Universidad InterNaciones Historia del Arte II Literatura y Narración Romántica Edduin Arrué - 14010032 Efraín Castillo – 14010008 Características de la literatura romántica: • Lírica. • El amor pasional. • Fuga del mundo que les rodea. • Atracción por lo nocturno y misterioso. • Subjetivismo. • La rebeldía. • La evasión. • El nacionalismo. • La naturaleza. • Imágenes. Narración Romántica: Mi nombre es Gustavo Miller, recuerdo que en mi infancia mis padres me enseñaron a siempre trabajar para alguien más. En la etapa de mi madurez; mi vida fue muy diferente a lo que es ahora. Todos los días giraban alrededor de intenso trabajo en el campo. La verdadera aventura comenzó cuando me di cuenta que era un subordinado, dependía de un jefe para sobrevivir. Tomé la decisión de independizarme y comenzar a ser el autor de mi propio trabajo. Fue difícil al principio, ya que al irme debía renunciar al hecho de estar con la mujer que he amado durante años; Amanda. Ella aún no sabía sobre mis sentimientos hacia su persona, pero estoy seguro que ella sentía lo mismo por mí. Sin embargo, decidí partir. Cinco años después, con esfuerzo y dedicación logré mi objetivo: Ser dueño de mi propio huerto. Mis sentimientos por Amanda no solo permanecían, habían aumentado debido a mi expectativa de vida. Regresé al huerto de mi antiguo jefe, solo para enterarme que Amanda había partido tres días después de mi partida. Realmente me arrepentí de nunca haberle confesado lo que sentía. Pero la esperanza no se había perdido, ya que uno de los guardias me dijo que ella había ido en la misma dirección en que yo había tomado. Esto me sorprendió, ya que nunca vi pasar a nadie cerca de mi huerto. La única posibilidad es que estuviera en un terreno localizado entre ambos huertos. Fui hasta dicho terreno, cuando llegue ya era de noche. Para mi sorpresa había una casa recién construida. Me asomé a la ventana y allí estaba, la bella Amanda cocinando la cena. A penas tuve tiempo para asimilar la realidad cuando sentí un golpe muy fuerte en la cabeza. Mi reacción inmediata fue voltearme y regresar el golpe. Como estaba oscuro no sabía quién era, pero la pelea no se detuvo. De pronto escuché la voz de Amanda gritando que nos detuviéramos mientras nos alumbraba con una lámpara. El sujeto al que golpeaba era su esposo, Alfonso. Yo solo me levanté, me disculpé y me retiré hacia mi huerto. El día que comencé mi sueños, debí hacerlo acompañado de Amanda.