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El buque mercante. Un análisis sociológico 144 ver (1) 127 4 Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 4.1 La relación del tripulante con la sociedad en general Una de las características que definen el concepto de institución total es el aislamiento que, durante 127 un período de tiempo apreciable, sufren sus miembros. No se trata tanto del tiempo en sí que dure el aislamiento, sino del hecho de pertenecer a una institución total, lo cual limita la libertad de la persona, en el sentido de que no puede abandonarla cuando desea, sino que está obligada a permanecer en ella, sin distinción entre horas de trabajo y horas de descanso. De hecho, al ingresar, la persona sabe que renuncia a una parcela importante de su libertad mientras dure su estancia allí. Esta característica conlleva una separación obligada del mundo exterior. Al mismo tiempo, como esta separación es una consecuencia necesaria pero no deseada, el interno buscará el medio de mantener el mayor contacto posible con ese mundo exterior. En la institución buque mercante, en el momento de embarcar, el marino renuncia a ver a su familia durante un tiempo y no sólo eso, sino que sabe que deberá permanecer más o menos alejado de la realidad cotidiana de su pueblo, de su país y, en cierto modo, del mundo en general. El estar alejado no sólo significa una dificultad para recibir información, sino además un ir perdiendo de alguna manera el interés por los acaecimientos cotidianos de lo que le queda lejos. Con ello el aislamiento aumenta de tal manera que el marino, a lo largo de los años de navegación, va desarrollando una vivencia propia de un mundo que no es precisamente el de la gente de tierra. Esto se alivia bastante en el caso de los marinos que gozan de frecuentes vacaciones, aunque, por el tipo de vida que llevan, sigue produciéndose una cierta pérdida de interés por aquellas cosas que él vive de una manera distinta.

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  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico144

    ver (1)127

    4 Las relaciones del tripulante con el mundo exterior

    4.1 La relacin del tripulante con la sociedad en general

    Una de las caractersticas que definen el concepto de institucin total es el aislamiento que, durante127

    un perodo de tiempo apreciable, sufren sus miembros.

    No se trata tanto del tiempo en s que dure el aislamiento, sino del hecho de pertenecer a unainstitucin total, lo cual limita la libertad de la persona, en el sentido de que no puede abandonarlacuando desea, sino que est obligada a permanecer en ella, sin distincin entre horas de trabajo y horasde descanso.

    De hecho, al ingresar, la persona sabe que renuncia a una parcela importante de su libertad mientrasdure su estancia all. Esta caracterstica conlleva una separacin obligada del mundo exterior. Almismo tiempo, como esta separacin es una consecuencia necesaria pero no deseada, el internobuscar el medio de mantener el mayor contacto posible con ese mundo exterior.

    En la institucin buque mercante, en el momento de embarcar, el marino renuncia a ver a su familiadurante un tiempo y no slo eso, sino que sabe que deber permanecer ms o menos alejado de larealidad cotidiana de su pueblo, de su pas y, en cierto modo, del mundo en general.

    El estar alejado no slo significa una dificultad para recibir informacin, sino adems un ir perdiendode alguna manera el inters por los acaecimientos cotidianos de lo que le queda lejos. Con ello elaislamiento aumenta de tal manera que el marino, a lo largo de los aos de navegacin, vadesarrollando una vivencia propia de un mundo que no es precisamente el de la gente de tierra. Estose alivia bastante en el caso de los marinos que gozan de frecuentes vacaciones, aunque, por el tipode vida que llevan, sigue producindose una cierta prdida de inters por aquellas cosas que l vivede una manera distinta.

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    BANKSTON, W.B.; FLOYD, H.H.; FORSYTH, C.J. Toward a generalmodel of the process of radical 128 conversion: an interactionist perspective on the transformation of self-identity. Lousiana, 1981

    IRWIN, J. The Felon. New Jersey, 1970129

    HANNA, C.F. Complaint as a form of association. Lousiana, 1981130

    Forsyth, C.J.; Bankston, W.B. The socio psychological consequence of life at sea: a cause model. Hants, 1984131

    4.1.1 Identidad social del marino

    El marino tiene una visin social de s mismo realmente peculiar. As lo refleja, por ejemplo, estafrase conocida entre los marinos espaoles: "En el mundo hay tres clases de seres: los vivos, losmuertos y los marinos."

    Bankston expone que los marinos pueden agruparse en dos tipos. En primer lugar, se encuentran128

    aqullos que viven en una actitud ausente. Mantienen una orientacin hacia el mundo exterior, haciatierra. Este tipo de marinos, se muestran encerrados en s mismos, hablan poco, leen mucho, eludendificultades, no son voluntarios para nada, rara vez se emborrachan, visten mejor que los dems ymanejan su dinero con ms control. Como dice Irwin , este tipo de marino "saca el mximo provecho129

    de la situacin, se adapta a las privaciones y mantiene una mayor vinculacin con el mundo exterior."

    Estos marinos se ven favorecidos por la naturaleza annima de la vida de mar. Sin embargo, lascircunstancias de aislamiento comn y la necesidad de un mutuo apoyo dan pie a un segundo tipo demarino, que es el que intenta organizar un nuevo mundo entre los mamparos del barco. Esto afectarla identidad del marino que ver como su conexin con tierra se va erosionando. Sin embargo, comodice Hanna , "el marino, a medida que va construyendo su estructura propia a bordo, desarrolla un130

    rechazo hacia ella, dado que no hacerlo sera reconocer que ya no est integrado en el mundoconvencional. Entonces busca criticar incluso aquello que tal vez le gusta."

    As, le gustar recalcar que l presta un gran servicio a la sociedad y que sta le da la espalda, que siencontrara un buen trabajo en tierra no dudara en desembarcar. Que no quiere que sus hijos sigan suprofesin.

    Se dan socialmente una mezcla de actitudes entre orgullo profesional y menosprecio por la gente detierra que vive tranquilamente y no sabe lo dura que es la mar, y un cierto complejo de inferioridad,cuando se da cuenta de que vive en otro mundo y que en tierra se siente que no es nadie.

    Por otra parte, como dicen Forsyth y Bankston , "la cualidad efmera de las relaciones interpersona-131

    les generan una identidad problemtica en el marino. El marino manifiesta continuamente sudesagrado por los barcos. A pesar de ello, la vida a bordo se convierte en ms deseable que la vidaen el exterior. A bordo, el marino suele tener un cierto confort y se siente seguro de su posicin". Sehace referencia aqu a esa frecuente contradiccin entre lo que el marino proclama y lo que en realidad

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    muchas veces siente. Y ello no es fruto de un querer incurrir en engao, sino de la colisin entre untpico -no carente de fundamento- de que la vida en la mar no es para las personas y con laconstatacin de que est tan hecho a esa vida que en el fondo se siente identificado con ella.

    En cuanto a las relaciones interpersonales, vienen marcadas inicialmente por una circunstanciaprofesional y una estructura jerrquica que, por de pronto, como ya se ha comentado, al hablar de latripulacin de un barco, condicionan ya mucho esas relaciones. Por otra parte, incluso con aqulloscon los que se tiene un contacto ms estrecho, surgir el problema de que se encuentran compartiendono slo el tiempo de trabajo, sino tambin parte del tiempo libre.

    Si a bordo coinciden personas que sintonizan en trminos generales, no ser difcil extender la relacinprofesional hacia una amistad. Sin embargo, cuando no se d esa sintona, o exista incluso unantagonismo, el marino deber elegir entre encerrarse en s mismo y vivir solo sus ratos libres, omantener una relacin de pacto tcito para superar la soledad, aunque sea de manera superficial.

    4.1.2 La informacin

    El marino en alta mar est muy aislado de lo que ocurre a su alrededor. A travs de la radiotelegrafase podr enterar de las noticias ms importantes a nivel internacional, pero el resto, las pequeasnoticias cotidianas, no le llegan.

    Por este motivo, los marinos suelen ser aficionados a la radio (la televisin no se ve en cuanto el barcose aleja unas millas de la costa). Es habitual que de los portillos de los camarotes, asomen cableselctricos, que se enganchan a cualquier elemento de la cubierta para hacer de antena. Los marinosbuscan aparatos de radio con onda corta. En las ciudades no es habitual encontrarlos, pero s cerca delos muelles y en puertos como los de las Islas Canarias, en que se aprovecha cualquier escala parahacer compras, entre otras cosas, radios, casetes, etc.

    A travs de la onda corta se puede escuchar desde el medio del Atlntico Radio Nacional de Espaa,especialmente a las horas de las noticias, as como los programas deportivos - para enterarse de lospartidos de ftbol del domingo - o emisiones especiales como Espaoles en la mar.

    Cuando un barco hace cabotaje por su pas, el marino puede comprar en cada escala el peridico, nohay problemas para recibir emisoras de radio locales e incluso la televisin. Sin embargo, navegandopor puertos extranjeros, apenas se leen peridicos. Las noticias importantes, como he dicho, ya lleganpor radio, y las otras son de inters ms bien local, aparte de las barreras idiomticas. De esta manera,cuando regresa un marino despus de varios meses fuera de su pas, el hecho de no haber estado alcorriente de los sucesos cotidianos, aumenta esa sensacin de extraeza, comentada en el apartado 4.5.

    De hecho, las noticias que ms interesan son las que llegan de casa y las de la naviera, pues estasltimas se refieren a los viajes a realizar, a los relevos, a la fecha de reparacin, etc.

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    Dentro del apartado de la informacin, entra tambin el correo. Para el marino, la llegada a puertose identifica con el esperar recibir cartas. Esto, aparte de la relevancia que tiene en lo que a surelacin con la familia se refiere y que se comenta ms adelante, es tambin una fuente de informacinimportante. No ser la noticia importante de la radio, sino la noticia pequea, particular del mbitofamiliar o del barrio o lugar en donde vive. Esas noticias, que para otra persona no significarn nada,para la persona que las recibe representa nada ms y nada menos que ir siguiendo la evolucin de losacaecimientos en lo que ella considera es su mundo y a donde dirige su pensamiento para sentir asque sigue formando parte de todo ello.

    4.1.3 Participacin social y poltica: asociacionismo y sindicalismo

    Uno de los mltiples problemas que el marino tiene para evitar su sensacin de marginado es ladificultad de participar de la vida social y poltica de su ciudad, de su pas.

    Esa posible participacin queda ya frustrada en el caso de viajes largos, especialmente por pasesextranjeros. La falta de la debida informacin a que en el apartado anterior se ha aludido, as comola dificultad en apreciar una noticia cuando se est lejos del lugar y de la circunstancia en que sucede,impide frecuentemente esa participacin.

    Hoy da, en que las noticias son viejas de un da para otro, es muy difcil conseguir su asimilacin,cuando ya han pasado.

    A nivel poltico, existen medios para participar a distancia de unas elecciones, a travs del voto porcorreo. Sin embargo, hay que tener mucho empeo en votar a alguien para que una persona que pasasemanas lejos de su pas prevea las medidas oportunas para poder enviar su voto del modo y en eltiempo legalmente sealados.

    Por este mismo motivo, es difcil para el marino formar asociaciones y cuando stas existen suelenser tener ms aceptacin entre los marinos de tierra, que entre los que navegan. Esto tiene susexplicaciones:

    En primer lugar, pertenecer a una asociacin, con la que no se puede mantener habitualmente uncontacto personal, no resulta interesante.

    En segundo lugar, cuando el marino est en casa de vacaciones, normalmente lo que ms desea esolvidarse de todo lo que suene a barco.

    En tercer lugar, hay una desconfianza innata por parte de los que navegan hacia los marinos que sehan quedado en tierra.

    Esto hace que las asociaciones de tipo cultural, recreativo o de amistad, sean aceptadas bsicamentepor los que ya no navegan. Tenemos, sin embargo, otro tipo de asociaciones que son las que persiguen

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    unos objetivos profesionales.

    En este grupo hay que considerar, de una parte, los colegios profesionales, como el Colegio deOficiales de la Marina Mercante Espaola -COMME-, que para poder crecer tuvo que conseguir lacolegiacin obligatoria para los marinos espaoles que navegan en navieras espaolas y, de otra, lossindicatos.

    A nivel internacional, destaca la International Transport Federation (ITF). En Espaa podemos citarUGT-Marina Mercante, que representa a ITF y el Sindicato Libre de la Marina Mercante (SLMM),que actualmente est unido a Comisiones Obreras.

    Hay que decir que el SLMM naci en los ltimos aos del franquismo, en la clandestinidad, arropadopor el Apostolado del Mar.

    La iniciativa sindical correspondi tambin a marinos que, desde tierra, se movieron para coordinaresfuerzos. Su protagonismo a la hora de negociar convenios con las empresas navieras y laconvocatoria de una serie de huelgas les dieron el impulso necesario para conseguir mover a losmarinos embarcados de su recelo y escepticismo inicial.

    Con todo, fuera de las navieras importantes, que cuentan con representantes sindicales, en navieraspequeas y especialmente para aquellos marinos que navegan en el extranjero, el estar semanas omeses por esos mares sigue siendo un obstculo para cualquier iniciativa de unin.

    4.2 El barco en puerto

    Cuando una persona llega a un pas, a una ciudad, aunque sea por motivos de trabajo, incluso estandode paso, se instala en un hotel, residencia o domicilio particular. Esta persona, aunque forme partede un grupo que ha dejado atrs, ha penetrado en una nueva sociedad, y a pesar que haya tenido talvez que someterse previamente a unos controles de aduana e inmigracin, una vez dentro puedemoverse como un ciudadano ms.

    La propia tripulacin de un avin, cuando descansa en una ciudad, es llevada a un hotel y hasta quetengan que volver a volar, durante el tiempo de estancia en ese lugar podrn ir a donde deseen orecibir en su habitacin de hotel a quien quieran.

    Cuando un barco llega a puerto, la tripulacin no inicia un perodo de descanso, sino que sigue enplena actividad, atendiendo las tareas que segn su cargo a bordo, les corresponda desempear durantela carga o descarga.

    Por otra parte, un puerto es siempre una zona fronteriza y, por tanto, sujeta a controles. Si es en unpas extranjero, el marino slo podr salir a tierra con un pase que le habrn dado.

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    DORIOL, R. Informe de un sacerdote obrero jesuita sobre su vida con los marinos. Pars, 1991132

    La conexin fsica entre el barco y la ciudad que lo acoge es el portaln, una escala o una simpleplancha, en uno de cuyos extremos frecuentemente habr un vigilante o polica, que controlar lasentradas y salidas del barco.

    La expresin "salir a tierra", tan propia de la gente de mar, refleja que el marino, aunque su barco esten puerto, mientras est a bordo no est en tierra y que, por tanto, cada vez que quiere acceder almundo que rodea los muelles, tiene que salir de su mundo, de su madriguera, de su barco.

    Hay que tener en cuenta tambin, que los muelles estn muchas veces alejados de la ciudad y que enestos casos hay que caminar bastante y no sin peligro pues, al atardecer, caminar por esos muelles,en los que hay contenedores, vagones de tren y carga amontonada, inspira siempre el recelo de sufrirun asalto.

    Roland Doriol escribe: "La primera escala en Japn es en el muelle de madera de Nagoya... despus132

    de haber pasado la verja del puerto, andamos haciendo auto-stop por la carretera general. Pero elgesto casi universal de levantar el pulgar para hacer auto-stop no vale aqu y nos vemos obligados aandar ocho kilmetros para encontrar una fonda..."

    Caminar 8 kilmetros por una carretera que lleva de un muelle a la ciudad, aparte del cansancio,implica sentirse un paria.

    Al margen de la comprensin o no del signo de hacer auto-stop, mucha gente tendr miedo de pararsey recoger a unas personas extraas, con aspecto de venir de lejos, pensando que a lo mejor losdesvalijan.

    Una vez en la ciudad, con bastante aspecto de despistados, los marinos suelen recorrer calles y calles,con ganas de disfrutar de unas horas lejos del barco.

    Cuando haya transcurrido el tiempo disponible para la salida debern regresar a bordo y, nuevamente,el portaln, un paso estrecho, significar dejar la ciudad y volver a integrarse a la rutina del barco.De hecho, el regreso a bordo, sobre todo cuando uno se encuentra en un pas extranjero y si a bordoest ms o menos adaptado, representa como un volver al hogar. Es el propio punto de referencia, elespacio donde uno se siente seguro, donde sabe quin es y cul es su rol.

    En un barco no es fcil recibir visitas. Normalmente, si no es con un permiso especial de la autoridadcompetente en ese mbito, no se puede acceder a los muelles y, en muchos casos, el acceso a bordode personas ajenas no autorizadas es imposible.

    Aunque un barco mercante no goza de extraterritorialidad y por tanto est afecto a las normas penalesdel pas en que se encuentra, se observa un respeto por su organizacin interna y, si no es por un

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    asunto delictivo o de competencia policial en general, nadie puede entrar a bordo sin previo permisodel capitn.

    El tripulante, durante las horas de trabajo a bordo, suele fijarse en la ciudad que lo circunda. Si esanochecido, las luces dan una especial sensacin de vida, de movimiento. Se ve como un mundoseparado del propio y en el que el tripulante intentar sumergirse durante unas horas, pero sin perderen todo instante esa identidad que le otorga el ser miembro de un tripulacin.

    Por otra parte, el hecho ya citado de que un puerto es una zona de frontera, hace que el marino se veasometido a un control aduanero muy estrecho. Cada vez que sale a tierra, deber pasar ante un puestode vigilancia en donde le pueden hacer mostrar los objetos que lleve en las manos o incluso dejarsecachear. Como, por otra parte, los puertos han sido y son zonas por las que habitualmente se cuelacontrabando y, hoy da, droga, todo marino es en principio sospechoso.

    El barco, cuando llega a puerto, lo hace con la misin de realizar las operaciones de carga o descargade mercancas o embarque y desembarque de pasajeros lo ms rpido posible. No se entra nunca enla consideracin de lo que pueda ser ms deseable por parte de la tripulacin. As, un barco puedeatracar a las 6 de la maana a un muelle, lejos de la ciudad, ponerse a trabajar y ocho horas despus,hacerse de nuevo a la mar. Teniendo en cuenta, en este caso, el trabajo de la tripulacin en puerto ylo lejos que queda la ciudad, es muy posible que nadie o casi nadie salga a tierra.

    Hoy da, muchos barcos estn slo horas en puerto y sin que los tripulantes tengan apenas posibilidadde pisar tierra. Si se trata de grandes petroleros, ocurre que normalmente atracan en pantalanes, o amarran a boyas,lejos de cualquier ciudad, sin posibilidades de ir a tierra. Los petroleros que van al Golfo Prsico aSiria o al Lbano, por citar algunos lugares, no ven tierra ms que a travs de los prismticos y lanica satisfaccin que tendrn ser el hecho de recibir y enviar alguna carta a travs del consignatario.

    4.2.1 La relacin del marino con las personas que vienen a bordo

    En los barcos suele decirse que la gente de tierra, cuando sube a bordo, slo busca dar trabajo obeneficiarse en algo.

    Lo primero es porque los agentes del barco o de la carga y tambin las autoridades, vienen a todashoras, sin consideracin por las horas de comidas de los barcos, y dan todas las instrucciones queconsideran oportunas.

    En segundo lugar, porque muchos de los que suben a bordo, esperan llevarse en la cartera o bajo lagabardina una botella de whisky, un cartn de tabaco, o ambas cosas.

    La relacin del marino con la gente de tierra que viene a bordo no es una relacin abierta, quefavorezca el encuentro persona-persona, sino ms bien una relacin laboral, comercial o burocrtica.

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    ver (132)133

    En algunos puertos, y sobre todo en caso de barreras idiomticas, apenas habr interrelacin. En elmismo escrito antes citado, Doriol , cuenta:"En Yokohama y en Kobe... se carga el barco sin133

    ninguna conversacin innecesaria entre los japoneses y los oficiales indios de cubierta, a quienesignoran puntualmente. Los japoneses no tienen nada que pedir, ni esperan nada... Hay pequeosintercambios entre los marineros y los vendedores de baratijas y aparatos elctricos..."

    Los estibadores y dems personal suelen hablar slo con su capataz, mientras que ser ste el que seentienda con los oficiales del barco.

    La subida a bordo de vendedores ambulantes es todo un acontecimiento. Suelen montar su escaparateen un comedor del barco y ofrecen toda clase de souvenirs y otros artculos atractivos. Es un alicientepara la tripulacin aunque slo sea porque se divierte viendo lo que le ofrecen. La mayor parte deestos vendedores cuenta ya con el regateo, que se convierte as en un aliciente ms de la compra. Elque adquiere algo, despus de un largo regateo, se vuelve muy contento al camarote, pensando no sloque ha hecho una buena compra, sino tambin sintindose orgulloso de como ha mostrado a suscompaeros el arte del regateo.

    En algunos pases de frica viene una avalancha de personas a bordo. Como dice Doriol, "se necesitala maa para distinguir a los verdaderos guardias de seguridad y verdaderos trabajadores portuariosen medio del enjambre de los visitantes de ocasin que venden frutas y recuerdos".

    La actitud cambiante de los propios tripulantes, segn el pas, es una explcita manifestacin deactitudes instintivamente racistas, o cuanto menos comparativas.

    As es destacable la diferente actitud de un marino espaol en un puerto de frica y en un puerto delnorte de Europa. En el primer caso, se dirigir a los portuarios y a la gente que se mueve por losmuelles de t y con un aire de superioridad instintivo. En el segundo caso, su actitud ser respetuosay muchas veces reflejar un complejo de inferioridad.

    Dentro de las personas que suben a bordo, forman una excepcin los llamados visitadores de barcos,de los centros de Apostolado del Mar y similares, que van a los barcos a llevar informacin sobre lasactividades que realizan, a invitar a los tripulantes a participar de ellas, a ofrecer material cultural yreligioso, a facilitar el transporte de los marinos del barco a los centros de asistencia, o simplementea charlar e interesarse por los posibles problemas de la gente a bordo. Estas visitas se producen enmuchos puertos de todo el mundo y suelen ser bien acogidas por los marinos, entre otras cosas porquelo que ofrecen es gratuito y desinteresado.

    La visita del consignatario del barco, o agente representante del armador, es acogida con expectacin,pues es el que trae el correo, el dinero y las noticias sobre cunto tiempo se estima que durar la cargao descarga, as como noticias sobre el prximo viaje.

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico152

    HEALEY, J.C. Foc'sle and Glory Hole: A study of merchant marine and his occupation. Nueva York, 1936134

    Si el barco est en su puerto base o en otro puerto no muy lejano, es probable la visita de personaldirectivo del armador, ante cuya presencia todo el mundo sentir de alguna manera la presinpsicolgica que genera la visita del dueo.

    4.2.2 La relacin del marino con la poblacin de los puertos: comunicacin y diversin

    Para el marino la llegada a puerto, siempre y cuando vaya a estar el tiempo suficiente para salir atierra, es una fiesta. Significa romper la monotona, conocer algo nuevo, comunicarse con casa,divertirse.

    Dentro de la diversin, al igual que ocurre a la poblacin de tierra, lo frvolo atrae porque proporcionauna satisfaccin fcil e inmediata, mientras que cualquier actividad humanamente ms enriquecedora,como puede ser una visita cultural o intentar conocer un poco en serio a la gente de un lugar, siempreresulta ms difcil y requiere un esfuerzo.

    De hecho, la circunstancia de que el marino no gaste dinero en la mar y de que reciba un dinero alllegar a puerto hace que, antes de llegar, piense en lo que har y, cuando llega, procure sacar partidoa esa situacin de rico por unos das.

    Es comn que el marino acostumbre a coger taxis y guste de cenar fuera del barco. En los puertos,en las calles de alrededor, el marino encontrar locales con luces de colores, en los cuales podr tomaralgunas copas con los amigos y, si lo desea, podr tambin gozar de compaa femenina que le estesperando.

    Dice J.C. Healey "El marino en puertos lejanos est amparado por el velo del anonimato. Esta134

    circunstancia, junto con el deseo de una satisfaccin sexual, tiene que afectar a la reaccin fsica ypsicolgica del marino hacia su hogar."

    Por supuesto que, como en tierra, hay gente frvola, sin problemas morales o ticos, y hay gente quebusca vivir en congruencia con unos valores. Un gran nmero de marinos pertenece a este ltimogrupo, y a todos los que de una u otra manera buscamos reivindicar socialmente la figura del marino,tan deformada por novelas y leyendas, nos disgusta unir a esta profesin con la conocida frase "encada puerto, un amor".

    Sin embargo, esta actitud, no implica olvidar la importancia sociolgica que en los puertos tiene laprostitucin. Healey tiene razn al hacer referencia a dos aspectos importantes: el deseo instintivo yel anonimato. A esto cabe unir el factor facilidad. Para un marino, para toda persona que llega a unlugar extrao, sin tener ningn vnculo personal con sus habitantes, es muy difcil iniciar una relacinde amistad, o de simple comunicacin humana, con la gente de un puerto, que le permita por unashoras ampliar el crculo humano en el que se mueve cotidianamente a bordo.

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 153

    ver apartado 2.3.1135

    Para el marino, el acudir a un local nocturno, aunque slo se limite a tomar unas copas y hablar unrato con una mujer, es una manera de comunicacin fcil y que, adems, carecer de cualquier otraimplicacin. Por supuesto que las circunstancias y el impulso instintivo le pueden conducir a algo ms,amparado en el anonimato.

    Otra caracterstica de esta circunstancia es el atractivo que ofrece la bebida alcohlica como mediode alcanzar rpidamente una sensacin divertida y desinhibida. Muchos son los marinos que en tierrabeben ms de la cuenta, como una forma ms de entrar fcil y rpidamente en una situacin de pasarlo bien.

    Aflora aqu el importante papel de la necesidad intrnsecamente humana de la comunicacin, que tienetodo marino como ser humano. Hay muchos estudios psicolgicos y sociolgicos en torno al papel quedesempean el alcohol y la prostitucin como sucedneos de una relacin humana que ayude alhombre a vencer la sensacin de soledad.

    No hay que olvidar aqu la importancia del sentido de los roles . Hay ciertas actitudes que son135

    tpicamente propias de una determinada situacin. En un barco, salir a tomar unas copas puede versecomo una conducta que cabe esperar del rol de marino.

    De hecho, el tripulante con inquietudes culturales que se dedica a visitar monumentos y que declinael ir a tomar unas copas - aunque ello no tenga que implicar nada ms -, ser posiblemente visto comoun ser extrao. Lo comn, incluso dentro de una actitud seria, es salir a dar un paseo y tomar algo.

    El marino que, como hemos visto, necesita sentirse integrado en el grupo humano de la tripulacin,buscar tambin participar de alguna manera de las salidas de sus compaeros para no menoscabar esaintegracin.

    Estas actitudes variarn segn el puerto. Cuando es del propio pas, la salida puede ser un ir a cenar,un ir al cine, aparte de que la mayor facilidad de hablar por telfono con casa har que el marino sesienta ms prximo al mundo de los que le esperan.

    Cuando el marino se encuentra en un pas extrao, cuando la comunicacin con casa sea ms remota,su familia quedar ms como algo disociada de la realidad cotidiana y ms fcilmente podr entrar enla rueda de vivir por unas horas un mundo de ficcin.

    En este sentido, tienen un importante papel que desarrollar los centros para marinos, como elApostolado del Mar y similares, en su oferta de medios para comunicarse con casa o de pasar un ratoentretenido y de poder establecer una relacin humana con nuevas personas, de manera sencilla y almismo tiempo sin necesidad de incurrir en frivolidades. Estos centros ofrecen la posibilidad de queel marino pueda ver satisfecha su ansia de compaa y tambin de distraccin a travs de excursioneso posibilidades ldicas.

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    HAHMAN, E. Seamen Ashore. New Haven, 1952136

    ver (132)137

    En cualquier caso, cuando el marino regresa a bordo, siente un bienestar. Como escribe Hahman ,136

    el marino sale a tierra con ganas de pasarlo bien, pero al regresar tiene una sensacin de seguridad,que le ofrece la institucin total.

    Un caso curioso, explica Roland Doriol , se da entre marinos filipinos, los cuales, cuando dos o ms137

    barcos filipinos coinciden en un puerto, se renen en uno de los barcos, en vez de acudir a un localde tierra. En esas circunstancias, no intercambian palabras solamente, sino canciones, pescado,papeles y revistas...

    4.3 Los barcos de pasaje y la relacin con los pasajeros

    El pasaje representa una posibilidad de contacto con ese mundo exterior. Para evaluar la relacin delpasaje con la tripulacin, debemos contemplar dos aspectos:

    1) el papel que desempea el pasajero en la institucin barco y2) el distinto contacto que puedan tener los tripulantes segn su departamento ycategora profesional, con el pasaje.

    1) Si se trata de un ferry o transbordador, cuyas travesas duran un da o una noche, podemosconsiderar que los pasajeros no desempean ningn papel dentro de la institucin barco. Estnmeramente de paso y no aportarn a la tripulacin mayor contacto con el mundo exterior del querepresenta las horas que todos los das pasan en puerto. La posibilidad de contacto ser mnima,incluso para los camareros.

    Si se trata de un barco de cruceros, y aos atrs los transatlnticos que iban cargados de emigrantes,la situacin cambia por completo. Ah el pasajero llega a formar parte en cierta manera de lainstitucin total.

    Por supuesto, la condicin de tripulante y la de pasajero son totalmente distintas. Ambos embarcanlibremente, pero mientras que los unos van a trabajar, los otros van a divertirse (barcos de cruceros)o a trasladarse; mientras que los unos van para ganar dinero, los otros van para gastarlo. El tripulanteestar una serie de meses a bordo, a tenor de lo que prevea su contrato y durante ese tiempo, ir adonde lo manden. El pasajero embarca para una o varias semanas y elige justo el viaje que ms legusta o conviene. El tripulante tiene un trabajo diario que realizar y el pasajero tiene todo el tiempoa su disposicin.

    Para el pasajero existe un rol a desempear -el de pasajero- y conservar en todo momento su

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 155

    El autor vivi a principios de los aos 70 una situacin de semimotn a bordo de un barco de pasaje, en reivindicacin de la138libertad de un polizn. Ante el peligro que supona una parte importante del pasaje manifestndose amenazante, se tomaronmedidas para detener a los cabecillas y encerrarlos hasta la llegada a puerto, en camarotes asegurados con candados.

    identidad: seguir siendo empleado de banca, tendero, arquitecto... lo que sea, lo ser durante todala travesa y la gente a la que conozca sabr pronto quin es y qu hace all. En cambio, como hemosvisto, el tripulante es identificado a bordo por su cargo o profesin, tanto en las horas de trabajo, comoen las libres.

    En alta mar, ni el pasajero ni el tripulante podrn fsicamente desembarcar, por lo cual el pasajerosufrir tambin el efecto del enclaustramiento. Con todo, el pasajero no llegar a vivir la problemticapersonal y familiar del marino y de hecho pasar a bordo de manera bastante superficial.

    En cuanto al esquema jerrquico, el pasaje queda de alguna manera dentro de l, en el sentido de queen todo aquello que afecte al orden, la convivencia y la seguridad a bordo, tambin el pasaje deberacatarlo. Cuando en los barcos de pasaje se hacen los obligatorios ejercicios de abandono de buque,se ejerce una cierta autoridad sobre los pasajeros al requerirles a acudir todos a cubierta, con loschalecos salvavidas puestos.

    En caso de emergencia, el pasaje deber acoplarse plenamente a las instrucciones que reciba delcapitn o de los oficiales.

    El capitn es la mxima autoridad a bordo, tambin para el pasaje, y tiene capacidad para detenerdurante la travesa a cualquier persona que amenaza con perturbar seriamente la vida de a bordo. Esms, en los barcos de pasaje suelen llevarse algunas armas para casos de especialmente graves.138

    Los pasajeros en realidad conviven parcialmente con algunos de los miembros de la tripulacin, peroson perfectamente diferenciables de stos, en cuanto que internos de una institucin total.

    2) Si pensamos ahora en la relacin que se puede establecer entre tripulantes y pasaje diremos que,por departamentos, el que ms contacto tiene es el de fonda, especialmente los camareros que sirvenen el comedor o en el bar, o que limpian el camarote y estn en contacto regular con el pasaje. Dentrode este departamento, sobrecargos y mayordomo, tendrn tambin contacto con el pasaje, ya queestarn supervisando el trabajo de los subalternos de fonda y se pasearn por todos los salones delbarco.

    El departamento que menos contacto tiene es el de mquinas, con excepcin de el jefe de mquinas,que, junto con el capitn y el primer oficial, suele comer con el pasaje. Los subalternos de mquinasno tienen, en cambio casi ningn posible contacto con el pasaje, mientras que el personal subalternode cubierta lo tendr en cierta manera cuando haga trabajos de mantenimiento en cubierta, durante lavigilancia de los portalones en puerto, etc.

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico156

    Del departamento de cubierta, por lo dicho, el capitn y el primer oficial (en otros pases le llamansegundo capitn), son los que mayor relacin tienen con el pasaje, de manera que se puede decir quelas public relations suceden aqu a las exigencias nuticas.

    Tambin hay que considerar a los oficiales jvenes, que aprovechar el tiempo que dure el cruceroo la travesa para entablar alguna amistad con personas del pasaje.

    En realidad, desde el punto de vista sociolgico, hay una importante diferencia entre un barco de cargay un barco de pasaje.

    En el primero, est mucho ms potenciada la vida de tripulacin. Las razones son muy simples, y esque fuera de la misma no hay otras posibilidades en alta mar. Adems, en un barco de carga, desdecapitn hasta mozo, todos tienen unas condiciones de vida similares. Uno tendr mejor camarote queel otro y en general gozar de ciertas prerrogativas que otros no, pero hay una cierta homogeneidad,especialmente cuando todos los tripulantes sean de la misma nacionalidad.

    En los barcos de pasaje, al haber tantos tripulantes -200, 300 o ms- y vivir tan separados entre s,muchos ni se conocen entre ellos. Las categoras profesionales estn aqu mucho ms marcadas. Losoficiales visten de uniforme, habitan las cubiertas altas del barco y tienen una cierta, aunque limitada,relacin con el pasaje.

    Los subalternos viven con muchas incomodidades y estrecheces. Es conocido que en los grandes ylujosos barcos de cruceros, suelen darse situaciones de explotacin y marginacin dirigidas atripulantes de pases del Tercer Mundo, a los que se les pretende exigir que trabajen mucho y por pocodinero y encima amenazados.

    Volviendo a la diferencia sociolgica que hay entre esos distintos tipos de barcos, podemos concluirque hay ms vida propia dentro del ambiente interno de la institucin barco de carga, que en la debarco de pasaje.

    4.4 La relacin del tripulante con su familia

    Dentro del apartado de las relaciones del marino con el mundo exterior, la relacin con la familia tieneuna importancia decisiva. De hecho, una gran parte de los marinos dejan la profesin por estar hartosde vivir siempre lejos de la familia. La familia, como grupo social primario y bsico, requiere laconvivencia de sus miembros. En ella no slo se desarrollan los lazos humanos ms ntimos, sino queadems se produce la transmisin de todos aquellos conocimientos, ideas, valores y actitudes, queconstituirn la columna vertebral sociocultural de los miembros que en su seno nazcan.

    Por este motivo, la profesin de marino siempre ha sido vista como incompatible con una vida defamilia tradicional y por este mismo motivo, para todo marino, la relacin que mantenga con sufamilia, a pesar de las circunstancias, es un objetivo prioritario, fuera de los estrictamenteprofesionales.

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 157

    FORSYTH, C.J.; BANKSTON, W. The merchant seaman as a social type: a marginal type of lifestyle. Lousiana State139 University, 1983

    Lass Anker Fallen. Bremen, 1993140

    Vivir separado de la familia tiene consecuencias negativas para el marino y tambin para su familia.

    El marino se convierte en un visitante en su propia familia.139

    Como veremos en los apartados siguientes, la circunstancia del marino de estar siempre de paso, dalugar a importantes problemas a la hora de organizar la vida de la familia, tanto a nivel de pareja comoa nivel de la relacin con los hijos.

    4.4.1. Problemtica de la familia del marino

    Es prcticamente un tpico decir que la vida de marino y la de familia son incompatibles. Lasimgenes del marino que conoce a su hijo cuando ya tiene 1 ao o la del marino que llega a casa y loshijos pequeos se ponen a llorar porque lo desconocen, son y han sido utilizadas en novelas ypelculas.

    En los aos setenta, con la paulatina mejora del sistema de vacaciones, que desemboc en el 4 mesesembarcado y 2 meses en casa, este panorama mejor sustancialmente, aunque con ello no seeliminaron todos los problemas que la vida de mar plantea a la familia.

    En un forum en Lbeck (Alemania) , una esposa de marino comentaba lo que haban mejorado en140

    la marina mercante las posibilidades de mantener un contacto ms seguido con el marido, a travs devacaciones ms frecuentes, la posibilidad de acompaar la esposa al marino en algunos viajes y lafacilidad de comunicarse telefnicamente desde alta mar.

    Probablemente, esta opinin corresponda a una esposa de oficial o capitn, que son quienes suelentener ms facilidad para embarcar como familiar acompaante y porque son tambin los oficiales losque tienen ms acceso al telfono o a la fona del barco. Estas mejoras son reales, como lo es todo lorelativo al confort a bordo, pero no podemos generalizar, sino que debemos tener en cuenta que haygrandes diferencias entre distintos tipos de barcos.

    Fue precisamente en la citada dcada de los setenta, cuando fue tomando fuerza la figura del barcobajo pabelln de conveniencia y con ello, los tripulantes del Tercer Mundo, a los que se poda enrolarpara campaas de un ao o similares.

    El proceso de desmantelamiento de las flotas de los pases llamados industrializados, en favor de lospases de libre bandera, represent un aumento masivo del nmero de tripulantes de mano de obrabarata, que aceptaban los largos perodos de embarque y con unas condiciones de comodidad yseguridad a bordo muy distintas de los niveles alcanzados en barcos modernos, de armadores serios.

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico158

    FORSYTH, C.J.; GRAMLING, R. Adapttive Familial Strategies Among Merchant Seamen. University of 141 Southwestern Lousiana, 1990

    BOHEN, H.; VIVEROS,A. Balancing jobs and family life. Philadelphia: Temple University Press, 1981142 BOSS, P. A clarification of the concept of psychological father presence in families experiencing ambiguity of boundary. Lousiana, 1977 BOSS, P. The relationship of psychological father presence, wife's personal qualities and wife family dysfunction in families on missing fathers. Lousiana, 1980

    ver (139)143

    De una u otra manera, con vacaciones ms o menos frecuentes, la profesin de marino supone unasfuertes contrariedades de cara a la vida de familia.

    Craig J.Forsyth y Robert Gramling estudian las estrategias con que las familias de marinos141

    mercantes se adaptan a esa situacin de ausencia del marido y padre.

    En las ltimas dcadas se han realizado muchos estudios sobre la incidencia en la vida de familia delos horarios de trabajo, quedando claro que aquellos horarios o calendarios de trabajo no tradicionales,son problemticos para las familias. 142

    Los marinos mercantes representan una forma extrema de programas de trabajo anormales, aunquesus problemas slo difieren en grado de los de otros trabajadores con horarios no habituales. Familiascon programas de trabajo no convencionales no pueden esperar desarrollar un sistema de organizaciny de roles convencional.

    De hecho, si lo intentan, estn cometiendo un error.143

    Forsyth y Gramling, estudiando las estrategias desarrolladas por distintas familias ante las ausenciasperidicas del padre, hallaron 5 sistemas:

    a) Autoridad familiar alternante entre marido y esposa.

    b) Autoridad conflictiva: La esposa ejerce la autoridad cuando el marido est fuera, perono hay acuerdo sobre quin ejerce la autoridad cuando el marido regresa.

    c) Autoridad sustitutiva: La autoridad del marido/padre es ejercida por otro parientemasculino, mientras aqul est ausente.

    d) Autoridad contingente: No hay traspaso de autoridad, sino que sta se ejerce por laesposa en aquellos asuntos urgentes, reteniendo en todo momento el marido la autoridad.

    e) Autoridad transferida: El marido es un husped peridico y la esposa asume los rolestradicionales de padre y madre, excepto en lo que se refiere a la fuente principal de ingresos.

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 159

    Para realizar este estudio, los citados autores tomaron una muestra de 141 familias de marinosmercantes durante un perodo de 7 aos (1981 - 1987). De las personas entrevistadas, 111 eranmarinos mercantes, 29 eran esposas y 23 hijos adultos, 89 eran oficiales o familiares de los mismosy 52 personal subalterno o familiares de los mismos.

    Un 44% se decant por la solucin c) ( sustitucin del padre por otro familiarmasculino), un 23,4% entraba en conflicto cuando el marido volva (caso b)

    Sustitucin del padre/marido: En este tipo de solucin, el padre o el hermano del marino, asumen eserol en su ausencia, aunque ms se da todava que lo haga algn miembro masculino de la familia dela esposa. Muchas familias de marinos, a la hora de buscar lugar de residencia, eligen uno que estcerca de la familia de la esposa. Esto tiene un sentido importante de tranquilidad para el marino, dadoque la impotencia desde la mar ante ciertas dificultades es causa de angustia.

    Conflicto: Surge la situacin de conflicto al tomar la esposa decisiones y a adoptar tareas propiasmasculinas en ausencia del esposo. Cuando ambos estaban juntos, compartan responsabilidades. Alausentarse el esposo, ste se da cuenta de que ella va tomando iniciativas en cuestiones que decidal. Ella por su parte, se siente molesta cuando el marido regresa y quiere ejercer una autoridad, a laque ella ya se ha acostumbrado.

    Este fenmeno se da, por ejemplo, con la educacin de los hijos. La mujer que ha tenido que hacerde padre y madre, se siente molesta cuando el marido pretende corregir ciertas cosas a los hijos o lecritica su manera de educar. Si la esposa planta cara, reivindicando lo que considera le corresponde,el marido se sentir que en su casa, ante sus hijos, no es nadie. Por su parte, la mujer que se veacensurada en lo que hace cuando est sola, ver por momentos al marido como a un extrao que vienea perturbar su vida.

    De una de las entrevistas realizadas por Forsyth y Gramling, una esposa declar:

    Tengo problemas cada vez que viene a casa... no parecemos armonizar... desmonta miorganizacin... los nios no escuchan... l acta como si hubiera estado en los ltimosmeses en casa... cuando se va, tardo aproximadamente una semana en volver aorganizarlo todo...

    ...y otra esposa coment:

    Cuando viene a casa, surgen problemas con todo el mundo. Pretende autorizar a losnios cosas que se apartan de las reglas que tengo establecidas y discute conmigo sobreello. Es bueno tenerlo en casa, pero despus de un par de das de discusiones,simplemente estorba. Su marcha tiene un doble filo. De una parte lo extrao y de otra,las discusiones se acaban.

    Autoridad contingente: El aspecto ms polmico en este caso, es el de la educacin de los hijos. La

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico160

    madre acta claramente en nombre del padre, que es quien acaba de poner los matices cuando vuelvea casa. Al padre le corresponde aqu el papel de severo, lo cual no es fcil.

    Un capitn de cincuenta y tantos aos deca:

    Suerte tiene el marino al que los hijos le salen estudiosos, porque de lo contrario estapaado: si al llegar a casa intenta ponerlos en lnea, dirn:"este pesado podravolverse al barco" y si no quiere amargarse la estancia y hace la vista gorda, dirn:"esto es jauja" y no se enmendarn.

    Husped peridico: Los largos perodos de ausencia hacen que el marino se convierta en un huspedperidico, en una visita. Es difcil de mantener una relacin familiar estable sobre la base de 4 mesesde contacto al ao (y no digamos si slo es un mes).

    El marino que llega a casa despus de un tiempo de estar ausente, al no haber vivido el da a da, caecomo un extrao.

    Para el propio marino, la casa y las personas que dej cuando se fue, no son exactamente iguales. Esuna sensacin muy comn la de que tanto el marino como los suyos, tengan un poco la impresin deque se trata de una visita. Aparte de la extraeza que pueda producir el tiempo de separacin hay otro factor,que tiene tambin importancia, y es el hecho de que al llegar el marino a casa, l est de vacaciones, cuandoposiblemente los otros miembros de la familia deban atender sus obligaciones cotidianas.

    En una familia en que los hijos van al colegio, o si hay alguno ya mayor, tal vez trabaje, la mujer llevetodo el peso de la casa e incluso puede ocurrir que trabaje fuera, una persona, que se levanta tarde,mientras los dems madrugan, que sale a dar una vuelta porque no sabe qu hacer, que tiene muy claroque despus de "x" meses en la mar, ahora le toca pasarlo bien... se convierte en un husped, en unavisita. Esta condicin lo margina, pues l es distinto que los suyos.

    Un marino entrevistado por Forsyth y Gramling deca:

    Mi mujer hace una gran labor con los nios. Yo no quiero meterme en su sistema deeducar... A veces me siento ajeno a todo... Slo intervengo cuando alguien me lo pide.

    Segn Forsyth y Gramling, la estrategia del husped peridico es la nica viable, en ausencia de unpariente cercano. Por qu?

    La mayor parte de las familias de marinos mercantes pertenecen a una clase obrera tradicional y tienenciertos valores y conceptos de los roles familiares. Cuando una de estas familias se enfrenta a laausencia del padre, la primera respuesta es la de retener la estructura familiar tradicional a la hora dereemplazar la figura del marido y padre. Al faltar un pariente cercano la familia comienza lo queparece un paso inevitable a la familia no tradicional. En tal caso, la autoridad del padre vadecreciendo, mientras la de la madre aumenta.

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 161

    MAU, G., GASSNEN, V., LANGHANS, K. y JENSEN, H.J. Sozialpsychologische Untersuchungen an bord 144 deutscher Seeschiffe. Flensburg, 1974

    ver (92)145

    El resultado del estudio realizado por los citados autores es de que lo que afecta a la familia no es tantola ausencia del padre como la estrategia utilizada. El padre acepta ser el husped peridico antes quecaer en lo que Mac Iver (1950) llama un estado de anomia (carencia de significacin social). Tantoel estado de autoridad conflictiva, como el de autoridad contingente suponen estados anmicos parael marino mercante.

    El marino, como husped peridico, no tendr que librar una batalla con la mujer, ni tendr queejercer un rol que no desea ante los hijos. Este esquema es el menos ambiguo. La madre asume un rolde marcar la disciplina y hacer las gestiones necesarias. El padre conserva una funcin muyimportante: es el que trae el pan a casa.

    En el estudio realizado en Flensburg, Alemania, por orden del Ministerio de Transporte yComunicaciones a bordo de 15 barcos en diferentes viajes, un 43,9% de los tripulantes encuestados144

    consideraban que la navegacin supona un duro gravamen para las relaciones familiares, mientras queun 23% consideraba que slo afectaba parcialmente. Un 36,3% teman una desmembracin de lafamilia y un 61,5% consideraba que era muy duro para la esposa la ausencia del marido. Segn el86,8% de los encuestados, las esposas no eran autosuficientes y ante situaciones difciles recurran aparientes o conocidos.

    Por otra parte, un 38,5% tenan la impresin de que la mujer, a causa de las largas separaciones, sehaba vuelto ms independiente y cuando el marido, al llegar de vacaciones, quera tomar ciertasdecisiones, haba tensiones. Esta problemtica se daba bsicamente en los tripulantes de cierta edad,probablemente por tener ya unos prejuicios en cuanto a competencias de decisin en el mbito de lafamilia.

    Un 67,7% de los casados, vea el grave inconveniente de no tener prcticamente influencia en laeducacin de los hijos.

    En el ao 1984, en la encuesta realizada por el Apostolado del Mar de Espaa se abord tambin145

    el tema de la familia del marino y, al margen de las respuestas concretas, en el puerto de Vigo, serecogieron las siguientes frases pronunciadas por esposas e hijos de marinos:

    La presencia del marido en casa, en sus cortas permanencias, da lugar a una vidaagitada, al querer vivir intensamente el poco tiempo para estar juntos...

    A veces el marido acaba convirtindose en una cuenta corriente en el banco.

    Es difcil la convivencia cuando se prolonga su estancia.

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico162

    RODRIGUEZ-MARTOS, R. Trabajo martimo y familia: dos realidades en tensin. Mombasa, 1987146

    La cosas importantes se las consulto a mi padre, pero las de cada da las hablo con mimadre... es la costumbre.

    Cuando mi padre rie, se olvida al momento; en cambio mi madre pone castigos que hayque cumplir.

    Tanto el estudio realizado en Alemania, como el del Apostolado del Mar de Espaa, vienen aconfirmar la tesis de Forsyth y Gramling. Tanto en la relacin con la mujer como con los hijos, elevitar conflictos de autoridad, delegando ampliamente en la madre, favorece la convivencia, aunqueeso no quita que se pueda producir un distanciamiento.

    El marino se envuelve en su rutina, se acostumbra a la calma; la vida de mar es dura en muchosaspectos, pero cmoda en otros: tienes trabajo, pero tus horas de descanso en un barco mercante sontuyas. La familia se acostumbra a prescindir del marido y del padre y , aunque haya mucho cario,la falta de convivencia cotidiana separa enormemente.146

    Despus de aceptar que la vida de mar es un grave inconveniente para la vida de familia y despus dever tambin, que entre las posibles soluciones sobre el modo de repartir la autoridad, la del huspedperidico pareca la mejor, habra que aadir alguna consideracin:

    Indudablemente, es importantsimo para el marino y para su familia que las vacaciones, el tiempo deestar juntos, sea satisfactorio para todos. En caso contrario, la ilusin inicial con que se espera cadareencuentro se transformar en frustracin, cosa que ir socavando profundamente, a la larga, larelacin familiar.

    El marino debe lgicamente delegar la autoridad familiar cotidiana en la esposa, pero ello tampocoimplica un desentenderse, que tampoco complacer normalmente a la esposa. Hoy da, los medios decomunicacin permiten un contacto ms o menos frecuente con la familia y con ello el poder participaren la toma de decisiones o simplemente compartir los problemas con la familia. El marido que desdela mar haya participado de esa manera al llegar a casa, aunque la vida cotidiana est organizada porla madre, no sentir que l all no pinta nada. Tambin los hijos lo vern ms cercano. El marino, desde su soledad obligada, puede caer en la tentacin de hacerse su castillo y desinhibirsede los problemas familiares y por extensin de los sociales en general. Del decir "desde aqu yo nopuedo hacer nada", se puede caer en el "no me importa nada".

    Otro aspecto a tener en cuenta es la tendencia del marino a fantasear sobre la vida en tierra y sobresu propia familia, lo cual le lleva muchas veces a sensaciones de frustracin, cuando la realidad noconicide con la fantasa.

    Despus de haber reflexionado sobre la problemtica de la familia del marino, vamos a fijarnos en loque representa para el marino la reincorporacin a la vida familiar.

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 163

    DECKER, K.R. Coping with Sea Duty: Problems encountered and resources utilized during periods of family 147 separation. Nueva York, 1978, pp.113-129

    ver apartado 3.10148

    FORSYTH C.J. Determinants of family integration among merchant seamen. The Universtiy of Southwestern 149 Lousiana, 1988

    4.4.2 Integracin familiar

    Una caracterstica obvia de la familia del marino es que el marino va a la mar y que, en consecuenciaes axiomtico que la familia de un marino profesional debe funcionar dentro del contexto de laseparacin, actual o potencial, a lo largo de su vida profesional.147

    Esta circunstancia es evidentemente intrnseca de la profesin de la mar. Se podr aliviarsensiblemente a base de vacaciones frecuentes, se podr hacer ms llevadera mediante unascomunicaciones mejores y ms regulares, etc., pero la familia del marino sabe que, de una u otramanera, ha de convivir con esa realidad.

    Por este motivo, al hablar de la mujer como profesional del mar , queda evidenciado que el mximo148

    problema no es la mejor o peor aceptacin de la mujer como profesional en los barcos, ni tampocoel grado de aptitud que pueda tener para ejercer esta profesin, sino las repercusiones sobre la vidafamiliar y cmo en el caso de la mujer, ser marino representaba renunciar prcticamente a lamaternidad y de hecho a la formacin de un hogar, por lo menos en el sentido que tradicionalmentedamos a esta palabra.

    Esa separacin es motivo de que el marino quede fuera de los eventos cotidianos de su familia y, enconsecuencia, de la toma de muchas decisiones.

    Forsyth hace un estudio sobre los rasgos ocupacionales y de la relacin con tierra del marino149

    mercante, que preforman su conciencia de integracin familiar.

    El factor ocupacional viene medido por cinco variables:

    a) factores utilizados para medir el factor ocupacional:

    - nmero de aos en la mar,- tiempo anual de permanencia en la mar,- duracin de los viajes;

    b) factores causados por el aislamiento del marino mercante:

    - el navegar siempre en el mismo barco,- el navegar siempre en un puesto similar.

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico164

    TONNIES, F. Community and Society. Michigan State University, 1957150

    MIDDLETON, R. Alienation, Race and Education. U.S.A., 1963151

    Segn Forsyth, el marino que ha pasado la mayor parte de su carrera en posiciones permanentes esms propenso a desarrollar lazos interpersonales con otros marinos, con lo cual reduce parte delaislamiento. Si tenemos en cuenta que el marino pasa la mayor parte de su tiempo en el barco, sustatus a bordo debera guardar una relacin con la integracin familiar.

    En realidad suele darse ms continuidad en los barcos entre oficialidad que entre personal subalterno,al que cambian con ms facilidad de un barco a otro.

    Este factor unido a la mayor facilidad del oficial a participar de asociaciones terrestres facilitan, segnForsyth, un mayor grado de integracin familiar por parte de los oficiales que por parte de lossubalternos.

    Para valorar la influencia de los rasgos ocupacionales en el nivel de integracin familiar, Forsythconsidera los siguientes factores:

    - La naturaleza de la comunidad en que se reside debe influir en el grado de integracin familiar. As,por ejemplo, el tamao de la comunidad contribuir al grado de integracin social que el marinomantiene. El tamao de una comunidad y su nivel de complejidad se considera determinante para laintegracin individual y de grupo . Formar parte de una comunidad con un grado complejo de150

    interacciones capacita al individuo a mantener unos vnculos a travs de la distancia.

    - La mobilidad geogrfica es un elemento negativo para la integracin. Una persona sola que habitaen un lugar fijo, con unas compaas ms o menos estables, tendr ms facilidad de integracin socialque una que vive de aqu para all, sin tener ningn ncleo humano fijo al que sentirse ligado. En elmundo de la mar se dan muchos casos de personas con un profundo desarraigo de base. Estas personastal vez se muestran indiferentes mientras otros aoran a la familia pero, lentamente y a medida quevan hacindose mayores, el desarraigo va haciendo ms mella en ellos, hasta llegar a ser personas quedifcilmente pueden adaptarse ya a una vida social y familiar tradicional.

    - La participacin en asociaciones religiosas u otras son tambin elementos necesarios. Aqullos queprocuran mantener esas afiliaciones institucionales ven reducidos los efectos de su aislamiento.

    - La educacin es tambin un factor que ayuda a mantener un mayor grado de integracin con elhogar . No cabe duda de que la persona que ha recibido una instruccin tiene a su alcance mayores151

    medios para cultivar la integracin a un ncleo social a distancia.

    - Finalmente, tener hijos debe ser considerado como un ligamen social que ayuda al individuo a vencer

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 165

    GROVE, W.; HUGHES, M. Reexamining the Ecological Fallacy: A Study in which Aggregate Data are Critical 152 in Investigating the Pathological effects of Living Alone. University of North Carolina, 1980

    BEOBIDE, J. La Soledad en la Gente de Mar. Barcelona, 1993153

    las consecuencias sociales negativas de la soledad a bordo . 152

    Forsyth realiz un estudio entre 132 marinos casados, donde analizaba la influencia de los factoresarriba indicados en la integracin familiar del marino y lleg a las siguiente conclusiones:

    A pesar de que la duracin de los viajes y los aos de profesin marinera son buenos indicadores dela integracin familiar, el grado de separacin contado por meses en la mar parece ser particularmenteinfluyente. No importa tanto el nmero de aos navegando, o si hace muchos viajes cortos o pocoslargos, lo que pesa es el tiempo total de separacin de la familia.

    La relacin entre el status a bordo y la integracin familiar sugiere que el prestigio a bordo del barcoy el grado de privacin social asociada con el status a bordo es trasladado a las asociaciones demarinos en tierra.

    Un esquema de viajes estable, con el mismo grupo humano, promueve la relacin entre esos hombrestanto en tierra como en la mar.

    Los efectos de tamao de comunidad, participacin religiosa, educacin, tener hijos y ser miembrode alguna organizacin en la integracin familiar, son coherentes con la integracin social general.

    El estudio de Forsyth muestra que cuanto ms tiempo lleva el marino en la mar, menos integrado esten su familia. Su integracin familiar est mediatizada por ciertas caractersticas sociales. El nivel deintegracin familiar del marino mercante est depende de su participacin asociativa y organizacional.

    4.4.3 La comunicacin con la familia

    La comunicacin es un elemento bsico para mantener la integracin con la familia. A pesar de ladistancia, hay marinos que van participando de todas las decisiones importantes que se toman en sufamilia y hay marinos que prefieren delegar plenamente en la esposa y van siendo ajenos a muchoseventos de los que podran haber participado a distancia. En cualquier caso, el marino piensa muchoen la familia, sobre todo el casado.

    Las cartas para el marino son algo sagrado. Joseba Beobide, director nacional del Apostolado del Mary capelln del puerto de Pasajes declaraba: 153

    El correo en Terranova es un asunto tan sensible que a veces los tripulantes se han negado a trabajar,porque el Patrn no quera desviarse 20 o 30 millas para recoger el correo. (En los pesqueros, elcorreo lo lanza el barco que viene de tierra a la mar con una boya y los otros pesqueros la cazan)...

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico166

    En cierta ocasin llevbamos cerca de un mes en la mar, vino el correo, que nos pas otro barco yhubo un marinero que no recibi ninguna carta, el nico. Me acuerdo que aquel hombre estabaafectado, como si le hubieran pegado un golpe en la cabeza. Para animarle, yo le deca: "Hombre,espera que no sabemos si ha quedado una carta en el otro barco" y el contestaba: "cuando llegue atierra le voy a decir esto y aquello a mi mujer". Afortunadamente su carta haba sido equivocadamenterecogida por un compaero, que se la entreg enseguida. Todava estoy viendo la cara de aquelhombre al ver que era como los dems... Cuando se recibe el correo los tripulantes se retiran alcamarote y desaparecen como los conejos dentro de su madriguera.

    Las cartas juegan un papel importante en la vida del marino.

    Escribir cartas quiere decir concentrarse en las personas a las que uno quiere y hacerles participar adistancia de lo que uno vive. Una postal frecuentemente es un simple saludo, sin ms contenido. Unacarta es distinta y normalmente el marino va escribiendo cartas durante la navegacin, y se es un ratoen el que conversa con la mujer, con los hijos. Mientras escribe la carta, suele mirar esas fotos quetiene en la mesita de noche o en la pared. Esos ratos, pensando en el hogar, son momentos de vivirla propia intimidad, de hacer un poco presente la familia en el camarote.

    Del mismo modo, las cartas hay que saborearlas. Se leen una primera vez deprisa para enterarse loantes posible de cualquier novedad y luego se releen despacio, saborendolas.

    En la vida de pareja, unas cartas con muchas hojas, es un medio muy vlido para mantenersecomunicado.

    Cuando un barco llega a puerto, hay dos cosas que inquietan de manera especial: "ha llegadocorreo?". Todo el mundo mira la cartera del consignatario, de la cual saldr despus el fajo de cartas.La otra cosa es: "dnde puedo echar mi carta?". En barcos que atracan cerca de la ciudad y que vana estar un par de das, esto no preocupa tanto, pues ocasiones habr para hacerlo. Pero en escalasbreves, tal vez de horas, todo el mundo est pendiente de poder entregar las cartas al consignatario.

    Hoy da, hablar por telfono es mucho ms asequible que hace unos aos. En realidad se puede llamardesde cualquier puerto y, aunque sea un poco caro, una o dos veces al mes resulta asequible paramuchos marinos.

    En los centros de asistencia al marino como Stella Maris y otros similares, el servicio de telfono esuno de los ms solicitados. En los muelles no suele haber telfonos y, si los hay, el marino noacostumbra a tener monedas, sobre todo en el extranjero y por las tardes, no siempre es fcil encontrardonde cambiar dinero para poder llamar desde una cabina. Por eso los marinos, cuando salen delbarco, suelen buscar el Stella Maris o su equivalente para cambiar all algo de dinero, llamar portelfono y franquear cartas.

    Hablando del telfono, ste es un medio vivo de comunicarse y representa la alegra de or la voz deuna persona querida y poder dialogar directamente. Sin embargo, normalmente las conversacionestelefnicas a larga distancia estn muy condicionadas por su costo y, a sabiendas de que no se pueden

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 167

    explicar demasiadas cosas, se repiten los saludos y cuatro frases, referentes a la salud, al estadogeneral y al cario.

    En realidad, la comunicacin es mucho ms extensa y profunda a travs de una carta, donde se puedenexplicar muchas ms cosas, con mayor riqueza de detalles y matices.

    Una experiencia que no suele tener muy buena aceptacin es la del envo de cintas de cassettegrabadas. Joseba Beobide comenta al respecto: Me sorprendi la reaccin de los tripulantes, no dealegra, sino al contrario, al pedirme que no se las mandase porque la impresin era demasiadofuerte.

    Or unas voces como encerradas en una cinta deja tristeza, acenta la sensacin de lejana. El telfono,que tambin tiene su factor negativo por que deja un poco triste, pues aumenta mucho el deseo devolver a casa, tiene como positivo que es una conversacin viva y que la comunicacin es recproca.Al or una cinta, quisieras contestar y no puedes y adems cada vez que la pones es peor.

    4.4.4 La familia a bordo

    La presencia a bordo de la esposa y a veces de algn hijo es un hecho que merece una atencinespecial, pues presenta una faceta que no se da en las otras instituciones totales.

    Presencia de familiares en puerto:

    La presencia de familiares a bordo, durante la estancia del barco en puerto, es propiamente una simplevisita que tambin puede producirse en otras instituciones totales. Sin embargo, aqu hay unadiferencia importante, ya que las visitas a un interno de una crcel, de un convento, de un cuartel, deun instituto psiquitrico, son visitas externas, que no incluyen la entrada libre al recinto, ni lapernoctacin, ni la libre convivencia con todos los miembros de la institucin.

    Cuando un barco entra en puerto, las esposas que suben a bordo, algunas acompaadas de algn hijo,se instalan en el camarote con el marido y durante los das que dure la estancia en puerto, compartirncon l camarote, comedor y en general todos los espacios habitables del barco.

    Se crea un ambiente distinto del cotidiano. A las horas de las comidas, la presencia de familiarespuede hacer cambiar completamente el hilo de las conversaciones. Si coinciden varias esposas sehablar de temas ms comunes en tierra, como pueden ser los hijos, o la pelcula que vieron la nocheanterior. Los que estn as acompaados experimentarn una sensacin de reintegracin a esa vida detierra, que los tiene olvidados.

    En cambio, los solteros, o los que no han podido recibir visita, se sentirn posiblemente un pocoincmodos, como desplazados en lo que es su mundo, por personas ajenas a l.

    En el barco en esas circunstancias se forma pues un ambiente atpico.

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico168

    La presencia de familiares en la mar:

    Es bastante habitual, sobre todo entre tripulantes de pases desarrollados, que viajen a bordo algunasesposas de tripulantes. Entre marinos de pases del Tercer Mundo no es tan normal. Por qu?. Sinpretender dar una respuesta exhaustiva, podemos considerar las siguientes razones:

    Una esposa, segn el punto de vista del armador, puede embarcar por un tiempo ms o menoslimitado: un mes, dos meses a lo sumo.

    A tenor de como sean los camarotes, slo podrn traer a bordo a la esposa aqullos que tengancamarotes individuales.

    Desde las circunstancias familiares, si tiene hijos o si ejerce alguna profesin, se ver muy limitadapara disponer del suficiente tiempo libre para embarcar.

    Por otra parte, salvo que tengan el hogar en un puerto en el que el barco toque con cierta regularidad,embarcar supondr desplazarse a otro lugar y tal vez a otro pas, lo cual supone un gasto, que nosiempre se podr permitir. Si hay que coger un avin y, especialmente desplazarse al extranjero, elnivel cultural y la mundologa de la esposa ser tambin un elemento que tendr una influencia.

    Todos estos puntos nos hacen ver que las mujeres de oficiales y adems de pases industrializadosacompaarn normalmente a sus maridos con ms frecuencia que las de pases del Tercer Mundo. Eneste caso, los sueldos bajos de los tripulantes, lo lejos que suelen andar los barcos de sus pases, lasobligaciones domsticas y las pocas atenciones que estos tripulantes reciben muchas veces a bordo,sern obstculos frecuentemente insalvables.

    La presencia de una o varias esposas a bordo tiene tambin una influencia en la vida cotidiana,especialmente a las horas de las comidas. De una parte, su presencia da un aire ms normal alambiente, en el sentido de que renueva un tanto la rutina de la vida a bordo. Las conversacionesvariarn y la gente ser ms cuidada y respetuosa al hablar.

    Desde el punto de vista de la institucin total, si las visitas en puerto no tenan ya equivalente en otrasinstituciones, en el caso de la esposa que navega un tiempo con su marido tripulante, es totalmenteajeno a cualquier otra forma de institucin total, dado que al navegar, pasa a formar parte de latripulacin, aunque sea en calidad de familiar acompaante. A tal fin, deber tener su cartilla denavegacin y ser enrolada a bordo.

    La diferencia con los dems tripulantes ser que no tiene ningn relacin contractual con el naviero,ni, por tanto, cometido profesional, ni tampoco salario, que no ejerce ninguna responsabilidad y queno pertenece a ningn departamento. Es simplemente la mujer de un tripulante.

    Sin embargo, por el hecho de hallarse a bordo y de participar de la vida cotidiana de global, tiene unascaractersticas que la hacen parte de la institucin total. As, es una persona ms dentro del grupo que

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 169

    SANTOS, F. Ponencia sobre la familia del marino. Mlaga, 1995154

    permanece aislado durante el tiempo que dura la navegacin. En esas circunstancias no tiene mayorlibertad que otro tripulante para decidir abandonar el barco. Est sujeta en cierta manera a unaautoridad, no en cuanto a lo estrictamente profesional, sino como miembro de una colectividad.Durante su estancia a bordo su mundo vendr delimitado por la borda del barco.

    Su integracin a bordo, sin embargo, no ser completa, dado que fuera de ser "la mujer de tal", no tendrotro rol y el hecho de saberse visita, ser un obstculo que impedir su autntica integracin a la institucintotal. Participar, por tanto, de la vida de la institucin, pero no ser propiamente miembro de ella.

    4.5 La reincorporacin a la vida familiar; el regreso al hogar

    La situacin del marino embarcado, habitando en un camarote, soportando cabeceos y balanceos,ruidos y vibraciones, yendo de aqu para all, a donde le mandan y a donde l no elige, en compaade unas personas con las que le unen en su mayor parte unos lazos puramente profesionales, es unasituacin vivida con la sensacin de un desarraigo de lo que considera su mundo, es decir, su pueblo,su familia, sus amigos.

    El marino, como ya se ha dicho, salvo el caso del joven que sale a navegar por ansias de aventura,ejerce su profesin para sacar adelante a su familia. Aunque haya salido a la mar por vocacin, ladureza de la vida que le toca llevar hace que no tarde en asumirlo como un sacrificio.

    El marino vive, pues, pensando en tierra, en su casa, en los suyos. Y llega un da en que regresa.

    La reaccin que sufrir el marino, como la que sufrir su familia, vendr directamente influenciadapor el tiempo que haya durado la separacin. No es lo mismo volver a casa despus de quince das,despus de tres meses o despus de un ao. Cuanto ms largo haya sido el perodo de separacin ycuanto menor haya sido la comunicacin durante este tiempo, ms sorprendente puede ser el regreso.

    Durante su estancia a bordo, el marino se ha pasado mucho tiempo pensando en su familia y en elregreso, idealizando en muchas ocasiones. Cuando se encuentra en casa y con la familia, aunquerebose de contento, pasados los primeros das se sentir fcilmente desplazado. Fina Santos , esposa154

    de un pescador de altura, que pasa perodos de cinco y seis meses fuera de casa, comenta: Una granparte de los marinos, cuando estn de vacaciones, pasan largos ratos fuera de casa, en el bar, conlos amigos, como si no aguantaran mucho tiempo dentro de casa.

    Por otra parte, habra que distinguir entre el desembarco por vacaciones y el regreso definitivo parareincorporarse establemente a la vida de la familia.

    Despus entraremos en matizaciones, vamos ahora a hablar genricamente de lo que representa elregreso al hogar:

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico170

    SCHUTZ, A. Estudios sobre teora social. La vuelta al hogar. Buenos Aires, 1974155

    Nota del autor: Despus de mi primer viaje como alumno de nutica, habiendo estado casi diez meses fuera, recorriendo156medio mundo, regres a casa una noche, ya tarde y, cuando despus de compartir unas horas con mi familia y celebrar el retorno,me qued solo en mi habitacin, tuve una sensacin muy extraa. Me sent casi deprimido. Era una mezcla de sentimientos. Loque me haca sentir peor era, que me vea a mi mismo como a un extrao, no me reconoca. Incluso por momentos pensaba enel barco, el camarote, los compaeros y me preguntaba "qu hago yo aqu?". Fue una sensacin desalentadora, que con eltranscurso de los siguientes das fue disminuyendo, hasta sentirme nuevamente integrado a mi "familia de siempre". Otroscompaeros de profesin han experimentado vivencias semejantes.

    ver (155) p.110157

    El que vuelve al hogar prev su regreso a un ambiente del cual siempre tuvo y cree seguir teniendo,un conocimiento ntimo, y que le basta presuponer para orientarse dentro de l. El forastero que seaproxima al grupo debe anticipar de manera ms o menos vaca, lo que encontrar; al que regresaal hogar le basta con recurrir a sus recuerdos. Eso cree, y por creerlo sufrir la tpica conmocin quedescribe Homero en la Odisea, cuando Ulises despus de 20 aos regresa a su tierra y no lareconoce .155

    El marino, durante el tiempo que ha estado fuera, ha pensado en el hogar, tal y como lo dej. Cuandose va acercando al hogar, va imaginando lo que va a encontrar, la reaccin de las personas, el olor dela casa, el ruido de las calles que le son familiares, todo lo que en el recuerdo le ha acompaado.

    Sin embargo, se encontrar con que muchas cosas o muchas personas no son exactamente lo mismoque eran y an ms, al intentar reconocerse a s mismo en lo que era su ambiente, notar que ltambin ha cambiado.156

    El hogar significa una cosa para el que nunca lo ha abandonado, otra para quien habita lejos de l,y otra para el que retorna.157

    La vida del hogar representa una serie de personas, cosas, vivencias, sensaciones, etc. Dice AlfredSchutz en la obra citada que segn una publicacin del Cuerpo de Infantera de la Marina Chevron,una encuesta hecha a los soldados norteamericanos durante la guerra en el Pacfico sealaba que stos,aparte de sus familias, esposas o novias, lo que ms extraaban era "un sandwich de lechuga contomate, la leche fresca y el diario de la maana, el silbato de una locomotora..."

    La persona que vive regularmente en su hogar, se ha habituado a una serie de sensaciones, de las queno se da ni cuenta. Es normal ver cada da a la esposa, es normal conversar con los hijos, es normaldesayunar cada da un caf con tostadas, es normal ver pasar un determinado autobs por delante decasa, etc.

    La vida de hogar supone una pauta de vida, un conjunto de costumbres, hbitos, tradiciones, horarios,etc. Todo esto se refleja en una manera de hacer las cosas, en un modo de relacionarse con los dems,en una manera de plantearse la vida, de hacer frente a los problemas y de proyectar el futuro. El modode vida en el hogar marca los actos de sus miembros.

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 171

    ver (155) p.110 158

    El sistema de significatividades adoptado por los miembros del endogrupo muestra un alto grado deconformidad. Siempre tengo una buena probabilidad de predecir la accin del otro hacia m, as comola reaccin del otro hacia mis propios actos sociales.158

    Como se vio al hablar de la vida interna de la institucin buque, estas connotaciones se dan tambinde alguna manera en el grupo humano llamado tripulacin, cuya vida est marcada por unascostumbres y hbitos y por la interrelacin entre unas personas que a fuerza de verse continuamente,prcticamente pueden adivinar en todo momento lo que les va a decir el otro.

    Dentro de la relacin que se produce dentro del hogar, hay una conciencia no slo de "yo" o de "t",sino de "nosotros", que marca la pertenencia al mismo grupo. Las personas que conviven habitualmen-te, aunque esa convivencia se vea diariamente interrumpida por los quehaceres que cada uno tiene,cuando se reencuentran no ha llegado a interrumpirse el sentido de convivencia y restablecen larelacin con toda normalidad.

    La persona que deja el hogar, ha salido de ese microcosmos y deja de participar de todos aquellosdetalles y momentos que forman la vida cotidiana y que hace que los miembros de la familia se sientancomo tales. Al marchar, la persona lleva consigo un nosotros, una relacin, que es lo que ha sido hastael da de emprender viaje.

    A partir de ese momento, sin embargo, dejar de compartir las vivencias de su familia, del lugar enque habitan, de lo que ha dicho un vecino, de lo que ha ocurrido en el pueblo de al lado, de unaalegra o un disgusto que ha tenido alguien de la familia, de los amigos. La experiencia vivida, daa da, se reemplaza por recuerdos. Las personas no son ya copartcipes de un dilogo, de una relacint a t. Su imagen ya no va acompaada de mil gestos o expresiones. Se acaba la inmediatez de lainterrelacin, en la que una palabra de uno suscita otra palabra del otro.

    La persona que deja el hogar pone punto a su vivencia y a partir de ese momento sustituir a esaspersonas por recuerdos, recuerdos que quedan como anclados en un instante del tiempo. Es como unafotografa: en ella vemos a una persona en cierto momento y dentro de diez aos la seguiremos viendoigual, mientras que si la viramos en carne y hueso, veramos lo mucho que habra cambiado.

    Al mismo tiempo, esta persona que abandona el hogar, va experimentando una serie de vivencias, delas que el resto de los suyos no han participado. Se entra en contacto con nuevas personas, ensituaciones distintas, se aprenden nuevos hbitos, se adquieren incluso, pasado un cierto tiempo,ciertos modos propios del nuevo grupo en el que se ha integrado.

    De esta manera nos encontramos ante una especie de bifurcacin. Cuanto ms tiempo dure laseparacin, mayor se va haciendo el distanciamiento, ms desfase hay entre la persona a la que serecuerda y la que es en la actualidad.

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico172

    ver (155), p.114159

    Hay medios de comunicarse, como el telfono o la correspondencia. Las cartas, entre personas quetengan una facilidad para expresarse de ese modo y se entretengan en llenar muchas pginas, sernsin duda un gran apoyo para tenerse mutuamente al da sobre los acaecimientos cotidianos, paraparticipar del mutuo crecimiento diario como persona. Con todo, hay una gran diferencia entre esedilogo epistolar y el t a t, cara a cara, pues no slo es lo que se piensa o un hecho objetivo en s,sino todo un cmulo de detalles, de forma de vida, que forman parte del mundo en que una personavive el da a da.

    Otro medio, como hemos citado, es el telfono. Sin embargo ste, aparte de poder or la voz y poderconversar, obteniendo respuestas al instante, en el fondo, e influenciado por su elevado coste, nopermite explicar lo mismo que una carta.

    Desde el punto de vista del ausente, el anhelo de restablecer la vieja intimidad, no solo con personas,sino tambin con cosas, es la caracterstica especial que se llama "aoranza". Sin embargo, el cambiodescrito en el sistema de significatividades y en el grado de intimidad es experimentado de maneradiferente por el ausente y por el grupo del hogar. Este ltimo contina su vida cotidiana dentro delesquema habitual.159

    Este sentimiento de aoranza puede ser recproco, pero tiene unas diferencias:

    El ausente, tiene ms fcil evocar la figura del hogar, de los que quiere, pues conoce dnde viven, quhacen cada da, etc. Ms difcil es para los que esperan en casa situar mentalmente al que se hamarchado. Un marino puede situar con el pensamiento a su familia e incluso, mirando el reloj, puedepensar: "ahora estarn cenando, ahora los nios estarn en el colegio, ahora dormirn..."

    Los familiares del marino se lo imaginarn en el barco, en un barco que tal vez no conocen, rodeadode unas personas de las que posiblemente sepan poco o nada, e ignoran si el barco se zarandea, onavega con buena mar, si llegar a puerto tal da o se retrasar.

    Durante el tiempo de ausencia, el marino ha sido miembro de una tripulacin, en la que haba personasde distintos caracteres y en el que todos han adoptado juntos unos horarios, han establecido unasrelaciones, han pasado ratos buenos y ratos malos, se han colocado apodos, han ejercido una profesiny han adoptado una especie de normas internas.

    El que es miembro de una tripulacin adquiere el sentido de pertenencia a ese grupo humano y en lalcanza un sentido su cargo profesional, a travs de unos modos propios de la gente de mar.

    En el marco de las instituciones totales, la reincorporacin a la vida externa plantea en generalproblemas. En el caso de los centros penitenciarios, preocupa el fenmeno de la reincidencia endelinquir cuando se produce la reinsercin temporal (caso de permisos) o la que se produce al acabar

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 173

    LARRAURI, F. Psicologa penitenciria: observaci i predicci de la conducta en els permisos de sortida. Barcelona,160 1994

    ver (155), p.115161

    la condena. Lo que interesa aqu destacar es como en los estudios hechos al respecto se pone demanifiesto la incidencia de la institucin cerrada en el desarrollo posterior de la persona en elexterior. 160

    Cuando el marino regresa a casa, se da cuenta de que cuando quiere explicar lo que ha vivido haycomo un cierto cortocircuito y tiene la sensacin que muchas de las cosas que explica o quisieraexplicar no son comprendidas. Una sensacin similar la experimenta de hecho cualquier persona queha hecho un viaje, con un grupo de amigos, que ha pasado una serie de peripecias y cuando llega acasa y quiere contarlo se da cuenta de que todo queda como desvirtuado.

    Pero Alfred Schutz nos seala otro problema. Dice as: Esta discrepancia entre la singularidad ydecisiva importancia que el ausente atribuye a sus experiencias y el hecho de que la personas delhogar las seudotipifiquen y les atribuyan una seudosignificatividad es uno de los mayores obstculospara el mutuo restablecimiento de las relaciones "nosotros" interrumpidas.161

    Es decir, que las personas que quedan en el hogar, que no han compartido las vivencias del ausente,se han imaginado un mundo en el que ste se desenvolva que ser siempre distinto al real. La gentede tierra ve al marino como lo ve en tantas pelculas, y entre esa imagen y la real hay siempre unagran diferencia. Aunque conozcan lo que es la vida de mar, siempre lo situarn mentalmente segnunos patrones que fcilmente divergern de los verdaderos.

    El que regresa al hogar, se encuentra as que vuelve a un hogar que no es el mismo que dej y que laspersonas, incluido l mismo, no son las que eran.

    Es una figura conocida de pelculas y novelas la del soldado que regresa de la guerra y sufre unaautntica conmocin. Claro est que en tiempo de guerra la gente en un corto perodo de tiempo puedesufrir grandes cambios y, as, es normal que el que regresa no identifique a los que encuentra, con losque dej. Pero tambin es parte importante del problema (seguimos a Alfred Schutz) que el soldadoque regresa, que durante meses ha estado viviendo en un rgimen militar, con una disciplina y unoscriterios de vida, de pronto se siente como desvalido, pues pierden significado toda una serie denormas, criterios y hasta una manera de ver el mundo.

    El marino se siente un tanto desorientado al volver al hogar. Por un lado, los horarios: en la mar secome a las 11 y se cena a las 6. Si haca una guardia de 4 a 8, se acostaba a las 10 o las 11 de la nochey se levantaba a las 3.45 de la madrugada. Hay marinos que al volver a casa, durante las primerosdas, se despiertan de madrugada, pues su cuerpo est habituado a un ritmo horario.

    Durante los meses en que ha estado solo, ha vivido en un camarote reducido, pero en l ha hecho lo

  • El buque mercante. Un anlisis sociolgico174

    HOHMAN, E. Seamen Ashore. New Haven, 1952162

    que le ha dado la gana. Ahora se encuentra con que tiene que acoplarse a un estilo de vida distinto yen el que tiene que participar mucho ms. En el barco, realiza su trabajo, pero en el tiempo libre, sino quiere, no habla con nadie. Esta actitud en el hogar no es aceptable.

    Si es un marino con cargo de mando, supongamos un capitn, nos encontramos con que a bordo es elque manda y al que, poco ms o menos, todo el mundo sirve. Un capitn italiano me contaba que unade las cosas que ms le chocaba, cuando estaba de vacaciones en casa, era ir a alguna oficina pblicay hacer cola. l que estaba acostumbrado a que en el barco, con una llamada, le traan al camarotelo que necesitaba y que, si era en tierra, el consignatario pona un taxi a su disposicin para ir aquo all...

    Una persona que ejerce un mando, que es obedecido en su mbito profesional, no suele aceptar demuy buena gana, que al llegar a casa le pongan cortapisas a su autoridad y lo conviertan en uno ms. Llegamos as a la conclusin de que el regreso no es fcil. Su dificultad depender entre otros muchosfactores, del tiempo que dure la separacin, de la frecuencia de sta y del contacto que se hayamantenido con la familia.

    En cualquier caso, el reencuentro requiere una cierta preparacin psicolgica, paciencia y mutuacomprensin. En realidad, y salvo casos que siempre pueden darse, a medida que va pasando el tiempoy, sobre todo, si los perodos de separacin son largos y los de convivencia cortos, se va produciendoun distanciamiento de las personas. Hay personas que al estar lejos suean con el reencuentro, peroque a los das de estar nuevamente juntos, discuten y no se sienten como en la espera pensaban.

    Este es uno de los motivos por los que se dice que el que quiere dejar la mar debe salir de ella todavajoven. Un marino, despus de 20 aos de navegacin, tiene dificultades para readaptarse a la vida detierra. Entre otras cosas, casi no tendr amigos y el tipo de trabajo y vida de tierra a la larga no leconvence.

    Cuando el marino se jubila tendr dificultades para adaptarse a lo que es la vida normal de tierra.Muchos marinos, pasado un cierto perodo de aos en la mar, temen el da en que no puedan volverya a su mundo familiar de la mar.162

    La reincorporacin a la vida del hogar no es, pues, fcil ni para el que regresa, ni para el que loespera. En muchos barcos extranjeros, especialmente bajo pabelln de conveniencia, tienen slo uno dos meses de vacaciones al ao. Si adems tenemos en cuenta que durante ese tiempo, casi nuncaven a sus familias, veremos que realmente se ha producido un desfase.

    En barcos espaoles, con frecuentes vacaciones, digamos 2 meses por cada 4 de trabajo, el problemaresidir en que durante el tiempo de vacaciones, el marino estar inicialmente en casa, sin saber quhacer, dado que durante ese tiempo el resto de la familia tendr sus quehaceres habituales.

  • Las relaciones del tripulante con el mundo exterior 175

    ver (139)163 ver tambin, FORSYTH, C. and BANKSTON, W.B.: The Social Psychological Consequence of Life at Sea: A Cause Model. Hants, 1984

    Aparte de la desconexin concreta y particular entre el marino y su familia, hay dos factores queintervienen dificultando el regreso del marino al hogar: el aislamiento a bordo, especialmente en elcaso de tripulaciones reducidas y el aislamiento social en general. Ambos factores afectan al marinoen el sentido de mermar la capacidad de un retorno exitoso a su familia.163

    Es decir que, aparte de los elementos considerados, como la falta de convivencia cotidiana, el habervivido durante perodos de tiempo largos situaciones distintas, etc., que justifican la dificultad quemuchas veces tiene el marino para reintegrarse en su propia familia, hay otros factores que producensimplemente una prdida de capacidad sociable, a causa del aislamiento experimentado por unapersona durante largo tiempo.

    4.6 La reincorporacin del marino a la sociedad de tierra

    Goffman describe una serie de procesos mentales que se producen en el interno antes de salir al mundolibre y al salir a l.

    Habla de ansiedad ante la idea de liberalizacin y estigmatizacin. El marino, despus de varios mesesa bordo, ms o menos separado de la sociedad con la que ha mantenido un contacto irregular, muyen dependencia con el tipo de lnea que haga su barco, al haber recibido noticias que no ha vivido, haadoptado una rutina de vida, con unos problemas profesionales o personales que ha ido resolviendo,pero siempre como individuo o como miembro de una tripulacin.

    A nivel de su pueblo o ciudad, cuando llega de la mar, lo mira todo un poco como si tuviera que irredescubriendo lugares.

    Los clubs, las asociaciones recreativas, culturales, polticas, todo ello ha seguido su curso y l es unvisitante.

    As, el marino, que a bordo tiene un lugar, que a pesar de todas las deficiencias de la vida de a bordo,de todos los aislamientos, etc., sabe que es parte de una tripulacin en la que desarrolla un funcindeterminada, cuando se acerca el momento de dejar el barco, siente una cierta inquietud, llmesenerviosismo o ansiedad. Claro est que depender de cada persona, de su familia, de la relacin quehaya mant