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EDUCACIÓN AMBIENTAL

COMO BASE PARA EL DESARROLLO SOSTENIBLE

La educación ambiental es una realidad

sentada por todos los pueblos andinos y

comunidades amazónicas, quienes han

trasladado su conocimiento ancestral a la

sociedad actual. “De lo que ahora se haga

o deje de hacer en esta sociedad actual

depende el futuro del desarrollo sostenible y

por ende del desarrollo de todos los

pueblos”.

La crisis ambiental que está viviendo

actualmente el país (caso de la minería)

determina un nuevo rol para el sistema

educativo, que nunca tiene en sus manos

la totalidad de la solución de los

problemas sociales, pero pese a eso está

obligado a responder ante ello, y una de

esas respuestas está aquí, en eventos tan

importantes que comprometan a

maestros y alumnos a responder ante

esta problemática.

Existen cuatro pilares de la

educación para el desarrollo

sostenible (EDS):

1. Conciencia Pública y de comprensión.

2. Acceso a la educación básica de

calidad.

3. Reorientación de la educación

existente.

4. Programas educativos para todos los

sectores.

Estos cuatro pilares nos permitirán

fomentar y mejorar la excelencia

científica, la investigación y el desarrollo

de nuevos conocimientos, con la

participación de las instituciones de la

educación superior, fortaleciendo las

funciones básicas de la universidad que

son: Docencia, Investigación y

participación de la comunidad.

¿De qué manera se realiza la educación

para el Desarrollo Sostenible?

Respetando el conocimiento local y

hacerlo global; utilizando herramientas

como cátedras magistrales (iniciativa del

MINAM), formar parte de la comisión de

coordinación interuniversitaria de

educación para el desarrollo sostenible

(ANR) y redes de educación para el

desarrollo sostenible (UNESCO).

Desarrollo Sostenible, implica satisfacer

las necesidades de esta generación sin

comprometer la capacidad de las

próximas a que puedan hacerlo también.

(Brundtland,1987) y por ende, la

educación, como agente transformador,

tiene un rol protagónico para hacer

realidad ese gran reto global. Entonces,

una Educación para el Desarrollo

Sostenible involucra:

1. Edúcate tu primero.

2. Educa a tu entorno.

3. Eduquémonos todos.

Edúcate tu primero.

La enseñanza se inicia con el ejemplo.

Llevar una vida coherente entre lo que

dices y haces es el primer requisito. La

Educación para el Desarrollo Sostenible se

debe VIVIR, a través de acciones

concretas, que muestren tu compromiso

por mejorar tu entorno.

Promueve la paz. Prioriza las buenas relacionesa todo nivel, con tu familia, tus vecinos, tuscompañeros de trabajo y todas las personascon las que te rodeas.

Cuida tu entorno. Incorpora en tu vidaprácticas sostenibles desde detalles comoracionalizar el consumo de agua y electricidaden tu hogar.

Vive la igualdad. Concilia tu vida personal ylaboral, mientras corresponsabilizas tareas encasa, tanto si eres hombre o mujer.Comprométete con la Democracia. Buscaentender lo que pasa en tu entorno y siénteteparte importante de él. Involúcrate en la tomade decisiones de tu comunidad. Sigueaprendiendo.

Educa a tu entorno.

Educándote a ti mismo ya diste el primer

paso. Tus actos dirán mucho más que tus

palabras. Ahora que ya tomas decisiones

que tienen en cuenta el futuro a largo

plazo puedes ayudar a otros a que lo

hagan también. Algunos de manera

formal, otros informal, todos somos

educadores. Así eduquemos a nuestros

hijos, hermanos, amigos o tengamos la

oportunidad de manejar grupos o dirigir

equipos o instituciones; todos tenemos una

gran responsabilidad.

Sensibiliza. Conversa, explica y comparte con

otros lo que significa preocuparse por un mundo

mejor y más justo. Cuenta lo que haces. Infórmate

sobre lo bueno que hacen otros.

Proporciona herramientas. Apuesta por enseñar a

pescar, antes que por dar pescado. Facilita el

acceso a información que te ha sido útil en tu

proceso de educación personal. Ayuda y enseña.

Lleva a la acción. Promueve el desarrollo de

habilidades para el pensamiento crítico, el cambio

de hábitos y la incorporación de valores de

respeto, igualdad y paz.

Motiva a los que te rodean. Trasmite tu

compromiso y tu experiencia. Usa tu creatividad.

Eduquémonos todos.

No estamos solos. Cada vez más y más

personas toman conciencia de la

importancia de promover un desarrollo

sostenible en nuestra sociedad. Sé parte de

esta ola de esperanza y cambio.

Involúcrate en este movimiento global de

actuación local.

Vincúlate. Apuesta por el trabajo en red ypromuévelo en tu entorno. Únete a los grupos,como éste, que ya están promoviendo unatoma de acción consiente y encaminada a lasostenibilidad.

Suma. Genera iniciativas, reprodúcelas en tuentorno y compártelas a través de losdiferentes medios para que puedas ayudar aotros con tu experiencia.

Muestra tu interés. Reclama la incorporaciónde prácticas sostenibles a tus autoridades, alos medios de comunicación, a las empresas.El silencio muestra indiferencia.

La acción lleva al cambio.

¿Cómo pasar de la educación ambiental a la

educación para el desarrollo sostenible?

Lamentablemente en nuestro país la educación

ambiental fue planteada como una sección de

las asignaturas vinculadas con la biología,

desmantelando así el sentido de integralidad

que tiene una visión sistémica que conduce a

pensar las relaciones, jerarquías, contradicciones

y procesos de manera tal que solo es posible

hacerlo con una visión multidisciplinaria.

En los planes curriculares de todas las

carreras profesionales se debe incluir el curso

de cultura ambiental, dando así la

plataforma necesaria para una visión

sistémica e inclusiva, puesto que cada

profesional trabaja en función de las

necesidades de los pueblos a nivel mundial.

Somos todos testigos que los países másdesarrollados son lo que cargan más almundo y cuyas huellas ecológicas se hanvuelto insostenibles; si no se hace uncuestionamiento adecuado a las perspectivasde desarrollo destructivas y no se cuestionatambién el desarrollo sostenible del cual seabanderan muchos no seremos consecuentecon nuestros actos. De hecho la problemáticaactual conduce a comprender con facilidadque los temas ambientales no pueden seranalizados de manera aislada, sin que setransversalice en la totalidad de los otrosaspectos en la vida y que, al mismo tiempo, sealimenten de esos.

De allí que se plantea que la educación

ambiental inclusiva tiene como objetivo

principal “desarrollar y reforzar el espíritu

crítico de la ciudadanía con el fin de

asegurar un control democrático las

decisiones, orientaciones políticas y acciones

relacionadas con el medio ambiente, el

desarrollo y el manejo de los recursos

naturales”

Es por eso que podemos concluir hoy, que

la relación entre educación y desarrollo

sostenible supera a la visión mantenida

hasta el momento. Y que esperamos que

esta nueva educación para el desarrollo

sostenible siente las bases para el

surgimiento de los pueblos, dándole una

importancia crítica a la promoción continua

de capacidades de los estudiantes y de esa

forma dar solución a los problemas

ambientales y de desarrollo.

CAMBIO DE ACTITUD

ACTITUD ANTE LA NATURALEZA:

Si tu padre y tu madre plantaron un árbol cuando

naciste, a ese árbol que tiene ahora unos 20 años,

a ese árbol lo quieres.

Si, realmente, porque ese árbol representa tu

propia vida, por eso significa mucho para ti.

En cada acto importante de la vida planta un

árbol: cuando te cases “planta un árbol”, cuando

nazca un hijo tuyo “planta un árbol”, cuando entres

a la primaria “planta un árbol”, antes de cualquier

evento realmente importante, “planta un árbol”.

Pero si aquel árbol lo siembra el gobierno, te

importa un comino aunque sea el mismo árbol.

Por eso, la juventud tiene que ser emprendedora.

Nos quejamos de la contaminación y de la erosión

del país, pero si cada quien plantara un árbol en

cada momento importante de su vida, el Perú sería

otro.

Por eso es importante que cada uno

haga sus propias cosas, para que las amemos.

Quiero terminar con un cuento que me

contó mi abuela, dice así:

Había un bosque en el que vivían

muchos animalitos. De repente este bosque se

empieza a incendiar y todos los animalitos

empiezan a huir. Sólo hay un gorrioncito que

va al río, moja sus alitas, vuela sobre el

bosque incendiado y deja caer una gotita de

agua, tratando de apagar el incendio. Va al río

moja sus alitas, vuela sobre el bosque

incendiado y una o dos gotitas de agua deja

caer, tratando de apagar el incendio.

Pasa un elefante y le grita al gorrioncito:

¡No seas tonto! ¡Huye como todos! ¡No ves que

te vas a achicharrar! El gorrioncito voltea y le

dice ¡No!, este bosque me ha dado todo, familia,

felicidad; me ha dado todo y le tengo tanta

lealtad que no me importa que me muera, pero

voy a tratar de salvar este bosque.

Ante esta actitud los dioses se

compadecen de él y dejan caer un tormentón, y

el incendio se apaga.

Va al río, moja sus alitas y revolotea

sobre el bosque incendiado y deja caer una o

dos gotitas de agua.

Y este bosque vuelve a reverdecer y a

florecer, y todos los animalitos vuelven a

regresar y a ser felices, más felices de lo que

eran.

Peruanos de todas las edades, yo

comparo este bosque con nuestro Perú, tal

vez estemos en un gran incendio, en una gran

crisis política, social, económica y moral; pero

yo les pido a ustedes que todos los días

dejemos caer una o dos gotitas del sudor de

nuestro trabajo. ¡Si así lo hacen!, el Perú se

los agradecerá y Dios los bendecirá.

El cuento de siempre• “Erase una vez que había cuatro personas, cuyos

nombres eran: Todo Mundo, Alguien, Nadie y Cualquiera.

• Cuando había un trabajo importante que hacer, Todo Mundo estaba seguro de que Alguien lo haría, Cualquiera lo pudo haber hecho, pero Nadie lo hizo.

• Cuando Nadie lo hizo, Todo Mundo se enojaba porque era el trabajo de todo mundo. Todo mundo pensó que Alguien lo haría, pero Nadie se dio cuenta de que nadie lo haría.

• Terminó de tal forma que Todo Mundo culpó a Alguien cuando Nadie hizo lo que Cualquiera pudo haber hecho desde un principio”

Muchas Gracias !