COMPILADO DE COMUNICACIONES SOBRE TICS

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SE TRATA DE UN COMPILADO DE CINCUENTA ARTICULOS PUBLICADOS POR EL AUTOR ENTRE 1993 Y 2012,ACOMPAÑANDO EL PROCESO DE IRRUPCION DE LAS TECNOLOGIAS DE LA COMUNICACION Y LA INFORMACION. ESTAN ORDENADO DEL MAS RECIENTE HACIA ATRAS.iNCLUYE COMO ANEXO UN GRUPO DE CINCO ARTICULOS BREVES PUBLICADOS EN EL PERIODICO "LA VOZ DE rEALICO",DE LA PROVINCIA DE lA PAMPA, aRGENTINA

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COMPILADO DE COMUNICACIONES SOBRE TECNOLOGAS DEL CONOCIMIENTO Y LA INFORMACIN

Por Alfredo Armando Aguirre

A modo de comentario previo: este documento constituye un compilado de comunicaciones que hemos elaborado acerca del tema del ttulo.Hemos procedido a ordenarlas a partir de las mas reciente a los efectos que se pueda percibir como una suerte de "upgrade" de las comunicaciones precedentes.Advertimos que atento el carcter de conocimientos acumulados, ser dable comprobar la repeticin de conceptos;en algunos casos su modificacin;en otros la incorporacin de nuevos.Dado la vertiginosidad que viene caracterizando la irrupcin de las Tics,podrn hasta parecer desactualizadas las comunicaciones del primer tercio para atrs.No obstante entendemos que ellas reflejan las vivencias sobre las cuales se iban formulando descripciones,en tiempos en que haba escasa bibliografa en espaol disponible en la ciudad de Buenos Aires.Cabe acotar que estas comunicaciones que integran la presente compilacin,atento nuestra condicin de cultor de otras temticas, han sido seleccionadas del total de nuestras publicaciones. Hacemos esta acotacin atento pueda parecer al eventual lector/ra una suerte de brecha o concentracin temporal en las mismas.

Indice01 - DOS DECADAS COMO USUARIO Tics(En el rea metropolitana de Buenos Aires) ;20 de agosto de 201202 - "LA GESTIN DEL CONOCIMIENTO COMO PUENTE ENTRE LA CULTURA ADMINISTRATIVA ANALGICA A LA CULTURA ADMINISTRATIVA POLIDIGITAL" ;24 de agosto de 200903 - RECAPACITACION LABORAL PARA UN MUNDO CAMBIANTE ;15 de febrero de 200804 - LA APROPIACION INFANTO- JUVENIL DE LAS TICS: UN DESAFIO PARA EL PLEXO DE AFECTOS E INTERESES DOCENTES: UN ESBOZO DE ABORDAJE PARA EL CASO DE UNA MACROREGION ARGENTINA ;29/10/200605 QUE CAMBIA Y QUE PERMANECE CON EL ADVENIMIENTO DE LAS TICS. ;29/10/200606 - UN CASO DE INFORME VOLUNTARIO DE EGRESO COMO ALTERNATIVA PARA CAPTURAR CONOCIMIENTO TACITO EN LA ADMINISTRACION PBLICA FEDERAL ARGENTINA ;12 de diciembre de 200607 - ESBOZO DE UNA NOCION DE TICS PARA ABORDAR UNA REINVENCION EDUCATIVA EN UNA PORCION DE SUDAMERICA DONDE CONVIVAN PACIFICAMENTE LAS CRECIENTES MAYORIAS TRANSOCCIDENTALES CON LAS DECRECIENTES MINORIAS OCCIDENTALIZADAS ;9 de agosto de 200408 - " RECREANDO PERMANENTE POLIGITAL, Y AGONICAMENTE DESDE EL CORAZON DE LA PAMPA GRINGA" ;27 de julio de 200309 - El iceberg Tics ;10 de Octubre de 200210- "Petaflops, terabyts, y velocidad de la luz. (Una combinacin de inmensas potencialidades)" ;4 de Mayo de 2002 11 - Las TICS en nuestras vidas cotidianas ; 23 de Enero de 200112 - ASPECTOS DE LA GESTION DEL CONOCIMIENTO EN LOS PODERES PUBLICOS ARGENTINOS ENFATIZANDO EN LOS SERVIDORES PUBLICOS ;27 de Agosto de 200113 - "HACIENDO FRENTE A LAS Tics CON CREATIVIDAD" ; 18/11/0014- " Rumbo a "Rosarios poligitales" en medio de un tifn conceptual" ;10 de Agosto de 200015- ESTIMULOS DESDE LA "INFONOMIA" DE CORNELLAS ; 23 de junio de 200016- " DE LA FECUNDA RELACION ENTRE LA ESTETICA Y LAS Tics" ;27 de abril de 200017- TICS y DIVERSIDAD ;12 de abril de 200018 - HINDUES ALGORITMICOS ;22/03/200019 - DE LA PUBLICIDAD EN INTERNET( O PROHIBIDO PROHIBIR) ;17 de marzo de 200020- SOBRE METODOLOGIAS PARA APROVECHAR LAS TECNOLOGIAS DE LA COMUNICACION Y LA INFORMACION ;18 de febrero de 200021- "ACCESO A INTERNET MINIMIZANDO COSTOS (Y SI ES POSIBLE GRATIS!!!)" ;19 de Octubre de 199922- POR UNA EDUCACION DUCTIL, FLEXIBLE VIVA ;17/09/199923- "EDAD DE LA INFORMACION Y REINVENCION EDUCATIVA" ;20 de Septiembre de 199924- CAMINOS PARA LA DIVULGACION TELEMATICA ;25 de Agosto de 199925- UN HOBBY PEQUEO-BURGUES... ;24/05/199926 - DE PERSPECTIVAS, PUBLICOS, ELITES Y OLIGARQUIAS ;18/03/199927 Tics: ESTIMULOS Y RESPUESTAS ;10/03/199928 - TICS, vocaciones y condicin humana ;06/03/199929 - EL IMPACTO DE LAS TECNOLOGIAS DE LA INFORMACION(UNA MEDITACION PERMANENTE....) ;26 DE FEBRERO DE 199930- " Utopas, institucinalizacin y burocratizacin "(una meditacin en clave de ingeniera social) ;12 de octubre de 199831- " RELACIONES HUMANAS TELEMATIZADAS" ;14 de agosto de 199832 - DISQUISICIONES SOBRE EL TELETRABAJO ;ABRIL DE 199833 - DESLUMBRAMIENTOS TELEMATICOS COTIDIANOS( Novedades incesantes en Internet e informtica) ;16 y 17 de enero de 199834- "BUROTICA , OFIMATICA, TELEMATICA (Nuevas herramientas de trabajo) ;noviembre de 199735- "TELEMATICA POPULAR" ;13 de Octubre de 199736- "VIDEOCONFERENCIA: PRIMERAS VIVENCIAS"( El estado del arte de Internet) ;12 de Junio de 199737 - "UNA CAPITAL FEDERAL VIRTUAL?"(posibilidades telemticas) ;29 de Agosto de 199638 - "INTERNET: HERRAMIENTA COMUNICACIONAL ;3 de Agosto de 199639 - " DE AUTODIDACTAS Y AUTOAPRENDIZAGE" (Alternativas de elevacin cultural) ;19 de Junio de 199640 - "DE PASEO POR LA ALDEA GLOBAL"(Vivencias en la INTERNET) ;9 DE JUNIO DE 199641- SARMIENTO, ALDERDI E INTERNET (La supercarretera de la informacin) ;3 de diciembre de 199542- GLOBALIZACION, CONECTIVIDAD Y MULTIMEDIA (IINFOCOM95, INTERNET ETC...), ;11 de Junio de 199543- "LAS TECNOLOGAS DE LA INFORMACIN" (Acortando tiempo y distancia) ;15-11-9444- TELEMATICA O TELEINFORMATICA(La nueva alfabetizacin), ;22 de enero de 199445 - GLOBALIZACION Y REEDUCACION ;2 de Octubre de 1993** Se incluyen como Anexo cinco(5) artculos breves publicados sobre el tema en el diario"LA VOZ DE REALICO",de la ciudad homnima,en la provincia de La Pampa,Argentina.

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CONTENIDOS01 - DOS DECADAS COMO USUARIO Tics(En el rea metropolitana de Buenos Aires)

Nos contamos entre quienes solemos dar cierta relevancia a la utilizacin determinados periodos de tiempo para realizar anlisis o balances sobre alguna temtica desarrollada durante ese periodo, circunscrita o no a determinado espacio geogrfico.En este ao se corre del calendario gregoriano (2012).podemos acreditar dos dcadas de utilizacin intensa de lo que ahora se conocen como Tecnologas de la informacin y la comunicacin (TICS, en adelante). Se nos ocurre que pueden interesar a eventuales lectores los testimonios sintetizados de dicha experiencia.Como transitamos por lo testimonial, se estima adecuado consignar algunos de los parmetros de ese testimonio. Cuando comenzamos nuestra inmersin en el universo Tics, frisbamos los 45 aos. Nuestro lugar en el mundo durante el periodo que comentamos ha sido la Banda Occidental del Rio de la Plata, el rea metropolitana de Buenos Aires, donde se asienta la ciudad de Buenos Aires, distrito federal de la Repblica Argentina.Parece hasta obvio consignar que nuestro encuentro con el tema lo hicimos con el bagaje conceptual previo. Desde fines de la dcada del 70 venamos aproximndonos al tema, en especial con las ediciones que desde Espaa se hacan, divulgando la buena nueva de la informtica. Pero lo concreto es que fue en mayo de 1992, que nos pusimos a utilizar .una computadora personal .Y ese contacto fue inducido por la ya fallecida Mara Marta Roldan. una compaera de trabajo, pionera del empleo de la informtica en la Administracin Pblica argentina, quien me estimulaba a introducirme en ese nuevo mundo dicindome que yo era para la informtica. Tambin fue estimulante el aliento de mi amiga la ingeniera Mirta Garciarena, quien me deca, a m que por entonces desconoca el tema: El Dbase es para Vos. Y fue Ricardo Elas el que me dio la instruccin bsica para las operaciones rudimentarias de una PC. Debo reconocer que mis conocimientos previos de ingls y de Nutica facilitaron mi inmersin. No sera honesto de mi parte, soslayar que me haba impactado la opinin vertida a travs de algn medio de comunicacin por Gustavo Beliz, por entonces funcionario del gobierno federal argentino, a quien le su opinin acerca del analfabetismo informtico. Paro ya iniciada mi relacin concreta con la informtica, tom conocimiento de algo que realmente me conmovi. Resulta que lleg a la agencia del gobierno federal argentino en la que entonces trabajaba, una funcionaria del gobierno uruguayo a dar unas charlas tcnicas. En algn momento de su discurso, pronunci la palabra que aun me suena mgica. Me refiero a la palabra MODEM.Por entonces ya llevaba varios aos haciendo conocer mis inquietudes a travs a medios escritos de comunicacin de tirada reducida. Esta persona me estaba diciendo que poda escribir un artculo en la computadora, y previo archivo luego enviarlo a otra computadora situada a cualquier lugar que tuviera tambin un dispositivo mdem, como tendra que tener la computadora desde donde enviara mis escritos.Casi en simultaneidad y aun empleando las planillas de clculo haciendo de procesador precario de textos, comenc a enviar al medio que entonces publicaba mis inquietudes los artculos que hasta ese momento enviaba tipeados en las maquinas de escribir de entonces.Recordemos que estamos en el momento previo al lanzamiento de la Web. Por ese entonces ya se haban instalado en Buenos Aires y en algn sitio del interior argentino, los Boarding Bulletin System (BBSs), en los cuales empezamos a subir nuestros escritos. Esa experiencia con los BBSs, seria una preparacin adecuada cuando apareciera la Web por estas latitudes casi en simultaneidad a su dispersin como componente significativo del concepto de globalizacin o mundializacin.Nuestros inicios coincidan con el uso del sistema operativo DOS y en ingles. Los comandos deban teclearse. As que cuando llego el primer sistema Windows, uno estaba familiarizado con el tecleado de comandos y en ingles.Debo confesar que de las utilidades que se me iban presentando, la que ms me interes, fueron los gestores de base de datos. Mi relacin con el programa Dbase III Plus, que es de la dcada del 80, me parece algo muy "amigable", aunque no me animo a calificarlo de insuperable. He aprendido que la versatilidad de las herramientas telemticas, depende de las necesidades de cada usuario.En las pocas iniciales, haba mucha profusin de revistas que estaban abriendo el mercado hispano parlante. Mirado desde este 2012 todo parece vertiginoso. En 1992, los 2400 baudios de velocidad de trasmisin parecan algo milagroso, en menos de 4 aos estaramos en los 56000 baudios y hoy ya hablamos de Gigas. Puede uno imaginar lo que significaba subir o bajar archivos con las tarifas telefnicas comunes. La digitalizacin y la fibra ptica estaban en ciernes.Atento lo hemos mencionado precedentemente, venamos haciendo conocer nuestras inquietudes por algunos medios de comunicacin escrito. Ello nos facilit la tarea de divulgar por esos medios los contenidos que bamos aprendiendo sobre la telemtica a partir de 1994.El trabajo con bases de datos fue algo que nos apasiona desde ese entonces. Recuerdo que el primer ejercicio para ver cmo funcionaba esa herramienta fue cargar un santoral de la iglesia catlica. Luego proced al diseo y carga de una recopilacin de datos que haba hecho entre 1987 y 1988, con la esperanza de algn da volcarla a alguna herramienta informtica. Y el momento lleg. Mis intensas experiencias con ese programa de la empresa Borland ya extinguida, me permiten comprobar que al menos en el nivel de mis necesidades, el programa pudo superar las crecientes velocidades de procesamiento que resultaban hasta inimaginables a principios de la dcada del 80.En esos principios de los 90, cabe recordar que en Buenos Aires, algunas empresas pioneras en el autoaprendizage, editaban manuales donde muchos aficionados aprendamos sus rudimentos. Debe reconocerse el papel de aquellos emprendedores.El inters que me despertaba el dispositivo de la videoconferencia me llevo a mis primeras experiencias de comercio electrnico.La dinmica del mercado en este rubro, reiteramos emblemtico de la globalizacin asimtrica por aadidura, ha llevado a que muchas empresas no hayan podido sobrevivir, absorbidas por otros emprendimientos. Tal el caso de la empresa CUSEEME, que produca un programa de videoconferencias y las cmaras anexas. Fue para adquirir una versin de ese programa que realic mi primera operacin de comercio electrnico. En los das que corren y sobre todo para el publico infanto juvenil que tiene presencia mayoritaria en el ahora conocido como ciberespacio, parece hasta trivial referirse a como se compra o se vende por Internet. Pero pensemos a fines de los 90 lo que implicaba comprar en otro pas y comprobar que luego el producto adquirido utilizando una tarjeta de crdito llegaba hasta el domicilio enviado por algn correo internacional. Recordamos que escribimos esa operacin y dicho relato fue publicado en un sitio web de California, por ser uno de los primeros relatos en espaol de esas operatorias.

Respecto a la franja infanto juvenil no podemos dejar de sealar de su papel entusiasta y generoso en los comienzos de la traumtica irrupcin de las Tics en pases como la Argentina. En Javincho Puyuelo, deseo simbolizar a todos aquellos jvenes que compartan sus conocimientos y que tanto nos ayudaron. Fueron ellos los que nos indicaron como obtener una cuenta de correo electrnico gratuita. Como obtener gratuitamente y auto disear la propia pgina personal, como modificarla e incorporarle contenidos.Para quienes hemos experimentado las dificultades para publicar nuestras inquietudes, las Tics nos han abierto un abanico posibilidades que hace que podamos publicar no solo pequeos textos, sino libros completos en formato electrnico. En los das que corren todo esto parece una obviedad; mas a los efectos retrospectivos no lo es.Junto a las posibilidades comerciales de las Tics, coexiste la gratuidad. Y ello bordeando la infoxicacin. Hay tanto contenido gratuito que son inabarcables para una existencia: El autodidactismo es una posibilidad a la mano de cualquiera que pueda acceder a una PC conectada la red.El aprendizaje es el mbito ms sugerente de las TICS. Solo el tiempo disponible y los intereses de cada persona pareceran ser los lmites para conocer. La certificacin de saberes est dejando velozmente de ser un monopolio de las instituciones educativas, dudando nosotros en cuanto a su configuracin futura.Asimismo la dinmica de las Tics ha generado su propia batera conceptual la cual realimenta su mismo proceso y resignifica toda la aventura del conocimiento humano Pre Tics.Es notable el uso creativo que hacen los particularismos y las expresiones culturales de grupos minoritarios. El aprendizaje de idiomas no masivos o lenguas casi extinguidas son uno de los innmeros ejemplos, que cada usuario intensivo de la Net puede describir desde sus irrepetibles pticasComo ya lo hemos expresado en otras comunicaciones. La conjuncin de estas maquinas electrnicas capaces de realizar operaciones que superan las decenas de millones de segundo, el almacenamiento de datos en magnitudes que necesitan de neologismos para caracterizarlas ,as como la circulacin de la informacin de esos contenidos a velocidades cercanas a la velocidad de la luz, comportan una sinergia que resulta casi inimaginable predecir sus efectos. La telefona celular, materializacin del concepto de miniaturizacin y la generacin de una masa de usuarios que vivencian cotidianamente la globalizacin an en su asimetra es nada ms que un episodio de lo que puede sobrevenirTal vez las nica limitacin de las Tics, sean las limitaciones de la propia condicin humana...Y esto puede sonar a una perogrullada. De todos modos las posibilidades de crecimiento personal que brindan son muy grandes. De las posibilidades de envilecimiento, prefiero omitirlas sin desconocerlas.Tal vez lo novedoso de este testimonio, estribe en que en las generaciones precedentes no hubo posibilidad concreta de reflejar vivencias dado la inexistencia de este tipo de ingenios humanos. Uno podra continuar extendindose en temas como los atinentes a la diferencia de percepcin de estos fenmenos segn las vocaciones y las localizaciones. Esto recin est en sus comienzos. Tan solo queramos compartir un testimonio, que tal vez estimule a que otras personas hagan algo parecido. Vaya mi agradecimiento a quienes me abrieron este camino.(Lunes 20 de agosto de 2012) 02 - "LA GESTIN DEL CONOCIMIENTO COMO PUENTE ENTRE LA CULTURA ADMINISTRATIVA ANALGICA A LA CULTURA ADMINISTRATIVA POLIDIGITAL"

Abstract
Esta comunicacin es el testimonio de un veterano miembro del servicio civil federal argentino, enfocado desde el punto de vista de la Gestin del Conocimiento.
Es opinin del autor que la experiencia acumulada por los servidores pblicos, convenientemente movilizada por los decisores polticos puede constituir un significativo aporte a la productividad de los servicios gubernamentales y por ende tambin contribuir a la calidad de vida de las personas implicadas.This communication is the testimony of a senior member of the Argentine federal civil service approached from the (KM) Knowledge Management's perspective .
It is the opinion of the author that the experience of public servants, conveniently mobilized by politicians can provide a significant contribution to the productivity of government services, and therefore also contribute to the quality of life of the people involved.Palabras claves: Gestin del conocimiento, cultura administrativa, macrothesaurus, servicio publico, Archivstica, capital humano, servicios gubernamentales, gestin publica, polticas pblicas, ArgentinaCOMUNICACIONLo que sigue transita por el sendero de lo testimonial, diz que autobiogrfico. Hay una suerte de auto-entrevista profunda con "observacin participante".Llevo en este invierno austral de 2009, poco ms de 62 aos. Hacia fines del ao en curso voy a cumplir cuarenta aos como graduado en Ciencia Poltica, habiendo ingresado a los cuadros de la Administracin Publica federal (nacional) argentina, en el tercer Trimestre de 1968. Salvo dos interrupciones que suman tres aos, todo ese tiempo en permanecido en el servicio publico, y viene siendo esa mi principal fuente de ingresos (parcialmente complementada con tareas docentes). Quienes me tratan, me han escuchado decir: "que mi trabajo es mi hobby": Agregara que en mi horizonte existencial se ha instalado la jubilacin, que sobrevendra hacia Julio del 2012.Preponderantemente voy a formular la presente comunicacin, desde lo que vengo vivenciando y reflexionando desde mi posicin laboral, enriquecido por lecturas de contenidos afines a la materia.Cada lector sabr hasta donde lo que expreso es extrapolable a otras administraciones pblicas iberoamericanas. Conjeturo que las burocracias pblicas de nuestros pases tienen mucho en comn, por cuanto los entornos en las que se desenvuelven tambin lo tienen. Tal vez las diferencias asomen en cuanto a las idiosincrasias de los pases ibricos con las de los pases de Latinoamrica o Indo Amrica.Si bien comenc a acercarme a la incorporacin de la Informtica en las agencias pblicas hacia 1979, mi inmersin en lo que todava no se denominaban Tics, se produjo hacia mayo de 1992. Nunca olvidar cuando una funcionaria uruguaya del proyecto Urucib, en una jornada de capacitacin interna, pronunci la palabra que creo marcara un hito en mi existencia: MDEM.Hasta ese momento saciaba mi inquietud comunicacional, desde mediados de 1977, escribiendo artculos de los temas de mi inters en publicaciones de tirada reducida. Es decir transitaba por los caminos de lo "analgico". Fue la toma de conocimiento de las posibilidades que se abran a travs del Mdem, la que cataliz mi migracin hacia lo digital (que por estas horas proyecto hacia lo "poligital", por entender que lo que se ha desencadenado tiende a lo ilimitado, aunque resulta casi inimaginable).Lo que he manifestado respecto a mi predisposicin para con las cuestiones de la Administracin Publica, ya formaba parte de mi bagaje de inquietudes en mi poca llamemsle analgica. Desde las practicas laborales y extra-laborales centradas en la telemtica, me encontr all por el ao 2000, con uno de los conceptos decantados por la dinmica del acontecer Tics, cual es el de "Gestin del conocimiento"(KM). Mi conocimiento de idioma ingls me facilitaron abrevar en los documentos que se venan produciendo al respecto, as como haban facilitado toda mi inmersin en las TicsDejo explcito desde ya, que el impacto Tics en el quehacer de las agencias publicas, esta lejos de agotarse en las cuestiones vinculadas a la Gestin del Conocimiento (En adelante GC). Lo que sucede es que a los efectos de la presente comunicacin, haremos nfasis en ellas, sin soslayar, como cuadra a los abordajes holsticos, que todo dentro y fuera de las agencias publicas esta dinmicamente interrelacionado.Tomando como marco referencial a las agencias o burocracias publicas, puede esbozarse una suerte de gama o abanico de posiciones de observacin o accin. A saber: la de las personas que estn "fuera " de los cuadros administrativos, pero que en cuanto "administrados", de algn modo y en algn punto de sus existencias tuvieron, tienen, o tendrn algn tipo de relacionamiento con las agencias publicas; las de las personas que ocupan puestos de conduccin o asesoramiento de las agencias, y lo hacen de manera temporal(por estas latitudes se los conoce funcionarios "polticos"), y la categora en que me ubico, que es la de los servidores pblicos permanentes o transitorios, que tienen contratos de trabajos con la Administracin publica y que realizan mltiples tareas, guardando con los funcionarios "polticos" una relacin "Patrn - empleado". Este abanico es dinmico y hasta admite cambios de posicin.En sntesis, que nuestro discurso es el de un servidor pblico, en este caso permanente, que no se considera funcionario poltico", aunque como en mi caso alguna vez, haya funcionado como tal.Nuestra trayectoria "analgica" y nuestra "migracin" hacia lo digital, nos ha permitido visualizar tanto el potencial de los analgico preexistente, y subsistente; como lo que las Tics posibilitan para potenciar y poner en valor a esa analogicidad, aun mas all de lo que la misma era aprovechada en la etapa pre - Tics Y asimismo, nos permite ponderar el aporte que el capital humano encuadrado en los servidores pblicos permanentes y semis-permanentes, hizo, hace y har, para gestionar un activo, estando en capacidad y aptitud para hacer un aporte substantivo a la calidad y cantidad de las polticas publicas que son resorte de las decisiones tomadas por los funcionarios "polticos", vinculados directa o indirectamente a los ciudadanos que los colocan all mediante el sufragio.Y aqu no debe soslayarse que ciudadanos son tanto los que estn "fuera de las agencias pblicas (la inmensa mayora) como los que pertenecen a sus cuadros.En una publicacin de divulgacin sobre el Plan de Gobierno 1947-1951 del Gobierno federal argentino, vi por vez primera el concepto de "cultura administrativa". Como cultor de lo que se conoce indistintamente como Etnologa o Antropologa Cultural, me pareci muy fecundo para adentrarse al peculiar flujo /fluencia vital de la Administracin pblica de mi pas. A los efectos del anlisis, adoptamos por considerarlo operativo aquel concepto de "cultura" acuado por Romano Guardini(1885-1968), en el sentido que:"cultura es todo lo que el hombre hace, crea o conforma".En orden a las precisiones, y entendiendo como cultura al contexto argentino, entonces podemos considerar al acontecer de la administracin pblica, como una "subcultura", en estrecha interaccin con su entorno, que es l que por otra parte justifica su existencia.Mas arriba empleamos los conceptos casi equivalentes de "flujo vital" y de "fluencia vital". El primero lo tomamos de Jos Imbelloni (1885-1967) y el segundo lo abrevamos en Sal Taborda (1884-1944), quien explicita que lo tom a su vez de Ortega y Gasset (1883 - 1955).Para tener una visin panormica de la subcultura administrativa argentina pre - Tics, es necesario remontarse al Derecho Indiano, sobre el que se montaron las agencias pblicas de los conquistadores y evangelizadores espaoles. Sobre la fluencia administrativa puesta en marcha por esas instituciones las que va de suyo experimentaron modificaciones a lo largo de los casi dos siglos y medio que rigieron, se montaron las iniciales instituciones argentinas, particularmente en el periodo de transicin que va desde 1810, hasta la instalacin del gobierno federal argentino en la ciudad de Buenos aires, en 1862.No conozco estudios sobre la Administracin pblica de ese periodo, pero arriesgo la hiptesis por la documentacin consultada, que sus practicas personificadas por los servidores pblico que fueron transmitiendo sus hbitos laborales y incluso participando en las transiciones o por los lazos familiares y amistosos que muchas veces parecen obvios pero que hacen al funcionamiento de las instituciones y a la transmisin asistemtica de conocimientos. Arriesgo la hiptesis repito, que por la conjuncin entre otros de esos factores, el nuevo estado de cosas iniciado en 1862, asimil a su acervo esas influencias. Y desde entonces, a pesar de las turbulencias institucionales que ha venido experimentando la Repblica Argentina, lo preexistente ha venido influenciando ostensiblemente a la cotidianidad del quehacer administrativo, aunque esta circunstancia, a veces por su obviedad, escapa a los anlisis, que generalmente, se hacen con pocas vivencias de esa cultura, o sin consultar a los portadores de esas vivencias. Esta falencia se hace ms evidente desde la perspectiva de la GC.Aplicadas a la cultura administrativa "analgica", hay dos nociones provenientes de la batera GC que son por dems reveladoras: las de conocimientos explcitos y tcitos.En lo que hace al conocimiento explicito, cuando se abreva en la documentacin que viene respaldando el quehacer de las agencias pblicas, se percibe una alta invisibilidad de esa masa de conocimientos en gran parte desaprovechados.Por suerte esa documentacin, pudo sobrevivir a los que la generaron.En el caso del conocimiento tcito, nos referimos al que han venido acumulando las actuales camadas de servidores y servidoras pblicas, as como el de aquellos que han pasado a categora de jubilados. Tambin se percibe un ostensible desaprovechamiento de ese conocimiento, que se torna voltil sino se generan los mbitos para tornarlo en "conocimiento explicito".Estos activos de conocimiento, sin desconocer la incorporacin acrtica y muchas veces perifrica, de herramientas informticas y telemticas a la Administracin publica, presentan un potencial que al menos en nuestra ptica, podra hacer un aporte substantivo a la elevacin de la calidad de las decisiones que ponen en marcha y implementan el men de polticas pblicas.Resulta muy amplio el espectro de tareas circunstanciadas que implicara poner en valor todo este conocimiento analgico procesndolo con el arsenal TicsMuchas veces ponemos el ejemplo de todo lo que puede hacer sobre el particular la simple combinacin de la fotocopiadora y el escner.No se hasta que punto resulta redundante, extendernos sobre el prrafo precedente, porque percibimos que a veces lo obvio o perogrullesco, recibe menos atencin que lo mas elaborado y formalizado. Como si hubiera una primaca de lo complejo y sofisticado, sobre lo simple y prctico. Como se sabe el grueso de los documentos analgicos son contenidos preponderantemente alfanumricos soportados en papel. Los hay manuscritos e impresos. Si asumimos que en los Archivos de Indias, estn los "cidos nucleicos" de la cultura administrativa de nuestros pas, en nuestro caso de la Argentina, podemos tener una hito de hasta donde puede llegar el proceso de digitalizacin de la informacin analgica. Aun para documentos escritos ms cercanos en el tiempo, hay un paso previo al escaneo, que es el fotocopiado. Ello es por la simple razn tcnica que desde una fotocopia (que van en continuo perfeccionamiento en cuanto a la reproduccin), es mucho mas ntida la imagen que puede procesar un escner, sea para el "reconocimiento ptico de caracteres"(OCR), o para las tcnicas fotogrficas que hacen uso de archivos como los de formato pdf. Acotamos que la tcnica de OCR, resulta ms amigable a la hora de alimentar bases de datos que permitan realizar bsquedas profundas tipo "minera de datos".Como se va apreciando se abren dos lneas de trabajos convergentes en esta propuesta de "recuperacin de informacin"(Al estilo del "Macrothesaurus, concepto que precedi a la generalizacin de las computadores personales y las redes telemticas). Una, es la de los documentos escritos, y otra la de los testimonios del los servidores pblicos (en actividad o jubilados).All por 1982, lemos en "Vers une Science des civilisations?" (Michaud et Marc, 1981), que: "todo viejo que muere es una biblioteca que desaparece". La memoria de las personas es "voltil" y desaparece con sus fallecimientos, salvo que hayan dejado algn testimonio escrito. Atento esa "volatibilidad" inevitable, debemos dar prioridad a el conocimiento tcito que albergan dilatadas trayectorias laborales en los portadores de esta "cultura administrativa" evanescente.Atento las normas del evento al que se presenta la presente comunicacin, requiere trabajos no publicados, tan solo consignaremos que en ocasin de las tareas de capacitacin que desarrolla el Instituto Nacional de la Administracin Pblica del gobierno federal argentino, y en el marco de las actividades sobre Gestin del Conocimiento que anima Graciela Falivene, presentamos un trabajo dedicado a la captacin de conocimiento tcito de personal prximo a jubilarse. Nos inspiramos en una modalidad de la GC, que son los "Exit Questionaries" (Formularios de Salida), como los que implementa la provincia de Calgary en el Canad.Y en esa direccin queremos citar un caso, del que tomamos conocimiento en ocasin de participar como censista en el ltimo Censo nacional argentino realizado en 2001. En esa oportunidad nos toc censar a un anciano, al que nos presentamos como miembros del servicio civil. Ello lo motiv a que nos contara detalladamente todas sus vivencias en la agencia gubernamental federal de los Parques Nacionales, y esa experiencia, que no ha sido la nica, son del tipo que nos hace proponer que la captura de conocimiento tcito, se haga extensiva tambin a los jubilados del servicio publico, que voluntariamente se avengan a hacerlo. Esta caracterstica de la voluntariedad, tambin la sugerimos para los "formularios de Salida", que realicen los servidores pblicos con trayectos laborales prolongados.Circunscritoa partir de este punto del desarrollo a la "visibilizacin" del conocimiento explcito analgico, previa digitalizacin destinada a servir como insumo en la elaboracin e implementacin de polticas publicas, comienzo por hacer un reconocimiento a todas las personasprofesionales o idneos como archiveros o bibliotecarios, que trabajaron para dejarnos un legado que estimamos de sumo valor y que esta casi sin utilizar.Expres al principio de esta comunicacin, que la misma transita por el sendero de lo testimonial.Una de las conclusiones que extraemos de esa trayectoria que a vuela pluma insinuamos es la de esa suerte de inutilizacin del conocimiento explicito almacenado en archivos y centros de documentacin de las agencias pblicas: Y no es que no existan aportes, sino que los mismos han ido siendo neutralizados entre otros motivos por la turbulencia que ha caracterizado al acontecer argentino, en algn modo solo atenuada, desde la vigencia del estado de derecho que rige en la Argentina a partir de diciembre de 1983.Por una orden de trabajo, recib hacia fines de 1972, la misin de hacer un relevamiento de los documentos existentes en la agencia publica en que me desempeaba. Podr parecer algo insignificante, pero no tanto si asumimos el apotegma que reza que "as como es la parte es el todo".Entre la documentacin que iba clasificando, con la rudimentaria metodologa que en ese entonces dispona, me encontr con una Memoria de los Ferrocarriles Patagnicos de la dcada del 40 o 50. All advert una riqueza de contenidos, que supona al menos dedicacin de los que haban intervenido en su elaboracin.Aunque no sean los nicos repositorios de informacin, y mas por mis inquietudes de conocimiento, que por razones laborales, en incontables oportunidades desde ese entonces, y an con anterioridad he formulado consultas tanto en el Archivo General de la Nacin como en la Biblioteca Nacional. No era mi criterio de bsqueda el de la investigacin histrica, sino el de quien busca antecedentes para resolver algn problema de inters pblico. Desde entonces; cuando no existan herramientas conceptuales como la GC, me era dable descubrir documentacin que en el mejor de los casos solo haba sido mencionada en alguna investigacin histrica, de escasa difusin. Tambin iba percibiendo, que esa masa documental era poco citada por las ltimas investigaciones que se iban realizando casi en simultaneidad con mis bsquedas. Y creo necesario acotar que el grueso de esa documentacin haba sigo generada por agencias publicas. As recordamos los informes generados a partir de 1898 por los Ministerios de Agricultura y Ganadera; de Obras Pblicas, y de Marina.En el Archivo General de la Nacin (AGN), de Buenos Aires, existen fondos documentales provenientes de las agencias pblicas poco trabajados o sin trabajar. De ellos me permito citar a los de la Contadura General y los de Asuntos Tcnicos (Gestin de Ral Mend 1949/1955).Da una idea de las tareas por encarar a los efectos de poner en valor digitalmente esta masa documental (de energa concentrada y con riesgo de prdida irreversible en muchos casos), los Decretos y normas menores a travs de las cuales los poderes Ejecutivos (Nacional, provinciales y municipales) implementan la accin de gobierno. Cada una de estas normas ha sido acompaada de un conjunto de documentos que la fundamentan. En Argentina se las denomina Actuacin o Expediente.De esos Decretos no existen colecciones exhaustivas: No resulta fcil encontrar las Colecciones del Registro Nacional, ni el Boletn Oficial que se editaron separadamente y con criterios distintos desde el ltimo tercio del Siglo XIX, y se unificaron en 1947: No hay una reparticin que tenga registrado Decretos anteriores a 1938.Va de suyo que si no hay colecciones o repertorios de esas normas, tampoco estn disponibles los expedientes que los fundamentan y que son valiosas canteras de informacin.Esta situacin de desaprovechamiento ya era evidente en los tiempos analgicos. Pareciera que quienes toman las decisiones polticas no terminaran de percibir la necesidad no solo de preservar sino de tornar operativo todo ese acervo documental. Y el argumento de la falta de personal, es algo que no puede esgrimirse en el sector pblico, porque es sostenible la opinin en el sentido de que muchas veces se lo utiliza para ocultar incapacidades conductivas. Ya en las pocas "analgicas", era evidente una deficiente distribucin del capital humano y la carencia de polticas de personal destinada a permitir el desarrollo de ese capital humano.Los documentos y las declaraciones suelen por lo general no decir estas cosas.Insistimos que transitamos por el sendero de lo testimonial.Con la perspectiva de racionalizar o perfeccionar una migracin de lo analgico a lo digital, hay referencias propias o cercanas que merecen mencionarse. As en fecha reciente se ha digitalizado una encuesta sobre cuestiones de folclore promovida por Ricardo Rojas(1882-1957), en 1921,desde su posicin de vocal del Consejo Nacional de Educacin, que realizaron maestras desde sus respectivas escuelas rurales. Esta encuesta pudo preservarse en su original formato analgico por el personal de lo que actualmente se denomina Instituto Nacional de Antropologa y Pensamiento Latino-americano.Mas el emprendimiento ms enjundioso es el que en marco de sus propsitos ha realizado la organizacin del culto denominada "The Church of Jesus Christ of Latter-day Saints"(conocido en el lenguaje cotidiano como "mormones).En el sitio Webhttp://search.labs.familysearch.org/recordsearch/start.html(consultado el 24 de agosto de 2009) se puede comprobar como ese culto ha cargado las planillas del Segundo Censo Nacional realizado en 1895.Esa carga no solo comporta la digitalizacin de las planillas que estaban manuscritas, sino el posterior vuelco a la estructura de una base de datos, diseada al efecto y que en la que permite gestionar la informacin, proveniente de un universo de poco mas de cuatro millones de personas. Tarea similar ha realizado esta organizacin con el Primer Censo Nacional Argentino de 1869, cuando mi pas tena poco menos de dos millones de habitantes. Estos datos, de acuerdo a mis consultas, estn parcialmente disponibles.Considero un ingenio de este tipo como una suerte de "banco de pruebas" (Bench mark), para lo que proponemos en la presente comunicacin. Mediante una adecuada movilizacin, motivacin y coordinacin, al interior de las agencias publicas de las distintas jurisdicciones en que estn formalmente organizados los poderes pblicos argentinos, existe la dotacin de personal y el equipamiento telemtico disponible para disear y alimentar una suerte de mega base de datos tendiente a brindar elementos para la elaboracin e implementacin de polticas publicas.Est demostrado que las agencias pblicas argentinas vienen siendo el principal receptculo de los cuadros egresados del sistema superior de educacin argentina. Ello deviene en superiores calificaciones por parte del actual capital humano en relacin a sus precedentes colegas que fueron los que con su trabajo cotidiano generaron analgicamente la masa de documentacin susceptible de digitalizacin. Esas calificaciones y el equipamiento disponible posibilitan poner en valor y aun resignificar esos conocimientos.Paulatinamente se va reconociendo aunque a veces con eufemismo, que estas cuestiones en ltima instancia estn sujetas a decisiones polticas. Para ser ms precisos sujetas a personas con vocacin poltica. Creo que se ha ganado mucho en reconocer que haya distintas racionalidades entre las personas con vocacin poltica (an las de ms prstina legitimidad), con el resto de las personas con otras vocaciones, como es el caso del grueso los servidores pblicos permanentes, tambin denominados "trabajadores del Estado". Los loables intentos de despolitizar la dinmica interna de las agencias pblicas han llevado ha frustraciones.La lucha permanente por la preeminencia es una constante, aun en plenitud del Estado de Derecho. En pases como la Argentina complejiza la problemtica, la circunstancia que esa lucha permanente por la preeminencia incluye cosmovisiones muy distintas y antagnicas. Ello no ha impedido la impronta incremental que los servidores pblicos vienen dado a la cotidianidad de la cultura administrativa.Estando ya al termino de la presente comunicacin, desearamos consignar algunos conceptos con los que estimamos que la misma puede ser mejor percibida.La misma resulta preponderantemente autoreferencial, por lo cual damos primaca a nuestros testimonios que a citas bibliogrficas.Una de las pocas menciones bibliogrficas es la de la obra de Michaud et Marc mas arriba mencionada. En la misma se distinguen dos miradas de la realidad: Las "encrticas", cuando se hacen desde dentro del poder; y las "acrticas": cuando se hacen desde fuera del poder. Soslayando la discusin de la difusa nocin de poder, estimamos que los servidores pblicos, por su relacin tan cercana con las personas de vocacin poltica en ejercicio, tiene miradas que no permiten encuadrarla en ninguna de las dos posiciones enumeradas.En otro orden de cosas deseamos consignar, y ello refuerce lo consignado en el prrafo precedente, acerca de las peculiares oportunidades de aprendizaje que se dan en el servicio publico, generando un tambin peculiar compromiso socialY por ultimo, toda la presente est atravesada por una transicin cuyos paradigmas de salida lo constituyen la sinresis del Derecho Romano, el dogma catlico y la lengua espaola, con el adicional de la Fsica clsica, y cuyo paradigma de arribo lo constituira lo que se conoce como Fsica subatmica.Esta demostrada la ineficacia de los unilateralismos y los monocausalismos. Y seria poco sustentable, extrapolar a las Tics, el carcter de panacea que otrora se otorgara a la tcnica.No obstante; la introduccin que se va operando de equipamientos que permiten velocidades de procesamiento de datos que rondan las decenas de billones de operaciones por segundo(teraflops), que posibilitan ingentes almacenamiento de datos(medidos en terabyts),y con velocidades de transmisin cercanas a la velocidad de la luz (300.000 km/h).Esta disponibilidad, as como el capital humanos idneo para realizar estos procesos, nos hace recordar algo que lemos en un libro de Vernon Van Dyke, " Ciencia Poltica :Un anlisis filosfico"( Tecnos, Madrid, 1962; primera edicin en ingls de 1960), en el sentido que esta disciplina tenia por objeto "contribuir a la racionalidad potencial de las decisiones polticas".Y ese es el sentido de esta comunicacin, insistimos preada de testimonialidad; el de contribuir a la visibilidad de potencial de conocimiento explicito analgico mediante una sistemtica digitalizacin, que la pondr en disposicin para constituirse en insumo para la formulacin e implementacin de las decisiones que vayan tomando las camadas sucesivas de decisores polticos.Buenos Aires, 24 de agosto de 2009

03 - RECAPACITACION LABORAL PARA UN MUNDO CAMBIANTE** Articulo publicado en la revista Movimiento Sindical, de la ciudad de Santa Rosa, Provincia de la Pampa, Argentina; Nmeros 12 y 13; Marzo y abril de 2008

Para dar una idea mas acabada de la intencin de la presente comunicacin, el titulo de la misma merecera ser ampliado. Por ejemplo: De la recapacitacin laboral permanente para un mundo velozmente cambiantePotenciado an por las posibilidades telemticas, uno no sabe cuando emite un mensaje quienes sern finalmente sus receptores. Esta observacin, no nos impide decir que la misma esta dirigida agente de trabajo que discurre su existencia terrenal en la provincia de La Pampa, Argentina y sus reas vecinas.Esta comunicacin transita deliberadamente por el camino de la divulgacin. No creemos que aporte nuevas informaciones a acadmicos y especialistas. Ya sexagenarios, y con el privilegio de venir accediendo desde hace casi cuatro dcadas a ingentes volmenes de informacin, provenientes por ejemplo de organismos internacionales, reparticiones oficiales, corporaciones empresarias o grandes organizaciones no gubernamentales, nos queda la impresin que esa masa informativa no se disemina entre el grueso de la poblacin, la que discurre sus cotidianidades con practicas culturales integrales, asimiladas de su propia experiencia o de las generaciones precedentes.Vinculada a esta percepcin, est otra que, se leen o escuchan generalizaciones sobre Latinoamrica o mas precisamente sobre la Argentina en cualquier rea de actividad, cuando en realidad se ha recopilado informacin sobre no mas de veinte reas urbanas del pas. Esto nos hace ser mas receptivos a los informes de los antroplogos, los etnlogos/folcloristas y los asistentes o trabajadores sociales, que a los estudios estadsticos o sociolgicos. Nuestra experiencia como encuestador nos ense que toda encuesta deja ms informacin fuera del formulario que la que recoge.Quisiramos decirle a la gente de trabajo, que nos honre leyendo estas lneas, que la manera de ganarse la vida mediante las formas laborales que practicamos, las que practicaron nuestros padres y an nuestros abuelos, en un plazo no muy largo podran terminarse, y esa terminacin, adems de traumtica, podra ser abrupta o repentina. En esta apreciacin, que puede resultar temeraria y alarmista, no hacemos mas que recoger una masa considerable de advertencias que se vienen haciendo desde hace alrededor de cuatro dcadas desde los crculos restringidos, mas arriba mencionados, pero que vaya a saber por que motivos tardan en diseminarse entre el grueso de la poblacin, que es la que finalmente padecer los desajustes emergentes de las nuevas realidades a soportar.Algo de esto que aqu decimos, se refleja en el tachin tachin que al respecto se va desprendiendo de los medios de comunicacin sobre temas como la crisis energtica o el cambio climtico global. La mezcolanza de estos dos paquetes de fenmenos esta siendo mundial y sus efectos, aunque muy atenuados ya se estn haciendo sentir en nuestras vidas y lo sern en forma creciente. A considerar formas de encarar estas cambiantes situaciones, van dirigidas estas lneas. Cavilando situados en el espacio pampeano, hacia mediados del mes de febrero del ao 2008 del calendario gregoriano, no est dems consignar que dicho espacio recin fue ocupado por la denominada civilizacin occidental, a partir de 1882 con las sucesivas fundaciones de Victorica y General Acha. Ya para la fecha de la fundacin, el ferrocarril haba irrumpido en el pas, y se proyectaban lneas sobre el espacio a ocupar (como bien se refleja en un pasaje de la Excursin a los indios ranqueles, de Mansilla, publicada en 1871).El ferrocarril llegara a Bernasconi en 1891.Qu significacin asignamos a estos datos histricos, en los tiempos que corren signados por lo que se le denomina la variable ambiental? Significa que todo el desenvolvimiento del proceso de Occidentalizacin del rea sobre la cual meditamos, tena como principal soporte energtico a la energa proveniente de los hidrocarburos (en orden sucesivo de aparicin: el carbn mineral, el petrleo y el gas). La inicial participacin de la lea y la traccin a sangre animal se fue minimizando paulatinamente.El panorama seria incompleto si no consignramos la incorporacin a la oferta energtica regional a partir de la dcada del 70, de la energa hidroelctrica generada por los ros de origen cordillerano.Esta disquisicin acerca del origen de la energa que da soporte a nuestras cotidianidades incluida la laboral, es algo que prcticamente no se hace.Y en nuestra opinin es momento de pensar en hacerlo, porque tendramos que comenzar a imaginar colectivamente como motorizar nuestras actividades, mantenindose la oferta de energa de fuente hidroelctrica y desapareciendo ms o menos abruptamente la energa proveniente de hidrocarburos. Sin perjuicio de referirnos a las formas de utilizar en la forma mas eficiente posible la energa de esas fuentes, adems de referirnos a las posibilidades que ofrecen otras fuentes de energa alternativa como la solar, la elica, la biomasa y otras; nuestra comunicacin esta orientada a lo laboral en tanto factor de la etapa productiva del proceso econmico. Transitando por el sendero de la divulgacin no esta de ms consignar que en la actividad econmica, componente inescindible de la actividad integral de todo agrupamiento humano, se suelen diferenciar cuatro etapas, a saber: la produccin, la circulacin, la distribucin y el consumo. El trabajo en tanto esfuerzo humano aplicado a la obtencin de bienes, se considera un factor directo de la produccin, y nosotros agregamos tambin de la circulacin .En cuanto a la distribucin al trabajo, mas precisamente a las personas que trabajan, se les remunera fundamentalmente a travs de salarios, y es con esas remuneraciones que el trabajador o la trabajadora y su familia, adquiere directa o indirectamente los bienes que consume para satisfacer sus necesidades.Estos procesos, sucintamente esbozados, son los que vienen efectuando las personas que se incluyen en ese concepto - convencional como todo concepto - conocido como Poblacin econmicamente activa, (PEA), y por lo menos, las tres generaciones que le precedieron.Teniendo en cuenta los datos de la historia regional arriba consignados -implicados ellos en los interrelacionados aconteceres nacional y planetario- apuntemos que las personas que estn actualmente en el inicio de la PEA. tienen 18 aos, y nacieron en 1990.Las personas que estn en el otro extremo de la PEA tiene 65 aos y nacieron en 1943. Una persona de 45 aos que le faltan 15 para jubilarse si es mujer y 20, si es varn, nacieron, en 1963.Estos guarismos, susceptibles de ser calificados de perogrullescos o redundantes, refuerzan nuestra hiptesis en el sentido que hay una cultura de la cotidianidad, que daba como supuesta la disponibilidad relativamente accesible de las fuentes de energa que ya mencionamos y que estn en trance de desaparicin. Ello apunta tanto al empleo de automotores, motocicletas, maquinarias, agrcolas y electrodomstico( y nos estbamos olvidando de ciertos fertilizantes). Mas tambin apunta a las fuentes de trabajo, en su mayora ligadas directa o indirectamente a ese soporte energtico en trance de desaparicin paulatina o abrupta, o de dificultades de obtencin por sus costos crecientemente inaccesibles para la poblacin dependiente de remuneraciones, de jubilaciones, de pensiones, o an de subsidios.No creemos ser fastidiosos, en enfatizar la invitacin casi forzosa a realizar cambios de estilos de vida como consecuencias de las situaciones que se vislumbran. No son cosas que se nos ocurran a nosotros, sino que son casi incontables los estudios y las opiniones que viene haciendo avisos prospectivos sobre el particular, aunque el publico en general recin se vaya anoticiando, por el retraso con que los medios masivos de comunicacin han hecho de estos desafos de nuestros respectivos porvenires y el de las generaciones que nos sucedan.Inmersa en un cambio integral de la configuracin del estilo de vida de los asentamientos humanos, donde cada persona discurre su existencia, ha de encuadrarse la recapacitacin de las habilidades laborales.Mas como deca Don Hiplito Irigoyen vayamos a las efectividades conducentes, ya que los ejemplos suelen aclararlo todo. Y a propsito de aclaraciones, es adecuado recordar que esta comunicacin tiene las limitaciones propias de lo monogrfico. Tan slo intentamos comunicar esbozos, los que s nos dan una idea de lo que se puede lograr a nivel de elaboraciones transdisciplinarias y participativas.En un escenario donde los hidrocarburos tienden a ser crecientemente escasos y obviamente con costos recientes, hay que prepararse para transiciones laborales que prescindan de los vehculos impulsados por hidrocarburos, de la utilizacin generalizada de materiales plsticos, del empleo de fertilizantes basados en hidrocarburos, y que minimicen el empleo de la gama de los electrodomsticos.En este sentido postulamos el empleo creativo de la fuerza fsica animal y humana, as como de otro tipo de materiales. Como la etapa signada por la abundancia de hidrocarburos, ha sido acompaada por un intenso desarrollo cientfico- tecnolgico, existen disponibles casi incontables adelantos que posibilitan soluciones alternativas, y que incluso hacen ms viables, modalidades que ya existan, pero que fueron minimizadas, cuando no desactivadas por la energa abundante y barata proveniente de los hidrocarburos. Como transitamos por el camino de las aproximaciones sucesivas, en desarrollos anteriores ajunto con la postulacin de la minimizacin de los automotores y los plsticos, la hacamos extensiva a los caminos pavimentados. Al menos, en el mbito geogrfico hacia el que direccionamos la presente comunicacin, creemos necesario revisar el tema caminos pavimentados, admitiendo la posibilidad de extendernos a otras situaciones geogrficas, aunque sin olvidar que parte de la materia prima para la pavimentacin de caminos proviene de hidrocarburos. En el mbito de la traccin animal, se necesitara personal capacitado para la elaboracin de herraduras; para la colocacin de esas herraduras, para la doma de los equinos, para la conduccin de los carruajes y maquinarias agrcolas, para la construccin, reparacin y mantenimiento de carruajes y maquinarias agrcolas con nuevos materiales livianos, para la elaboracin de arneses; para el cuidado y mantenimiento de los animales. Cuando decimos caballos, podemos tambin pensar en bueyes y aun en camellos y llamas.Todava recordamos, la hilaridad que caus a nuestros conocidos, cuando un cuarto de siglo atrs en un peridico de la regin- y ya conscientes de lo que pasara- sugerimos reemplazar los tractores con los cuales los municipios pampeanos recogan residuos domiciliarias, por carros de plstico y aluminio traccionados por caballos percherones (para ese entonces desconocamos la existencia de los caballo belgas que son aun de mayor capacidad tractiva que los percherones).En el mbito de la traccin humana, y asumidas las posibilidades de las bicicletas y los triciclos tanto para el transporte de mercaderas y de reparto, potenciadas por nuevos diseos y materiales livianos , har falta personal capacitado por fabricar, mantener y reparar esos vehculos, as como para la conduccin de los mismos.Los envases de plstico, reemplazaron, una gama importante de los que se elaboraban con vidrio. Incluso ello conllevo la desactivacin del ciclo de la cestera que acompaaba a esos envases. El retorno de los envases de vidrio con las debidas actualizaciones tecnolgicas, requerir personal capacitado para la elaboracin de envases de vidrios y los anexos de cestera y aun de cajones de madera, teniendo en cuenta la sustentabilidad de los respectivos recursos.La gama de los electrodomsticos es muy amplia, y con las actualizaciones tecnolgicas que atraviesan todas estas consideraciones, se puede retornar al empleo de la energa humana, que reemplaz la electricidad relativamente de costos accesibles, casos concretos las maquinas de coser y las batidoras.Con esta somera y preliminar enunciacin de ejemplos, queda claro que se hace necesaria una migracin de las actuales fuentes de trabajo a las nuevas. Sera una necedad decir que esta migracin no comportar alguna cuota de traumaticidad conflictiva, pero la misma puede minimizarse, si los interesados estn sensibilizados acerca de la necesidad de los cambios y reciben la capacitacin para las nuevas habilidades laborales. De suyo que el sector empresario debe acompaar estos procesos de reinvencin productiva que implican la internalizacin de la variable ambiental. Desde las consideraciones precedentes que reiteramos transitan por el camino del esbozo monogrfico - intentamos insinuar acerca de las responsabilidades en material de las tareas de formacin y capacitacin que comportan estos ineludibles desafos. Es obvio que nos introducimos en el campo educacional, entendido este en sentido amplio.Para comenzar no puede afirmarse ni que no existen antecedentes en la materia, ni que actualmente no se viene haciendo nada sobre al particular. La frase precedente, se emparenta con la voluminosa informacin que se viene produciendo tanto a nivel de los organismos internacionales, acompaadas de acciones puntuales, como desde organizaciones no gubernamentales, empresas trasnacionales y publicaciones especializadas.Acotndonos al caso argentino, y consignado igual nivel de importancia a los antecedentes, como a las acciones en curso, se puede sostener que los precedentes padecieron de la irregularidad institucional que caracterizo al pas hasta diciembre de 1983; y que lo que se viene haciendo en materia llamemsle de formacin profesional en los das que corren, es una oferta desbordada por la demanda de nuevas capacitaciones o recapacitaciones laborales.Es frecuente que haya gente que se siente molesta, cuando no se citan antecedentes, como cuando se afirma ligeramente que en esta como en otras materias no se hace nada. En nuestra ptica, esto puede interpretarse, como una circulacin muy viscosa de la informacin, de tal modo que aun la gente interesada no est enterada de las cosas que se viene haciendo, como de las que se hicieron.Hay una suerte de acuerdo acerca de divorcio existente entre el sistema educativo y el sistema productivo. Esto se viene denunciando desde la dcada del 30, del siglo que pas, a travs de calificados voceros como Sal Taborda y Juan Mantovani. Propuestas como las de Otto Krausse, o las escuelas de aprendices, slo cobraron envergadura a partir de 1944, con la puesta en marcha del sistema de Aprendizaje y formacin profesional, que dio base a la creacin de las Escuelas Industriales de la Nacin, precedidas por las Escuelas de Artes y Oficios. Ese sistema culminaba en la creacin de la Universidad Obrera Nacional, en la que los obreros mas calificados formados por el sistema, devinieran en ingenieros de fbrica. A partir de septiembre de 1955, con la conversin de esa universidad en Universidad Tecnolgica Nacional, y la Creacin del Consejo Nacional de Educacin Tcnica, el sistema comenz a desvirtuarse de sus propsitos originales, que incluan la laborterapia productiva, para los trabajadores jubilados, consagrada en los Derechos de la Ancianidad, que cobraron rango constitucional en 1949. Ello no fue bice que el proceso de industrializacin, emergente del esquema de sustitucin de importaciones, siguiera dando sustento al nuevo esquema de formacin profesional. Se puede conjeturar que la educacin tcnica, llevada a su mnima expresin, con la sancin de la ley federal de educacin de 1994, fue afectada del mismo proceso de ensimismamiento burocrtico, que se haba apoderado de todo el sistema educativo argentino, y que pareciera perpetuarse, a pesar de los intento en contrario.Es recurrente escuchar acerca de la falta de recursos, para tareas como las que se sugieren. No compartimos esa opinin. Nosotros entendemos que existen en los presupuestos pblicos, recursos susceptibles de ser aplicados a esquemas de recalificacin laboral, a poco menos que estos recursos se redireccionen. Para ese redireccionamiento hace falta una enrgica voluntad poltica para neutralizar las resistencias de los comportamientos burocrticos, que nadie puede negar que existan, pero que son difciles de identificar.No obstante el debilitamiento padecido por las organizaciones sindicales argentinas en el devenir argentinos de las dcadas precedentes, se puede apreciar que una suerte de resiliencia, ha permitido a las organizaciones sindicales, preservar recursos y modalidades de accin. Probablemente por la influencia de las organizaciones sindicales internacionales, y por la labor seera, aunque poco difundida de la Organizacin Internacional del Trabajo (OIT.), los sindicatos vienen desplegando interesantes esquemas de formacin profesional y recalificacin laboral, aunque a escala reducida, en funcin de la dimensin de las demandas crecientes. Es casi excepcional que un sindicato no posea actualmente una Secretaria de Capacitacin en su organigrama, y en muchos de ellos, se desenvuelven ciclos de formacin hasta de nivel terciario.Como en otros ordenes de la vida argentina, forma parte de nuestras mas afianzadas convicciones, la que mediante una adecuada movilizacin y coordinacin existen tanto en el sector publico, en las organizaciones sindicales y en las empresarias (recientemente imbuidas del concepto de responsabilidad empresaria motorizado por las empresas trasnacionales), los recursos para realizar la transicin de las capacidades laborales para afrontar lo que se denomina la sociedad post hidrocarburos.Expresamos al comienzo de este desarrollo, que el mismo no estaba destinado a especialistas, sino a aquella gente de trabajo, geogrficamente asentada en la provincia de La Pampa y alrededores, que est en trance de tener que reorientar (y por que no en algunos casos potenciar) sus calificaciones laborales.No somos creyentes de las planificaciones circunstanciadas, que histricamente han fracasado. Tenemos muchas reservas con el automatismo de las fuerza del mercado como autorreguladores sociales.Estamos convencidos que estos procesos se sentirn sobre nuestras respectivas existencias en poco tiempo mas. Esta en cada uno de nosotros, si vamos a aceptar acrticamente los esquemas que ya se insinan desde los epgonos del mundo econmico internacional, concentrados en el G-8 y la Organizacin mundial del Comercio, esparciendo sus concepciones mediante el sistema de las Naciones Unidas, o si haremos una adaptacin critica de aquello que proveniente de ese foro estimemos convenientes y generemos respuestas propias para afrontar este presente, del que tanto nos advirtieron que acontecera y que ya esta aconteciendo.Que las consideraciones precedentes, sean una contribucin para sensibilizar en una problemtica de la que cada uno tendr que responder para una mejor calidad de vida propia y de su entorno familiar, y a travs de l con su respectivo entorno comunitario.Buenos Aires, viernes, 15 de febrero de 2008** Articulo publicado en la revista Movimiento Sindical, de la ciudad de Santa Rosa, Provincia de la Pampa, Argentina; Nmeros 12 y 13; marzo y abril de 2008

04 -

LA APROPIACION INFANTO- JUVENIL DE LAS TICS: UN DESAFIO PARA EL PLEXO DE AFECTOS E INTERESES DOCENTES: UN ESBOZO DE ABORDAJE PARA EL CASO DE UNA MACROREGION ARGENTINA (*)

(*) Comunicacin presentada a la tercera edicin del Congreso ONLINE del Observatorio para la CiberSociedad, Conocimiento Abierto, Sociedad Libre, noviembre de 2006 Palabras clave:aculturacin telemtica * sector infanto juvenil * subcultura docente * interculturalidad conflictiva * calidad de pensamientoResumenAcotado a un determinado espacio geogrfico de la Argentina se intenta un abordaje que enfatice el ensanchamiento de la brecha cosmovisional existente entre la poblacin infanto- juvenil escolarizada y las estructuras educativas animadas por los docentes. El mencionado ensanchamiento es inducido por la modalidad de apropiacin de las Tics por parte de nios y adolescentes. Esta apropiacin encuentra limitaciones en las mentalidades docentes para su aprovechamiento a los fines de generar calidad de pensamiento. Esta calidad de pensamiento es de una necesidad prioritaria ante la creciente crisis energtica, ecolgica y alimentaria.AbstractFocused to a determined geographic space of Argentina is tried an approach that emphasizes the widening cosmovisional gap between the children - young people sector and the educative structures animated by teachers and professors. This disruption is deeped by the modality of children and young people Tics appropriation. This appropriation finds limitations in the teachers and professors mentalities in order to scope the aims to generate quality of thought. This quality of thought is a high-priority necessity before the increasing power, ecological and foods crisis.COMUNICACINEl remanido describe tu aldea y sers universal( Tolstoi), viene al caso para una vez mas expresar que, atento las invariantes de la condicin humana, gran parte de lo que aqu intentaremos expresar imperfectamente, se percibe tambin en otros puntos de la nave Tierra. Aclaro que esta incorporado a nuestro bagaje conceptual la nocin de glocalizacion; aunque pensamos que tal nocin no es unidireccional sino bidireccional.Hoy disponemos de herramientas como el Google Earth (http://earth.google.com/ ) que nos permite, acercarnos con el zoom a la zona que por algn criterio, siempre sesgado de arbitrariedad (aunque racionalmente justificada), hemos escogido para nuestra comunicacin.Ese torbellino de imgenes, sirve para recordar que formulamos estas consideraciones en un contexto de triple e interrelacionada crisis planetaria en los aspectos ecolgicos, energticos y alimentarios, tal cual ya se expreso en la Carta de Macchu Picchu en 1977.Haciendo nuestras ideas que hemos tomado del Commowealth de Educacin, urge que se genere no ya pensamiento critico, sino pensamiento de calidad (JOHN Daniel. president of the Commonwealth of Learning, 2005) para afrontar esa triple crisis, sobre cuya inminencia se discute en muchos foros (entre ellos Culture Change, http://www.culturechange.org/cms/index.php ).Aunque el orden de las presentaciones no altera el producto procurado por esta comunicacin, se asume que las actuales modalidades educativas no son contribuyentes a la generacin de pensamiento de calidad, o al menos no lo generan en una masa crtica demogrficamente abarcativa. Este supuesto era previo a la disrupcin Tics Pero en los tiempos que discurren atenta la situacin crtica ligeramente esbozada se hace mas visible y simultneamente se insina como potencialmente reversible. Una de las tantas paradojas emergentes de la disrupcin TicsNos acotamos a la masa de interacciones que vienen sobreviniendo en una macroregin argentina. Los mismos trazados carreteros, nos ahorran el referirnos a una lnea imaginaria. Se trata sobre el mapa de la Argentina de visualizar la regin que va desde la ciudad de Concordia(Nota explicativa: luego de cada ciudad se consigan sus coordenadas geogrficas: primero la latitud, con el signo menos que significa Sur, y luego la longitud antecedida del signo menos que significa Oeste, o sea: -31.4 -58.0333333), sobre la margen derecha del Ro Uruguay, pasa por las ciudades de Paran(-31.7333333-60.5333333), Santa Fe (-31.6333333 -60.7); San Francisco(-31.4 -62.1333333); Crdoba (-31.4 -64.1833333); Ro Cuarto(-33.1333333 -64.35), Santa Rosa (-36.6166667 -64.2833333 ) y Baha Blanca(-38.7166667 -62.2833333). Desde la geografa, la macroregion. Es conocida como Pampa Hmeda, y una gran parte de ella por la extraccin inmigratoria de su poblacin es conocida como Pampa Gringa( Greca ).La misma concentra alrededor del 85 % de la poblacin del pas. La gran mayora de los alrededor de 1610 asentamientos urbanos mayores de 600 habitantes estn localizados en esta rea( Aguirre, 1998). Hacer ulteriores precisiones comparativas sobre el resto de la Argentina, escapa a los propsitos de la comunicacin. Adems como transitaremos por lo autoreferencial y lo vivencial, es sobre esta macrorregion, por donde venimos realizando desde hace mas de tres dcadas, lo que Malinowski( 1944), denominaba, "observacin participante".De los alrededor de 38 millones de habitantes que se estima tiene a la fecha la Argentina, alrededor de 11 millones estn cursando alguna instancia del sistema educativo. Existen alrededor de 25.000 escuelas bsicas, y alrededor de 7.000 de enseanza media( Aguirre 1998).( Comentario posterior: Atento el editorial firmado por Ministro argentino de Educacin, la la revista El Monitor de la Educacin, N 9 se septiembre/octubre de 2006, la cantidad de escuela asciende a 40.000).Acotndonos a la enseanza inicial, bsica y media, es constatable que esas franjas de poblacin estn contenidas por las instituciones educativas, con prestaciones de calidad irregular. La enseanza es impartida por un estamento docente, que pese a padecer un proceso de pauperizacin que ya lleva dcadas, ha decantado una subcultura, sobre cuyas caractersticas volveremos ms adelante.Con algunas avanzadillas a travs de los juegos electrnicos que datan de comienzo de los ochenta, es de fecha muy reciente la acelerada difusin del empleo de las PCs conectadas a algn tipo de enlace por parte del sector infanto juvenil.Desde el punto de vista tecnolgico ello se vio facilitado por la preexistencia de infraestructura telefnica de larga distancia. De todos modos la aceleracin cuntica del fenmeno de apropiacin por parte de esta franja etaria fue catalizada por la incorporacin de la tecnologa banda ancha banda ancha, en paralelo con la disrupcin de la telefona celular, que es obvio decir tambin por estas coordenadas geogrficas genera intensa sinergia.El mbito donde se dan estos fenmenos, atento las estadsticas de venta de PCs, se dan al interior de los hogares, pero se hace mas visibles en los locutorios de titularidad privada (la jerga de los usuarios le llama cybers), y en una medida marginal en bibliotecas populares, centros tecnolgicos comunitarios y algunas instituciones educativas.Pero lo mas visible y dentro de algunas limitaciones emergentes del derecho a la privacidad de los usuarios, se percibe en los cybers atiborrados de poblacin infanto juvenil.Parafraseando al Napolen, que deca que un ejemplo suele aclararlo( Pern, 1973), voy a relatar algo que he visto en una de las ciudades de la macroregion escogida. Frente a un establecimiento medio educacional de mucho alumnado, funciona un negocio de venta de mercaderas que adquieren habitualmente los estudiantes, equipado con varios computadores conectados a la red. Dems esta decir que apenas salen de sus jornadas ulicas los prvulos se enfrascan entusiastamente en las maquinas para interactuar, contrastando con la actitud que hasta hace un momento experimentaban en las aulas, a la que perciben como una perdida de tiempo sino fuera por las chanzas que se hacen entre compaeros y las conversaciones y juegos durante los periodos de recreo.Esto as expresado, casi en forma pedestre, desnuda el ncleo del problema y una suerte de exclusin de la otra parte de la relacin enseanza aprendizaje: el docente.Ya ultrapasa la categora de hiptesis la brecha entre las expectativas de los docentes y las de los alumnos. Como insinuamos mas arriba, el tema no es nuevo, al menos en el rea en cuestin (Sal Taborda, 1932). Se dira que la irrupcin de la TICS y la consecuente apropiacin de ellas por el sector infanto juvenil, problematiza y aun cuestiona, a todas las burocratizadas estructuras docentes y el personal que las anima, con valores congruentes a las mencionadas estructuras.Prolifera literatura acerca de esta situacin. Y ms all de las declaraciones de funcionarios y especialistas y las modalidades de perfeccionamiento docente, nos encontramos ante una subcultura docente muy arraigada que en nuestra visin tiene serias dificultades para procesar la mentada apropiacin.Se trata en el fondo de una confrontacin de subculturas, con ms puntos de desacuerdo que de acuerdos. Un conflicto que ultrapasa lo generacional. Y que deviene en una gran dilapidacin de energa y de recursos: Recursos que cada da sern ms escasos.Desde la antropologa cultural, la etnologa y el folclore, sabemos que en toda civilizacin ha existido alguna forma de transmisin de conocimientos. Tambin sabemos de lo dificultoso y lo traumtico que con los cambios culturales. Y cuando estos cambios se dan, son lentosLas Tics, como ya hemos expresado en anteriores comunicaciones, son un producto de la vertiente tecnolgica de la cultura californiana( Aguirre, 2006). Leyendo, tardamente a Ferguson (1984) entendemos que significo la sinergia operada entre los estudiosos de la mente de Palo Alto y los tecnlogos del Sylicon Valley. Mas una vez lanzadas las TICS al mercado, se operaria la resignificacin por los apropiadores. Desde sus respectivas geoculturas (Kusch, 1976), fueron valga la redundancia no solo resignificando sino encontrando nuestras aplicaciones a los ingenios que ni siquiera haban sido contempladas por sus creadores. Y tambin hubo impactos condicionados por las aculturaciones de los receptores. Una, es la recepcin por aquellas personas (por lo general adultas) con toda las concepciones llamemsle Pre Tics y otra cosa son las de los prvulos no condicionados por los parmetros de La ciencia experimental, matemticamente formalizada (Pichon Riviere, 1970).Estas apreciaciones estn circunscritas a donde la "cultura euro-americana(Herkowitzs,1952) pudo sentar baza. Ya se va percibiendo como viene siendo la apropiacin de las TICS en la India.Es dable pensar que esta situacin de tensin entre alumnos infanto juveniles y docentes con mentalidad Pre- Tics, resulta algo episdico y que se ira amenguando en la medida que los hoy nios- jvenes, devengan en docentes. Es una posibilidad.Pero, tambin puede pensarse que las estructuras de reproduccin de la docencia, no cuentan por el momento (con las consabidas excepciones) con la plasticidad necesaria como para reinventarse. Hay muchas evidencias que las estructuras docentes quieren seguir haciendo lo mismo que antes pero ahora con computadoras en lnea...Adems (y en esto seguimos a los propiciadores del Deschooling con Bill Ellis, 2000), estando las instituciones educativas, ligadas al resto de las estructuras sociales, polticas y econmicas llamemsle pre Tics, y sobre todo a las estructura de pensamientos que las animan, tambin es hipotizable que intenten depotenciar el potencial disruptivo de las Tics tal cual lo vienen procesando los nios y jvenes.Ya asoman por la regin considerada, actitudes de prejuicio y limitacin de las libertades. Algunas son atendibles como las atinentes al material pornogrfico. Pero han comenzado limitaciones a los horarios de permanencia y esas limitaciones estn legitimadas por las autoridades que dictan normas restrictivas al empleo de las TicsEn este como en otros foros, abundan propuestas para abordar esta problemtica.En nuestro caso tan solo quisimos aportar nuestras vivencias, asumiendo que la dinmica de apropiacin es inexorable y que las resistencias decantadas en mentalidades institucionalizadas, seguirn implicando la perdida de tiempo, energa y recursos, en contexto de creciente carencias.No obstante la globalizacin y la sensacin aparente que las distancias se han borrado, el esfuerzo de caminar un kilmetro sigue siendo el mismo desde que se conoce la condicin humana. Foros como estos tienen una planta en la Europa y otra en La Amrica hispano luso parlante, plena de indigenismo, negritud, arcasmos(Flores Morador, 2001) y mestizajes. Anhelamos que desde lo universal se pueda contribuir al despliegue de lo local y desde lo local se pueda contribuir a mejorar a un planeta en plena diversidad. La generacin de pensamiento de calidad solo requiere de buena voluntad, de creatividad y de movilizacinBuenos Aires (29/10/2006 21:22:23)BibliografaAGUIRRE, Alfredo Armando; " CONOZCO OTRO PAS...( Por la "reinvencin" de Argentina); Publicado en el diario LA REFORMA, de la ciudad de General Pico, provincia de La Pampa. Argentina, los das 28, 29, 30 y 31 de enero de 1998, Nros. 24.033, 24.034, 24.035 y 24.036. ( Disponible en sitio http://members.tripod.com/~choloar/reinve01.htm verificado el 30 de octubre de 2006)AGUIRRE, Alfredo Armando; Qu cambia y que permanece con el advenimiento de las Tics; en Revista Novedades Educativas Edicin 185. Ediciones Novedades Educativas, Buenos Aires . Mayo 2006. ISSN 0328-3534AGUIRRE, Alfredo Armando; ESCRITOS PUBLICADOS ( Sitio http://choloar.tripod.com/trabajos.htm verificado el 30 de octubre de 2006)ELLIS William N. ; Community Life-Long Learning Centres; en Creating Learning Communities; 2000.( Sitio http://www.creatinglearningcommunities.org/ verificado el 30 de octubre de 2006)CULTURE CHANGE ( Sitio http://culturechange.org/cms/index.php verificado el 30 de octubre de 2006)FERGUSON Marilyn; La Conspiracin de Acuario; Editorial Amrica Ibrica, Madrid, 1994. ( Primera edicin en ingles, 1980)FLORES MORADOR Fernando; Tierra firme anticipada. El descubrimiento de Amrica y las races arcaicas de Occidente; Lund Universitet, Suecia, edicin de prueba 2003.( Primera edicin en sueco, 2011).Google Earth ( Sitio http://earth.google.com/ verificado el 30 de octubre de 2006) GRECA Alcides; La Pampa Gringa, Rosario, S/D.HERSKOVITS Melville; El hombre y sus obras; Fondo de Cultura Econmica; Mjico, 1968. ( Primera edicin en ingles, 1948)KUSCH Rodolfo; Geocultura del hombre Americano; Fernando Garca Cambeiro, Buenos Aires, 1976Carta Machu Pichu; en sitio :http://www.geocities.com/emuseoros/Docs/CARTA_DE_MACHU.htm verificado el 30 de octubre de 2006) MALINOWSKI Bronislaw; Una teora cientfica de la cultura; Sarpe, Madrid, 1984JOHN Daniel. president of the Commonwealth of Learning; Commonwealth Cooperation in Distance Education: Potential Benefits for Small Status, given at the Caribbean Regional Association for Distance and Open Learning , posting in: TOMORROW'S PROFESSOR(SM) MAILING LIST . [email protected]. TP Msg. #626 ; Fecha: Viernes, 25 de Febrero de 2005 12:13 a.m.PERON Juan Domingo; Conduccin Poltica; Editorial Megafn, Buenos Aires, 1982PICHON RIVIERE Juan Bernardo; Ciencia Poltica General como ciencia de la promocin humana. La paratcnica; Ctedra, Buenos Aires, 1971TABORDA Sal; Investigaciones Pedaggicas 2 vols; Ediciones Ateneo Filosfico de Crdoba; Crdoba, Argentina, 1951( Versin en linea en http://www.fundacionosde.com.ar/Fundacion_OSDE/pensadores.aspSitio verificado el 30 de octubre de 2006)05- QUE CAMBIA Y QUE PERMANECE CON EL ADVENIMIENTO DE LAS TICS.

Esta comunicacin aspira ser testimonial y, preponderantemente autoreferencial.El autor desde 1992, esta inserto en el complejo de las tecnologas de la comunicacin y la informacin (En adelante Tics). Hacia 1994, aprovechando su condicin de colaborador del diario La Reforma de General Pico, Argentina, comenz a registrar en artculos lo que se venia vivenciando en las incursiones telemticas. Estas colaboraciones constan en la URL : http://choloar.tripod.com/trabajos.htm .El peridico mencionado public 8 de Febrero de 1994, el artculo "Telemtica o tele-informtica (La nueva alfabetizacin)". De su titulo, se desprende como nuestro discurso sobre el tema se vincul desde sus inicios con lo educativo. A partir de ese trabajo, se iba consignando lo que se comprobaba en la inmersin por el universo Tics Por entonces pequeas editoriales comenzaban a publicar trabajos destinados al auto-aprendizaje de los programas ms comunes de computacin, poniendo nuevamente en circulacin el concepto de autodidactismo.Esta recidiva del autodidactismo en un nuevo contexto tecnolgico permita avizorar un alto potencial de cambio en lo que hace a modalidades de transmisin de los conocimientos al menos en las partes occidentales y/u occidentalizadas del Planeta.Ese potencial, ira generando escenarios de creciente conflicto en curso de desarrollo en los das que corren.Parece, pues sugerente preguntarse que cambia y que permanece con el advenimiento de las Tics Existen invariantes en la condicin humana, cambiando solo las maneras o herramientas mediante las cuales se intentan satisfacer esas necesidades permanentes, que se reiteran en cada parbola existencial. Si se considerasen como sinnimos los trminos tecnologas y herramientas, se contara con un matiz diferencial en la percepcin del fenmeno. Ante el marbete Sociedad del conocimiento y la informacin. Preferimos referirnos a comunidades interconectadas de los conocimientos y las informaciones. Con ello se alude al modelo de relacionamiento humano que acta como marco referencial de nuestros desarrollos sobre el particular.Estas herramientas en constante desenvolvimiento no hacen ms que devenir en incorporaciones de desarrollos conceptuales ya presentes, en los tiempos Pre - TicsConsignaba Andr Marshal (1955), que en todo rgimen econmico concreto encontrbamos prdromos de lo que vendra. En cuanto a las herramientas, slo se perciben refinamientos tcnicos entre la telegrafa con y sin hilos, y la Internet, y tecnologas como la WI FI. Los saltos cunticos en materia de procesamiento de la informacin, capacidades de almacenamiento y velocidades de transmisin, presentan como limitantes la capacidad de percepcin y asimilacin de cada persona. Se percibe una manera mas amigable de manipulacin de conceptos denominmosle pre - TICS. Acotndose al tema educativo, se aprecia que las Tics sirven de catalizadores de nociones como la ya mencionada de auto-aprendizaje, educacin a distancia, educacin a trmino, educacin permanente, formacin continua, macrothesarus, etc. Del flujo de contenidos capturados de la Net, se columbra el potencial de aprendizaje incito en las mismas. Intensas vivencias, ensean que: Tambin se puede vivir sin Internet. Se estima que quienes tienen dificultades para acceder a las mismas o directamente no tiene posibilidad de acceso, que se puede comunicar e informar con los recursos pre Tics, relativizndose el concepto de brecha digital. Dicha relativizacin emana tanto de una denotacin lata del concepto TICS, como de una sobrevaloracin del potencial de las Tics en la que se estima concurren factores de mercadeo como actitudes esnobistas. Ello no implica desconocimiento del el impacto que las Tics vienen produciendo. La concepcin lata de la nocin Tics, surgi a poco de comenzar a meditar sobre vivencias en las mismas. En esas cavilaciones iba surgiendo, que si se ampliaba la consideracin de las Tics del circulo inicial de una PC conectada a otras; se empezaban a columbrar mas posibilidades, unas derivadas de la informtica como los escneres, y otras ligadas a la fotocopiadora, al fax, a la radiodifusin, a la televisin, a la cinematografa, a la fotografa, as como a las tradicionales bibliotecas. Al imaginar la sinergia que va desencadenado el empleo en forma interconectada de todos estos dispositivos, surgen sugestivas proyecciones. Un concepto que se potencia con esta concepcin lata, es el de Macrothesuarus, procedimiento de recuperacin de informacin, diseado en la poca de las mainframes, que resulta fecundo a la hora de digitalizar ingentes volmenes de documentacin impresa en perodos pre - Tics.La conjuncin escner- fotocopiadora posibilita esta implementacin del Macrothesaurus La fotocopia facilita el reconocimiento ptico de los caracteres (OCR) por parte de los escneres. La progresin de magnitudes cunticas de informacin que se acumula en bancos de datos descentralizadamente, ya se vuelca al ciberespacio, fenmeno comprobable con el uso de los motores de bsqueda tipo Google, otro de los dispositivos del fenmeno de alto potencial educativo.Mas estas novedosas herramientas tienen un techo y un piso: el de las geoculturas desde donde vienen siendo generadas o utilizadas. Las Tics son una creacin de la cultura euro-americana, de la cultura anglosajona. Un ingenio gestado en el Sylycon Valley, California.En sus primeros tiempos las Tics fueron dominio de personas calificadas en las ciencias duras. Y as como los que transitan por las llamadas Humanidades, imaginaron lo que luego plasmaran los tecnlogos; as, los humanistas anglosajones comenzaron a procesar las aplicaciones para el nuevo fenmeno, incluidas la educacin. Esos humanistas y tecnlogos tenan una cosmovisin comn: eran preponderantemente anglosajones y angloparlantes.Nosotros pertenecemos a horizontes simblicos diferentes, aunque haya islas de Occidentalidad, que vienen haciendo asimilaciones de las TICS La cuestin estriba en el impacto de las mismas entre quienes transitan su cotidianidad por horizontes simblicos transoccidentales, demogrficamente mayoritarios en el Planeta Tierra. Esta diversidad cultural, tambin forma parte de los patrimonios de muchos pases que formalmente pertenecen a la llamada cultura euro-americana, pero que albergan en sus territorios etnoculturas marcadamente transoccidentales. En los estudios culturolgicos, Imbelloni (1959), los aspectos materiales, sociales y mentales de una determinada cultura son indesglosables. De all se infiere que aprendizaje y contenidos son inseparables. Esto lleva a preguntarnos sobre aspectos que hacen al aprendizaje en funcin del impacto de las Tics sobre lo que se conoce como Cuenca del Plata y/o Mercosur. La regin se caracteriza por lo pluritnico y lo multicultural, factor no demasiado ponderado por sectores ligados a sus estructuras formales urbanas occidentales, el educativo incluido. La fluencia vital, en esta regin, tiene como mainstream a las mayoras mestizas de idiosincrasias arcaizantes. El mismo asimila de manera distinta el impacto de las Tics, de como lo hacen los minoritarios pero influyentes sectores que dominan las estructuras formales de la regin, asumiendo como paradigmas, los que viene generando la cultura euro-americana, Tics incluidas. Esta dispar forma de asimilacin, ya se vena dando desde las pocas pre Tics .Y viene resultando en la ptica de muchos, una de las cuestiones ms complejas en orden a la implementacin de los procesos de aprendizaje. La irrupcin de las Tics es visualizada como una oportunidad de revertir esa situacin, pero tambin la posibilidad de perpetuarla. La pregunta recurrente que muchos se hacen es: Que permanece y que cambia con la emergencia de las Tics en sentido lato? Desde los foros de la cultura euro-americana, particularmente desde lo angloparlante, se intentan respuestas al interrogante. Al respecto cabe sealar la responsabilidad social a los que en el rea hispanolusoparlante latinoamericana, dominan el idioma ingls en el sentido de realizar una intensa tarea de traduccin. Ello se empalma con el tema de los contenidos, ya que las crecientes magnitudes de informacin disponibles, estn en diversos idiomas, predominando el ingls: Esos contenidos albergan diversidad sea temtica como de pticas. Se percibe que toda persona, que tiene algo que comunicar, anoticiado de la posibilidad de emitir contenidos vienen obrando en consecuencia. En esta dinmica se advierte el rol democratizador de las Tics comportando un factor de cambio con relacin a pocas pre Tics Ello comporta que las mayoras transoccidentales de la regin, podran introyectar a la NET, los contenidos de sus horizontes simblicos, asaz distintos a los que se irradian desde las instituciones formales de la misma, que solo han cambiado de soporte para continuar irradiando con mas eficiencia, similares contenidos a los de sus etapas Pre - TICS, y seguir reforzando los vnculos con los epicentros de la cultura euro-americanaPostulamos el carcter disruptivo de las Tics Estas posibilitan la formulacin de nuevos conceptos, susceptibles de ser utilizados en modalidades de vivir sin Internet. Se podr vivir con o sin Tics, pero no se podr prescindir de su existencia a nivel conceptual.Estas apreciaciones sobre la diversidad de impactos en funcin de las idiosincrasias del polo transoccidental, son extrapolable a lo educativo. Es en ese campo donde se viene dando una relacin controvertida entre las cosmovisiones que sustentan los educadores y las de la mayora de los educandos. Ello explicara los desajustes multidimensionales que padece la regin.Atento el carcter disruptivo de las Tics, se abre, una gran posibilidad para reinventar los sistemas de aprendizaje, la que parecera estar operndose espontneamente un poco al margen de las instituciones preexistentes.Asimismo, una suerte de brecha digital generacional aumenta la crisis en que se encuentran las instituciones educativas en la regin. Ese divorcio era previo a las Tics Argentina esta equipada con la infraestructura para receptar la irrupcin masiva de las Tics en sentido lato.La poblacin infanto- juvenil atiborra todo mbito donde haya una PC conectada a Internet. Ello genera una masiva alfabetizacin telemtica, que en muchos casos ha tenido como etapa preparatoria, la difusin de los juegos electrnicosUn conflicto temporario se genera con las estructuras formales, incluidas las docentes, operadas por personas aculturadas periodos pre TicsEsta alfabetizacin telemtica infanto juvenil masiva e informal, amplia conflictos generacionales y cosmovisionales, y esta generando reacciones que tienden a restringir el libre empleo de las Tics, como acontece en los pases desarrollados telemticamente.La disrupcin ofrece una oportunidad para reinventar los sistemas de aprendizaje, enriquecidos por: conceptos pedaggicos alternativos que proliferan por la red; la amigabilidad de las Tics para nios y jvenes, y la revalorizacin de la diversidad cultural.Nota: Una versin desplegada de este articulo puede verse en:http://members.tripod.com/choloar/ponenciamoi2004a.htm06 - UN CASO DE INFORME VOLUNTARIO DE EGRESO COMO ALTERNATIVA PARA CAPTURAR CONOCIMIENTO TACITO EN LA ADMINISTRACION PBLICA FEDERAL ARGENTINA

Introduccin001. La presente comunicacin constituye un intento de aplicar el concepto de Exit Questionnaire en tanto componente del paquete conceptual conocido como Gestin del conocimiento (en adelante GC).Variables del autor de la comunicacin002. El intento est generado por un servidor pblico de la Subjurisdiccin Secretara General de la Presidencia de la Nacin Direccin de Programas de Gobierno; nacido en 1947; ingresado en la Administracin Pblica Nacional (en adelante APN.) en Noviembre de 1968; con 35 aos y medio de antigedad en el servicio publico; Nivel y grado SINAPA B-9, y que ha acredita a nivel formal educacin nivel de postgrado incompleto.Teniendo como referencia conceptos como observacin participante e informante clave, consignamos un motto con el que intentamos autoidentificarnos: Solemos repetir que nuestro trabajo es nuestro hobby.El estmulo que induce la comunicacin, diagnstico preliminar, y posibilidades operativas003. La actitud de participar primero en el Seminario y luego en el Taller, de G.C. implementado por el INAP, denota nuestro inters por un tema que venamos siguiendo como inquietud personal, aunque con contenidos diferentes a los comunicados en el Seminario y en el Taller. Esa diferencia de contenidos nos ha resultado sumamente enriquecedora. Y entre las novedades conceptuales receptadas figura la de Exit Questionnaire (En adelante EQ), porque encuadra con una inquietud que forma parte de nuestras convicciones y hace a la percepcin de disipacin y/o invisibilidad de informaciones y conocimientos, como una caracterstica de la APN, que apreciamos con un juicio de valor negativo.

004. Entendemos que la GC y/o la gestin del capital intelectual es una herramienta poderosa a travs de las nociones de conocimientos tcito y explicito, para capturar una calidad de pensamiento que genere a su vez sinrgicamente una mejor calidad de pensamiento que se traduzca en una elevacin y mejoramiento de los servicios gubernamentales con los escasos recursos disponibles - en cuanto producto de la APN- que redunde simultneamente en la calidad de vida de los recipiendarios de esos servicios, y en el crecimiento personal de los servidores pblicos involucrados.

El contexto de origen de la nocin de ED

005. La presentacin en el Taller de la EQ, inserta en una batera de GC generada por el gobierno del Estado de Alberta, en el Canad, as como el impacto que nos provoc la nocin, nos motiv- teniendo en vista la realizacin de un proyecto que la comprendiera - a una bsqueda preliminar utilizando los motores de bsqueda disponibles.Como toda la GC considerada como sistema, el EQ en cuanto componente del sistema, se presenta como flexible. Se trata por otra parte, de un concepto decantado por la cultura anglosajona. Hay abundantes contenidos en sitios ingleses, canadienses anglfonos y estadounidenses. Se constata que se aplica indistintamente en los sectores pblico y privado. As, encontramos contenidos alusivos en sitos de municipios, del gobierno Federal, de universidades y de servicios de justicia. 006. Sin perjuicio de retornar a lo afirmado precedentemente (lo cual esta sujeto a la lectura de otros c