PwC Perú - César Puntriano - El Peruano

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4-5 suplemento de análisis legal Martes 28 de abril de 2015 EN SUBCONTRATACIÓN DE SERVICIOS CÉSAR PUNTRIANO ROSAS Director del área laboral de PriceWaterhouseCoopers (PwC). Docente universitario. E l título de este trabajo ‘prevención de riesgos laborales’(1) no es antojadizo, pues parte del supuesto comprobado que la prevención, a todas luces, es la mejor posición que puede asumir el empleador en materia de seguridad y salud en el trabajo, prevenir antes que lamentar reza un popular adagio. La regulación sobre seguridad y salud en el trabajo plasma como eje fundamental de la misma a la prevención, estableciendo que “el empleador garantizará, en el centro de trabajo, el establecimiento de los medios y condiciones que protejan la vida, la salud y el bienestar de los trabajadores, y de aquellos que no teniendo vínculo laboral prestan servicios o se encuentran dentro del ámbito del centro de labores”. En la descentralización productiva, ya sea subcontratación de prestación de servicios o eje- cución de bienes (tercerización) o de mano de obra (intermediación laboral), los riesgos laborales no se encuentran ausentes, teniendo este esquema de organización empresarial la presencia de más de un empleador responsable de la seguridad ocu- pacional del personal involucrado en el servicio. Notemos que esta pluralidad se materializa en un esquema de desplazamiento de personal hacia el lugar de trabajo (2) que indique el cliente, lo que en nuestra normativa gatilla la aplicación de la Ley N° 29245 y normas reglamentarias en lo relativo a la tercerización (3), y a la Ley N° 27626, en la intermediación laboral. Responsabilidad Un primer ámbito que se presenta en este esquema es el deber del empleador contratista de otorgar adecuadas condiciones de seguridad ocupacional a sus trabajadores desplazados. Es indispensable, pues, que el empleador verifique que el trabajador posea información teórico-práctica suficiente respecto al puesto de trabajo a ocupar (4); de no ser así, deberá facili- tarle la formación en forma previa a la prestación de servicios (5). Esta obligación formativa recae tanto en el empleador que intermedia personal (destaque o provisión de mano de obra) como en el empleador que provee servicios (subcontrata- ción de servicios), requiriéndose la participación activa en ambos casos del empleador cliente que recibirá al personal. Es posible, y recomenda- ble en algunos casos, que el empleador cliente (principal) realice esta formación con cargo al empleador que presta servicios. Sobre el particular, el artículo 77 de la Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo (LSST) dispone que los trabajadores que mantengan vínculo la- boral con el empleador o con contratistas, sub- contratistas, empresas especiales de servicios o cooperativas de trabajadores que hayan celebrado contrato con el empleador tienen derecho a través de sus empleadores respectivos al mismo nivel de protección en seguridad y salud en el trabajo. Esto significa que el empleador contratista deberá replicar en su personal aquel nivel de pro- tección que el cliente posea para el suyo, en tanto, sin duda, exista similitud en los riesgos laborales a los que se encuentren expuestos los trabajadores. Conviene añadir que de detectarse el incum- Incumplimientos Si bien la norma no lo señala expresamente, creemos que en caso de que el tercero (contra- tista) no cumpla, la empresa princi- pal podrá asumir las obligaciones y luego repetir contra su presta- dor de servicios para cobrarse el costo de las mismas. Nótese también que el artículo 103 de la LSST indica que la empresa prin- cipal responde directamente por las infracciones que cometan por el incumplimien- to de la obligación de garantizar la SST de los trabajadores de los contratistas y subcontratistas que desarrollan actividades en sus instalaciones. Prevención de los riesgos laborales

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4-5 suplemento deanálisis legal Martes 28 de abril de 2015

EN SUBCONTRATACIÓN DE SERVICIOS

CÉSARPUNTRIANO ROSAS

Director del área laboral de PriceWaterhouseCoopers (PwC). Docente universitario.

El título de este trabajo ‘prevención de riesgos laborales’(1) no es antojadizo, pues parte del supuesto comprobado que la prevención, a todas luces, es la mejor posición que puede asumir el

empleador en materia de seguridad y salud en el trabajo, prevenir antes que lamentar reza un popular adagio.

La regulación sobre seguridad y salud en el trabajo plasma como eje fundamental de la misma a la prevención, estableciendo que “el empleador garantizará, en el centro de trabajo, el establecimiento de los medios y condiciones que protejan la vida, la salud y el bienestar de los trabajadores, y de aquellos que no teniendo vínculo laboral prestan servicios o se encuentran dentro del ámbito del centro de labores”.

En la descentralización productiva, ya sea subcontratación de prestación de servicios o eje-cución de bienes (tercerización) o de mano de obra (intermediación laboral), los riesgos laborales no se encuentran ausentes, teniendo este esquema de organización empresarial la presencia de más de un empleador responsable de la seguridad ocu-pacional del personal involucrado en el servicio. Notemos que esta pluralidad se materializa en un esquema de desplazamiento de personal hacia el lugar de trabajo (2) que indique el cliente, lo que en nuestra normativa gatilla la aplicación de la Ley N° 29245 y normas reglamentarias en lo relativo a la tercerización (3), y a la Ley N° 27626, en la intermediación laboral.

ResponsabilidadUn primer ámbito que se presenta en este esquema es el deber del empleador contratista de otorgar adecuadas condiciones de seguridad ocupacional a sus trabajadores desplazados.

Es indispensable, pues, que el empleador verifique que el trabajador posea información

teórico-práctica suficiente respecto al puesto de trabajo a ocupar (4); de no ser así, deberá facili-tarle la formación en forma previa a la prestación de servicios (5). Esta obligación formativa recae tanto en el empleador que intermedia personal (destaque o provisión de mano de obra) como en el empleador que provee servicios (subcontrata-ción de servicios), requiriéndose la participación activa en ambos casos del empleador cliente que recibirá al personal. Es posible, y recomenda-ble en algunos casos, que el empleador cliente (principal) realice esta formación con cargo al empleador que presta servicios.

Sobre el particular, el artículo 77 de la Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo (LSST) dispone que los trabajadores que mantengan vínculo la-boral con el empleador o con contratistas, sub-contratistas, empresas especiales de servicios o cooperativas de trabajadores que hayan celebrado contrato con el empleador tienen derecho a través de sus empleadores respectivos al mismo nivel de protección en seguridad y salud en el trabajo.

Esto significa que el empleador contratista deberá replicar en su personal aquel nivel de pro-tección que el cliente posea para el suyo, en tanto, sin duda, exista similitud en los riesgos laborales a los que se encuentren expuestos los trabajadores.

Conviene añadir que de detectarse el incum-

IncumplimientosSi bien la norma no lo señala expresamente, creemos que en caso de que el tercero (contra-tista) no cumpla, la empresa princi-pal podrá asumir las obligaciones y luego repetir contra su presta-dor de servicios para cobrarse el costo de las mismas. Nótese también que el

artículo 103 de la LSST indica que la empresa prin-cipal responde directamente por las infracciones que cometan por el incumplimien-to de la obligación de garantizar la SST de los trabajadores de los contratistas y subcontratistas que desarrollan actividades en sus instalaciones.

Prevención de los riesgos laborales

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SEGURIDAD OCUPACIONAL

EL EMPLEADOR DEBERÁ VERIFICAR QUE EL TRABAJADOR POSEA INFORMACIÓN SUFICIENTE DEL PUESTO DE TRABAJO A OCUPAR. DE LO CONTRARIO, DEBERÁ FACILITARLE FORMACIÓN PREVIA A LA PRESTACIÓN DE LOS SERVICIOS.

Contratistas y empresa principalDe todo lo expuesto podemos concluir que si bien la subcontratación se presenta como una forma flexible de organización empresarial que permite a la empresa ser más efi-ciente al concentrarse en su núcleo esencial (core business) y encargar (des-centralizar o externali-zar) a terceros actividades periféricas, e inclusive algunas principales, esta

flexibilidad de ningu-na manera exime a las empresas involucradas de sus responsabilidades en materia de seguridad y salud en el trabajo. En efecto, tanto el contratista y la empresa principal poseen deberes esencia-les en esta materia que deberán cumplir a cabalidad, toda vez que la seguridad laboral posee como sustento

último a la dignidad de la persona humana, siendo esta un principio-derecho que surge como un imperativo orientador de nuestro ordenamiento jurídico y de las actua-ciones de los operadores del mismo, como el empleador, con el fin de garantizar la suprema-cía de la persona, tanto individualmente como en el aspecto social.

[1] Dedicado a mi esposa Katia Pasco, quien hoy cumple un año más de vida. [2] Resulta más apropiado emplear el término ‘lugar de trabajo’ en vez de centro de trabajo pues, de acuerdo con el artículo 3 c) del Convenio N° 155 de la OIT, establece que esta expresión abarca todos los sitios donde los trabajadores tienen que permanecer y adonde tienen que acudir por razo-nes de su trabajo y que se hallan bajo el control directo o indirecto del empleador. [3] En tanto las actividades a realizar sean principales para la empresa que recibe el servicio.[4] La normativa en seguridad y salud en el trabajo requiere que el empleador comunique a su personal recomendaciones en relación con los riesgos en el centro de trabajo, particular-mente aquellos relacionados con el puesto o función, a efectos de que el trabajador los conozca, así como las medidas de protección y prevención que debe adoptar o exigir al empleador. [5] LÓPEZ-ROMERO GONZÁLEZ, María Piedad. Presencia de trabajadores puestos a disposición en la empresa usuaria y prevención de riesgos laborales. Comentarios a la Ponencia Temática I presentados en el X Congreso Nacional de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, Zaragoza, 28 y 29 de mayo de 1999. p.522. [6] Esta responsabilidad derivada de un incumplimiento laboral deberá ventilarse en un proceso laboral aplicando las normas del Código Civil sobre inejecución de obligaciones. [7] NICOLAS BERNAD, Alberto. La descen-tralización productiva y la responsabilidad empresarial en el ámbito de la seguridad y salud en el trabajo. Comunicación a la Ponencia General presentada en el X Congreso Nacional de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, Zaragoza, 28 y 29 de mayo de 1999. p.235. [8] LOPEZ-ROMERO, ibid. p.518-522. [9] Vid. Nota 4.

plimiento por parte del empleador de alguna de sus obligaciones contenidas en la LSST o en las normas sectoriales, el empleador será pasible de ser sancionado económicamente en aplicación de la Ley General de Inspección del Trabajo y su respectivo reglamento.

Es más, si se produce algún infortunio laboral, el trabajador involucrado o sus familiares legiti-mados podrán activar al aparato jurisdiccional para verse resarcidos económicamente mediante una demanda de pago de indemnización por daños y perjuicios, en tanto el empleador no pueda demostrar que actuó en forma diligente. Tengamos en cuenta que al tratarse de un deber de seguridad propio de la relación laboral, su infracción y posterior daño generan la posibili-dad de que el empleador sea condenado a pagar una indemnización por daños derivados de su responsabilidad contractual o, mejor dicho, irresponsabilidad (6). Como veremos luego, el cliente (empresa principal) podrá responder por la indemnización si incumple con el deber de vigilancia que detallamos más adelante.

Usuario o cliente de los serviciosSe genera una obligación de seguridad y salud adicional o añadida a la que como propia empresa, y prescindiendo de su condición de principal, le corresponde al cliente, respecto de sus propios trabajadores (7), pues deberá cumplir con un deber in vigilando de verificar que quienes le desplazan personal cumplan con la normativa en materia de seguridad ocupacional.

Al respecto, existen cuatro ejes fundamentales sobre los que se cimienta la responsabilidad del empresario cliente (8):

a) Información.– La empresa usuaria o cliente deberá informar al trabajador desplazado o des-tacado sobre los riesgos derivados de su puesto

de trabajo, a través de su empleador. Los riesgos que requieren ser informados son aquellos que concurran de manera general en la empresa, como los específicos en el puesto de trabajo y las tareas a desarrollar, así como las medidas y actividades de prevención y protección (9).

La empresa usuaria o cliente, asimismo, debe recabar información necesaria del empleador contratista para asegurarse que el trabajador destacado: (i) ha sido considerado apto a través de un reconocimiento médico adecuado para realizar los servicios que deba prestar, (ii) posee las calificaciones, capacidades y formación requeridas para desempeñar las tareas que se le encomienden en las condiciones que vayan a efectuarse.

No deberá permitirse el inicio de la prestación de servicios del trabajador hasta que no se tenga constancia de que se han cumplido las mencio-nadas obligaciones.

b) Formación.– El cliente deberá verificar, como se señaló anteriormente, que el trabaja-dor a ser desplazado se encuentre debidamente calificado para las actividades a desarrollar. Este deber de formación recaerá en su empleador. c) Vigilancia de la salud.– La vigilancia de la salud es responsabilidad de la empleadora contratista, siendo altamente recomendable su verificación por parte de la empresa cliente. Nótese que para nuestra legislación la vigilancia de la salud del personal de las contratistas recae en la empresa principal (RM Nº 571-2014/Minsa). Opinamos que la principal válidamente podría exigir al cliente el reembolso del monto invertido.

d) Igualdad de trato.– Debe existir un trato equitativo en seguridad y salud en el trabajo por parte de la empresa cliente entre su personal y el perteneciente al contratista, en tanto se en-cuentren expuestos a riesgos laborales similares.

EmpleadoresRespecto a las obligaciones de la empresa cliente, la LSST establece en su artículo 68 que el em-pleador en cuyas instalaciones sus trabajadores desarrollen actividades conjuntamente con tra-bajadores de contratistas, subcontratistas, em-presas especiales de servicios y cooperativas de trabajadores; o quien asuma el contrato principal de la misma es quien garantiza:

i) El diseño, implementación y evaluación de un sistema de gestión en seguridad y salud en el trabajo para todo el personal que se encuentre en un mismo centro de labores.

ii) El deber de prevención en seguridad y salud de los trabajadores de todo el personal que se encuentra en sus instalaciones.

iii) La verificación de la contratación de los seguros de acuerdo con la normativa vigente efectuada por cada empleador durante la ejecu-ción del trabajo.

iv) La vigilancia del cumplimiento de la nor-mativa vigente en seguridad y salud en el trabajo por parte de los contratistas.

Nuestra norma recoge el deber in vigilando del empleador cliente o principal, y le exige ga-rantizar la seguridad y salud de los trabajadores de terceros, para lo cual deberá no solamente proveer de instalaciones seguras en las cuales los trabajadores laboren, sino también compro-bar que las empresas empleadoras cumplan con sus deberes relativos a la seguridad y salud en el trabajo (SST).

Es imperativo ejercer dicho deber, pues de no verificarse la contratación de seguros o el cumpli-miento de la normativa en SST, la empresa principal responderá solidariamente (conjuntamente) con el empleador por los daños e indemnizaciones que pudieran generarse. Por ello, es fundamental que los clientes auditen a sus contratistas en esta materia. ◗