ENSAYO

La infancia es quizás la etapa más importante del desarrollo humano; durante esta etapa se realiza una transformación que enmarca el surgimiento del lenguaje, la representación de la realidad y el desarrollo como sujeto. Esta etapa edifica las concepciones socio-culturales que se manifestaran en la personalidad del adulto. Esta comprendida por todo el desarrollo psicocognitivo, anatómico y sociocultural que tiene el niño desde los 0 al inicio de la adolescencia (13 a 14) años de edad. En este arduo caminar se hace plausible una multifactorialidad de aspectos que rigen el rumbo hacia donde esta dirigido el desarrollo infantil.

El ambiente, la sociedad y la cultura sin duda se relacionan directamente con el desarrollo de la infancia y la génesis del sujeto. El cual es un proceso gradual que transforma al niño de objeto del deseo a objeto deseante, durante esta transformación se configuran muchas habilidades como la de la comunicación, el desarrollo del lenguaje y la posibilidad de representar de manera clara el entorno.

Uno de los principales aspectos que caracterizan la etapa de la infancia es la adquisición del lenguaje, este proceso está muy ligado a todo el aspecto social y cultural del entorno. Puesto que de la cultura surge la posibilidad de perpetuar las costumbres, los acontecimientos y los conocimientos a través del lenguaje y a su vez este da la posibilidad se comunicarse con los otros , debatir y discernir en pro de la construcción de una interpretación de la realidad .

La adquisición de la lengua inicia desde los cero meses hasta los 12 años, y es de suma importancia, no obstaculizar el lenguaje natural o espontaneo puesto que esto interfiere en la capacidad de comunicar y expresar las emociones, pensamientos o deseos que puede llegar a tener el niño a demás cada palabra es una impronta y contribuye en la formación del lenguaje.

El proceso del lenguaje: inicia por la fonética, esta comprende el ritmo, tono, musicalidad y tempo. En la sintaxis se hace énfasis en la oración, coordinación, subordinación y finalmente en la semántica se aborda la inherencia, proposición, metáfora y la ironía.

La cultura produce creaciones literarias que aportan como elementos externos a la formación del lenguaje. estas creaciones culturales como los cuentos, cantos y nanas constituyen un factor simbólico que aporta en el desarrollo de la psiquis en los niños, estos elementos constituyen el alimento simbólico que se requiere para nutrir las necesidades musicales de la psiquis (Cabrejo, 2006) . El desarrollo neurológico y esta adquisición del lenguaje que llevan a cabo los infantes, está acompañada de procesos de anticipación que permiten una aproximación inicial a la simbología de las palabras; un ejemplo de dichos procesos es el balbuceo que precede al lenguaje fluido. Por esta razón estos procesos se consideran fundamentales en la organización del lenguaje infantil, ya que interiorizan y crean la representación fonética de las percepciones. Permitiendo al niño iniciar la construcción como sujeto, a partir del reconocimiento del otro acompañado de la la transformación a través de lo social y la cultura.

Dentro de la construcción del lenguaje por parte de los infantes la cultura y el ambiente social desempeñan un papel muy importante, La cultura se relaciona con esta génesis del lenguaje en la medida en que esta impone reglas, por ejemplo, cuando el otro habla se respeta el turno, se crean parámetros que llegan a limitar la oralidad.

Vale la pena mencionar algunas ideas que emergen en nuestra cultura

El lenguaje del niño es incorrecto- que la oralidad es un estado temporal - el niño cuando se expresa es incoherente - el lenguaje del niño es una materia a mejorar

Al parecer la sociedad ejerce otro sentido en cuanto al lenguaje y los saberes infantiles.

Esto se distancia de lo que realmente constituye el lenguaje pues se debe partir de la premisa que los lenguajes son vivos, son pertenencias sociales, tienen sus idiosincrasias. El niño y niña aprenden en interacción con el otro de hay la importancia de la lengua materna porque de ella emerge la comunicación o la representación de la realidad y su entorno. Así como los saberes que acompañan el aprendizaje de la lengua y contribuyen a la psiquilinguistica.

En paralelo a este proceso del desarrollo del lenguaje el desarrollo anatómico permite al niño percibir su entorno a través de los órganos de los sentidos y la locomoción, esto da la posibilidad de interiorizar estas percepciones y comunicarlas a través del lenguaje. Estas características le posibilitan estar dentro de un grupo social es decir se un sujeto. En la medida que el infante se desarrolla los le va dando significancia a lo que lo rodea, objetos, señas o gestos y a su vez va integrando objetos a su dimensión afectiva estos se convierten en lo que se denomina “objeto transicional” que representa para el infante una primera posesión, posee características del mundo externo representado especialmente por su madre. El niño se aferra a ellos en sus primeros meses lo que le proporciona una defensa contra la ansiedad espacialmente depresiva, muchas veces estos objetos presentan condición de ser capaces de conservar el aroma de la madre u otra característica particular que le proporciona seguridad. Esto podría tomarse como un tipo de lenguaje simbólico que comunica o transmite al niño la satisfacción de un deseo.

El hombre por naturaleza es un ser social, por lo tanto ejerce la comunicación lingüística bajo una unidad expresiva como discurso, por ende, es importante el papel del discurso en la sociedad y en la infancia. Su principal función ha sido desde sus orígenes comunicar o exponer, pero con el objetivo principal de persuadir puesto que desde una perspectiva histórica vemos como el discurso se usa como medio para un fin de quien lo emite. Cuando desde la infancia se desarrolla el lenguaje también se inicia a forjar un propio discurso que se afianzara y reconfigurara en la adultez.

Como se ha mencionado en las líneas anteriores los factores que configuran la etapa de la infancia son múltiples, pero sin duda todos y cada uno de ellos tienen una conexión directa con lo que en el futuro será cada sujeto podría considerarse por esta razón que la infancia es una etapa trascendental en el desarrollo humano y tal vez por eso tos y cada uno de nosotros la reconocemos como el pilar de nuestro desarrollo como sujetos sociales.

Si bien la infancia es tan importante en el desarrollo humano y el lenguaje se muestra como un elemento fundamental para configurar dicha afirmación sería interesante abordar de aquí en adelante la problemática del porqué la infancia se aborda desde una perspectiva del adultocentrismo y como la cultura frena en ocasiones el impulso de la etapa de la infancia.

Interpretar la realidad del sujeto niño en un concepto como el adultocentrismo donde las prácticas sociales que sustentan la representación de los adultos con un modelo de superioridad, dominio entre otras. Hacen de nuestros infantes objetos deseantes. No sujetos de derechos, la infancia actualmente se asocia con la inmadurez, la incapacidad y no se reconoce la importancia de esta etapa para nuestro desarrollo ni para nuestra formación como sujetos y seres sociales.

Es difícil abordar al infante como un sujeto que está en constante transformación, que el desarrollo socio-afectivo y psicocognitivo que sufre es un proceso que va paso a paso y lo que se hace es juzgar desde la realidad del adulto tomando los comportamientos infantiles como irrelevantes e inmaduros y lo que es más grave muchas veces faltando a la premisa de otredad que trata del reconocimiento del otro como individuo diferente, que no forma parte de la comunidad propia ya que pertenece a otra cultura ya sea por sus creencias, tradiciones, intereses y religión.

De la misma manera la transculturalidad a traviesa los imaginarios siendo la universalidad una cuestión amplia global que abarca un todo y que es para todos y asi mismo la cultura es aprendida, compartida y transmitida de una generación a otra por los miembros de una comunidad por esta razón es un principio que determina, regula y moldea la conducta de los seres humanos y ni siquiera estando en las primeras etapas del desarrollo se escapa de esta condición puesto que la cultura restringe en muchos aspectos, por ejemplo en las instituciones estamos regidos por una serie de normas , estándares y tiempo donde el niño es objeto de la cultura impuesta por las mismas políticas.

Por otra parte los medios de comunicación, la publicidad buscan beneficiarse con el tema social a través del discurso teniendo una intencionalidad sobre las causas estructurales de una problemática actual como lo es la infancia..

Según la teoría psicoanalítica de Freud en su obra el malestar de la cultura, los seres humanos somos solo instintos y pulsiones y el niño permanece dentro de estas en el ello, donde obtiene un estado de placer y disfrute con lo que le pasa, el ser humano se encuentra sumergido en la cultura que lo lleva a no encontrar la felicidad, sin embargo, el hombre se determina a sí mismo, la búsqueda de la felicidad por medio de varios fines, es así que, la felicidad surge de la satisfacción de necesidades acumuladas; resultando dos premisas, la cultura como fuente de miseria y la hostilidad contra la cultura.

Por otra parte, Freud afirma que la cultura es una suma de producciones e instituciones que distancian nuestra vida de la de nuestros antecesores animales y que posee rasgos como la actividad y bienes útiles para el hombre, deidades cualidades que nos eleva, belleza no es útil es una necesidad de carácter estético e higiene, la falta de esta distancia al hombre de la cultura.

La agresión como una disposición instintiva, estas tendencias agresivas son factores que perturban las relaciones con los semejantes ,lo instintivo como lo agresivo hacen parte de la naturaleza. La cultura defiende al sujeto de estas expresiones agresivas a través de la

ley que permite la convivencia es decir un interés racional. Pero en ocasiones sobrepone esta premisa y limita la expresión de la emotividad.

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