Download - Lv g 201506230431 Lb

Transcript
  • MARTES, 23 JUNIO 2015 C U L T U R A LAVANGUARDIA 43

    CRT ICA DE ROCKCRT ICA DE MSICA CLSICA

    David Vias redescubre en Sin miedo a Borges al escritor parsito, el hednico, el explorador o el escptico

    Quin temeaBorges?NRIA ESCURBarcelona

    ElBorges parsito, el he-dnico, el enciclopdi-co, el explorador, el dis-ponible, el escptico oel impostor, todos esos se propu-so explicar David Vias Piquer(Barcelona, 1968) en Sin miedo aBorges (Elba). Un atrevimientoque l mismo profesor de teorade la literatura y literatura Com-parada de laUB reconoce. Otrolibro sobre Borges? Y sin embar-go consigue el autor que descu-bramos lo nuevo en lo ya dicho.Con ingenio ensaystico y muchoestudio previo. Cuando tena 14o 15 aos un profesor lleg sin ga-nas de explicar y nos reparti uncuento. Se titulabaEl libro de are-na y el autor era un tal Borges. Lole y no entend nada de nada, pe-ro sal de clase y empec a buscary comprar todo lo de Borges por-que me pareci mgico. As quemi formacin literaria empezcon un cuento que no entend yun maestro que en realidad nun-ca tuve explica Vias as queintento saldar esa deuda.Es as como partimos de ese

    Borges que insiste Vias algu-nos abandonan al leer porque noentienden lo que se estn per-diendo. Impart durante aoscursos de doctorado y mster enlos que se inclua a Borges. Ob-serv que mucha gente se sienteexpulsada de su obra porque en-cuentra en ella recursos extra-os. Vias sinti la necesidad deexplicar que esos recursos for-man parte de un proyecto litera-rio original y que slo conocien-do eso se puede adoptar la acti-tud de lectura adecuada ante eseautor.Tanta bibliografa inabarcable

    sobre l puede provocar, efecti-vamente, un efecto paralizante.Vias prefiere introducirnos asu-miendo que sus cuentos revier-ten en historias ya contadas.

    Borges defenda, pues, la lecturaanrquica, nunca obligatoria.En 2007 Pierre Bayard public

    un ensayo titulado Cmo hablarde los libros que no se han ledo.Borges va ms all: habla de li-bros que no se han escrito. Algu-nos de quienes le conocieron ase-guraban que tena una inteligen-cia prodigiosa pero no eraerudito. No aspiraba a ello.El Borges explorador evoca los

    antecedentes familiares milita-res. Siente que los hombres de

    accin necesitan poetas que re-cuerden sus gestas. Su literaturaera criolla en cuanto le interesabapasear por su pas como turista,no como argentino. Son otrosquienes le han atribuido a Borgesvirtudes y defectos, eso le con-vierte en traidor si no hace lo queotros esperan. Es, en fin, un es-critor escptico (soyms rico enperplejidad que en certidum-bre) que dijo lo siguiente: Loscatlicos argentinos creen en unmundo ultraterreno, pero he no-tado que no se interesan por l. Amme ocurre lo contrario: me in-teresa pero no creo.El Borges disponiblemantiene

    comodijo enunaocasin enunaentrevista que el silencio es unaopinin y el Borges impostor re-conoce ustedes se equivocanconmigo. Yo soy una alucinacincolectiva. Imprescindible releerBorges y yo. Sea como fuere, supoder magntico lo evoca EstelaCastro al recordar la devocin dequienes le escuchaban: La genteno iba a una conferencia: iba amisa.c

    LEX GARCIA

    El profesor de literatura David Vias consigue que descubramos lo nuevo en lo ya dicho

    Algunos abandonansu lectura porqueno entienden lo quese estn perdiendo,defiende el autor

    Porque el escritor argentino,que mantuvo siempre que casitodoestabadicho, desconfiabadelas autoras. Todos los hombresque repiten una lnea de Shake-speare son William Shake-speare. Borges cree que el pla-gio existe como fase lgica por laque pasa el escritor principiante.Todo texto es un tejidode citas,admite en la lnea de tericos co-mo Barthes, Kristeva o Derrida.As pues, si no hay autor origi-nal es que todos los autores sedeben cosas los unos a los otros.El Borges hednico ocupa tam-

    bin su lugar en el libro. Siem-pre le libros por pura emocinesttica. Yunpocoms all: Yo,como el resto del universo, no heledo el Ulises. Pero leo y releocon felicidad algunas escenas.

    Intensidade interiorResidnciesMusicalsIntrpretes:OscarAlabau,violon-celo;BenBaker, violn; Jean-SelimAbdelmoula,pianoLugaryfecha:LaPedrera (21/VI)

    JORGE DE PERSIA

    Seguramente dentro de unos aos,en el catlogo de estas ResidnciesMusicals de La Pedrera podremosencontrar los primeros pasos dequienes para entonces sern nues-tras figurasde la interpretacin.Noexagero, si siguentrabajando

    con la intensidad y la conscienciacon que lo hacen ahora; vaya nom-breslosquehanpresentadolastrestemporadas que lleva la singularexperiencia coordinada por RosaMaria Plans: Lus Gran, AnnaAls, Enrique Bagara, Elena Rey,Pau Codina, Ignasi Cambra, Marc

    Heredia, Vctor de la Rosa y OscarAlabau, que ofrecieron recitales asoloydecmara.Ah, otra sugeren-cia, staparaprogramadores: estosrecitales son una ocasin estupen-da para valorar y comprar progra-masquecuestamuchopreparar. Sino han estado presentes, supongoque La Pedrera los ha grabado; al-gunosdeestosmsicosyatransitanescenarios internacionales.Esta ltima Residncia de la

    temporada estaba centrada en elvioloncelistaOscarAlabau (Barce-lona, 1988), de slida formacin,que estuvo acompaado de dos j-venes de su generacin tambinformados en escuelas internacio-nales.Yentro,prepararonunpro-grama atractivo, sutil y a la vez in-tenso, que conjug la interioridaddelNocturno enMibemoldeSchu-bert, los deliciosos Estudios en for-madeCanon para tro con pianodeSchumann, y el imponente y arre-

    batadorTro enLamenor, deChai-kovski.Alabaudisponedeunsonidocon

    cuerpo y gran musicalidad. Muycuidada la tcnica, proyecta unapersonalidadafnal lirismo, a la in-tensidad tanto expansiva como n-tima,para loqueesteprogramafueuna demostracin ideal. Es ciertoque el lenguaje del Tro de cmaraes interdependiente, y tanto el vio-ln Baker como el piano de Abdel-moula, adems de coincidir en laintensidad de la expresin, exhi-bieronmuybuena tcnica.Algo alterados algunos peque-

    os pasajes de transicin del Trode Chaikovski (es una obra majes-tuosa,difcilyelloesnormalenunaprimeraversinenconcierto)perosiempre en funcin de darlo todo,dejugarconcontrastes,deunenor-me entusiasmo. Y en toda esta in-tensidadexpresivaclidoysutilelcellonosedescuidlavertientel-ricaypoticasustancialqueencon-tren ladelicadeza tanbienexpre-sada del Schumann o en ese pro-fundo sentimiento que va y vienedelNocturnodeSchubert.c

    TracaKissLugaryfecha:PalauStJordi(21/VI)

    KARLES TORRA

    Kissechaandarypublicsupri-mer disco en 1974. Caracteriza-dosconmaquillajesyconestrafa-larios ropajes, escupan fuego ysangre, cautivando la imagina-cindemuchosteenagersenlos70. El grupo ha perdurado hastahoy, vendiendo la friolera demsdecienmillonesdediscos.En la gira de su 40 aniversario,

    Kiss present un lujoso espect-culovisual,unbuenmanejodelostrucos circenses ymucha,muchapirotecnia.Dentrodeun reperto-rio de corte antolgico, y entre elestallido de innumerables tracas,el grupo revis en la parte inicial

    algunos de sus primigenios hitscomo Detroit rock city o Deuce.Para acometer poco despus unainteresante revisin de su lbumCreatures of the night (1982), conuna esplndida interpretacin deWarmachineyelyaclsiconme-rodeSimmonsescupiendofuego.El espectculo alcanz el cenit

    a propsito de una extenssimarecreacin de Lick it up, utilizan-do elWont get fooled againde losWho como puente y desembo-cando en otro nmero de Sim-mons, que esta vez escupe sangrey vuela. Ya con el mximo prota-gonismo para Paul Stanley, quetambin vuela y en su caso parainterpretar Love gun desde elcentro de la pista, Kiss cerr elconcierto con Black Diamond, suprimer single de 1974. Reservan-do su emblemtico Rock and rollallnite,comotracafinalenunasu-perpirotcnica tandadebises.c

    La literatura obligatoria es absurda]Si al empezar un libro note gusta, djalo. Unamxi-madeBorges que incluyetodos los derechos del lec-tor. A saber: el derecho a leersaltndose pginas, a hojear,el derecho ano terminar ellibro, pero tambin a releerpasajes concretos que danplacer cuando ya la infeccindel bovarismo resulta inevi-table. As lo resumeVias yas lo creaMontaigne.Borges fue un inslito profe-sor deFilosofa yLetras en laUniversidaddeBuenosAi-res, que no segua pautas,

    algo que le acarre algunaenemistad conhomlogos.La literatura obligatoria estan absurda como la felici-dad obligatoria.No ensea-ba ni listas ni nombres nifechas ni datos acadmicos...prescinda de citas eruditasy evocaba las buenas horasque, de nio, pas, simple-mente, hojeando enciclope-dias en la biblioteca de supadre, profesor dePsicolo-ga. O cuando le acompaabaa laBibliotecaNacional. Allse hizo la foto de la portadadel libro.