escritores salvadoreños

27
SALVADOR SALAZAR ARRUÉ también conocido por el seudónimo “Salarrué”, es un escritor y pintor salvadoreño. Nació en Sonsonate el 22 de octubre de 1899 y murió en Los Planes de Renderos (San Salvador) el 27 de noviembre de 1975. Estudió en la Corcoran School of Arts de Washington D.C. entre 1916 y 1919, fecha en que regresó a El Salvador. En 1922 se casó con la pintora salvadoreña Zélie Lardé, con quien procreó tres hijas que también se dedicaron a las artes plásticas: Olga, Aída y Maya. A finales de los años veinte trabajó como jefe de redacción en el periódico Patria, del escritor y filósofo salvadoreño Alberto Masferrer. En ese periódico comenzó a publicar una de sus obras más queridas e importantes en El Salvador: Cuentos de cipotes, como “relleno” para las páginas en las que quedaban espacios en blanco; sólo se publicarían en forma de libro más de treinta años después, en 1961, a instancias del poeta, historiador y editor Italo López Vallecillos. Su casa, recuperada en 2003 por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de El Salvador (CONCULTURA), actualmente alberga La Casa del Escritor, un proyecto de formación de escritores jóvenes. Las obras publicadas de Salarrué son: El Cristo negro (novela, 1926), El señor de La Burbuja (novela, 1927), O’Yarkandal (cuento, 1929), Remontando el Uluán (cuento, 1932), Cuentos de barro (cuento, 1934), El libro desnudo (relato, 1936), Eso y más (cuento, 1940), Cuentos de cipotes (1943 en edición parcial, 1961 en edición completa), Trasmallo (cuento, 1954), La espada y otras narraciones (cuento, 1960), La sed de Sling Bader (novela, 1971), Catleya luna (novela, 1974) y Mundo nomasito (poesía, 1975). Las primeras ediciones de Cuentos de cipotes fueron ilustradas por su esposa, Zélie Lardé, y las siguientes por su hija Maya. Algunas ediciones de Cuentos de barro tienen ilustraciones hechas ad hoc por el pintor salvadoreño José Mejía Vides.

Transcript of escritores salvadoreños

Page 1: escritores salvadoreños

SALVADOR SALAZAR ARRUÉ

también conocido por el seudónimo “Salarrué”, es un escritor y pintor salvadoreño. Nació en Sonsonate el 22 de octubre de 1899 y murió en Los Planes de Renderos (San Salvador) el 27 de noviembre de 1975. Estudió en la Corcoran School of Arts de Washington D.C. entre 1916 y 1919, fecha en que regresó a El Salvador.En 1922 se casó con la pintora salvadoreña Zélie

Lardé, con quien procreó tres hijas que también se dedicaron a las artes plásticas: Olga, Aída y Maya. A finales de los años veinte trabajó como jefe de redacción en el periódico Patria, del escritor y filósofo salvadoreño Alberto Masferrer. En ese periódico comenzó a publicar una de sus obras más queridas e importantes en El Salvador: Cuentos de cipotes, como “relleno” para las páginas en las que quedaban espacios en blanco; sólo se publicarían en forma de libro más de treinta años después, en 1961, a instancias del poeta, historiador y editor Italo López Vallecillos. Su casa, recuperada en 2003 por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de El Salvador (CONCULTURA), actualmente alberga La Casa del Escritor, un proyecto de formación de escritores jóvenes.

Las obras publicadas de Salarrué son: El Cristo negro (novela, 1926), El señor de La Burbuja (novela, 1927), O’Yarkandal (cuento, 1929), Remontando el Uluán (cuento, 1932), Cuentos de barro (cuento, 1934), El libro desnudo (relato, 1936), Eso y más (cuento, 1940), Cuentos de cipotes (1943 en edición parcial, 1961 en edición completa), Trasmallo (cuento, 1954), La espada y otras narraciones (cuento, 1960), La sed de Sling Bader (novela, 1971), Catleya luna (novela, 1974) y Mundo nomasito (poesía, 1975). Las primeras ediciones de Cuentos de cipotes fueron ilustradas por su esposa, Zélie Lardé, y las siguientes por su hija Maya. Algunas ediciones de Cuentos de barro tienen ilustraciones hechas ad hoc por el pintor salvadoreño José Mejía Vides.

Page 2: escritores salvadoreños

DAVID ESCOBAR GALINDO

(4 de octubre de 1943) es un poeta, novelista y jurista salvadoreño nacido en Santa Ana, El Salvador. Es Doctor en Jurisprudencia y Ciencias Sociales, graduado de la Universidad de El Salvador, Fundador y Rector de la Universidad “Dr. José Matías Delgado”, y columnista habitual del diario La Prensa Gráfica. Entre 1990 y 1992 participó en la Comisión gubernamental negociadora del proceso de paz que puso fin a la Guerra Civil de El Salvador.

Es miembro de número de la Academia Salvadoreña de la Lengua; ganador de los Juegos Florales de Quezaltenango, Guatemala en la rama de Poesía en 1980,1981 y 1983; y ha sido nombrado Hijo Meritísimo de la Ciudad de Santa Ana.

Es considerado uno de los autores más prolijos y reconocidos de la literatura salvadoreña. Su obra publicada comprende los poemarios Cornamusa (1975), El Libro de Lilian (1976), Sonetos penitenciales (1980), Árbol sin Tregua (1996), Oración en la Guerra (1989) El venado y el colibrí (1996) y la novela Una Grieta en el Agua (1972). Además ha preparado varias antologías poéticas como El Árbol de Todos, Lecturas Hispanoamericanas (1979) y Páginas Patrióticas Salvadoreñas (1988).

Álvaro Menen Desleal

Perteneció a la llamada Generación Comprometida junto con Manlio Argueta, Italo López Vallecillos, Roque Dalton y otros. Menendez Leal fue el

Page 3: escritores salvadoreños

creador de los noticieros televisivos en El Salvador, con el mítico programa Telediario salvadoreño. Su suerte cambiaba de gobierno a gobierno; estuvo exiliado y fue también agregado cultural de El Salvador en México y director del Teatro Nacional.

Álvaro Menéndez Leal nació en la ciudad de Santa Ana, el 13 de marzo de 1931. Ingresó a la Escuela Militar “General Gerardo Barrios”, de la cual fue expulsado cuando cursaba el tercer curso (1952), debido a un poema “subversivo” que publicó en La Prensa Gráfica.Ingresó a la redacción de El Diario de Hoy (enero de 1953), rotativo en el que colaboraba desde 1950. En agosto de 1953, fue detenido y fichado en el cuartel central de la Policía Nacional, acusado de conspirar contra el régimen del teniente coronel Óscar Osorio.Realizó una gira como boxeador peso mosca por las arenas de Guatemala y las del México provincial, hasta que llegó a debutar en la Arena Metropolitana del distrito federal. De su primera estancia en este país emanó un poemario existencialista, titulado El extraño habitante (México, 3AM), iniciado en marzo de ese mismo año y publicado en San Salvador, diez años después.

Entre su obra editada se encuentra, La llave (cuento, San Salvador, 1962); Cuentos Breves y Maravillosos (cuento. Libro premiado con el Segundo Lugar en el Certamen Nacional de Cultura, 1962); El Extraño Habitante (Poesía, San Salvador, 1964); El Circo y otras Piezas Falsas (Teatro. Revista La Universidad, San Salvador, 1966); Luz Negra (Teatro: Primer Premio compartido, Juegos Florales Hispanoamericanos de Quezaltenango, Guatemala, 1965); Ciudad, Casa de Todos (Ensayo: Segundo Premio Certamen Nacional de Cultura, San Salvador, 1966); Una cuerda de Nylon y Oro (Cuento: Primer Premio en el certamen Nacional de Cultura, San Salvador, 1968); Revolución en el País que edificó un Castillo de Hadas (Cuento: Primer Lugar en el Certamen Centroamericano Miguel Ángel Asturias, del Consejo Superior Universitario Centroamericano, Coosta Rica, 1970); La Ilustre Familia Androide (Cuento, Argentina, 1972); Los Vicios de Papá (Cuento, San Salvador, 1978); La bicicleta al pie de la muralla (Teatro, San Salvador, 2000); Tres novelas cortas y poco ejemplares (San Salvador, 2001).

ARTURO AMBROGI

(San Salvador, El Salvador, 1874 - id. 1936) fue un escritor y periodista salvadoreño, considerado uno de los fundadores de la literatura salvadoreña, junto con Francisco Gavidia y Alberto Masferrer y uno de los representantes del costumbrismo en Centroamérica.

Era hijo de un inmigrante italiano. A los 16 años de edad, conoció a al poeta nicaragüense Rubén Darío. Trabajando como periodista,

Page 4: escritores salvadoreños

viajó en su juventud por Europa, Suramérica y el Lejano Oriente; en sus viajes por el Cono Sur conoció al escritor uruguayo José Ingenieros. Su padre creó las condiciones económicas para que él tuviera una formación elitista y que adquiriera una gran cultura cosmopolita al punto que se afirmaba de él que era el salvadoreño de su época más informado, no tuvo descendencia porque nunca se casó, pero un hermano llamado Constantino Ambrogi Acosta se radicó en Nicaragua donde procreó con Rosa Medal tres hijos: Vicente Julián, Constantino y Cristina. Siendo los hijos de éstos los descendientes más cercanos a este escritor. El padre de Arturo Ambrogi se llamó Constantino Ambrogi Luissi y su madre era Lucrecia Acosta, tía carnal del también escritor Vicente Acosta. El último en morir de sus sobrinos Vicente Julian Ambrogi Medal, a la edad de noventa años en 1999, llevaba ese nombre en honor de Vicente Acosta puesto por su padre a sugerencia del mismo Arturo Ambrogi. Sus restos descansan junto a los de su padre en el cementerio de la ciudad de Jinotepe.

Ambrogi cultivó la narrativa costumbrista y fue influenciado por el romanticismo español y el modernismo hispanoamericano. En sus cuentos y crónicas quiso plasmar por escrito todos los aspectos tradicionales de la vida campesina salvadoreña. Sus obras publicadas son: “Cuentos y Fantasías” (1895), “Máscaras, Manchas y Sensaciones” (1901), “El Libro del Trópico” (1907), “Sensaciones del Japón y de la China” (1915) y “El Jetón” (1936).

Gabriel José de la Concordia García Márquez es un novelista colombiano, escritor de cuentos, guionista y periodista. Nacido en la Región Caribe, en el municipio de Aracataca (Magdalena), el 6 de marzo de 1927. Es conocido familiarmente como “Gabo “ (y también Gabito) (hipocorístico guajiro para Gabriel), desde que su compañero del diario bogotano El Espectador, José Salgar, comenzara a llamarle así. En 1958, se casó con Mercedes Barcha, tienen dos hijos, Rodrigo y Gonzalo.

Es considerado uno de los autores más significativos del siglo XX. Obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1982, según la laudatoria de la Academia Sueca “por sus novelas e historias cortas, en las que lo fantástico y lo real son combinados en un tranquilo mundo de imaginación rica, reflejando la vida y los conflictos de un continente”.[1] Su novela más reconocida internacionalmente es Cien años de soledad.

Nació en Aracataca, en el departamento costeño de Magdalena, Colombia, el domingo 6 de marzo de 1927 (aunque algunas fuentes

Page 5: escritores salvadoreños

insisten en 1928, como año de nacimiento, cuando en 2007 celebró sus 80 años y 40 años de Cien Años de Soledad). Hijo de Gabriel Eligio García y de Luisa Santiaga Márquez Iguarán. Poco después de su nacimiento, su padre se convirtió en farmacéutico. En enero de 1929, sus padres se mudaron a Barranquilla. Fue criado por sus abuelos maternos, el coronel Nicolás Márquez y Tranquilina Iguarán, en Aracataca. En 1936 cuando tenía ocho años, su abuelo murió, y se trasladó a Barranquilla donde su padre era farmacéutico.

Cuando sus padres se enamoraron se opuso a su relación el padre de Luisa, el Coronel. Gabriel Eligio García no era el hombre que el coronel había previsto para ganar el corazón de su hija: Él (Gabriel Eligio) es un conservador, y tenía la reputación de ser un mujeriego. Gabriel Eligio le dio a Luisa serenatas con su violín, poemas de amor, innumerables cartas, e incluso después de los mensajes telegráficos. Su padre la envió fuera de la ciudad con la intención de separar a la joven pareja. Ellos intentaron todo para deshacerse del hombre. Su familia finalmente capituló y se le dio permiso para casarse con Gabriel Eligio. (La tragicomedia historia de su cortejo más tarde sería adaptado y refundida como El amor en los tiempos del cólera por su hijo Gabriel García Márquez.)

Juan Rulfo

Nació en Apulco, municipio de San Gabriel, distrito de la ciudad de Sayula, estado de Jalisco, el 16 de mayo de 1917. Murió en la Ciudad de México, el 7 de enero de 1986, escritor, guionista y fotógrafo mexicano , perteneciente a la generación del 52. La reputación de Rulfo se asienta en dos pequeños libros: El llano en llamas, compuesto de diecisiete pequeños relatos y publicado en 1953, y la novela Pedro Páramo,

publicada en 1955. Se trata de uno de los escritores de mayor prestigio del siglo XX, pese a ser poco prolífico. Ha sido considerado uno de los más destacados escritores en la lengua española de este periodo, junto a Jorge Luis Borges, por una encuesta realizada por la editorial Alfaguara.

Juan Rulfo fue uno de los grandes escritores latinoamericanos del siglo XX, que pertenecieron al movimiento literario denominado “realismo mágico”, y en sus obras se presenta una combinación de realidad y fantasía, cuya acción se desarrolla en escenarios americanos, y sus personajes representan y reflejan el tipismo del lugar, con sus grandes problemáticas socio-culturales entretejidas con el mundo fantástico.

Page 6: escritores salvadoreños

En 1942 participó en la revista América. En 1945, publicó dos cuentos para la revista Pan en Guadalajara: Nos han dado la tierra y Macario. Establecido en la Ciudad de México en 1946 se publicó el cuento Macario en la revista América. En 1948, se publicó La cuesta de las comadres y en 1950 Talpa y El llano en llamas. En 1951 la revista América publicó el cuento ¡Diles que no me maten! y en 1953 el Fondo de Cultura Económica integró El llano en llamas (al que pertenece el cuento “Nos han dado la tierra”) en la colección “Letras Mexicanas”.3 En 1955 se publicó Pedro Páramo, Juan Rulfo se trasladó a vivir a Ciudad Alemán, Veracruz.

Guionista de cine En 1956, el director de cine Emilio “el Indio” Fernández le solicitó guiones para cine, Rulfo en colaboración con Juan José Arreola realizó algunos de ellos. Muchos de sus textos han sido base de producciones cinematográficas. En 1960 se produjo la película El despojo basada en una idea de Rulfo y en 1964 El gallo de oro dirigida por Roberto Gavaldón y adaptada al cine por Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez.4

PABLO NERUDA

Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto[1]

(Parral, 12 de julio de 1904 – Santiago de Chile, 23 de septiembre de 1973) conocido por el seudónimo y, más tarde, el nombre legal de Pablo Neruda, fue un poeta chileno, considerado entre los mejores y más influyentes de su siglo, siendo llamado por el novelista Gabriel García Márquez “el más grande poeta del siglo XX en cualquier idioma”.[2] También fue un destacado activista político, siendo Senador de la República, integrante del Comité Central del Partido Comunista y pre-candidato a la Presidencia. Entre sus múltiples reconocimientos destacan el Premio Nobel de Literatura en 1971 y un Doctorado Honoris Causa por la Universidad de Oxford. En palabras del crítico Harold Bloom, “ningún poeta del hemisferio occidental de nuestro siglo admite comparación con él”.[3]

Hijo de José del Carmen Reyes Morales, obrero ferroviario, y Rosa Neftalí Basoalto Opazo, maestra de escuela fallecida debido a una tuberculosis cuando Neruda tenía un mes de edad4 . En 1906, la familia se trasladó a Temuco, donde su padre se casa en segundas nupcias con Trinidad Candia Marverde a quien Neruda llamará “mamadre”1 en diversos textos como en Confieso que he vivido y

Page 7: escritores salvadoreños

Memorial de Isla Negra5 Neruda ingresa al Liceo de Hombres de Temuco, donde cursa todos sus estudios hasta terminar el 6º año de humanidades en 19204 . El impresionante entorno natural de Temuco, sus bosques, lagos, ríos y montañas marcarán para siempre el mundo poético de Neruda.

Fotografía del joven Neruda, aún firmando como Ricardo Reyes

En 1917, publica su primer artículo en el diario La Mañana de Temuco, con el título de «Entusiasmo y perseverancia» En esta ciudad escribió gran parte de los trabajos, que pasarían a integrar su primer libro de poemas: Crepusculario5 .

Entre 1918 y 1919, publica diversos poemas en la revista “corazon salvaje”, Corre-Vuela de Santiago, con el seudónimo de Neftalí Reyes.

En 1919, obtiene el tercer lugar en los Juegos Florales del Maule con su poema «Comunión Ideal1 » o «Nocturno Ideal»4 . En 1920 comienza a contribuir con la revista literaria Selva Austral .

Ricardo Trigueros de León (Ahuachapán, El Salvador, 13 de noviembre de 1917; San Salvador, El Salvador, 20 de mayo de 1965) fue un poeta, periodista, abogado y crítico literario salvadoreño.

Estudió Derecho en la Universidad de El Salvador. Fue profesor de literatura en varios colegios de secundaria de San Salvador y catedrático de Periodismo en la Universidad de El Salvador; Fue columnista de El Diario de Hoy. Fungió como jefe de la Departamento Editorial del Ministerio de Cultura en la década de 1950.

Murió prematuramente a los 48 años.

Sus poemarios publicados son:

Campanario (1941),

Page 8: escritores salvadoreños

Nardo y estrella (1943), Presencia de la rosa (1945), Labrado en madera (1947), Perfil en el aire (1955) y Pueblo (1960).

GABRIELA MISTRAL (Vicuña 1889 - Nueva York 1957)

Lucila Godoy, llamada Gabriela Mistral (conocida mejor como Gabriela Mistral), escritora chilena. Hija de un maestro rural, que abandonó el hogar a los tres años del nacimiento de Gabriela, la muchacha tuvo una niñez difícil en uno de los parajes más desolados de Chile. A los 15 años publicó sus primeros versos en la prensa local, y empezó a estudiar para maestra. En 1906 se enamoró de un modesto empleado de ferrocarriles, Romelio Ureta, que, por causas desconocidas, se suicidó al poco tiempo; de la enorme impresión que le causó aquella pérdida surgieron sus primeros versos importantes. En 1910 obtuvo el título de maestra en Santiago, y cuatro años después se produjo su consagración poética en los juegos florales de la capital de Chile; los versos ganadores- Los sonetos de la muerte- pertenecen a su libro Desolación (1922), que publicaría el instituto de las Españas de Nueva York. En 1925 dejó la enseñanza, y, tras actuar como representante de Chile en el Instituto de cooperación intelectual de la S.D.N., fue cónsul en Nápoles y en Lisboa. Vuelta a su patria colaboró decisivamente en la campaña electoral del Frente popular (1938), que llevó a la presidencia de la república a su amigo de juventud P. Aguirre Cerda. En 1945 recibió el premio Nobel de literatura;

Page 9: escritores salvadoreños

viajó por todo el mundo, y en 1951 recogió en su país el premio nacional.

En 1953 se le nombra Cónsul de Chile en Nueva York. Participa en la Asamblea de Las Naciones Unidas representando a Chile. En 1954 viene a Chile y se le tributa un homenaje oficial. Regresa a los Estados Unidos.

El Gobierno de Chile le acuerda en 1956 una pensión especial por la Ley que se promulga en el mes de noviembre.

En1957, después de una larga enfermedad, muere el 10 de enero, en el Hospital General de Hempstead, en Nueva York. Sus restos reciben el homenaje del pueblo chileno, declarándose tres días de duelo oficial. Los funerales constituyen una apoteosis. Se le rinden homenajes en todo el Continente y en la mayoría de los países del mundo.

La obra poética de Gabriela Mistral surge del modernismo, más concretamente de Amado Nervo, aunque también se aprecia la influencia de Frédéric Mistral (de quién tomó el seudónimo) y el recuerdo del estilo de la Biblia. De algunos momentos de Rubén Darío tomó, sin duda, la principal de sus características: la ausencia de retórica y el gusto por el lenguaje coloquial. A pesar de sus imágenes violentas y su gusto por los símbolos, fue, sin embargo, absolutamente refractaria a la “poesía pura”, y, ya en 1945, rechazó un prólogo de P. Valéry a la versión francesa de sus versos. Sus temas predilectos fueron: la maternidad, el amor, la comunión con la naturaleza americana, la muerte como destino, y, por encima de todos, un extraño panteísmo religioso, que, no obstante, persiste en la utilización de las referencias concretas al cristianismo. Al citado Desolación siguieron los libros Lecturas para mujeres destinadas a la enseñanza del lenguaje (1924); Ternura (1924

Francisco Gavidia, fue escritor, educador, historiador y periodista salvadoreño. Nace en el departamento de San Miguel el 29 de diciembre de 1863, muere en San Salvador el 22 de septiembre de 1955 su nombre completo es: Francisco Antonio Gavidia Guandique. Es tomado como el fundamentador de la literatura salvadoreña. Gavidia llena una época, marca una etapa.

Practicó todos los géneros literarios, y en todos aportó una visión enriquecedora de nuestra realidad. Con Gavidia tenemos algunos de los fundamentos para insistir en la búsqueda de lo nuestro; él tiene cierta profundidad que no encontramos en autores antes de él o contemporáneos suyos. Descubrió el alejandrino francés y lo enseñó a Rubén Darío (Nicaragua), quien lo incorporó al verso escrito en español y lo llevó a sus últimas consecuencias. Su espíritu buscador lo llevaba por todos los rumbos de la literatura, por lo que algunos afirman que su obra es un tanto dispersa. Su

Page 10: escritores salvadoreños

diversidad es de riquezas no de fragmentación: es un todo que muestra la dedicación de un hombre preocupado por fundamentar una expresión cultural salvadoreña. Para ello estudió el pasado prehispánico y colonial del país en su contexto centroamericano así como el de nuestra América. Aparte de su labor poética, participó en actividades periodísticas-literarias y se preocupó por la educación; publicó numerosos ensayos de aspecto educativo; en 1932 es declarado “Salvadoreño Meritísimo” por la asamblea legislativa.

Catedrático de la Universidad de El Salvador (que lo nombró Doctor Honoris Causa, en 1941), fundador del Ateneo de El Salvador (1912) y de las Academias Salvadoreñas de la Historia (febrero de 1925) y de la Lengua (en septiembre de 1952, fue nombrado director honorario de esta última institución cultural, en la que ocupó la silla G). Director titular (1906-1919) y honorario de la Biblioteca Nacional, catedrático de la Escuela Normal de Señoritas (1890), del Instituto Nacional de Varones (después INFRAMEN) y de la Universidad de El Salvador, que, posteriormente, lo nombra Doctor Honoris Causa. Además, fue miembro de la Comisión de Cooperación Intelectual de El Salvador —dependencia de la Sociedad de Naciones, antecedente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU, 1948) ―, del Comité de Investigaciones Folklóricas y Arte Típico Nacional (1943), vinculado con el Ministerio de Instrucción Pública

Algunas de sus obras son:

Versos (poesía), 1885. Ursino (teatro), 1886. Júpiter (teatro), 1889. El Encomendero 1901. Historia Moderna de El Salvador, 1917. Cuentos y Narraciones, 1931.

Saúl Flores

Nació en Zacatecoluca el 16 de agosto de 1889 y murió en San

Salvador en 1980. Sus padres fueron el Dr. Ezequiel Fernández y

doña Isabel Flores.

En 1897 su familia se traslada a la capital y Saúl estudia su

primaria con don Joaquín Rodezno. Obtiene una beca en la

Escuela Normal hasta graduarse de profesor.

En 1928 fue becado para estudiar en la Universidad de Santiago de Chile, donde conoció a

su esposa, Lavinia Rivera.

Page 11: escritores salvadoreños

Recibió muchos agasajos y premios, entre ellos la medalla “Bernardo O´Higgins” del

gobierno de Chile, la condecoración “Orden de Mayo” en el Grado de Gran Comendador

de la república Argentina en 1966 y el título de Maestro del Año en El Salvador.

Algunas de sus obras son “Lecturas nacionales de El Salvador”, “Esta es mi tierra”,

“Escuelas y maestros de El Salvador”, “Temas vivos sobre educación”, “Madre Tierra” y

“Simiente”

 

VICENTE ALBERTO MASFERRER

Vicente Alberto Masferrer Mónico, fue un maestro, filósofo, periodista, ensayista, poeta y político salvadoreño nacido el 24 de julio de 1868 en Alegría (antes Tecapa), Usulután y fallecido en el exilio el 4 de septiembre de 1932 en Tegucigalpa, Honduras.[3] Escritor que marca con sus letras toda una época de la literatura salvadoreña a través de la definición de su pensamiento inclinado a la defensa de los más desposeídos y de denuncia social.[

Alberto Masferrer nació en una población del oriente de El Salvador, de origen pipil y dominado posteriormente por los lencas. Su educación fue autodidáctica en combinación con educación formal. Su gusto por la lectura le llevó a escoger la docencia como carrera. Al respecto, Arturo Ambrogi expresaba que "pocas veces he visto un lector tan tremendo como Alberto".[2]

Carrera

Page 12: escritores salvadoreños

Entre 1928 y 1930 fundó y dirigió el periódico Patria,[2] en el cual hacía denuncia social y abogaba por la justicia para con los más necesitados en el marco de la pobreza generalizada del país. Trabajó diarios y revistas nacionales e internacionales, fue redactor de los diarios El Chileno y El Mercurio, de Santiago de Chile; el semanario La Reforma, diario Los obreros unidos; en las revistas La República de Centroamérica, Actualidades, Bibliográfica Científico-Literaria, El Simiente y otros.[4]Inició su carrera política siendo cónsul de El Salvador en Argentina (1901), Chile (1902), Costa Rica (1907) y Bélgica (1910),[5] así como en la Corte Internacional de Justicia en 1912;[4] además se desempeñó como archivero de la contaduría mayor de la nación, redactor y director del Diario Oficial (1892),[6] Secretario del Instituto Nacional (1890) y Asesor del Ministerio de Instrucción Pública (1916).[4] Bajo la premisa fundamental de la lucha pacífica por los derechos de cada individuo, se convirtió en el ideólogo y director de la campaña política que en 1930 llevó a la presidencia al ingeniero Arturo Araujo. Ese mismo año fue electo como diputado nacional, separándose políticamente del presidente y de sus posturas.[2]

Obras publicadas

Pese a la prolifera publicación de ensayos y escritos aislados, las obras completas publicadas por Masferrer son:[10]

Páginas (1893) Niñerías (1900) ¿Qué debemos saber? (ensayo epistolar, 1913) Leer y escribir (ensayo sociológico, 1915) Una vida en el cine (1922) Ensayo sobre el destino (1925) Las siete cuerdas de la lira (ensayo filosófico, 1926) El dinero maldito (ensayo moral, 1927)

CLARIBEL ALEGRÍA

(Estelí, Nicaragua, 1924) es una escritora nicaragüense.Nació el 12 de mayo de 1924 en la ciudad de Estelí en Nicaragua de padres nicaragüenses y salvadoreños. Creció en la ciudad de Santa Ana al occidente de El Salvador. A la edad de ocho años, Alegría presenció la masacre de más de treinta mil campesinos e indígenas en El Salvador.En 1943 Alegría se mudó a EE.UU. a estudiar en la Universidad George Washington en Washington D.C..

En 1948 se graduó con el diploma de filosofía y letras.Pero antes de estudiar en los E.E.U.U estudio en Santa Ana para la elementaria y secundaria.Vivió en EE. UU. por muchos años y se casó con el escritor estadunidense Darwin J. Flakoll. En 1985 Alegría regreso a Nicaragua para ayudar en la resurención de Nicaragua después de la Guerra civil. Ella cree en la no violencia ya que ella ha visto en persona la violenta masacre de campesinos en 1932 en El Salvador.En 1995 Flakoll murió en Managua, Nicaragua y hoy en día Alegria todavía vive en la casa que compartió con su esposo.

.....existen los barrotes/nos rodean: Acuario (1955)

Page 13: escritores salvadoreños

Obra Como escritora y poeta goza de fama internacional y ha recibido varios premios internacionales, como el Casa de las Americas de Cuba en el año 1978 por su libro Sobrevivo. Entre sus obras hay varias novelas históricas como Somoza, expediente cerrado: La historia de un ajusticiamiento (1993) que habla de la vida del dictador nicaragüense Anastasio Somoza. Este libro y otros fueron escritos en colaboración con su esposo Flakoll. Su obra (poesía, novela y cuento) sigue las líneas de su época, busca la denuncia social y reivindica los derechos humanos con un lenguaje a veces antiliterario.Lista de Obras

Anillo de silencio (1948) Vigilias (1953) Acuario (1955) Huésped de mi tiempo (1961) Vía única (1965) Aprendizaje (1970) Pasaré a cobrar y otros poemas (1973) Sobrevivo (1978, Premio Casa de las Américas de Poesía) Flores del volcán; Suma y sigue (1981) Tres cuentos (1958) Álbum familiar (1984) Despierta, mi bien, despierta (1986) Luisa en el país de la realidad (1987) Cenizas de Izalco (1966) La encrucijada salvadoreña (1980) Nicaragua: la revolución sandinista (1980) No me agarran viva: la mujer salvadoreña en lucha (1983) Para romper el silencio: resistencia y lucha en las cárceles salvadoreñas

(1984) Ars Poética. Antología (1948-2006) (2007)

HUGO LINDO OLIVARES

fue un poeta, novelista, diplomático, político y

abogado salvadoreño nacido en el Puerto de La

Unión (El Salvador), el 13 de octubre de 1917,

dentro de una familia de clase trabajadora.

Estudio en la Universidad de El Salvador, donde obtuvo el título de

Doctor en Jurisprudencia y Ciencias Sociales. En 1947 hizo un viaje

como diplomático a Corea. Fue embajador de El Salvador ante la

República de Chile (1952-1959) y ante la República de Colombia (1959-

1960). Fue Ministro de Educación en 1961 y volvió al servicio

Page 14: escritores salvadoreños

diplomático como embajador de El Salvador en España (1969-1972).

Participó en la fundación de la Universidad "Dr. José Matías Delgado" y

se desempeñó como Decano de la Facultad de Bellas Artes de esta

Universidad (1979-1985).

Publicó los poemarios: Poema eucarístico y otros (1943), Sinfonía sin

límites (1953), Trece instantes (1959), Navegante río (1963), Solo la voz

(1968), Maneras de llover (1969) así como las novelas Justicia, Señor

Gobernador (1960, su obra más conocida), Cada día tiene su afán

(1965) y Yo soy (1983).

Murió en San Salvador, el 9 de septiembre de 1985.

En 2005, la VII Semana de la Lectura de El Salvador estuvo dedicada a

su memoria.

ALFREDO ESPINO

fue un poeta salvadoreño. Nació en el Departamento de Ahuachapán, zona occidental de El Salvador, en el año de 1900. hijo de Enriqueta Najarro, maestra por vocación, y Alfonso Espino, poeta, creció en un hogar que respiraba poesía y amor al arte, su hermano Miguel Ángel Espino también creció para volverse artista de la pluma pero en la rama de la prosa.

Ingresó a la Universidad de El Salvador en el año de 1920, inscribiendose en la Jurisprudencia durante su instancia en la Ciudad Universitaria, fue parte de tantas actividades dentro de la misma inclusive de manifestaciones hechas por estudiantes para evitar el alza de los precios de pasaje en tranvía.

Page 15: escritores salvadoreños

Los últimos años de su vida se volvieron muy adversos, la negativa de sus padres para consentir su casamiento con ciertas jóvenes lo condujo a constantes desequilibrios emocionales y amorosos. Para mitigarlos, se entregó a largos ratos de bohemia, en bares y burdeles de la Capital Salvadoreña.

Fue durante una de estas crisis alcohólicas que él mismo puso fin a su vida, en la madrugada del 24 de mayo de 1928 en la ciudad de San Salvador.

Sepultados primero en el Cementerio General capitalino -donde los discursos de estilo corrieron a cargo del doctor y escritor Julio Enrique Ávila y los entonces bachilleres Manuel F. Chavarría y Rafael Vásquez-, desde hace unos años los restos de Espino fueron trasladados a la Cripta de los Poetas, en el camposanto privado Jardines del Recuerdo, al sur de la ciudad de San Salvador.

Su único libro es Jícaras Tristes, recopilación de 96 poemas, publicada postumámente gracias a varios amigos y bajo el visto bueno de Alberto Masferrer, es uno de los libros más editados en su país; su autor es de los más leídos y comentados pero no estudiado o analizado en su expresión.

Tiene una poética delicada, buscó plasmar su terruño con una visión lírica; la que presentó con un estilo sencillo, fácil de captar, por lo tanto, sin complicaciones formales; escribió sonetos, romances y versos libres.

BIOGRAFÍA DE LEÓN SIGÜENZA.

Nació en la ciudad de Cojutepeque,

departamento de Cuscatlán, el 31 de octubre de

1895. Fue el primogénito del hogar del abogado

y escribiente Antonio Sigüenza y Margarita

Mineros. Estudió en Cojutepeque y San Salvador, de donde fue regidor

en (1918) — y alcalde temporal en varias ocasiones. Ocupó una curul en

la Asamblea Legislativa (1933) y fue electo presidente de la comisión de

Relaciones Exteriores, Gracia y Justicia. Vivió mucho tiempo en Estados

Page 16: escritores salvadoreños

Unidos, como secretario del Consulado salvadoreño en Nueva York. De

1927 a 1931 fue cónsul general en Tokio, Japón. Cumplió un segundo

período de 1934 a 1941. También fue corresponsal en Estados Unidos

de "La Prensa" y "Diario El Salvador". Su único libro es "Fábulas" y fue

editado póstumamente por su hermano, Guillermo. Cañas Dinarte

apunta que es considerado el primer fabulista salvadoreño. No alcanzó a

realizar su libro de fábulas, ni novelas orientales y un tratado de

estética, porque la muerte lo sorprendió el 27 de mayo de 1942.

RAÚL CONTRERAS ( Cojutepeque, 3 de mayo de 1896 – Madrid, 2 de diciembre de 1973) fue un poeta, dramaturgo y diplomático salvadoreño. Desde la segunda década del siglo XX obtuvo cargos diplomáticos en los que fungió como enviado extraordinario y ministro en Madrid y París. Debido a la Segunda Guerra Mundial pasó a radicar con su familia en el sur de Francia.

Entre 1947 y 1950 escribió bajo el seudónimo de Lydia Nogales, y sus primeros poemas

aparecieron en La patria de las artes y Tribuna Libre en San Salvador.

Junto a Alberto Guerra Trigueros y Ricardo Trigueros de León fundó la Casa de Cultura de San Salvador. Logró, además, el ingreso como miembro a la Academia Salvadoreña de la Lengua. En los años 1950 fue presidente de la Junta Nacional de Turismo la cual tuvo significativos resultados al construir muchos turicentros y parques populares que

Page 17: escritores salvadoreños

continúan funcionando en la actualidad, entre ellos el Parque Balboa, Los Chorros, Apulo, Hotel de montaña en el cerro verde, etc.

Después de su muerte, sus restos reposan en el rincón de los poetas, en el turicentro los Chorros. David Escobar Galindo describe a Contreras como:

Poeta de fibra romántica que deviene en post-modernista. Cultor excelente del soneto, forma clásica en la que está vertida casi toda su producción poética.

Juan Guzmán Cruchaga, por su parte, expresa:

Gran Poeta, creador de creadores y fabuloso Mago de los jardines…

Obra

Armonías íntimas, poesía, San Salvador, 1919.

La Princesa Está Triste…, pieza teatral en verso, Madrid, 1925.

Poesías Escogidas, poesía, Madrid, 1926.

Presencia de Humo, poesía, San Salvador, 1959.

Margarita del Carmen Brannon Vega, conocida por su pseudónimo Claudia Lars (Armenia, 20 de diciembre de 1899-San Salvador, 22 de julio de 1974), fue una poetisa salvadoreña. Su obra es considerada de un depurado lirismo y dominio de la métrica.[1]Sus padres fueron el irlandés Peter Patrick Brannon y la salvadoreña Carmen Vega Zelayandía. Durante su infacia fue amiga de Consuelo Suncín, futura esposa de Antoine de Saint-Exupéry. Inició su educación en su propio hogar y posteriormente estudió en el Colegio La Asunción de la ciudad de

Santa Ana. En su adolescencia, y gracias al general Juan José Cañas, logró que un cuadernillo de poemas de su autoría fuera publicado con el nombre Tristes mirajes. Asimismo, inició una relación sentimental con el poeta nicaragüense Salomón de la Selva en 1919, pero sus padres rompieron la relación[2] y mandaron a la joven hacia Estados Unidos donde conoció a Leroy Beers, su primer esposo. En este país enseñó

Page 18: escritores salvadoreños

castellano en la Escuela Berlitz de Brooklyn.Brannon regresó a El Salvador junto a su esposo en 1927, al haber sido nombrado cónsul de Estados Unidos, y ese mismo año dio a luz a su único hijo Leroy Beers Brannon. Al mismo tiempo, departió con los intelectuales de la época, entre ellos Salarrué, Alberto Guerra Trigueros, Serafín Quiteño y Alberto Masferrer. En 1933 comenzó a usar el pseudónimo Claudia Lars.[3]

Publicó el libro Estrellas en el Pozo en 1934 y también participó en programas líricos radiofónicos para público infantil. De igual manera, colaboró en la Página de los niños de El Diario de Hoy. Por otro lado, en este tiempo se le atribuye haber iniciado un afecto por el escritor Salarrué, el cual no prosperó por los compromisos familiares de este último.[3]

A inicios de la siguiente década, Claudia Lars obtuvo el segundo lugar de los Juegos Florales de la Feria Novembrina en Guatemala, realizado en 1941, gracias a su obra Sonetos del arcángel. También serían publicadas algunas de sus creaciones como La casa de vidrio (Santiago de Chile, 1942), Romances de Norte y Sur (1946), Sonetos y Ciudad bajo mi voz (1947), ganadora del certamen conmemorativo del IV Centenario del título de Ciudad de San Salvador. En estos años, Lars, como agregada cultural de la embajada de El Salvador, partió hacia Guatemala en 1948 donde conoció a su segundo esposo Carlos Samayoa Chinchilla, de quien se divorciaría en 1967. Sin embargo, antes de contraer nupcias, sobrellevó una vida agitada en la que trabajó empacando duraznos en Estados Unidos, traduciendo historietas para Walt Disney y colaborando para periódicos antifascistas salvadoreños.

JULIO CORTÁZAR

fue un escritor, traductor e intelectual argentino. Nació con el nombre de Jules Florencio Cortázar en Bruselas (Bélgica) el 26 de agosto de 1914 y falleció en París (Francia) el 12 de febrero de 1984.

Se le considera uno de los autores más innovadores y originales de su tiempo, maestro del relato corto, la prosa poética y la narración breve en general, comparable a Jorge Luis Borges, Antón Chéjov o Edgar Allan Poe, y creador de importantes novelas que inauguraron una nueva forma de hacer literatura en Latinoamérica, rompiendo los moldes clásicos mediante narraciones que escapan de la linealidad temporal y donde los personajes adquieren una autonomía y una profundidad psicológica pocas veces vista hasta entonces.

Page 19: escritores salvadoreños

Vivió buena parte de su vida en París, ciudad en la que se estableció en 1951, en la que ambientó algunas de sus obras, y donde finalmente murió. En 1981 se le otorgó la ciudadanía francesa. Cortázar también vivió en Argentina y Suiza

Cortázar nació en la embajada de Argentina en Bélgica, en Ixelles, distrito de Bruselas, el 26 de agosto de 1914, hijo de Julio Cortázar y María Herminia Scott. Más adelante en su vida declararía: «Mi nacimiento [en Bruselas] fue un producto del turismo y la diplomacia». En ese entonces Bruselas estaba ocupada por los alemanes.

Siempre se afirmó cierta relación de su padre con el cuerpo diplomático argentino. Sus padres, María Herminia Descotte y Julio José Cortázar, eran argentinos. Hacia fines de la Primera Guerra Mundial, los Cortázar lograron pasar a Suiza gracias a la condición alemana de la abuela materna de Julio, y de allí, poco tiempo más tarde a Barcelona, donde vivieron año y medio. Jugó con frecuencia en el Parque Güell con otros niños. A los cuatro años volvieron a Argentina y pasó el resto de su infancia en Banfield, en el sur del Gran Buenos Aires, junto a su madre, una tía y Ofelia, su única hermana (un año menor que él). Vivió en una casa con fondo (Los Venenos, Deshoras, están basados en sus recuerdos infantiles), pero no fue totalmente feliz. «Mucha servidumbre, excesiva sensibilidad, una tristeza frecuente» (Carta a Graciela M. de Sola, París, 4 de noviembre de 1963). Conoció, gracias a su madre, al escritor a quien admiraría por el resto de su vida: Julio Verne.

A pesar de ser reconocido por su narrativa, escribió gran cantidad de poemas en prosa (en libros mixtos como Historias de cronopios y de famas, Un tal lucas, Último round); e incluso poemas en verso (Presencia, Pameos y meopas, Salvo el crepúsculo). Colaboró en muchas publicaciones en distintos países, grabó sus poemas y cuentos, escribió letras de tangos (por ejemplo con el Tata Cedrón) y le puso textos a libros de fotografías e historietas.

JORGE FRANCISCO ISIDORO LUIS BORGES

(Buenos Aires, 24 de agosto de 1899 – Ginebra, 14 de junio de 1986) fue un escritor argentino, uno de los autores más destacados de la literatura del siglo XX en este país. Publicó ensayos breves, cuentos y poemas. Su obra, fundamental en la literatura y en el pensamiento humano, ha sido objeto de minuciosos análisis y de múltiples interpretaciones, trasciende cualquier clasificación y excluye cualquier tipo de dogmatismo.1Se lo ha presentado como uno de los eruditos más grandes del siglo XX, lo cual no impide que la lectura de sus escritos suscite momentos de viva emoción o de simple distracción. Ontologías fantásticas, genealogías sincrónicas, gramáticas utópicas, geografías novelescas, múltiples historias universales, bestiarios lógicos, silogismos ornitológicos,

Page 20: escritores salvadoreños

éticas narrativas, matemáticas imaginarias, thrillers teológicos, nostálgicas geometrías y recuerdos inventados son parte del inmenso paisaje que las obras de Borges ofrece tanto a los estudiosos como al lector casual. Y sobre todas las cosas, la filosofía, concebida como perplejidad, el pensamiento como conjetura, y la poesía, la forma suprema de la racionalidad. Siendo un literato puro pero, paradójicamente, preferido por los semióticos, matemáticos, filólogos, filósofos y mitólogos, Borges ofrece -a través de la perfección de su lenguaje, de sus conocimientos, del universalismo de sus ideas, de la originalidad de sus ficciones y de la belleza de su poesía- una obra que hace honor a la lengua española y la mente universal.2Ciego a los 55 años, personaje polémico, con postura políticas que le impidieron ganar el Premio Nobel de Literatura al que fue candidato durante casi treinta años, Borges siempre soñó con que la posteridad le perdonara sus errores y le concediera la gloria de que se lo recordase por sus mejores textos.Borges consideraba que había heredado dos tradiciones de sus antepasados: una militar y otra literaria. Su árbol genealógico lo entronca con ilustres familias argentinas de estirpe criolla y anglosajona, como también portuguesa. Desciende de varios militares que tomaron parte activa en la Independencia Argentina, como Francisco Narciso de Laprida, que presidió el Congreso de Tucumán y firmó el Acta de la Independencia; Francisco Borges Lafinur -su abuelo paterno- fue un coronel uruguayo; Edward Young Haslam -su bisabuelo paterno- fue un poeta romántico que editó uno de los primeros periódicos ingleses del Río de Plata, el Southern Cross; Manuel Isidoro Suárez -su bisabuelo materno- fue un coronel que luchó en las guerras de la Independencia; Juan Crisóstomo Lafinur -su tío abuelo paterno- fue un poeta argentino autor de composiciones románticas y patrióticas y profesor de Filosofía; Isidoro de Acevedo Laprida -su abuelo materno- fue un militar que luchó contra Juan Manuel de Rosas.4Su padre, Jorge Guillermo Borges, fue un abogado argentino, nacido en la provincia de Entre Ríos, que se dedicó a impartir clases de psicología. Era un ávido lector y tenía aspiraciones literarias que concretó en una novela, El caudillo, y algunos poemas; además tradujo a Omar Jayyam de la versión inglesa de Edward Fitzgerald. Para 1970, Jorge Luis Borges recordaba con estas palabras a su padre: «El me reveló el poder de la poesía: el hecho de que las palabras sean no sólo un medio de comunicación sino símbolos mágicos y música».5 Su madre, Leonor Acevedo Suárez, era uruguaya. Aprendió inglés de su marido y tradujo varias obras de esa lengua al español. La familia de su padre tenía orígenes españoles, portugueses e ingleses; la de su madre, españoles y posiblemente portugueses.

ROQUE DALTON GARCÍA

 (San Salvador, 14 de mayo de 1935 - 10 de mayo de 1975) fue un poeta, novelista, y ensayista salvadoreño.

Hijo del inmigrante estadounidense Winnall Dalton, quien estaba casado con Aída Ulloa, y de la enfermera salvadoreña María Josefa García, Roque Dalton fue educado con los jesuitas en el Colegio Externado de

Page 21: escritores salvadoreños

San José. Viajó a Santiago de Chile en 1953, para estudiar Derecho, aunque volvió a San Salvador a continuar sus estudios. En 1957, con otros estudiantes salvadoreños, visitó la URSS para participar en el Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes por la Paz y la Amistad. Durante el cual conoció a intelectuales y políticos que luego cobrarían relevancia en el contexto internacional, como el revolucionario nicaragüenseCarlos Fonseca, fundador del FSLN, el poeta guatemalteco que ganaría el Premio Nobel años más tarde, Miguel Ángel Asturias, el poeta argentino Juan Gelman y el poeta turco Nazim Hikmet.

Fundó el Círculo Literario Universitario (1956) junto con el poeta guatemalteco exiliado en El Salvador Otto René Castillo. En esta iniciativa participaron otros poetas salvadoreños contemporáneos, como Manlio Argueta, José Roberto Cea y Tirso Canales. Dalton es considerado una de las voces más influyentes de la Generación Comprometida.Encarcelado en 1960, fue liberado en octubre de ese año, al ser derrocado el presidente José María Lemus. Roque Dalton recorrió el mundo, viajó a países como la Unión Soviética y Corea del Norte, y vivió temporadas largas en México, Checoslovaquia y en Cuba.Roque Dalton tiene en su honor haber continuado en el país la estirpe de poetas como Oswaldo Escobar Velado y Pedro Geoffroy Rivas, quienes impulsaron años antes una literatura de denuncia, que describía con cruda realidad la situación económica y social sin dejar escondido nada y sin ser amable con los culpables de la situación.

Obras: La ventana en el rostro (1962), El turno del ofendido (México, 1964), Miguel Mármol (Costa Rica, 1972), Pobrecito poeta que era yo...(Costa Rica, 1975), Monografía sobre El Salvador (La Habana, ?), Taberna y otros lugares (Premio Casa de las Américas 1969), Poemas clandestinos (El Salvador, 1975), Historias prohibidas del pulgarcito (México, 1975), Un libro rojo para Lenin (póstumo; Managua, 198?).Es el creador de la pieza poética Poema de amor, donde presenta en forma mordaz ciertos rasgos de identidad de los salvadoreños.

RAFAEL GÓCHEZ SOSA

Page 22: escritores salvadoreños

Rafael Góchez Sosa (Santa Tecla, 23 de diciembre de 1927 – 16 de diciembre de 1986) fue un poeta y docente salvadoreño.

En su juventud Góchez logró ser titulado como contador, y fungió además como maestro de educación media en la especialidad de estética y letras. A finales de la década de los años 1940 partió a Honduras a trabajar en las bananeras de este país, como un trabajador más. De regreso a El Salvador se dedicó a la docencia y al periodismo, además de contraer nupcias en 1957. El siguiente año fundó el Liceo Tecleño.

Su primer éxito en el ámbito poético fue en los Juegos florales de Sonsonate en 1959, formando parte en ese tiempo de la llamada “Generación comprometida”. Ganó otros concursos, entre ellos los Juegos florales de Quezaltenango con los trabajos Desde la Sombra y Los Regresos en 1967 y 1970, respectivamente. Otro de sus logros fue el haber ganado la II Bienal Latinoamericana de poesía en Panamá en 1972.

Obra

Luna Nueva, poesía, San Salvador, 1962. Poemas Circulares, poesía, San Salvador, 1964. Voces del Silencio, poesía, San Salvador, 1967. Poemas para leer sin Música, poesía, México, 1971.

Cien Años de Poesía Salvadoreña: 1800-1900 con Tirso Canales,

crítica histórico–literaria, San Salvador, 1978.