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    INDI

    C

    E

    .NUEVA

    -AMERICANA

    PROLOGODE

    ALBERTI

    VICE[.{'fE

    UIDOBR

    v

    q

    .r/

    /

    , / t

    DE

    LA

    t r t t

    POESIA

    r)

    l :

    t

    L

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    -

    -

    r

    rl

    til

    l l t

    I lli

    l ,

    l

    ' t

    t

    r l

    r (

    l-

    INIDICE

    DE

    LA

    t lh?- o

    ha

    lmpreo

    3o

    Do

    6rw

    l'^-_']l,...rro.

    obr

    pa-

    c

    omf

    t].8_]

    il

    -,*-o.

    riat,

    numof

    r-

    pGl

    do-uoP-- ' . lp

    f .SOO

    obte

    d'",::1'.::i'ii"'

    no"o

    rcnt'

    NUEVA

    POESIA

    AMERICAI\A

    P R O L O G O

    D E

    A L B E R T O

    H I D A L G O

    VICENTE

    HUIDOBRO

    y

    JORGE

    LUIS

    BORGES

    S o c t E D A D

    D E

    E D I C I O N

    M E X I C O l 4 l

    M C M

    PueL lcAc roNEs

    E l I r . c

    E S

    E S P E C I A L E S

    B U E N O S A I R t i S

    ffiffi*osffo

    QUE

    AR.A

    ;;;

    coPYRYcHr

    BY

    EL

    rNcA

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    I

    Lr

    I

    TJO

    AQIN

    A8ESINAI'A8

    IAS

    DISTANCIA8-

    Sa

    luede

    l a,hor

    eD

    ocos

    Dltrutos

    rlede

    la

    esquina

    de Esmeralda

    y

    Correte$

    eo Buenos

    Aires,

    hasta

    la callo

    de Ia

    Ma,gnolia,

    en Mdco.

    326ij8

    I

    I

    )

    li

    Pgro

    no

    se

    cre

    qus

    sto

    es

    lula

    contibuciu

    al acerca-

    otento

    de

    los

    pafses

    cuya

    exllotacin porali

    Espa,.a

    hace

    ya

    sur alto.

    Tengo

    premure

    en d.eclarar

    que

    ol

    hispa.o_

    aDerlcaJxismo

    e

    elrugaa.

    Eso'es

    una

    cosa falsa,

    utplca

    y

    med.az

    convertlcla,

    como

    o

    podla

    ser

    de

    otro

    modo,

    en

    una

    profesin

    idntica

    a otra

    cualquiera.

    ge

    es

    hfs_

    panoamerlcanista comol mfucoi d comerciante. No conoz_

    co

    uno

    solo

    de

    tales parsltos

    que

    jerza

    su oficlo

    con

    desinters,

    o

    asf

    fuera

    slo

    con

    d.isioulo.

    E

    Amrica

    hay

    abundalrcia

    de repbllcas

    a

    c.usa

    del

    exceso

    do

    caclques.

    Cuando

    haya

    muerto

    Bailto

    y

    Ordez,

    qu

    razn

    babr

    para

    que

    subslsta

    el Uru_

    guay?

    Sobran

    pafses

    y

    fatan

    pueblos.

    gon

    los

    carclquer

    os

    que

    sobortran

    a

    los hlspanoamerlcaristas,

    porque

    es

    cuestin

    de

    vida

    o

    muorte

    para

    ellos.

    La coDfraterIdad

    quo

    predican

    rcposa

    en

    eI

    hstixto

    de

    conseraci

    y

    no

    eu

    el

    afecto

    mutuo

    nJ l altruisDo.

    Adeus, no

    hay

    siquicra

    siitud.

    d6

    caracteres

    ete

    los

    pass

    Dispano_

    anrfcanos.

    Nada

    tiene

    quo

    ver

    u

    peruano

    con un

    pa-

    rag'uayo. Entre un argentino y un colonrbiano ol abisao

    quo

    so

    columbra

    es incomensurable.

    eue

    tod.os

    seu

    d.es_

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    i

    I

    \,

    I

    I

    f t

    I

    cendientes

    de

    espaoleo, eso

    os

    lo de

    menoe. Log

    cn-

    quistadores

    impusleron

    el

    idloma,

    psro

    no

    el

    espiritu.

    La influencia

    que predomina

    ea Ia do

    la ti6a'

    y

    acaao

    la d.e la tribu con

    la,

    que

    se

    produjo

    el cruzamlento. I)

    oro

    lado, afirmo

    que

    la iudependencia

    de

    Espaa

    no

    se

    olrtuvo

    en

    los

    campoe

    de bata,lla. I,a

    verdadera

    intlepen-

    dencia

    Ia est

    haclend.o,

    o la ha

    hecho

    ya,

    el lnmigraDto

    de Rusia, ftalia, Alemania, etc. Dentro de Bocosaos mu-

    chos ms sorn

    los americanos

    bijos

    cle

    uso

    o

    italiano,

    quo

    Ios

    hijos

    do

    espaoles.

    Cmo

    se

    puede

    hablar

    e

    6erio

    de

    hispanoamericall ismo?

    1) .

    Eso cuanto

    al

    6ur. Cuanto

    al norte, sostengo

    que

    los

    mericanos

    y

    centrormericanos son

    intrusos

    donale

    estn.

    Los

    grandes pueblos

    son como

    los

    lquidos: toman la

    forma dcl

    vaso

    que

    los

    contlene, Los Estaalos

    nidcs

    es-

    tn crecicndo, creciendo, Lgicament tendrtr

    qus

    ex-

    tend.erse

    sobre Mrico, sobro Gratemala,

    sobre Nicaa-

    gua,

    sobre...

    (cuntaB

    an?

    cmo

    se llarran

    las

    otras

    republiquetas?). Tienen

    derecho

    a

    ello.

    Son los

    dueos

    natrales de todo eso, Ilasta donde

    el

    mar los deje ir,

    hasta ahl d.eben r, hasta ah ir.L Nad.a podr para evi-

    tarlo la

    poltica

    de

    lloriqueo

    y

    adulacin

    que

    Mxico

    des-

    arrolla

    en

    el

    sur

    para

    que

    lo d.efendamos

    contra

    el norte.

    Basta

    ya

    de farsas

    No es

    posible

    enmendarle

    Ia

    plana

    a

    la

    naturaleza. Nuestro

    continente, en

    cumplimiento

    de

    quini

    sabe

    qu

    secreto designio,

    est formado

    de

    tl

    modo,

    que

    tod

    ura

    paro

    d.ebe

    sor sajona;

    toda

    la

    otr

    latina.

    La

    doctrina

    de

    Mouroe,

    aunque en

    eI

    fo:rdo

    es

    jrst4

    est

    mal

    planteaata.

    Ad.olece

    d.s

    excesivo

    romanticismo.

    I.e faltan

    medida,

    equilibrio.

    Iu constrde

    a base de

    ambicin,

    cuand.o slo dl.ebi

    serlo

    a base de aspira-

    (1) A fin de evitar suspicaciaB, aleclro que taDbl loy

    a,t-

    tipanamerca,ni8t.

    6

    cin.

    Es

    poco

    prctic,

    Pualo etenerso lo

    posi-

    tle, a

    lo fcilmente hacedero,

    las

    insinuacians del

    toEeno,

    o sa

    al

    mand.ato

    de l

    geologfa"

    Pero alur et

    tiempo

    de nmendada. La d,oc'trin

    de Mooq

    Da

    coDta.r cotr el

    beneplcito

    uiversal

    y

    especlalmBnt'e

    de

    la

    Juventud

    suramericanan d.ebo ser

    sta:

    "Amrica

    del

    Ilforte

    paa

    los

    Dorteamericanos".

    El imperialismo yanqui no e u pellgro para la

    A.Drica

    del 8u,

    Qrtz

    sl

    es

    cou

    Broft'lca

    lntuicin

    que

    fueron

    los

    Dxismos

    noreamericanos los

    que

    abrierotr el

    canel

    de

    Panau. Ilasta ahf no

    ms

    llegar la

    grao

    rep-

    blica. El ma, es

    su

    lmite. El

    mar

    Ie impedir

    que

    Base

    adelante, Si

    crec mucho

    y

    desbord,a,

    el

    mar

    se

    tragari

    sus

    desbordes.

    El

    mar, el nar es

    una

    monta

    gobre

    esto

    tpico be de escribir

    un

    llbro. Estoy acrt.-

    mulando datos

    y

    aciocinios.

    AII habr

    de

    probar,

    haota

    con el apoyo de argr&entos

    cieutfficos,

    la

    verdad de rni

    tesis: Amrica dol Norte

    para

    los norteamericanos.

    Aquf

    slo

    quiero

    sig:rificar

    qne

    no opond.r

    ningrrn

    reistea-

    cla a

    que

    los

    yanquis

    se apoderen

    de

    M6xico

    el da

    que

    mejor

    les

    cuad.re,

    como

    ver

    con

    grad.o que

    la

    Agenti-

    na se

    apodere

    cuaJxto antes

    del Uruguay, etr viftud.

    de

    que

    actualmente ese

    pas

    parece

    una

    provincia

    argenti-

    na. Ni inferior

    a

    Jqiuy,

    ni superior

    a Santa f.

    (tri

    amigo

    Prez

    Buiz

    y

    yo,

    hablamos

    siempro

    d.e Morte\rtdeo

    como de u

    arrabal

    de

    Buenos

    Ales),

    Otro sco.

    Bollvia

    no tiorre

    representacin

    en

    este

    libro

    debid.o a

    que

    en mis

    afanosos viaJes

    por

    los

    rr1a6a

    del mundo

    no me he encontrado

    con sus costas.

    Es

    que

    no

    existe?

    Ilel Paraguay

    s

    que

    no

    conoco

    ul

    de od.as a

    Dalabr

    arte, Alli slo

    ge

    d.an oros

    y yerba

    mate.

    Prometo

    remenda,r

    las ausencia^s

    et

    futurag edlciones, si aprecen

    potas

    por

    ah, o si hay alguno

    que,

    deBasiado

    tDido,

    no

    ha

    emprendido

    vlaje a ml

    conocirxiento.

    Ife suprimido datos biogrficos y bibliogrflcos, paa,

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    I

    I t l

    .l

    ro hacr una

    atologa de nrlga,rialades

    y

    rlpios.

    QEton

    quiora

    stos,

    cDBrese

    calqrier bro

    d.e los

    poetas

    quo

    no

    Drepoder;

    quien

    lecesite

    aqueuos,

    pidalos

    a

    log

    auto'ras:

    a,h est6n

    srs

    recciones,

    Espero

    qtre

    6to

    r

    lo

    agtaileza4

    adems,

    las admiradoras.

    Louis Aagn

    ce

    que

    toda

    antologia es

    obra

    do

    con-

    ciacl" Iista vieno a dosmoDtirlo. Yo

    no

    mo caso

    con

    nadie, lo cual es bastac lgico eD ur hombro que ya ao

    es solero.

    Aqu

    no

    sobra nirgn mal

    poeta

    y

    e9

    probable

    que

    no

    falte ninguno

    bueno. Mas

    coafieso

    que

    para

    hacer

    menos estruendosa la

    prosencia

    de los

    mejores,

    be

    di&tado

    el vacfo de los

    psimos.

    Algunos desocupado8 ostn ahora

    practicando

    ol

    ospor

    de

    copiar

    a Gmez

    de

    la Serna, al

    cual lo usan sfrazado

    e

    una solucln de Paul MorDd

    ms unas

    gotas

    de

    porno-

    grafa.

    No

    lncluyo

    muestras de tales

    egendros

    para

    ro

    dar

    al

    pleglo

    carta de cludadaxa

    artfstica. No

    es

    que

    me

    parezca

    repudiable

    la

    influencia

    de Ramn.

    Todo

    lo

    con

    tra,rio. Creo

    qro

    en algn aspector

    de

    ni

    obra

    no 6 di-

    tfcil

    perclblr

    la sugeltl do eso

    genio, y

    hasta

    sospecho

    quo en easl todo escrltor modarno, as de aqui como de

    EuroBa,

    hay su

    pluca

    de

    ramonismo.

    Mas de al

    a la

    imitacln,

    al

    calco,

    a

    ld

    suplntacin

    de la

    personaud.ad,

    so

    preexto

    de

    que

    las

    palabras

    no

    sor

    las mispas, hy

    uD camino

    muy

    largo.

    Quo

    a

    nao

    s6 lq

    pued

    llanr

    rliscputo

    de nadie,

    porquo

    solre

    l

    ser

    uDivorsal

    el

    dosprecio

    No bemos nacidlo

    por

    generacin

    espontDea,

    Eaco

    alguno8

    a,os

    stas cosan tEvleroD

    su

    ovidelte

    aticipa-

    cir en

    la obra,

    brove

    pero

    cabal,

    del

    ilmenso

    poot

    pe-

    ruaDo

    Jos6 Mala Egureu.

    Cuando

    la

    gente

    rubendariab

    an a

    voz eD cuello,

    mi

    paisano

    public

    los

    libros

    ,,SiB-

    bIicas"

    y

    "Ila

    Cancin

    de las liguras',

    que

    son

    lrara

    los

    americanos lo

    que paa

    los

    franceses

    la

    obra

    ale

    Rin-

    baud: la Drecrrsirt. Acaso los proced.lDientos empleados

    I

    por

    l

    lobrelteve.

    algnna etlad,

    pero

    el sBfritu

    es nuevo,

    nnestro. Tras tle

    eso

    Ilo

    huo rlada

    importa'nte basta

    qro

    ararcl Euidobro,

    Iluldotro,

    en Espaa'

    derroc el

    nbenttri.soo,

    y

    Bl

    bie4

    puede afirmarrio

    que

    su accin es

    igual a cero

    en

    Amrica,

    a.lgo se

    ftra aqu, a

    travs d6"

    los

    ultraistas

    argentinos

    puesto que

    el

    ultraisuc,o

    es becbu-

    ra sya^ A*sf, el

    Boeta

    chileno

    se

    asemeja

    a nubB.

    Ambos

    apreaden l too de la hora en francia y lo trasladatr a

    Espaa" Con ellos

    Verlaie

    y

    Roverdy

    entran

    Bor

    turro

    en Amrlca. Abor4

    bajo

    el

    sosiego de los aos, emBiezan

    unog a

    d.ar

    voces

    ttuevas, aBartndose ds ]6 sslrslg

    ni-

    ciales,

    y

    otos inventan

    Bistemas

    Bara

    uso

    proBio,

    del

    misBo eodo

    quq

    cada

    quien

    se ajusta los

    Bntalo .6

    e

    la

    altula

    que

    Ie

    convtene.

    BeDrssentamos el

    ala

    que

    est tt6l laalo

    tlel

    corazn

    Es

    que

    hay mejor

    manera de

    ser

    poetas?

    Totlo

    lo

    graDde

    llega

    por

    el

    misro caEino. La macha

    ato

    os

    eJrcitos

    se

    iaicia

    por

    la

    lierla

    lzqderda- Las

    iglesias

    que

    slo

    tienen

    sna torre,

    la

    que

    tienen

    uo

    es la

    derecha.

    Si

    a

    Cervaues

    no le

    hublean

    cortado

    a

    tiemBo la siniestra,

    no

    existirla

    el Quijote, pues esa mano es la rue d.esd.ea EtrDiaLad

    escriti

    aquellas

    pginas.

    Eu

    los

    das

    de oxcesivo

    trfico,

    la

    polica

    mdtiplica

    los

    carteles

    de

    "conserve

    su izquier-

    d.1". Dios

    bizo

    al

    mundo con la diestra,:

    por

    eso lo sali

    tan

    ma. Cuando;el sol se olvida

    la

    leccin, se cnadra en

    el horizonte, alza los

    brazos

    para

    orientarse,

    y,

    natural-

    monte,

    sae

    pcr

    frente a

    la d.erecba. jos hoBbres llevamos

    la

    virilidad. a ese

    lado

    y

    a

    las

    miujeres

    el

    seno

    que

    les

    crece

    ms

    es

    el

    izquiordo,

    Y el

    qus

    no

    sepa

    hacia

    dud,e

    ost incunad

    la

    torre

    d.e

    Pisa, veuga

    a

    pregunt6rEelo,

    Alberto

    IIIDAIJGO.

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    6/145

    I

    I

    u

    A

    lo

    verdaleror

    Boetas,

    fuertos

    y

    puro8,

    a todo

    los

    e8Dflltus

    jvenes,

    agetros r bJsB

    Irasloltor,

    que

    no hE

    olvtalalo

    quo

    fu

    El

    mao

    l

    quo

    rroj lr

    aoDlU,

    O II,AY RUTA

    EXCLUSTVA,

    NI

    ITNA POE.

    sa oscptica

    de

    ella

    r4lqDta,

    EntoDces?

    Buscaremos

    Biempre.

    Xn estremecimintos

    d.ispersos

    mis vr8os

    sin

    gultarra

    y

    sln

    inquietud,

    la

    cosa as

    concebida

    e.ios

    del

    pooma,

    robar

    la

    nlevs al

    polo

    y

    ta

    BiBa

    a

    marino.

    Alg1uros

    dias

    desrus

    ms

    di cuenta

    de

    que

    el

    polo

    era uDa

    perla

    para

    ml

    cobata.

    lY

    los

    exploredors?

    Corvertidos

    en

    poots

    cantaban

    de

    pie

    sobre

    las

    olas dotramada8.

    Y

    los

    poetas?

    Convertidos

    en

    explorad.oros

    bugcaban

    cristales

    en

    la

    garganta

    do

    los

    ruiseoros.

    Y

    por

    esto:

    Poota

    :

    Globe

    trotter

    sin

    oficio

    acti-

    tivo,

    Globe

    trottr

    :

    poeta

    sin

    oficio

    Basivo.

    Sobre

    todo,

    es

    necesario

    cantar

    o

    simplements

    hablar

    sin equvoco

    obligatorio,

    sino

    con alguaas

    olas

    disciplnadas.

    Ninguna

    elevacin

    ficicia,

    nicamenie

    la verda-

    dera,

    que

    es

    orgnica.

    Dejemos

    el

    cielo

    a

    los

    aatr_

    nomos y

    las

    chlas

    a los

    qumicos.

    El

    poeta

    no

    6s siempre

    rur telescopio

    transforua-

    ble e[ su contrario, y si la estrella se desliza ha8t el

    ojo

    Bor

    el iterior

    rlel tubo, no es mediato tJt

    "lift"

    sino

    gracias

    a una

    lente

    imagirativa.

    Nada

    de

    nquinas ni

    d.o

    mod.erno

    ou s.

    Nada

    de

    golf-stream

    i

    de

    cocteles,

    Borque

    el

    gou-atream

    y

    los

    costeles

    se

    han

    vuelto

    ms

    maquinaria

    que

    las

    loco-

    .Dotorag o lag escafandras

    y

    Eucbo ms

    modernos

    que

    Nerr

    York

    y

    los

    ct,logos.

    Miln... Ciuilad lngenua,

    los Alpes, virgen

    sin

    emba.rgo.

    Y EL GEAN

    PEIIGR,O

    POESIA.

    virgen fatigada de

    DEI, POEMA

    ES I,A

    Entonces

    yo

    os digo busquemos

    ms

    lejos,

    lejos

    de

    la

    uquina

    y

    de

    la

    aurola, ta .

    staote de l[ew

    York

    como

    de Bizancio.

    No agreguis

    poesa

    a

    lo

    que

    si

    necesid.ad.de

    vosotros la tiene, Miel

    sobre

    r.iel eula-

    Iaga. Dejad secar

    al sol

    los

    pena,chos

    do

    las fbricas

    y

    los

    pauolos

    de

    los adioses.

    Ponetl vuestros

    zapatos

    al

    clao de la lua

    y

    luego

    hablaremos,

    y

    sobre

    toalo no

    olvidis

    que

    el

    Vesubio a

    pesr

    del futusmo

    est

    leno do Gouod.

    Y lo iusrevisto?

    A

    pesar

    de

    que poclria

    ser muy

    bella

    una cosa

    que

    ss

    presenta

    co

    la

    imparcialid.ad.

    de

    un

    gesto

    na-

    cido del azar

    y

    uo buscad.o,

    debemos condenarlo,

    porque

    est

    ms

    c6rca

    del instiDto

    y

    es

    ms animal

    quo

    hu-

    mano. Ill azar

    es

    bueno

    cuand.o

    os dados

    nos

    d.a cinco

    ases

    o al me ,os

    cuatro

    reinas.

    fuora

    de

    eso

    debemos

    xcluirlo.

    Naala d.e

    poemas

    tirados

    a

    la suerte.

    Sobro la mesa

    del

    Bota

    no

    hay

    un

    tapiz

    verd.e.

    Y si el

    mejor

    poema

    puede

    form,rso

    eD

    Ia

    gar-

    ganta,

    es

    porque

    la

    garga[t

    es

    el

    justo

    medio

    ontr

    el corazn

    y

    la cabeza.

    Ifaced. la poesia, pero no la pongis en torno de

    las

    cosas. Invenad.la.

    I

    1 t

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    7/145

    El

    poeta

    no

    debe

    ser

    el

    lluttrrmento

    de

    la Natu-

    r&leza,

    sino

    convertir

    a

    la

    Nauralez

    eD

    su

    tnstru-

    meto.

    IIe

    ahf

    tola

    la

    diferencia

    co[ las

    vlejas es-

    clelas.

    Y

    be

    aqu

    abora

    que

    l

    os

    trao

    ur

    hecho evo,

    simple

    en

    su

    esoDcla,

    independiente

    de todo

    otro

    fe-

    nmeno

    erterno,

    una

    creacin

    humana,

    muy

    lrra

    y

    trabaJada por eI corobro con uJxa paciencia

    dg ostr.

    Es

    un

    poema

    u otre

    cosa?

    Poco

    Imports.

    Poco

    lDrporta

    guo

    la criatula

    sea

    van

    o

    rnujer,

    abogado,

    ingeulcro

    o

    bilogo,

    cou

    tal

    que

    eUa

    ed.sta.

    Vvo

    o iquieta,

    arrn

    quedando

    en

    el foDdo

    tran_

    qullo,

    Quiz

    no

    sca

    ol

    pooma

    habitual,

    pero

    es

    u

    Boe-

    ma sin

    embargo.

    As,

    primor

    ofocto

    dol

    poem,

    trarufiguracin

    d.o

    nuestro

    Cristo

    cotidlano,

    catstrofo

    ingenua,

    los

    oJos

    dosnesurados

    al

    bords

    de

    las palabras

    qus

    corren. el

    cerobro

    desciendo

    a

    pecho

    y

    el

    cornzn

    subo

    a Ia

    ca-

    beza,

    si:t

    perd.cr

    srls

    facultndcs

    oscnciales,

    ED

    fi- re-

    yolucin total, L tierra gira et sc.ntido inverso y el

    sol

    se levanta por

    eI

    occidonto.

    Ixnde

    ests?

    DDds

    estoy?

    Los

    puntos

    cadiaales

    se ran

    pcrdo

    en

    el

    motn.

    como

    los

    ases

    de

    rm

    juego

    do

    cartas.

    Despus,

    s

    acepta

    o

    so

    rcchrza,

    pero

    la

    ilusin

    ha

    tenid.o

    asientos

    cuodos,

    ol

    fastid.io

    ha

    eBcontrado

    un

    buen

    tren

    y

    el

    corazn

    so

    ha

    yertido

    coro

    r

    frasco.

    (La

    aceptacin

    o

    el

    echazo

    no

    tienen

    ingtl

    valor

    para

    el

    pocta

    yordadero,

    porgne

    l sabe

    q.ue

    ol

    muDd.o

    camin&

    de

    dorecha

    a izquierda

    y

    los

    hombres

    d,e

    la

    izclerda

    hacia la d.erecha, Es Ia ley del equilibrlo).

    Y

    luego,

    es

    ri

    mano

    la

    gue

    os

    ha

    guiado,

    os

    ha,

    l2

    mosrado

    los

    paisajos que

    quiso

    y

    ha

    becho brotar

    n

    arroyo de

    un almeudro

    sin

    darle uaa

    lanzada en

    el

    costado.

    Y

    cuando

    los drometlarios

    de

    rnrestra

    imaginacin

    querian

    spersarse,

    yo

    los detuve

    et

    seco, mejor

    qus

    un

    adrn en

    l desierto.

    Nad

    d.e

    paseos

    ind,ecisos

    I.a, bolsa o la

    vitla"

    Esto es Deto, esto es claro. Ningun itrter?reta,

    cil

    personal.

    La bolsa no

    quiere

    decir el

    cotaz6n, ni

    la

    vicla

    los ojos.

    La bolsa es la bolse

    y

    Ia

    vitla es la vid.a.

    Cada

    verso

    es

    el vrtlce de un ngulo

    quo

    so

    cio-

    rra

    y

    tro d.

    u

    ngulo

    que

    se

    abre

    a

    los cuatro

    viertos.

    El

    poena,

    tal como aqui

    se

    preseDt&,

    no eg realista

    sino

    huxano.

    No es

    ealist&,

    pero

    se rruelve realitlad..

    Eealidatl

    csmica,

    coo ruta atmsfera

    propia, y

    que

    tiene

    seguramente tierra

    y

    agua; coro

    agua

    y

    tierre

    tienen todos los

    nulrdos

    que

    s6 respetan.

    No

    busqus

    Jams

    en

    ostos

    poemas

    el

    recueralo

    do

    cosas visba,s, xi Ia

    posibilictad

    de

    ver otras,

    Un

    poema

    es

    un

    poema,

    como uua naranja es un

    naranj&

    y

    no

    tura r"nzana.

    No

    e[contraris

    en l

    cosas

    que

    existan

    de ante-

    Elano

    ni

    coutacto diecto con

    los objetos

    dlel mundo

    extrno.

    l

    pocta

    tro debe

    iD.itaf

    la

    Naturaleza,

    porquo

    no

    tieno

    derecho d6

    plagiar

    a

    Dios.

    Encontra,ris aqrr

    lo

    quo

    no hbis

    eacontrad.o

    en

    niaguna

    partc:

    cl

    Poena.

    Una croacin del hombre.

    t3

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    8/145

    Y

    de

    todas las

    fuerzas

    humaJra,s

    a

    que

    ms nos

    iteresa eg

    la fuoza

    cfead.ora.

    vicete FttIDoBBo.

    III

    N

    ANTIQUISIMO

    CUENTERO

    DE CUYO

    nombro

    ao

    quiero

    acordarme

    (es

    d.e

    Cervantes.

    elo

    fostoJBalo mellntlre

    y Be

    lo

    devuelvo

    en

    se.

    gulda)

    cuonta

    que

    en

    los

    principios

    d.e l

    era.

    crlstla.na sali dcl nlar

    una

    gran

    voz, un

    evangelio

    prl-

    mitivo

    y

    final,

    y

    nuci

    rr I

    gerltidad que

    el dios

    Pan

    habfa

    muerto,

    Tarto mo

    gusta

    suponer

    que

    las cosas.

    eleuentales

    participan

    en las

    d.el

    lma

    y

    son

    gus

    chas-

    qes

    o

    lenguaraces

    o

    rutrclos,

    que

    hoy

    guerria

    hablarles

    a

    todos con la voz salobrs dcl mar

    y

    la incasablo de,

    Ios

    os

    y

    l

    enterrada

    de los

    pozos y

    la

    exttica de log

    charcos,

    para

    decirles

    quo

    sel

    gast

    ol

    rubersmo

    al

    fin,

    gracias

    a Dios

    Xl

    rubenismo fu

    nuestra ailoranza

    de

    Europa. Fu

    uD

    suelto lazo

    do nostalgia tiado

    hacia sus torres,

    fu6

    un largo

    adis

    que

    ray

    el

    aire

    d.ol

    Atlntico, fu rur

    sentirnos

    extraos

    y

    descontentazos

    y

    finos. Tiemlo

    en

    que

    Lorras

    d.e

    Zamora versificba

    a

    Chipre

    y

    elx

    que

    Eo-

    lemnizaban los

    mulatos

    acerca

    de Xstambul,

    se

    d.escom-

    puso

    para

    dicha

    de

    odos.

    Queds

    su eternid er

    las atr-

    tologas:

    qued.en

    muchas

    estrofas

    de LubD

    y

    alguaas

    de

    Lugones

    y

    otras

    d.e

    Marcolo del

    Mazo

    y

    ninguna

    dO

    Rojas...

    Hay otro

    verso

    rubenjsta

    hoy

    en

    pie:

    la

    sus-

    pirosa 3,osaleda quo con su cisnerio y sr lrdolencia es-

    t q

    I

    l

    condc

    cl

    iluo

    entlrfeto

    rlel

    bario on

    quo

    don

    Jua

    Mauol

    fu6 temlble.

    Et europeo

    fastlco

    do SpoDgler

    -

    el

    rovoroDcta'lor

    d.e

    lo

    leJano

    o

    ol

    eslaclo

    y

    tto

    lo ldeciso

    eD el

    tlerBo'

    el

    arcalzanto

    o

    progresiaa

    que

    lo

    enendc

    ol

    boy

    a'rri-

    mlnalolo

    4

    u

    antenocho

    o al

    es

    que

    vleno

    -

    tvo

    una

    tor?o

    teatuccin

    al

    absuralo

    elr

    l

    rubonlsta

    'to

    eq'ul'

    Ntn'

    guno de ellos e ae a supoaer Quo ya estaba en la

    iea:

    todos

    buscaon

    ura

    Yereda

    de

    elrfrcnto

    dou'le

    aloJarse.

    Psra

    Rub&

    ega

    Yereda

    fu Vesalles

    o

    Perla

    o

    el [edltotsneo

    o

    l

    lmpa,

    y

    Do

    la

    Irampa

    de

    balao

    y

    dfas

    largos,

    slo

    1 Pamla

    triDtolmica'

    crisol

    de

    raza'e

    ]

    to

    aenls.

    Pra

    Froyre

    fueron

    las

    leyentlas

    fslndicas

    y

    Da

    8atos

    Choca,Do'el

    Aabuac

    de don

    Antonio

    ile

    Eolis.

    En

    cuato

    a nod,

    fu

    un

    norbeaBericano'

    o

    l

    taqui

    pero

    sl un

    ctedtico

    do

    Boston,

    relleno

    de

    ilu-

    sfoneg

    sobre

    lanidad,

    e

    hlspanldad.

    Lugones

    es

    otro

    fo-

    ra,stero

    gleclzante, verseaalor

    de

    vagos

    paisaJer

    becbos

    &

    puro

    arbitrio

    do

    rlmas

    y

    donalo

    basta

    quo

    sea

    azul

    el

    aire

    eD

    urr

    Yorso

    pra

    que

    al subsig:uiente

    le

    salga

    un

    abedul e la puDta. De la Stornl y ale otras Dersouas

    que

    han

    metificado

    su

    tedio

    do

    vivir er

    esta

    ciud

    de

    calles

    derechas,

    slo .tir6

    que

    el aburrimiento

    es

    qz

    la rlnlca

    emocfn

    impotica

    (irreparablemeDto

    impotica,

    pese

    aI

    gFaD

    Po

    Baloja)

    y

    que

    er

    tambin,

    la

    que

    con

    preferon-

    cla

    ensalzan srs

    plumas.

    gon

    lubenistas

    velgouzanteg'

    mledosos.

    Dcsde

    mil lovocietrtos

    veintids

    -

    la

    fecha

    es

    tan-

    teadora: se

    trata

    de una

    situcin

    dc conciencia

    que

    ha

    itto

    tlefinintl.ose

    poco

    a

    Boco

    -

    totlo

    eso

    ha

    catlucatlo'

    I,a verdad.

    poetizable

    ya

    no

    est slo

    allentle

    el

    mar'

    No

    es

    d.lllcil

    ni

    huaa:

    est

    en

    la

    queja

    de

    la

    canilla

    del

    patio y

    en el

    Lacroze

    que

    rezonga

    una

    esquina

    y

    en el

    claror

    do

    la cigarreia

    frente

    a

    la

    noche

    callejera'

    Esto'

    aquf

    en Buenos

    Aies.

    En Mjico, el compaeroMaples

    jl

    t5

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    9/145

    7

    Arce apura

    la

    avenid Jurez

    en

    un t go

    ile

    gasoliua;

    n Chile,

    Rcyes

    eusalza ol cabaret

    y

    l

    virto

    del

    mar,

    rur

    viento nogro

    y

    de suicio,

    que

    trae

    aves marinas en

    su enyln

    y

    en el ca,l

    las

    persianas

    de

    Valparaso

    ostn

    siemple

    golpendose.

    Ias dos alas

    de

    esta

    poesa

    (ultrasmo,

    simplisno:

    et

    rtrlo

    es lo do

    menos)

    son el

    verso

    suelto

    y

    la

    imagen,

    La rima es aleatoria. Ya d.on francisco de Quevedo ao

    burl

    de

    ella

    por

    la

    esclavitud

    que

    impone

    at

    poeta; ya

    otro

    ms

    ponderoso

    Quevedo,

    Milton

    ol

    Buritano,

    la ta-

    cb

    de invencfn

    de una

    era

    bbara

    y

    se

    Jact

    dle haber

    dovrelto al verso

    su libertad

    antigua,

    omanciBndole

    de

    la

    moderna suJocin

    de rima

    (,,modern

    bondage

    of

    ri-

    hig").

    Estas

    lhutrcs

    opiliones

    las saco

    a

    reluclr,

    para

    quo

    nuestro

    desdn

    de

    la

    rima no se

    juzgue

    a

    po

    ca-

    pricho y

    a

    torpeza

    do mozos.

    Sn

    ombargo,

    mi mejor ar-

    grmeto

    es el

    empirlco

    do

    que

    las rimas ya

    nos

    cansart"

    Para

    cualquior

    de nosotros, cstos

    versos blancos

    de Ga-

    cllaso

    sotr entero

    y grto

    arquetipo

    de

    musicaliclad:

    Corriontor

    8guc,

    Durf,s,

    crlstaltrr

    Arbolcs qtro oE cst,ls Dlrndo

    en llsJ,

    Voa lo

    Drdo

    do l rc tca

    ombra

    l lsno . . .

    gu

    auor,

    ehpero,

    corr

    esa

    asidua

    observacin

    ds

    l

    rr

    que

    hubo en su

    siglo,

    escrtbi,

    en

    seguida

    otras

    l_

    ]leas

    qo

    etrtonces

    era,

    necesarias

    para

    cumplir

    la

    or_

    trofa,

    esto

    es,

    el

    pleno

    halago

    musical, y

    hoy la

    rebaJaa

    siDg"ularmente:

    Avos

    qro

    aqui

    sembrir

    vuosirar

    quersllar,

    Yed

    que

    por

    os

    rbolos

    camlna8

    Toclordo

    el

    Daso

    por

    ru verde

    oDo,

    Yo

    m

    vI ta

    ,,gotro

    De

    grsvs

    Dal

    quo

    6lelto

    Que

    o

    ptro

    cotelto.

    . .

    y o que subsigue.

    16

    i '

    1

    Quiero

    inscribir

    algr:a

    obsorvacin

    &cerca

    do

    la

    imagen.

    La

    imagen

    (la

    que

    llamaron

    traslacin

    los

    latinos,

    y

    los

    griegos

    tropo

    y

    metfoa)

    es'

    boy

    por

    hoy,

    nuestro

    rlivrsal

    sanio

    y

    sea.

    Destle

    esas

    uoches

    incansables

    eD

    que

    el

    calavern

    frailuro

    Quovedo

    holgabs

    con

    la

    lengua

    espaola,

    no han

    sucedido

    porretadas

    cle

    imgenes, plea,mares

    y

    malones

    d'o

    aetforas,

    asemeta-

    bles

    a

    los

    que

    en

    este

    libro

    vers.

    Des'le

    lo travesura y

    brujera

    de Macedonio

    Fernndez

    hasta

    el

    resBlanlor

    de

    Juicio

    final

    que

    altiveci

    los vetsos

    cte

    Piero,

    'Lesdo

    as

    firu^xs

    acertattas

    d.o lclalgo

    hasta

    el

    rebao

    do

    vebe-

    meDci

    bblica

    que

    Brantln

    rige bien,

    hay

    obtencione8

    de

    expresin

    i[aualitas.

    El

    itlioma

    se

    suelta'

    Los

    verbos

    i:rtransitivos

    se bacen

    activos

    y

    el

    adjtivo

    sienta

    plaz

    de nombre,

    Meilra

    el

    barbarismo,

    el

    neologismo'

    las

    pa'

    labras

    arcaicas.

    Frente

    al

    proviDciaDisro

    remilgado

    que

    ejerce

    la

    Academia

    (deotro

    de lo

    universal

    espaol

    tar

    provincia

    es

    castiua

    como

    soriano

    y

    tan

    casero

    es ha-

    blar

    de los

    cerros

    tte Ubeda

    como

    de dontte

    el Diablo

    pertli

    el

    porcho)

    restlo

    idioma

    va

    adinerntlose'

    No

    es

    de altos ros soslayar la impureza, sino aceptarla y con'

    vertla

    en su

    envin.

    As

    Io

    entendieron

    los hombres

    del

    sigto

    diez

    y

    siete:

    asi

    lo comprendi

    Saavettra

    qrre

    se

    buri de

    quienes

    end.eblecen

    nuestra

    lengua

    por

    rnan-

    tenerla

    pura,

    as don

    Luis de

    Gngora

    que

    (al

    decir

    de

    srr

    prinxer

    prologuista)

    huy

    de

    la sencillez

    de

    nlrestra

    habla, -rsel

    agringad.o

    Cervantes

    que

    se

    jact

    del

    cauce

    do

    dulzura

    que

    abri

    en uestro

    lenguaje,

    a9

    ese dscolo

    Qucueclo

    que

    sac

    voces

    dcl

    latn

    y

    del

    griego

    y

    ann

    d

    Ia

    gcrmaua,

    as el

    piecursor

    de

    elIos,

    Tray

    Luis

    ale r'

    que

    hebraiz

    tau

    pertinazmente

    en

    sus

    traslados

    bbli-

    cos...

    No

    lcmos

    nosotrosde ser

    menos.

    Est;l

    clrre nos cie

    es la

    realid, es

    ' 'ulla'

    '

    reali,.

    Junto a llosotros cstn la Vida y la Muerte y las le-

    vintrrcnos

    cor vcisos.

    t?

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    /

    I aI

    qa

    aD

    tl

    gct

    ac

    ,tr,

    Dcba

    cta

    c[rlto

    ctlt

    OoD

    toll.

    l

    ror

    quc

    s..

    FENELON

    ARCE

    (Cas14

    2898.

    -

    ganago

    ate

    Chile)

    D

    D

    IANO

    o

    pJao

    pero

    algo ll6ga

    a

    mf tlesale

    os

    bosgues

    I

    dond.e noras

    con las

    agujas

    d.e ese

    canto tejo

    esta

    malla d.e

    palabras

    levanto

    ecos

    alo

    sombra en

    l&

    trraza del cansaJxclo

    y

    no est atluIrclado

    el expreso ttel alba

    qus

    te

    trao

    baJo

    de mf el

    honbre mecnlco

    Ju6g

    poker

    con

    el ualpe dlo

    los henlqferiog

    y

    el

    cambfavfas

    no ha tomadlo la

    palanca

    e las manos

    no recuerdo

    la

    Boca

    pero

    fu antes de tu

    primer

    sueo

    cuaxdo abrlste

    tu alm

    como un libro

    de

    cuontos

    yo

    era

    entonces

    el

    nico

    grumete

    de tu barco

    ahora

    en los

    cimieutoe

    de tu

    sonrlsa

    d.e eDro

    y

    pertticla

    construyo

    esto

    andamfo enormo

    d,e nueve

    mll

    momontos

    pero

    t no

    ests

    nl

    egas

    y

    la espera

    es lntil.

    G.

    I\/IUJER.

    horizontal

    de Norte

    a Su llmite

    de sueo

    rvrsgl6

    tr

    maceerode

    flores

    y

    no to encetrto

    en

    la plaza geomtrlca

    tr

    paracafdas

    fu tu viaJe

    mufeca

    d.e resorto

    Jorgo

    Luta

    TOBOEB

    i

    t 8

    t 9

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    ...

    /

    pero

    quoalaste

    desarticulaata,

    y

    bonrt&

    estamos UeDos de capftulos

    desdo

    que

    da,nzaste

    tu ltimo sbimmy en mis

    recuerdos

    algo

    nos falta

    para

    estar distantes

    un radiograna o u

    tren nocturno

    abre

    tus oJos

    de

    colores

    mientras

    me

    destio

    a[te

    tus

    claridacles

    y

    d.etrs del

    paisaje

    gritan

    tus

    palabras

    hurfanas

    so me rluiebran ]as nanos si te toco ni.a y te deshaces

    tampoco

    sabrfa

    suspenrlcrte

    en los

    brazos

    no

    quiero quo

    diluya tu

    actitud.

    de

    camino

    frente

    a mis

    actos

    colgados

    en

    la techumbre

    de

    la

    nocbe

    proyecto

    llevr

    tu

    sombra

    y

    tu retrato

    ms all

    de

    ri dolor,

    siondo

    tu

    tristeza

    una

    caja de

    sor-

    preBas

    tengo fotografiad la pera

    de tu

    voz

    desde

    que

    to

    entretcnas

    en cl

    pixno

    del vie$to

    y

    ostoy solo frcnto

    tu

    calda

    80 refleja

    ml vida

    cn

    tu

    chtrco

    do

    aguas

    sin orillas

    las banderas de tu

    norbrc

    nto

    llmu

    pero

    suena

    la hora

    de

    con:rtl'ur trr

    edificio

    de

    cascabele

    p&sa una nube por uds rn,nos

    en tanto

    dialogo

    con tu

    cirdacl encuedernacla

    cle sueos

    tu ltima

    carta

    est

    girand.o

    en el

    circo

    clc mi esBera

    des-

    trutta

    frasco

    de

    tita la

    noche

    so derrama por

    tus cabellos

    y

    tu

    entusiasmo

    de

    sbado se clurmi

    entrc tus

    labios

    despierta

    nia Ia

    alr,,ohad;r, ujeta

    tu

    fiscnoma antigua

    seDxejas

    na cortina

    en

    la

    ventna rle

    la

    natr:r&leza

    se descuelga

    de tu boca

    tu sonrisa

    de vidrio

    mientras archivo

    trrs

    palabras

    y

    tts

    jestos

    y

    en

    la

    pizarra

    de

    tus

    bescs nuevos

    bujo

    el affiche

    de lo

    que

    piensas

    esta

    tard.e

    AI,ITOI\IO

    ARRAZ

    (Caracas,

    Veezuole)

    t,,(

    BARBO

    V

    O

    mo

    Bopulto

    o

    tf,

    amads;

    I

    en tf,

    perfumada

    y

    ttbia

    como

    lul

    rddo

    on la

    selva.

    En

    tl,

    dulce

    como

    rura, Delodfa,

    tn

    tt

    que

    slo

    er6s

    ur

    gra

    suspiro

    pUdo

    que

    crujs

    bajo

    mf.

    Soy

    un

    sello cald.ente.

    Y sea,rto 68, atlada,

    mi

    ms bella,

    mi

    s

    grand.e,

    ml

    ms

    primorosa

    obra

    d.e

    arte.

    Yo

    soy

    d.e fuego

    y

    ca;nto:

    tu

    barfo

    desmayado

    y

    tlbfo,

    mi barro

    adoroso

    y

    fuert.

    EI,

    ?:R.MANO

    MIIEI|'TO

    OY he recordad.o

    a

    Dl

    borma"Do

    de

    sangXe

    quo

    tnrrl

    on la batall.

    20

    Vtvl nucho ntes que yo,

    2l

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    /

    Murl

    mucho

    &Dt6

    quo yo.

    Y, sin

    enbalgo, 6l ss

    rd hermano de snge.

    Ilernano,

    de

    guerr*

    y

    do

    paz.

    Ilermato

    de br8zo

    y

    de

    mente.

    Hormno de vitla

    y

    do

    Druert.

    Mi

    bermano de eangre muri

    heco

    ya

    tleolo.

    La

    herid.a la tuvo

    on ol

    pecho.

    No bablaba os& longu extralJera

    que

    hablo

    yo

    ehor&.

    No tenia la

    freuto ultr&Jsd.a.

    No

    vlva en caaas

    tapad.as al

    gol.

    RUBEN AZOCAR

    (Llceo

    de hombree,

    AJrcual.

    -

    Ohile)

    oy

    coN

    x,As

    oLoBosAs

    cAfcroNEs

    QUE

    Prr.

    RIFICABON

    SI' DET.EITE.

    Una

    palabra

    puede

    traer lo

    que

    I1o tien trtno.

    I r

    Eso

    es

    la

    soledad, a

    profunda

    soled.ad.

    ue

    yo

    hablo.

    ;l

    I

    I

    Ah hay

    historias

    de amor,

    campias

    llenas

    al

    ragancia,

    altos rboles

    musicales,

    mar

    de

    lrbos

    erf8tlte

    o el

    sol cierra lag lentas

    alas

    frento

    I ois

    creB{reculos.

    .Entoncos era la alegrla. filu sln ancd,oes,

    corrla

    llbremerto colfnaE'

    r lnfintta

    espelanz

    que

    r&

    cuando

    estba

    I

    nt lado.

    crey

    ar

    oL Ptto

    oozaaDa,

    a

    travB

    de su rosttro

    se alze

    la sombra

    gin

    lfmlts

    el

    dios

    quo

    80 orlgotrda

    a

    af

    mlsmo.

    y

    Es descuelga

    sobre stos

    caninoe

    &laleanos.

    Ml hermano

    de sengro

    murl haco

    ya

    tlempo.

    Qui6n

    fuera

    ml hermano

    de

    saJxgrol

    Eumo

    torcid.o robre

    mis

    Bolitarios

    o1os trlsts.

    Euyo hacla

    alonale

    qulebras

    los

    dlas

    on

    las

    manog

    trallt|.

    Aenta

    las

    hojas.

    Espanta

    las estrellas,

    Cielo asetrt.

    rt\qu

    se apoya la noche.

    Entonces era

    la

    alegrla

    alecledor

    de

    gu

    aombre.

    Todo se

    va- Ilecir

    eso tambin

    no

    est

    ms;

    aU hua alguien

    e

    fbamos

    entre

    las

    hoJas.

    22

    23

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    13/145

    srcedialo D

    OtA IOCB.

    Dulce suef,o

    alormialo

    a

    la

    oria

    alo

    su

    cuerpo srecldo

    do

    llores

    dle

    color;

    lento

    licor do

    dolette

    quo

    yo

    bebfa

    vltlmente.

    Despus

    la alta

    sombra de la

    aruencia

    hacla

    donde

    mf

    alm

    Be

    tuerce como

    l humo.

    Desde aqu mlro los astros dontlo eso rro eist'ia.

    IeJanos

    Buertos.

    Brcos

    remotos,

    anclados

    al fodo

    de ml vlda vagaburda.

    Quin

    era

    el

    vajero recin

    llegado.

    1

    UMOR de

    Ia

    resac.

    Vlonto

    quo

    a,huyenta

    Eis

    vocos.

    f\

    nuinas

    llenas

    do

    sombras,

    TorreoDs sia

    pJaros

    y

    al

    poDlente

    ls c&rpas

    gitanas

    ds

    la tade.

    Detrs de la vlilrierag mi abandono ae puebla rle im6geaes

    Peo

    en tus ojos vagabunilos,

    Jugueteria

    de

    colores,

    el

    carrou.gel de la

    prlnavra

    d&

    Vueltas

    y

    hace msica.

    lr

    el

    tiempo

    rlQ

    las

    lluvts,

    nollno

    de

    paisaJes

    despir-

    tado8.

    Lloro

    y

    csnto. Alegda

    defiltlva.

    Ah Dada

    pueclo

    con-

    tenerla

    y

    rbalB

    en

    tug

    bzos

    cono el

    Et&r er las

    playas.

    Surco

    recln araalo

    hmedo

    ari de crepsculo.

    CampaDa

    suspenrUcla

    de tus

    ojos

    llnos

    de

    pJaros.

    Aarfa

    mis voces

    como

    cord.eles

    infiDitog

    24

    a

    tus

    faales

    iluminados. LeJana, no

    erlses.

    Toda

    la

    uoche

    ce lo

    solealaal

    gobro

    ml lm&

    Ee ahl

    mis

    palabras,

    moliao

    vagabuado,

    columpio

    de aguas azules, espoJo de

    otoos arluos.

    AI otro

    latlo

    del

    xar

    Buegan

    las velas del crepsculo.

    CoEo ua, plaza eotari ml soledaal est &nocheciudoFe.,

    La Daoa

    toplacable

    golpea

    Dl congoj,

    ecinto

    de

    pJaros

    tristes;

    e

    a[l cnro

    huyetr.

    Viajero taciturDq

    dclces cmios

    do

    la

    tlerra,

    celidog

    a mi

    crerpo

    como

    un

    cintrD eblo.

    Para

    qu6

    rlecir

    las

    Balabras

    ale las

    ausencias,

    catconeg

    de

    humo,

    abandondos

    cntos

    de

    olvalo.

    Quin

    empqia

    los astros,

    quln

    d.shoJa

    s

    costleciorei;.

    dnde suJetan los paisajes y cortan las am+'ra,s al vlonto.

    A.

    Vastedatl

    botblo. Soledail

    lnconclusa.

    Quin

    cantar6

    mls

    palbras

    tle

    Jbilo.

    Uimno

    de estrellas,

    surtidor

    bJo

    la

    och,

    carrouse

    onvejocido mi corazn

    est

    triste.

    lUDer

    DE LA TARDE:

    SILENCIO

    SIf

    LIMITE,

    golpeado por

    el

    viento vido:

    all

    mueve los

    ceraos.

    hacs

    flamea los rboles;

    ronda;

    huye;

    galopa,

    mtando

    la

    tristeza

    de

    los

    caminos dorrotados.

    Ma de colores. ocano tle soletl.ad.

    2$

    /

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    14/145

    dado

    tuEbo8,

    oriUaralo el clelo,

    leuto

    creDsculo

    dc

    (Xolo,

    silos como

    s

    las trlss

    mi

    corazn olltato.

    .Oaacol

    dl

    creDfisculo:

    all6

    caJrta

    le ols,

    all doode ell

    vuelca Bu

    voz bella

    y

    leJana.

    Sol de

    adloses.

    Infhlta

    pena.

    ltisteza lncortoDlblo.

    Ilulce mujer:

    cuanilo

    los

    pescadores

    recojen la redes

    colmadas ale

    ostrollas

    vlvas

    conozco

    quo

    en

    tt

    puorto,

    Uonq do

    pJaros

    y

    de barcoc

    pequoflor

    t

    Juegas

    con ml anillo

    y

    tu corazn 86 anega

    de

    congoJr.

    UATAO TLEOIIAS CLAVADAS

    EN

    3T.

    COBAZON

    DEI,

    \rIENTO,

    son

    las campanas de

    la

    fglesla ontrlstecldas.

    Yo voy

    con ml hato do camlnos,

    como el rebenque co[ ol quo ms azotaba nl paclre,

    y

    10

    [ego

    salta,r volvletralo

    al

    puoblo.

    8e sumergen las

    camptas

    y

    los

    altos

    rboles,

    al fondo de

    mi

    polvareda

    de vagabundo enveJecido,

    Ambulante Uuvla

    moJacla de

    grls

    trmulo,

    rocia[alo

    el corazn

    desuudo

    do

    los

    pueblos.

    Solariega

    barca lleta

    de canciones mueras

    anclada

    en

    mealio

    de los

    ceros

    fugitivos.

    Desde

    todas

    las

    orillas de

    los cielos iamviles

    vuolan innumerables bandad.as de pJaros vlaJeros.

    26

    FRANCISCO

    LUIS

    BERNARDEZ

    (Bfo

    de Juelro

    262,

    Bs.

    Alros)

    TAR^I'E CON8TRUIDA

    CON

    VERSOS

    ElnAg

    del horizonte

    se va

    poniendo

    mi

    corzn

    y

    la

    tarde se

    tirale a

    descansar

    sobre

    ml

    8lD&.

    Tarale lent&

    y

    silenciosa

    como un beso.

    Trd.o

    dulce como

    ol agua

    ile los

    ros.

    Tade

    ancha

    como el

    pecho

    d.e un

    hombre

    y

    acogoalor&

    coEo

    el regazo

    de uaa muJer.

    Ifay ua

    lu

    de

    pJaro8

    err

    Bu

    vor.

    Da luz olvltlatla

    por

    muchacbas.

    Una

    luz

    pensads por

    alos.

    Llevo la tard.o

    a cuestar.

    como Ee

    lleva

    una

    gulta,rra,

    cono

    se

    lleva

    u cruz

    En

    la boca redoxala del

    Espaclo,

    la

    tarde es uxa

    cancin

    de

    cua

    quo

    DioB me canta cacla

    da.

    Es

    Da

    palabta

    de dlstanclag

    que

    el Tlempo

    d:ics,

    para

    consolaru.e,

    Y s u peltlalo ms

    27

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    15/145

    Ba

    subl balta ttr amo .

    DesmoleDadE

    d.6

    versol,

    la tads e tlende s descla,r sobre

    ml alma,

    EloDtres vaz&

    l muchedumbre de

    l

    oombra,

    entulud

    de ostells.

    SETS \lEB8Os A I'NA \rENTAIA

    r

    OBRE

    ml hora

    lntgencia

    tle dktauclas

    J

    este vqntena og

    ln&

    mo ablerte.

    En

    la morro, rugos

    do caminos,

    su

    pa,uelo

    ds clelo mo

    cosuola.

    Ml

    sodontarl

    Bord,oz sllvle

    con

    u.

    pulado

    t,clto

    do loguas.

    ooA80

    E

    L sencto

    se abrl

    como

    una llaga.

    IJ Crecen

    como recuerdos

    las

    ostrolla"s.Juega

    con un

    cantar l

    fuete

    hurfsua

    y,

    en la

    ya,cento

    paz

    del

    borlzonto,

    solloza

    el canpo

    viudo sus

    tuclrDgas.

    EPITAEIO

    A ITNA

    MAIO

    DE

    LABB.ADOB'

    il'

    N el

    Pontgtane

    del labradfo

    tr

    escribiste la

    msfca

    del trlgo.

    Tu eruatfciu

    de

    soles y

    trabaJos,

    predicando

    palabras

    do sudor

    hall

    crucifixin

    en el

    arad.o.

    La noche

    d.o

    tu

    artsa

    repoblaste

    cor uivrso8 lclilos d.e paes.

    28

    La

    amjgtacl

    cotidia

    de

    la tierra,

    contagindote

    tod.a,

    de tus

    iled.os

    hizo las

    ciuco

    prEtas

    de

    una estrolla.

    Crispada

    osts

    c'rrl

    remansado

    ro.

    I,

    otomiald

    es

    tu

    primer

    domipgo.

    29

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    16/145

    FEDERICO

    BOLAOS

    (Caman 869, Lime. - Psr)

    EI

    ATLUENTE

    DIVINO

    ENGO de

    la

    nlta montaa

    donde ha

    nrcldo

    l llombre.

    En mi

    lormacln

    coufluYoron

    los

    antiguos d.oslgnios

    dsl

    Mundo.

    Como soy

    torronto

    inflatlo de alogres ospumas,

    como soy

    naturaloza

    coronada

    de dinmica"g

    luces creadorss,

    como soy

    el

    Ifombro

    vienen

    d.el

    Dolor,

    las

    Nflos ivisible

    que

    fecundan mi

    cuerpo;

    voy

    pendiento abajo

    desmoronando

    piedras

    eD

    el

    camino,

    empollando en

    mis

    ondes

    las ms

    dulces estellas.

    sin Boder,

    sin

    pod.er

    detetrer

    Bi

    carrer.

    Y

    que

    h de

    degemtoca

    co

    todas

    nts

    cditla f[orre8 vlolotrtas

    eD la rada

    geisl

    alo

    I

    Etmitla

    Yo

    8oy Uu

    Maravlllogol

    Alluente de Dfosl

    EI

    EO [ts8E

    8IN ATIOB

    A n f v a

    A

    el

    anttguo

    hncfpe

    alo la Pasfu

    de

    Arnor,

    Dordiendo

    la cal de

    los tnurog.

    quebrndose

    las

    maos

    falnge

    por

    fala,uge.

    A.hf

    va

    el

    acribillaclo

    ra,ladeanalo

    a sal

    amarga

    de su

    saDgre

    sin cerebro y

    sin

    estrella,

    ecostndose como urr mendigo

    eD

    totlas

    las esqulnas

    de la Sombra.

    Vedle.

    Es

    ur

    insulto

    a

    la

    alegrfa

    d.e a

    Tiera

    Con los

    ojos llorosos

    ciego

    y

    desmedulado

    camina

    entre

    los hombres,

    sin

    poder

    doblarse

    como un

    grito

    contra

    las costillas

    grias del

    gilencio

    El

    que

    tenia

    en

    slu

    manos

    un

    inmenso

    penacho

    d.e luz,

    el quo caldeaba su corazn

    con

    un

    llamarada

    de

    jbilo,

    I

    3 l

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    17/145

    hoy

    tieDe

    la frente entre el

    polvo

    y

    aun no

    acaba

    de

    traga,rse el coazn

    Como es un

    insulto

    al, carnavxl de

    la vida,

    atrapaallo con

    vuestlos

    brazos varoniles

    y

    crucificadle

    cual un Cristo

    de

    tiniebla

    eJx cruz do un viento cualquiera.

    JORGE

    LUIS

    (Avonicl

    Quintaua

    2n,

    3,s.

    Afros.

    -

    Bep.

    Arg@tts)

    I4IL CI'ITABBA

    E

    ulatlo

    I Penpa

    cle un

    patleclto

    de

    la

    clle

    8rn m BE@o

    Alre.

    Cuanclo eut'16

    no l

    vf.

    Estba ar.rrucatla

    en lo

    profundo

    do un brqsca

    gultrta

    Solo

    so

    desmelen

    a,l

    etleyerar

    la

    dlesta la cuertla,s.

    No s lo

    que

    azuzabar;

    a lo meJor fu6 un triste dsl

    Norts

    pero

    yo

    vl la PamBa.

    Vf

    muchas bragadas d.e

    clelo

    sobo

    u maaojito de

    pasto.

    V

    ua

    loma

    que

    arritrcoart

    quietas

    distancias

    m,ientras leguas

    y

    leguas

    cae

    d.esd

    o

    alto.

    V eI

    campo

    dond.e

    cabo

    Dios si

    haber de

    lrclinase,

    vi

    cl nico lugar cle la tl6ra

    donde

    puede

    smln

    Diog

    a

    gus

    aJcbrt.

    Vl

    la

    pampa

    cansada

    quo

    antes

    hortorizaron

    los

    malones

    y hoy apaciguan c quietutl macTza las ltafte

    f

    32

    33

    .

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    18/145

    De

    un

    tlr

    vi

    toalo

    eso

    tn.fcxtras so

    desesperaban las

    c1rerda's|

    eD

    ur

    comp6s tan

    zarand,eado

    como 6ste.

    (I

    vl

    tambi6n

    o olla

    ctryo

    recuord.o

    aguarda

    en

    toda

    mustca).

    Easta

    qus

    e

    brusco

    cataclismo

    se allan

    la

    gultarra

    ecabritada

    y

    ostnJomo

    el sllsnclo

    y huaaDeto volvi ol yivt a estaucarsg,

    ATAR.DECEB

    f

    A vthuota

    L

    ya

    no c

    Bu Amor n

    tu

    regazo,

    El silencio

    que

    vlvo

    cn

    los ospJos

    ha

    forzado

    su crcel.

    I,a

    oscurld es

    Ia

    sangrs

    de

    las

    cosas

    heridas.

    En el

    poniente

    pobro

    la ta,rale

    mutilada,

    ez u Avemaa, de coloes.

    UN

    PATIO

    rr

    ON la

    ta.rde

    L.u

    ."rr ."ron

    los

    dos o

    tres

    colorcs

    del

    patio,

    I,a

    gran

    franqueza

    de

    la luna

    llena

    ya

    no

    entusiasma

    su

    habitual

    firmarxento.

    Ifoy

    que

    est

    crespo

    el cielo

    tl.ir

    la

    agorea

    que

    ha

    muerto

    u

    angelito.

    Patio,

    cielo

    eDcauzaalo.

    El

    patio

    es

    el

    decUve

    Bor el cual se derrana eI clelo en la casa.

    34

    SersIa

    la eterxictad.

    espera

    eD la encnrcijad

    ile estrellat.

    Iido es

    vivi

    en

    la

    amlstad

    oscura

    de

    ul

    zagun,

    de u

    alero

    y

    alo u

    alJlbo.

    LA

    NOCEE

    DE

    SAN JITAN

    .

    L

    poniente

    implacablo en esplondores

    ,?..

    quebr

    a fo d.e espada

    las

    stancias.

    Suave como rJx

    sauzal est'

    la

    :xoche.

    Rojas

    chisponotean

    l?s

    guit?.rras

    calientes de

    las bruscas hogueras:

    lea sacrificada

    que

    se desangra en

    brlosa Uamarada'

    bandera

    viva en gil travesura.

    f,a

    sombra

    es apacible como

    ula lejana;

    bien ecuerd.an

    las calles

    que

    fueron

    smp6

    un dla.

    Toda

    la

    santa

    noche la

    soled"ad.

    ezando

    el osario sBerso de

    astros

    desBarTamad.os.

    ATA3,D3CER

    1-

    oDA la

    charra multitud,

    de un

    ponieDto

    I

    alborota

    la callo

    la calle

    abierta

    como

    ur

    acbo

    sueo

    hacia cualquier aza,t,

    La

    limpida

    arboled

    que

    serena

    y

    bendice mi vagaocl

    se

    olvidr

    del

    paisaje

    y

    acalla cl barullero

    respla,nd.orde

    sus ramag.

    La tarde naniatada

    slo clana su queja en el ocaso,

    35

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    19/145

    La nano

    Jtrotta

    dc un menilfgo

    .lfuerza

    le

    cogoJal ale I

    teral6.

    BI'SIA

    A TRINCIIEBA

    avanzada es eu la cctepa

    un

    berco

    IJ &l abordajo

    Gol

    gallardeter

    do

    hurar

    letllorlfa

    ostalleD on lor

    ojo6

    BaJo

    bandoras

    do silenclo

    pasa

    la muchoalumbro

    Y el Bol

    cruclflcado

    on

    el

    poniento,

    8e

    pluraliza

    en

    la

    voclnglera

    D6

    las torrer

    del Kreml

    ll nar vendr

    nadantlo

    a esos

    ejrcitos

    Que

    envolvern sus torsos

    En

    toda

    la

    praders

    del nacfonte

    En el cuerto salvaJe do uu

    arco lrle

    Clamaemos 8u

    gesta

    Bayonetas

    Que llevar en la punta Irs maan.s.

    DITLCIA I,INQI'IITVS

    ATT,VA

    llfi cancln

    de crlouo

    flnal

    Po

    Ir

    noche

    sg ndad

    le

    rolmpagor

    Ea l cxpreso del sur

    Que

    alesonda

    y pierdo

    lor caEpor:

    NA amistad. hicieron

    mis

    abuelo

    Con

    esta leJana

    Y conquistaron la fntinldacl

    de

    la

    Panpa

    Y

    ligaron

    a au baqufa

    Ira tierra, el fuego,

    el

    airo,

    el

    agua.

    fucon solalodog

    r

    gtarc{oros

    Y apacentaron

    el corazn

    con

    maf,aua

    Y

    el

    horizonte lgual

    quo

    uns

    boraloua

    AoIt

    etr la

    hond.ua

    de

    su

    rtera

    Jord

    Su

    Jornatla

    fu6 claa

    cono

    u rfo

    Y era

    fresca

    Bu trtle

    como ol

    algfbe

    itel

    patto

    Y

    en

    su vlr

    eran las

    cuato

    estaclonos,

    Oomo los cutro vergog d,e una copla espera.a.

    Desclfia,ron brra,as

    lolya,red.ag

    Th

    caTstas

    o en caballadas

    Y

    lo alegr

    el resBlandor

    Con

    que

    avlva

    el sereno

    la luz

    de Ia

    osBadal.

    Uno

    pele

    contra

    los

    godos,

    Otro

    en

    el

    Paraguay

    cans

    su

    espada;

    Todos

    supiero del

    abrazo

    del

    mundo

    Y

    fu

    mujer

    Bu.mlsa

    a su

    querer

    la

    canpa,.

    Is otros

    corazones

    fueron

    sorenog

    Como ventana

    que

    d.a al

    campo;

    Respland.ecientes

    y

    altos

    eran

    sus

    ag

    Eechos

    de

    cielo

    y

    llano.

    Sabitl.rfa d.e tiera ad.entro la suya,

    De la lazada

    quo

    es comitt

    Y

    d.e la

    estrella

    quo

    es vereda

    Y de

    la

    guitarra

    encendida.

    gangre

    negra

    de coplas

    brot

    bajo

    sus mno8;

    ge

    sirltieron

    confesos

    en el

    canto tte

    un

    pJa,ro.

    Soy

    un

    puebiero

    y

    ya

    no s

    d.e esas

    cosas,

    Soy

    hombre

    de ciuilarl,

    do barrio, de calle:

    I.os

    tra,vas lejaos

    me ayudan

    la tristeza

    Con esa

    queja

    larga

    que

    sueltan en las tardos.

    36

    37

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    20/145

    [ONTEvfDEO

    lr /f

    I CORAZON

    resbata

    por

    Ia

    tartle

    corDo

    el eerlaucfo

    lVl

    p"t

    Ia

    Bieclacl

    de un

    deciive.

    La Iroche

    nuva

    es como

    un

    ala

    sobre

    tug

    azos.

    Ere

    ol

    Buenos

    Aircs

    que

    tuvimos,

    el

    quo

    en

    los

    a.os

    ge

    alej

    quietamonte'

    Eres remaEsada y clara e la tarde como el rectrordo do

    una

    lisa

    amistad'

    El cario

    brot

    en

    tus

    picilras

    como

    un

    pastito

    hmilalo'

    Eros

    nustra

    y

    ficstera,

    como

    la esrella

    que

    duplica

    uD

    'baaato.

    Puorta falsa

    cn

    ol

    tlcnpo,

    tus

    calles

    miralx

    al

    pasado

    ms

    .levo.

    Claror

    de

    dondc

    la maflana

    nos

    llega,

    sobre la

    dulce

    tur-

    bied.ad

    de

    las

    ag"ua.s.

    Antos

    do

    llumlnar

    ml

    cslostn

    su bajo sol

    bienaveDtua

    us

    quitas.

    Ciuttad

    quo

    89 oyo

    como un

    vor8o.

    Galles con

    luz de

    Patlo.

    A

    LA CAI.LE

    SERR.ANO

    ALIE

    gerraJxo.

    \/os

    ya

    no

    sos

    Ia

    Bisma

    de

    cuando el

    Centnrlo:

    Ates

    eras

    ms

    cielo

    y

    hoy

    sos

    puras

    fachad'as.

    El cfelo

    esta,ba

    en tod.o:

    En

    la, Iuz de

    los charcos

    Y

    en

    las

    tapia,s

    rosadas.

    A.hora

    te

    prestlgian

    El

    barIlo

    cliente

    de

    ua

    confitera

    Y un

    avigo

    punz

    como

    una

    injuria.

    En

    la

    espa,ldla movltla

    de

    tusJ

    italiaita

    No hay ni una trenza donde ahorcar la ternrr. .. .

    38

    Ife

    solto

    ni

    vagancia

    lrof

    tu

    noche

    gua8nga"

    Ad.ontro de

    un fongrafo

    Bersisto

    una

    guitare

    Y

    el

    sabor

    d.e Paleno

    so

    me subo

    hasta

    el

    8..

    La tierda

    La

    gfteD

    Se

    aneBinti

    d.e

    ese.

    Ate8

    Eabfa rm corazn

    en

    cada casa:

    El corazu ttel

    patfo.

    Me acuerdo

    de ua

    luna

    gla"ncle

    desde la

    acra.

    (No

    s6

    si era

    Carriego ol

    qus

    le daba cuerda.)

    tr(q a,cuerd.o

    de esas

    tapias

    rosad.as

    que

    slegFaban

    Y ea crno

    ut espeJo do

    Ia

    tartle

    ligora.

    Por ellas el

    porfente

    Slsllpro estaba

    en

    tu

    tlet.

    i

    I

    39

    G - : - : . : . . . . @

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    21/145

    FBIUA19EBA

    Et

    I I'NA

    sol

    alo

    agu

    sobre

    los

    tochos

    D6ltalor;

    r

    'Ifaa

    sed.

    d.e

    acuf,

    los

    rlsados

    crtstales

    stu

    DUr

    d,e

    ls Uuvtq

    V

    el dulce

    tabletoa,r

    del

    citrc

    y

    del

    asfatto

    rovetado

    o

    sotrid.os

    como

    frutos

    D.aduros.. . .

    Prinavetra.. . .

    Es

    ua

    sed

    de agna

    robro

    los

    techos

    ptfilo*

    Ios

    etpaclos

    d.el

    cielo

    su

    tfblo azul

    espesan

    y

    oprlmen

    las cludad.es

    como

    una

    pulpa

    ilcil.

    Una

    blada

    epftlermis

    se

    desnuda

    en

    la

    copa

    dle

    lo

    _

    bolos

    claro&

    Una

    blarala

    a{rpereza

    se

    d.eFa4

    en

    l

    aire,

    patds

    alol

    cslraclo.

    Y esperaado

    el

    augurlo

    de las

    aves

    vlajeras

    que

    remolcan.

    .la

    lluvia,

    escudrir

    ansiosas

    los

    camlnos,

    las

    torres.

    los

    caminos

    del

    viento polvorosos

    y

    secos

    y

    aqrellos

    tan

    Drofulxdor

    que

    frecuentan

    las nubes.

    Primvera.

    ,

    .

    Es uua

    sd

    de

    ag:ua

    sobre

    los

    techos

    pIid.os.

    Ua

    deseo

    de

    darnos

    o

    vibrar

    en

    el

    aire

    como

    ut arco

    transido

    bajo

    la

    cabellera

    vibrate

    de

    la

    iluvia que

    estalla

    en

    grandes

    nardos. '

    IfD a.nsia

    de

    apretar

    las

    estrellas

    Jugosas

    en

    las

    nochef

    carnales,

    de

    coagular

    la

    luz

    ardiete

    en las

    pupilas

    y

    desnnda.r

    as

    prpadol

    y

    mojarnos

    los

    dedos y

    mancharnos

    la

    boca

    y

    hrudirnos

    en

    el

    balo

    de

    ungentos

    y

    de

    zu.mos

    de

    las

    lunas

    violentas,

    del

    violento

    setiembre.

    En

    loca

    emracin

    de

    cristalinos

    sones.

    las calles y las plazas, limpian

    ,*

    .opm

    de

    oro.

    A.

    BRANDAI{

    CARAFFA

    (an

    Ja 1886, DoD. 8.

    -

    Bs. Alros,

    BeD.

    ArgeutJna)

    EXPn,ESS

    r

    N

    esaa

    horas

    grandes

    como

    cimlentos

    del

    tleEpo:

    I:

    cundo

    ol

    Jbo

    de

    mlnrnos

    Dodaba

    nuestos

    oJos

    do tod

    brlzna

    del

    mudo,

    y

    anudbamos

    con

    los

    c&blos

    do

    Ia

    fica

    luz

    Du.estraa

    dos certld.umbrss

    do

    ostar

    vlvos

    y

    otestos.

    IbaEos

    de

    retorno.

    (Ia erDlttad alzada)

    Ttapasados

    d.e

    das.

    Con

    el rencor

    antiguo de

    los cuatro

    horizontes

    al

    vot

    qEe

    arrebatbamos

    lnsaclobles

    el

    vie[to.

    r:n

    una

    sutil cabltra

    Doblaala

    do

    virtuales

    ausenclas;

    pequeos

    corazones

    de

    metal

    gustadores

    de onlas

    (ella,s

    se abren

    como

    collres

    d6

    eter

    ms

    aU de Ias

    nocho )

    aleJados

    atrs

    los rpidos

    clamorosos

    y

    turbfos

    qne

    ftecuentaD

    los

    hombres.

    En

    las

    grandes

    behfas

    sensitivas

    del

    cielo,

    audacias

    I'minosas

    que

    difunden

    abismo;

    ll[lcbealumbres

    de espacios

    que

    no

    se acuesta

    nuncet

    Xn Un tea-transatl6ntico-dtrigible. . . .

    40

    41.

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    22/145

    T mientras

    el creBsculo,

    garganta

    quo

    se

    ahoga

    de

    ||n

    amproso celo

    despedaza en sollozos

    de luz

    sus tard.os

    oJos,

    las manos do la

    sombra spersas

    y

    liviana,s,

    anltlan largamento

    las voces

    de

    los

    nios

    que

    Juegan

    en

    los

    patio$

    Hmavera...

    Es uxa sed. de

    agua sobre los

    techos

    pllctos.

    Ifn perfnne flltel al6 maaas antiguas y de vlrtuolar

    ;yerbas

    y

    una ronda

    profunda

    d

    clgarras

    aldeanas

    adormeciondo

    ostablos

    y

    ataJos

    en la sista.

    Olor del

    cabaUito de

    palo

    y

    d.el

    tambor

    afnlco

    y

    el sol salta[do

    petios

    y

    huertos

    y

    baldlos

    con la car lavda

    por

    el a.

    Los

    parques

    8o omaDsa

    do

    brlsas

    y

    d

    pausadas

    horas.

    I,as camBanas

    ao aloJan

    hacia

    valles de

    donde

    ya

    no

    vuelven

    y

    laa

    mad.res

    retozan

    con srs rubios

    hxfantes, dando l-

    .bricfas al alre

    quo

    d.escubre

    el secreto

    liviano

    d.o las

    vlrgenes

    y nsarcha log

    senderos del bosque

    y

    dol deseo.

    Primavera...

    Es ura

    sed. de

    agua sobre

    los

    techos

    pIlctos,

    Nacen

    tbios

    espejos en

    el

    airo lavado

    acumulan

    los labios,

    prodicacin

    de besos y

    premura

    de

    cantos

    y

    las ma.nos,

    orcaces, se engolan

    de caricias...

    Una bl.auda eBidermis so dosnud

    olr eI

    mundo, torpe

    vaso

    del cielo

    las

    palomas,

    jadeatos

    do deslertas

    Jortradas,

    traen al fin la llave

    d.ol leJano

    horizonte

    y

    se abren cor

    estrpito, srTentinas

    de

    plata,

    las

    cuencas

    de

    la

    lluvia,

    porteutosa

    y

    fragante.

    42

    DAIZA

    E

    S LM.{NA

    y

    porfecta

    como

    los ssres dlvi[os

    L

    Arco

    de

    flechas incendiadas, tiembla

    su cuerpo

    en

    el

    aio.

    En

    sus ojos

    tsanquilos,

    Juegatr

    ta.ralo.

    Sus maos d,ecoran

    el

    silencio,

    reros.

    Y n sus

    pies

    vive

    la

    dulce cogturDbre de una danza.

    El mudo Bs hce

    pequeo

    como

    ua

    senda

    para

    adorar

    sus

    pasos;

    y

    la

    muerte

    Ia

    mira,

    como

    Abraham a

    su

    hijo:

    Con

    la

    hoz levantada,

    pero

    el amor deshecbo

    en

    lla,ntol...

    Cuand.o

    leg4

    una

    nube

    (le

    sueos se

    posa

    sobre

    laa horas,

    y

    antiguos horizortes

    se asoman en

    los mareg...

    Cuado se va, la vida

    se desgaja

    en

    camiuos

    y

    la

    lur

    la sigue como |rn

    DJaro...

    .

    .

    .Entoncos,

    La noche, construye la soledaal y el espanto

    y

    los ojos se

    quealn

    prlsloneros

    eDi l&

    torre sollad.a

    de

    rn

    8Scncla

    Ias

    ltimas

    lucos

    de

    la

    con

    mucheclumbres

    de

    43

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    23/145

    E. BUSTA

    MANTE

    BALLIVIAN

    (Ipgacl

    ilsl Per.

    -

    Eio

    ile Jalelro,

    Brail)

    l[IsTroa

    f

    A

    catodraf

    -

    atormentada

    do hftlto

    hunde sus torrgs

    en

    las nubes

    para

    brxcar

    dlo.

    Pero

    como

    sab

    qne

    es

    un ard.uo

    probleEs

    se

    tientlo de

    ospaldaspara

    no

    carago

    do

    cglrersr.

    El

    rgano

    tlsfco

    hace

    gimng

    respiratoria

    porque

    sierte

    que

    so

    va a

    qued.ar

    afnlco.

    PONIENTE

    -

    fEMBITAN

    de anglstia

    oja

    I

    las

    manos suicidas

    d.e la

    tade

    44

    cuyo

    Drp8do

    8srl

    cerre u

    ruplla

    qgnlcr

    de recaracionfl

    y

    ile ma,fua.

    Sangro, sElgre,

    rDgrtt

    E ablsto todas Eus

    trtlar

    Gl cloo, ol Er,r y l plaV.

    CABBON UIIITBO

    E

    N l

    entra

    lJdl

    rocavl

    late la

    bomba

    ahogndoso tlo

    proful

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    24/145

    BaJo

    luces fijas

    y

    oJos

    que

    se cla,van

    la ogameDta del

    alestlno

    ru.eda sus

    senar

    y

    sus aaes

    buscando

    Ia

    carno

    do

    promresas

    que

    le arrarcarn

    nuestros cadog

    hambrientos,

    NOCTTIRIO DEL

    AUTO

    A

    1500 kilnrctros

    A e l 2 o o H . P .

    va empuJando cu la

    noche

    el tringulo

    do luz

    cuyo vrtico so

    lucrusta

    en

    el radiad.or.

    Trepida iscrono

    el

    anhelo

    d distaJxclag

    que

    agitan los

    mbolos

    y

    iembla

    toalo

    el

    acero

    un vaBor

    de aceites

    y

    de

    gasolna

    y

    rna sed,

    de

    inme.sfdad.

    Planeantlo sobre

    el

    camJno

    como un ava

    do

    alas

    rodnts

    ds caucho.

    fu un vrbigo

    tod.o a noche

    empujar

    la

    luz

    bacia occidente.

    Y cuando vino la arora

    46

    47

    n

    las espaldas

    tniamos al

    sol.

    COLOIIZACION

    PENAS hay

    ul

    mite

    ilusorio

    en

    el

    vago

    horizonte

    Itar cerrar esta lnea interminable de la pampa

    quo

    bajo

    las

    ruedas del tren se

    deshace

    en u

    polvo

    d.e

    asfixias.

    Estaciones,

    casas,

    pueblos,

    rboles,

    todo

    numerado

    y

    con nombres

    para

    saber

    como

    se

    llama.

    Pueblos

    que

    no tienen rosfuo

    y

    en

    el rio

    que

    corre

    se desconocn

    al

    mirarse.

    Pueblos

    que

    apenas

    son

    un

    pedazo

    de

    carno

    arrancado

    a

    la

    ciudad

    Pueblos donale

    los campesinos

    tienen

    aun

    sus

    billetes

    de viaje

    y

    ro

    son

    leos

    de

    mil

    aos

    los brazos

    que

    se siembran

    en

    la

    tierra

    Pueblos

    que

    han

    perdido

    el

    tren

    en

    que

    queran

    irse

    a

    cualquier

    parte.

    A

    apoyar

    en

    algn

    cerro,

    a mirar

    un

    cascada,

    a baiiarse

    en el ocauo

    o

    a

    anonadarse

    n

    la

    urbe

    en un suicidis millgis.

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    25/145

    Pueblos

    que por

    sor

    graDaaol

    ao han

    potliclo

    6r

    trlgales,

    omo slnten

    su abandono

    cuardo Be marcha

    un

    auhelo

    Jovcl

    trs

    todo

    lo

    que

    ost

    lejor,

    qB

    eI

    tops dol

    ltirqo carro.

    48

    4'

    t

    I

    t

    l

    I

    ll

    LUIS

    CARD

    OZA

    ARAGON

    (Legacitr

    de

    Mxico.

    -

    Parls, Fratrci)

    -

    rt IGLO

    XX.

    \

    L'

    Nuevo Renacfuriento,

    Aquf

    est la vid.a ma:

    Nacf cuand.o del

    sollozo ctel

    ltimo

    siglo,

    No se ofa nf

    utr solo

    eco,

    Y aeronauta

    ebrio

    ile

    vrtigo,

    Lanc

    ml

    lastre al

    pasado

    Y lne hico

    todo

    alas

    Tal vez

    mis oJos

    tengaD

    f,as retinas

    convexas

    Y

    mi visin

    sea

    nica:

    IVli

    mund.o es

    deformado,

    DoIorido,

    Xl

    undo de

    los

    otros

    R.eflejado

    En

    mis

    curvos

    espeJos.

    (En

    los

    curvos

    espejos

    De la

    vida

    el

    ge:rto,

    MeJor

    so

    ve

    porque

    se ve

    gIotesco.)

    Mo cata la Adolescencia sus misterios.

    7

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    26/145

    -Oa,nclonos

    de

    lrenasl

    -

    g

    08

    toda u

    locua

    mi asts

    ild ytrl

    Ileroca,r Juveutud.

    Como

    ua forune,

    Por

    mls oJos

    ae

    6c&pa:

    8o

    dos

    goy8ors

    do

    espfrltu.

    geal de sabsr dol placer,

    I)el dolor,

    dol

    amor

    y

    del

    oo,

    Del r.isterlo

    do l& vids

    y

    la

    muerte:

    Vlvtr,

    vlvlr, vlvlrl

    Y en

    l armonlos

    locura

    dol

    mundo,

    -Monta;&

    nus o8plrltul

    -

    El alma despoarl

    Que

    cada

    d.fa

    quo

    paso

    ost

    Dlarro

    Do

    un

    nuevo

    eptsodio,

    lvIi

    aventura

    cn le

    vldat

    Nacl odiando

    la

    D,onotonfa

    De

    las

    almag

    en

    paz.

    Odio

    la

    llanura

    Por

    no accldentad.a:

    Que

    alfombre

    la llanurs

    La

    senda

    en dond.e

    pasan

    Galopantlo

    las

    morrtaast

    Itn

    grano

    d.e

    locura

    Floreci

    en

    mis

    entra,ast

    I

    NQUIETUD,

    I

    fnquietud,

    Inquietud,

    SufrioDdo

    agIstla8

    d,e

    poeto:

    Alas

    en los hombrog

    Cetloras

    en

    los

    lies,

    Ahela

    reposa,r

    Ia Tlerra

    tocla,

    8u cabeza

    de io

    pensativo,

    En el

    eeno

    ,aternel

    de

    otro

    Blanetal

    Vagabund.os

    En derredor de los muelles,

    Crucificantlo

    Bus

    almas

    En

    los mstiles

    de los

    bacos

    que

    se

    v&tr. .

    ,

    Viendo levar

    las anclas,

    Ante

    el crepsculo

    na,rauja

    y

    verde,

    Gonstruyeron

    castillos en el aire.

    Y

    si sus sueos

    Ilbiesen

    sid.o

    ciertos algn

    dfa,

    Ixistiera,n fabulosas

    ciud.ades

    de milagro,

    Fabulosas,

    fabulosas, fabulosas

    Por las

    noches,

    en

    el

    cielo,

    Uu Dios irnico,

    Is ofrece rut regrero d.e d.ollars.

    Oh

    la triste

    frsa universal.

    "Baet

    russot

    I)u Mechant

    l)ieu "

    LUNA

    PAR.K.

    InquietuE

    Inquietuq

    Inquietud,

    I,os

    yanquis

    -Niagn

    yanqui

    tiene

    ms

    de

    1b

    aos

    "Y

    los nios dicen

    la

    verdad.,'

    -

    Aseguran

    que

    ms tard.e,

    *

    l

    60

    5t

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    27/145

    Dios

    oir

    8lo Ia

    plegaria,s

    Illchas e

    fngls.

    Como log

    Judfos,

    -ItD

    mlsmo tlestlno?-

    Ios

    rusos so derramaron

    por

    el

    multdo,

    "El

    pan nuestro de cada "

    Tal vez

    est

    compuesto

    De

    trigo

    de

    los campos

    de batalla,

    De

    las estepas

    rusas

    Enormos,

    PIana"s,

    Tristog

    Como

    pochos

    do nruJer

    si 6onos,

    Y

    gus

    rafce

    8o huntlan

    cn

    el dolor do nrrcsiros

    dias,

    Y la

    miga

    frrtura

    qulzs

    tcnga

    Un

    lejano

    gusto

    do

    rcncor.

    Quien no est en el Futuro no xise.

    El

    Puturo empez

    aycr.

    La brjula no

    quierc

    marcr

    ms el Norte,

    Bohema

    erra la Tierra por

    el ter,

    Se siente

    fatigado

    el

    Sol

    I)e nacer

    slempre

    elr Oriento;

    3l blanco de

    ser blanco.

    ll

    negro

    de

    ser

    uegro,

    El

    llombrs

    de sr llombro.

    ANDRES

    L.

    CARO

    (xico

    1416.

    8s,

    Aires, nep.

    Argentir)

    NOCEE

    1

    ERDUZCOS

    esqueletos

    del

    isomo

    V

    e

    desgano

    Be tira, en

    las veetlag

    y

    los faroles

    reman

    el silencio

    con sus

    ojos d lrz entr6

    la

    niebla.

    Iras

    esquinas se agrietan

    cle

    cansaDcio

    donde

    ol

    dolor de

    andar

    su frente

    tizna,

    Pobre

    cancin d.el

    tedio

    que

    te

    marchas

    por Ia mslca d. e una alcantaria.

    Pasar

    el carro

    viejo de la

    aoche

    con su

    roja

    e

    incomprensible

    ruta.

    All

    en los

    Buentes

    se suicida

    el mundo

    y

    utra estrella nos

    tiende

    su mano

    desnuala.

    FIESTA

    ^

    XDAS

    cosmopolitas

    ds

    banderas.

    )

    8u

    l*n. vestido

    ls

    casas

    con sus

    trajes

    de

    fiesta.

    Lenta fanfarria de cabaeria

    52

    53

    I

  • 8/11/2019 Alberto-Hidalgo-ed-Indice-de-la-nueva-poesia-americana-1926 (1).pdf

    28/145

    troDras de

    bronce

    que

    estallan

    d sol

    por

    las

    calles

    de

    la

    nllez

    desfila

    la troDa

    d.el

    rocusrdo con su roJo

    pompn

    Iog

    nuseos

    blstricos d.esperezan su

    basto

    de

    vahos

    d6 antfguos mnrebles

    y

    viojos uifornc.

    Con las

    oscarapelas

    del

    jbilo

    he

    prondo

    los

    anchos cuellos de

    a.trtes

    a

    mJs

    solapas

    tle

    hombc.

    I,a

    tardo

    es

    un

    gramfono

    que

    cauta

    por

    todas

    las osqulnas roncog aires

    de

    marchs.

    NOSTALGTA

    I

    A TARDE

    ost como nsfixiada

    rJ

    cn

    la8

    lolanfns tcrros&B

    Euole

    a

    ksrosono brr&to

    r

    lmpara

    maravfllosa

    Corfaln

    do

    maderaa con

    tu

    ruldo

    te hacos rur corazn eormo do alma

    Yo

    tambin tengo

    uis

    negtos

    letreror

    en la

    pared.

    de

    cal

    de

    la esperanza

    tn

    los vidios,

    que

    d.an a

    la trasenda

    de r

    suclo

    y gris

    hoja,latero

    la

    tarde suelda

    de

    Iz

    su

    abandono

    mieDtras

    cada votana

    filma

    un

    sueo

    Pasa

    el

    vidriero

    verde,

    baJo

    el

    brazo

    filmartlo

    el

    mund.o

    indiferenta

    Yo

    fibnara

    de

    oro

    mi nostalgia

    por la pa,xtalla quo tu amor enciede.

    ANGEL

    CRUCHAGA

    SANTA

    MARIA

    (MalllnErortt

    170,

    Santiago de Chlle)

    IMOS

    de

    los

    cielos,

    navlos

    que

    se

    van,

    alas do

    loc

    pJaros,

    todo lo

    que

    at'ravlesa

    el

    arco

    de

    l

    vid hacie

    tf

    fluye.

    Eechlzadora,

    desdo

    el

    fodo

    d.e tus

    oJoE a

    eternidad

    me

    sorpronde.

    Te bo

    querirlo

    en

    un huracn

    de

    cu:nbres, dosorbitado.

    De pi sobre el Brdo crrrido d.e catrellas como clego

    solo

    supe

    alargat mis brazos

    a tu corazn

    lento de

    heridas.

    En

    la

    guav'iilad

    ds

    mrs

    cauas

    quo

    no

    vern

    al hijo

    d6ja

    quo

    tus

    ldradas so

    quedon

    bast

    que

    muera.

    Ya nada firers de

    ti

    me llenar de

    asombro

    porque

    todo

    est en tus ojos

    y

    en

    la

    elega de

    tus

    brazos.

    Acrcate