15 de Agosto

BEETHOVENDALÍy algo mas

LUDWING VAN BEETHOVEN

EL FARO

http://youtu.be/W2N5iyQuFWI

http://youtu.be/W2N5iyQuFWI

¿Quién no ha tenido en la vida momentos de intenso dolor?¿Quién no ha tenido, en algún momento de su vida, el deseo de darse por vencido?¿Quién no se ha sentido solo… extremadamente solo y tenido la sensa-ción de haber perdido toda esperanza? Eso fue exactamente lo que pasó con uno de los más importantes compo-sitores de todos los tiempos, Ludwig Van Beethoven, quien nacióen Bonn, Alemania en 1770, y murió en Viena, Austria en 1827.Beethoven atravezaba uno de esos sombríos momentos y estaba muy triste y deprimido por la muerte de un príncipe alemán,quien era su be-nefactor y era, a la vez, como un segundo padre para él.El joven compositor sufría de una enorme falta de afecto. Su padre era un borracho que lo golpeaba. Murió de alcoholismo en plena calle. Su madre murió muy joven. Su hermano biológico nunca le ayudó y, sobre todo, sentía que su enfermedad iba empeorando. Los síntomas de sorde-ra empezaron a afectarlo, convirtiéndolo en una persona nerviosa e irri-tableBeethoven solo podía oír utilizando una especie de cuerno. Siempre lle-vaba consigo un cuaderno, en donde la gente podía escribirle y comuni-carse con él , pero no tenían paciencia para eso, ni él para leer sus labios.

Dándose cuenta que nadie le entendía ni quería ayudarle, Beethoven se encerró en sí mismo, evitando a la gente. De ahí se ganó la fama de ser un misántropo.Por todas estas razones, el compositor cayó en una profunda depresión incluso hasta preparó su testamento, diciendo que quizá sería mejor para él, suicidarse.Pero, como no hay niño que por Dios que sea olvidado, la mano salvado-ra que Beethoven necesitaba vino a través de una joven mujer ciega, que vivía en el mismo edificio que él, y que una noche le dijo, gritando a sus oídos:«Daría cualquier cosa por ver la luz de la luna»Escuchándola a ella... Beethoven rompió a llorar.

Después de todo... ¡él podía ver !Después de todo... ¡podía componer música y escribirla sobre papel!De repente, un fuerte deseo de vivir invadió a Beethoven y lo llevó a com-poner una de las más hermosas piezas de música de todos los tiempos:

«Sonata Claro de Luna» http://youtu.be/W2N5iyQuFWI

En el tema central de la sonata, la melodía imita y reproduce los pasos lentos de gente, posiblemente del mismo Beethoven y de otras personas llevando el atáud del príncipe alemán, su amigo, patrón y benefactor

Observando el cielo, plateado por la luz la luna, y recordando a la joven mujer ciega, Beethoven parece preguntar por las razones de la muerte de su querido amigo y entra en una profunda y enriquecedora meditación.

Algunos estudiosos de la música dicen que las notas que se repiten insis-tentemente, en el tema central del primer movimiento de la sonata, podrían ser las sílabas de la palabra «Warum? Warum?»(¿por qué... ¿por qué?...) o alguna otra palabra alemana de similar signifi-cado. Años después de superar su angustia, su tristeza y su dolor, vino la incom-parable

«Oda de la Alegría» de la Novena Sinfonía, su obra magna: Con ello se coronaba la obra de un extraordinario compositor. Beethoven dirigió personalmente el estreno de la Novena Sinfonía, en 1824, estando ya completamente sordo...Pero pudo escuchar el aplauso de un público emocionado.Uno de los músicos de la orquesta, gentilmente giró a Beethoven para que pudiera ver la sala y a los asistentes, llenos de emoción y alegría dando eufóricos aplausos y ondeando sus sombreros.Se dice que «La Oda de la Alegría» expresa la gratitud de Beethoven a la vida y a Dios, por no haberse suicidado.

C o m o Como ocurre todas las tardes, desde hace 40 años, a eso de las tres llega el viejo Bernardo y se sienta en la piedra que se encuentra debajo de la gran ceiba. El árbol de espeso follaje y luengas ramas es como un perpetuo e imponente espectador que se empina al lado del campo de fútbol. Para quienes van de paso por aquel lugar, la cancha no es más que una entele-quia. Un campo polvoriento en él que apenas si se notan algunos lunares de césped. Los deteriorados y toscos arcos, por su parte, están formados por guaduas, unidas mediante una triste amarradura de alambres he-rrumbrados. Pero para Bernardo la antigua cancha es como si fuese el mismísimo Maracaná. Sus ojos, de párpados escurridos, la ven como un estadio monumental, donde sus en otrora prodigiosas piernas, marcaron sus primeros goles e hicieron gambetas circenses que dejaban despata-rrados y en ridículo a quienes osaban marcarlo.

– ¡Qué tiempos aquellos! – piensa Bernardo, en tanto aspira y aprieta con sus labios rugosos un cigarro que lánguidamente se extingue, dejan-do caer una nevada de cenizas sobre el suelo terroso. Bernardo, abstraí-do en una desbandada de reminiscencias, expulsa una fumarada que viaja por el aíre y envuelve su faz, así como la neblina ciñe la cúspide de la montaña. Con ayuda de una tímida brisa el humo se disipa mientras adopta figuras amorfas, las cuales el anciano observa con atención, como si lo regresasen a sus jugadas de antaño, cuando era un zagal, con pies de danzarín y dueño de la genialidad propia de los maestros versados con el balón como lo fueron Maradona, Eusebio y Pelé. Para Bernardo ellos no eran jugadores, fueron dioses cuyos pies eran pinceles y sus ju-gadas las obras maestras que se tatuaron por siempre en la memoria de los aficionados.

Bernardo, por su parte, es un anciano de piel tostada por el sol y de

ESTE ES SOLO UN CUENTO DE FUTBOL

aproximadamente setenta años. En su cara el discurrir del tiempo ha marcado y remarcado profundos surcos. Su nariz es aguileña. Tiene ojos taciturnos de color café. Es alto y algo jorobado y en su cabeza el pelo ya es tan escaso como la hierba en la cancha de sus amores. Siempre se pone la misma camisa roja bastante raída, la gente del pueblo hace mofa de él, pues dicen que nunca la lava. Su vestimenta la complementa un jean viejo cortado a nivel de las rodillas y unas sandalias, cuya suela casi ha desaparecido.

Ninguna persona del pueblo conoce con certeza la procedencia de Bernardo, pues parece que el viejo desde siempre hubiese estado ahí. Sin embargo, su enigmática e inescrutable existencia susci-tó que en torno a él brotase una amalgama de historias. Algunos creen que fue un entrenador fracasado que quiso ocultar su ver-güenza en ese pueblo olvidado. Otros dicen que fue jugador en Europa y que vistió las camisetas de los grandes equipos, pero una fuerte lesión lo exilio del balompié. Otros se atreven a afirmar que simplemente es un anciano que se chifló, porque nunca pudo cumplir su sueño de jugar al fútbol profesional. El viejo Bernardo conoce todo lo que se rumora acerca de su vida, pero a él poco o nada le importan las especulaciones.

IVAN ZULUAGACALI - COLOMBIAColaborar estable

IVAN ZULUAGACALI - COLOMBIAColaborar estable

Año 778. Los francos son derrotados a su paso por el desfiladero de Roncesvalles (pirineo Navarro de Es-paña). Este suceso histórico da origen a la fascinante leyenda recogida en EL CANTAR DE ROLDAN.

Año 1057. Muere en combate Macbeth, cuya vida ins-pira a William Shakespeare a escribir su famosa obra de teatro.

año 1498. Durante su tercer viaje Colón descubre el golfo de Paria en la desembocadura del río Orinoco, La Isla Margarita y Cabagua, que será famosa por sus perlas.

Año 1519. Pedro Arias Dávila funda la ciudad de Pa-namá con unos 100 habitantes, siendo ésta la primera ciudad permanente en el Océano Pacífico.

Año 1534. En Paris, Ignacio de Loyola, de 43 años, ex oficial del ejército español funda la Compañía de Jesús, destinada a convertirse en el principal instru-mento de la contrarreforma.

Año 1537. Juan de Salazar y Espinosa de los Monteros funda la Muy Noble y Leal Ciudad de Nuestra Santa María de la Asunción, que más tarde será la capital de Paraguay.

Año 1540. Al pie del Volcán Misti se funda “Si, qué-dense” = “Arequipai”, actual Arequipa.

Año 1769. En Córcega nace Napoleón Bonaparte, em-perador de Francia.

Año 1771. Nace sir Walter Scott. Autor de Ivanhoe, novela que inicia el género literario: La Novela His-tórica, en la que un personaje ficticio se verá envuelto en una trama histórica con personajes históricos, todo ellos tratado con absoluta minuciosidad.

Año 1914. Se inaugura el Canal de Panamá.

Año 1947. India y Pakistan obtienen la independencia del Reino Unido.

ELLA ES TERNURA

Ella es joven, fresca,Bella alma de esta tierra.Ella es ternura,Es el sol en su rostro.La lluvia en sus ojos.Una historia de vida que duele contar.

Yo soy la experiencia, pero esclavo de sus besos.Soy la entraña de este amor,sin medidas.Decreto de un mensaje,de un destino,de un dios.Quiero vertir en tílo más puro de mi serquiero darte mi mundoquiero que seas, feliz.

Acunaremos los sueños,gritaremos al cielo,que mi futuro sea,morir a tu lado.

Un camino de estrellas.que mi destino sea,llegar juntos a ser ancianos.

MYRIAM B. MANZONEARGENTINAColaboradora Estable

ANGEL

Cuando tus ojitos se cierran y tu voz se acallaPara adentrarte en tus inocentes sueños,Encuentro en tu rostro la dulce esperanzaQue conduce mi vida a un rumbo nuevo.

Un mundo pequeño para tu amor y el míoE inmenso para emprender nuestro vuelo,Un mundo que encuentra en tus ojos preguntasY a las puertas de tu corazón se complace en respuestas.

Que divino plan se crearía allá en el cielo,Que al más hermoso ángel envía a la tierra,Y qué gran fortuna que fuese en mi cuerpoQue tu rayito de luz se convirtiera en lumbrera

YOLI PAZ DIAZCOLOMBIANAColaboradora Estable

EDITORIALDalí es un genio y su arte es visual, por ello más que textos sobre su vida, hemos dedicado estas páginas a algunas de sus obras. Con agrado en una próxima mostraremos otras que tal vez ya estén extrañando.

Por otra parte, hemos querido contar brevemente la historia que habría detras de la sonata CLARO DE LUNA, que no deja de estremecer una vez que asocias la situación al resultado. Sin duda una pieza clave para disfrutar al magnífico composi-tor alemán.

Especial cariño a nuestras colaboradoras que he-mos denominado estables, porque siempre están cuando las necesitamos, llenándonos de amor con su dulzura, fuerza y presencia, gracias amigas y para Iván el más cálido de los abrazos. Atte. Ariel Figueroa Ortega Revistaelfarochile@gmail.com Coordinador