Figura 70. Vista del complejo desde el muelle de cocos y ganado de Julián Patrón. En primer plano el viejo muelle de mangle y tablas que ya había sido abandonado y destruido; al

fondo a la derecha, casi como línea del horizonte, el muelle principal. Coveñas, 1921

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 71. Vista de los muelles desde Rancho Grande. A la derecha el viejo muelle de ganados, a la izquierda el nuevo. Coveñas, 1939

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 72. Muelle para embarcaciones pequeñas, también construido con pino canadiense creosotado. En la playa, gran plantío de cocoteros. Coveñas, 1921

Foto por cortesía de Muriel A. KeelerLa fotografía precedente (Figura 72), contiene detalles únicos que corresponden a las siguientes situaciones:

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Es la única fotografía que existe del muelle pequeño y donde se pueden observar detalles de su estructura. De este muelle pequeño solo quede esta fotografía para su conocimiento.

En la coquera que se observa al fondo del muelle pequeño, especialmente en la parte localizada a la izquierda de la fotografía, se alcanzan a distinguir los techos de palma de algunas de las casas allí construidas y que correspondían a un asentamiento humano denominado “Pueblo Nuevo”, pequeño conjunto de casas que fue utilizado como vivienda por los peones de Don Julián Patrón y que posteriormente desapareció por la incursión del mar hacia este sitio. Así, actualmente no existen, ni el muelle, ni la coquera ni las casas y toda esa área fue cubierta por el mar. Para referencia, esta zona corresponde exactamente a la parte marina situada frente a las dos primeras casas de la Villa que se encuentran frente al mar de occidente a oriente.

En todo caso, la desaparición de esta zona costera, con el plantío de cocos y las casas de los peones y su reemplazo total por el mar es, por decir lo menos, extraña y curiosa ya se esperaría que la zona estuviera situada en tierra firme (donde construir casas) y con escasa erosión (evidenciada por la exuberante vegetación observada en la foto). Sin embargo, ya hemos visto como el mar es inexorable en su avance en algunas zonas mientras otras permanecen indemnes por años, resguardadas del embate de los elementos por la topografía, la dirección de las mareas o simplemente, el destino.

3.4.5 MATERIALES Y ACTIVIDADES DE CARGA Y DESCARGA

El cemento para la construcción, de tipo Portland, contenido en barriles de seiscientas libras llegó desde los Estados Unidos. Era descargado desde el barco hacia los bongos, de estos hacia las lanchas y luego hacia al muelle, donde se trasladaban a plataformas abiertas situadas sobre los rieles para ser llevados a las bodegas. Para 1921 se habían empleado en la construcción 8.000 barriles de 600 libras de cemento, cantidad que en total pudo haber ascendido a 20.000 barriles al terminar la construcción de las instalaciones en 1923.

Figura 73. Trabajadores descargan barriles de cemento desde la Chiquimula hacia el muelle. A la derecha se observa parte de otra de las lanchas.

Coveñas, Nov 16 de 1920

Figura 74. Detalle de la Chiquimula descargando en el muelle del Packing House en Coveñas. Los

barriles de cemento están en una plataforma sobre rieles para ser llevados a las bodegas. Coveñas,

Nov 16 de 1920

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

El cemento en barriles era almacenado temporalmente en las bodegas con otros materiales de construcción. Las bodegas serían el sitio de almacenamiento de los

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materiales, herramientas, repuestos y productos dispuestos en estantes y catalogados convenientemente. A pesar de la exhaustiva ventilación superior, sus techos y paredes de láminas de zinc las hacían especialmente calurosas, mas no húmedas, asunto que favorecía la conservación en seco del cemento. Durante la época de Sagoc las paredes fueron hechas de mampostería hasta media altura.

Figura 75. Construcción de las bodegas de almacenamiento de materiales. Coveñas, 1920

Figura 76. Otro aspecto de la construcción de dos de las tres bodegas de almacenamiento de

materiales. Coveñas, 1921

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Las tres bodegas construidas por la Colombia Products Co. tenían pesadas puertas corredizas de acceso por sus costados norte y sur. A través de ellas pasaba la línea férrea que conducía los vagones y plataformas de carga desde los muelles para facilitar las operaciones de ingreso y salida de los materiales allí dispuestos.

Estas bodegas fueron conservadas hasta la época de la Sagoc y sirvieron como oficinas y bodegas de almacenamiento de materiales propios de la industria del petróleo; pasaron a ser propiedad de la Base Naval ARC Coveñas y fueron demolidas en años recientes para dar paso a zonas verdes y plazoleta de tránsito de la Escuela de Infantería de Marina.

3.4.6 LA PLANTA DE LADRILLOS

Los ladrillos requeridos para la construcción, de vivo color rojo anaranjado, fueron fabricados in situ en el horno y elaborados con arcilla traída de la cantera situada al Este de la represa de Villeros. La planta de ladrillos fue instalada inmediatamente por detrás de los talleres y plantas. Allí se elaboraron 1.500.000 ladrillos (220.000 en cada hornada de 10 días) con los que se construyó RANCHO GRANDE y algunas de las otras instalaciones (tales como las barracas de los obreros, las casas para las familias de los obreros, las edificaciones para las plantas de energía, talleres y casa de calderas, ya que las casas de habitación del personal de dirección y las demás edificaciones fueron construidas en madera y parte de las paredes de las bodegas en láminas de zinc).

Figura 77. Planta de ladrillos. A la derecha horno y su chimenea; a la izquierda el depósito de

ladrillos. 1920

Figura 78. Depósito de ladrillos. Coveñas, julio de 1920

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Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 79. Localización de la planta de ladrillos y otras construcciones. Coveñas, julio de 1920

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

3.4.7 TRABAJOS EN MADERA. LA CARPINTERÍA

La madera utilizada para la construcción de los acabados de las edificaciones (marcos, puertas y ventanas, divisiones, paredes y soportes de techos de las casas) era el pino rojo canadiense, traído por barcos. Era desembarcada hacia barcazas o planchones y botadas desde estos al mar cerca de la playa donde las recogían los trabajadores y las llevaban a sitios temporales de lavado con agua dulce y secado para su uso posterior.

También era de pino canadiense la madera creosotada utilizada para la construcción de los pilotes de soporte y de las vigas y tablas de la plataforma del muelle principal y el muelle pequeño de ganados. La madera desechable utilizada para las diversas actividades el trabajo diario y de uso transitorio para las formaletas requeridas especialmente por Rancho Grande, era obtenida de los silvestres plantíos de roble, guayacán, abarco y otro árboles maderables de la misma región de Coveñas, especialmente por la zona de la represa de Villeros. Todos los trabajos de madera fueron realizados en la carpintería construida por la Colombia Products Co. en la parte Oeste de las edificaciones dispuestas para las plantas de energía. Allí se hicieron los marcos de puertas y ventanas, los ventanales, las columnas y vigas de las casas y edificaciones de madera y sus correspondientes tablados para paredes, escaleras y techos, todos en pino rojo canadiense.

Figura 80. Barcaza descargando madera para la construcción de la planta. Coveñas, 1920

Figura 81. Barco con madera para la construcción. Coveñas, 1921

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Foto del archivo personal del autor Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

La carpintería, con toda su maquinaria y herramientas, también sobrevivió al tiempo. Sierras para el corte de la madera, tornos y un sinnúmero de herramientas, todo importado y de la mejor calidad e instalados una amplísima edificación bien ventilada, fueron los elementos con que contaba Víctor Jennings, capataz de los carpinteros y quien según Earl H. Austin, era muy competente y amo de la inventiva en el idioma español, para trabajar y enseñar a los carpinteros colombianos este arte que desempeñaron con gran profesionalismo y habilidad y que transmitieron a varias generaciones posteriores en la época de la Sagoc.

3.4.8 EL ACUEDUCTO

El acueducto desde la represa de Villeros hacia las instalaciones del Packing House fue construido con tubería de ocho pulgadas. Surtía primero el estanque pequeño o reserva de servicio y seguía con un ramal hasta un tanque de concreto situado en tierra, detrás de la rampa Sur de acceso de ganado, donde se realizaba la aireación del agua y el tratamiento de sedimentación con precipitantes (alumbre). Luego era bombeada hacia los tanques de cloración dispuestos en una caseta al norte del tanque de aireación y desde allí se bombeaba al tanque blanco con rayas rojas, de 150.000 galones de capacidad, elevado a 34 metros de altura desde donde era distribuida a todo el complejo con una alta presión.

El tanque elevado era y es la estructura mas elevada del complejo. Además de los 34 metros de su propia altura, fue construido en la colina posterior a Rancho Grande, de unos 4 metros de altura, por lo que la altura total de la estructura sería de alrededor de 38 metros.

La extensión total del acueducto era de ocho kilómetros, incluidos los ramales construidos para suplir del líquido las instalaciones industriales, residenciales, el muelle y los barcos. Surtía también los hidrantes, monitores y mangueras dispuestas para el sistema de extinción de incendios, distribuidos por toda la planta. Los hidrantes de alta presión se encontraban estratégicamente instalados cerca del matadero, del frigorífico, de las bodegas y particularmente de las casas de madera destinadas para oficinas, hospital, lavandería, club y residencias de los empleados de mayor rango, así como cerca de las barracas de los obreros. Junto a los hidrantes se situaban grandes carretes de mangueras de caucho reforzadas con lonas, que debían ser conectadas a los hidrantes en caso de incendio y estos debían ser operados con llaves especiales para proveer el suministro de agua a presión.

Figura 82. Tanque elevado para depósito y distribución del agua instalado en 1923. Coveñas, 1939

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Foto archivo personal del autor

Todas estas estructuras perduraron muchos años después de la Colombia Products Co., y fueron mantenidas por la Sagoc y mejoradas con el agregado de voluminosos extintores que tenían sus propias ruedas metálicas de casi dos metros de diámetro y de tiradores para arrastrarlos o moverlos a mano a modo de carretillas o llevarlos con vehículos hasta donde fueran requeridos. No se conoce de ningún incendio ocurrido durante la época de la Colombia Products Co., que hubiera requerido de la utilización de tal sofisticado (para la época) sistema contraincendio.

La planta de hielo de la Colombia Products Co. estaba situada detrás de la carpintería. Su estructura vertical con múltiples persianas de madera y su casi permanente funcionamiento caracterizado por el abundante rocío de agua desde los surtidores de su parte mas elevada, producía los bloques de hielo rectangulares que eran distribuidos en los sitios de trabajo y de residencia de los obreros y empleados de la empresa. La planta perduró y funcionó perfectamente durante toda la época de la Sagoc.

Para mayo de 1921 las construcciones avanzaban de acuerdo con lo esperado y a buen ritmo; a instancias de Don Carlos Vélez Danies, presidente de la Colombia Products Co., el Ministro de Gobierno realizó una inspección a las obras y envió el siguiente mensaje al señor Presidente de la República, Don Marco Fidel Suárez, en el cual expresa:

OFICIAL, Cartagena, mayo 6 de 1921. Regresamos hoy del Packing House, que esta en construcción en Coveñas, encenada (sic) aptitud situada a 20 leguas por mar de esta ciudad entre Tolú y la boca del Sinú es una de las empresas más importantes que tiene el país. Tiene ya levantados 11 edificios para habitaciones y un hospital modelo con un médico de nuestra Facultad Nacional para atender a los enfermos. Las edificaciones para beneficio, refrigeración, balanza, etc., están muy avanzadas. Dan una idea de la magnitud de los trabajos, el acueducto tiene ocho kilómetros de longitud, y la represa hecha para tomar

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el agua, la vía férrea para trabajos locales, que tiene 10 kilómetros; el sistema de alcantarillado, el muelle en construcción de 500 metros; los 8.000 barriles de 600 libras de Cemento que llevan gastados y los 500 trabajadores colombianos que tienen empleados. Además las dehesas y el número de ganados que poseen. Tienen ya invertido $1'800.000 y el desarrollo de la fuente de riqueza. En informe especial daré cuenta detallada a su excelencia, a quien saludo cordialmente. LUIS CUERVO MÁRQUEZ.142

La mínima y fugaz alusión que se hace en el mensaje anterior al sistema de alcantarillado es fiel reflejo de la poca trascendencia que entonces (1921) se daba al manejo de los residuos y al escaso conocimiento que, con respecto a la contaminación del medio ambiente existía para la época. Si bien la planta estaba diseñada para el procesamiento exhaustivo y la utilización de todos los productos de los animales sacrificados y el desperdicio debería ser mínimo, de todas formas se producirían desechos, especialmente excretas y aguas negras procedentes de las instalaciones industriales y habitacionales, que drenaban por el sistema de alcantarillado hacia la orilla del mar en tres sitios: el primero exactamente frente a Rancho Grande, entre el matadero y el frigorífico, el segundo a unos 100 metros al oriente del primero, entre el frigorífico y las bodegas y el tercero a unos 800 metros al oriente de las instalaciones, cerca de un manglar y un banco de coral.

Con respecto al alcantarillado no se hicieron esfuerzos por establecer una planta de tratamiento de aguas residuales por lo que el drenaje de las alcantarillas, conjuntamente con el de aguas lluvias permaneció realizándose durante muchos años, incluso durante la época de la Sagoc, hacia el mar, contaminando progresiva e inexorablemente las aguas cristalinas del golfo y el lecho marino, destruyendo los bancos de coral con su carga de vida y los manglares aledaños, en una gravísima alteración del ecosistema cuyas consecuencias, en términos de permanencia de la biodiversidad y de sostenibilidad ambiental, han sido desastrosas.

3.4.9 INSTALACIONES RESIDENCIALES Y DE SERVICIOS

Las casas hechas de varetas de caña recubiertas de boñiga de vaca y con techo de palma, a la usanza centenaria de la costa, que eran las frescas habitaciones de los peones de la hacienda de Don Julián, fueron reemplazadas por las edificaciones que albergaron a algunos de los 500 colombianos y extranjeros que, entre 1919 y 1923, construyeron el complejo de la Colombia Products Co. Fueron las nuevas casas de madera para los obreros casados, barracas de ladrillo para los obreros solteros y casas de madera para los directivos.

La estructura de las edificaciones para los obreros, al decir de la comisión que, a nombre del gobierno recibiría las obras del Packing House de Coveñas en 1924, era la de un “campamento de mampostería y madera para residencia de los obreros, construido dentro de las disposiciones sobre higiene”. Había tres barracas para obreros solteros, cada una con capacidad para 50 personas. Como se observará, en contraste con las casas de madera construidas para los empleados de mayor rango, las barracas tenían muy poca ventilación a través de unas pequeñas ventanas contiguas a las puertas, lo que debía proveerlas de un clima mas caluroso y poco adecuado para propiciar el adecuado descanso de quienes vivían allí; sin embargo,

142 Memorias del Ministerio de Agricultura y Comercio al Congreso de 1923. Citada por MACHADO, Op. cit., p. 35-36. El muelle en construcción realmente era de 1900 pies, es decir, 580 metros (no 500 metros). N. del A.

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el clima interior se mejoraba considerablemente con la ayuda de los ventiladores de techo Westinghouse de funcionamiento extraordinariamente silencioso, que perduraron en esas edificaciones durante muchos años después de la Colombia Products Co. Frente a cada una de las barracas se construyeron tres edificaciones de menor envergadura para los baños.

Para los obreros con familia se edificaron casas de madera con mejores prestaciones habitacionales, por lo menos en términos de clima, que las barracas de los solteros. Eran de un piso y fueron construidas a ras de tierra; disponían de mejores ventanales, techo también de resistentes láminas planas de asbesto-cemento impermeable, baño anexo a la parte posterior y cocina externa a las casas. De estas se construyeron dieciocho casas en dos filas de cinco y dos filas de cuatro en lugar ligeramente al Sur de donde antes estuvieron las casas de los peones de la hacienda de Don Julián Patrón. Una de las casas era la vivienda de los funcionarios de la policía.

Las casas para el personal directivo también fueron hechas en madera de pino canadiense. Se construyeron al Sur de Rancho Grande, detrás del estanque de reserva, en una planicie ligeramente elevada desde donde se podía observar el amplio panorama de las instalaciones. Tales casas serían de dos niveles, elevadas sobre pilotes para protección contra las alimañas, con acceso frontal y posterior a través de escaleras paralelas a la estructura. En el nivel superior estaban las dos alcobas, sala, comedor, baño y cocina, mientras en la planta baja estaba la habitación y baño para el servicio doméstico; las circundaban ventanales de anjeo y, para proteger de la lluvia o de eventuales y rarísimos intrusos, con hojas de madera que se abrían y cerraban desde adentro con una manija, parte de un sistema de cremallera muy útil e ingenioso que permitía manipularlas a pesar de la existencia de la ventana protectora de anjeo.

Figura 83. Barracas para los obreros solteros de la Colombia Products Co. Coveñas, 1921

Figura 84. Casas de obreros con familia de la Colombia Products Co., vista posterior

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto archivo personal del autor

La pequeña elevación y la arboleda del fondo de la fotografía de la figura 83 corresponden al sitio próximo a donde, décadas más tarde, se edificaría la iglesia (que estaría situada unos 30 a 40 metros a la derecha del árbol del fondo.

Figura 85. Otra vista de las casas de obreros con familia. Coveñas, 1919

Figura 86. Tipo de casas de habitación de empleados. Coveñas, 1939

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Foto archivo personal del autor Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 87. Vista frontal parcial del conjunto de las casas de los empleados de alto rango de la

Colombia Products Co. Las tres primeras casas, con escaleras perpendiculares a la fachada

corresponden al Hotel-Comedor, Club y Casa de solteros. Coveñas, 1939

Figura 88. Vista posterior parcial del conjunto de las casas de los empleados directivos de la

Colombia Products Co. Coveñas, 1939

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 89. Panorámica de las casas de los empleados directivos, situadas al sur de Rancho Grande. Coveñas, 1939

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Las diez casas de madera se utilizaron para albergar a los técnicos, empleados de mayor rango y sus familias, instalar las oficinas, el club, el hotel-comedor y la lavandería.

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Figura 90. Oficinas de la Colombia Products Co. Construcción en madera de pino canadiense. Coveñas, 1939

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

El hospital de la Colombia Products Co., también fue una construcción en madera de pino canadiense, similar a las casas de madera del barrio directivo, estaba situado a unos cien metros al Este de las diez casas residenciales y se comunicaba con ellas por un andén peatonal.

Figura 91. Hospital de la Colombia Products Co., vista frontal. Coveñas, 1939

Figura 92. Hospital de la Colombia Products Co., vista posterior. Obsérvese la cama “de viento” de

uso común en la costa atlántica colombiana. Coveñas, 1939

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 93. Cocina, club, y restaurante de la Colombia Products Co. Coveñas, 1920

Figura 94. Oficina postal y comisariato. Coveñas, 1939

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 95. Tres personajes no identificados frente al club con la indumentaria de la época. Coveñas, 1920

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Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Así como en las demás edificaciones de madera contiguas (casas, oficinas, hospital), el club tenía un clima tolerable, mejorado por la existencia de ventiladores de techo, de mesa y de pie marca Westinghouse, importados de los Estados Unidos. No existían entonces los aparatos de aire acondicionado. De manera que no era demasiado extraño ver estos personajes ataviados con sacos, corbatas, camisas manga larga, sombreros y hasta cascos de explorador inglés, ya que su permanencia en los exteriores, por lo menos con tales atavíos, debía estar destinada solamente a la fugaz pose para toma de algunas fotos para la posteridad o a las breves inspecciones de las instalaciones o de los trabajos.

Figura 96. Tipo de ventiladores caseros y de oficina, Westinghouse utilizados en Coveñas

Foto del archivo personal del autor

3.4.10 LA ENERGÍA ELÉCTRICA Y TALLERES

El suministro de energía eléctrica provendría de la planta construida al sur del frigorífico. Para instalarla se construyó una alta estructura con piso de concreto, columnas de acero, paredes de cemento a media altura y techo de zinc con sobretecho para la ventilación. Allí se instalarían las plantas generadoras de energía eléctrica que funcionaban con turbinas impulsadas con el vapor procedente de la casa de calderas y bombas construida a su lado sur, que a su vez era alimentada con leña y todo tipo de material vegetal seco combustible, incluidas las cáscaras y los troncos secos de coco. Al lado de la casa de calderas y bombas se construyó una estructura techada con zinc, de menor altura, para el secamiento y almacenamiento de la leña y de los productos vegetales requeridos. El agua para abastecer las calderas y producir el vapor, era agua de mar que provenía de una tubería

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extendida varios cientos de metros en el mar, al frente de las instalaciones. Debido a la evidente corrosión que debía producir el agua de mar y el hecho que debía llegar provista de diversos elementos (arena, algas y hasta peces), es probable que hubiera algún sistema de filtrado previo a la utilización del agua de mar para las calderas y condensadores; como también es muy probable que la suplencia de agua de mar hacia las calderas fuera reemplazado rápidamente por agua dulce (y potable) cuando se terminó de construir la represa de Villeros y se puso en funcionamiento el acueducto.

La planta eléctrica tenía dos generadores, cada uno con 125 Kilovatios y tres compresores. Funcionaron perfectamente durante la época de la Colombia Products Co., produciendo eficientemente la energía requerida por el complejo para el suministro de las áreas residenciales e industriales, la iluminación general y el funcionamiento de las maquinas de la carpintería y otras menores, ya que no se requirió en gran medida para la planta y el frigorífico por su parálisis.

Figura 97. Planta eléctrica terminada. Vista noreste desde la parte baja del frigorífico.

Coveñas, 1939

Figura 98. La casa de calderas en primer plano, a la izquierda parte de la planta de energía, a la derecha el depósito de leña. Vista occidental.

Coveñas, 1939

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 99. Detalle del depósito de leña para alimentar las calderas. Obsérvese la madera puesta al sol para el secado. Vista occidental.

Coveñas, 1939

Figura 100. Construcción de talleres al sur del frigorífico. A la derecha el horno y depósito de

ladrillos. Coveñas, 1921

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. KeelerEn la edificación oriental contigua a la de plantas de energía eléctrica se instalaron los compresores y dinamos que proporcionarían la refrigeración y congelación del gran frigorífico. De ella salían las tuberías aéreas que corrían por su costado norte y

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que luego atravesando la calle penetraban por el costado sur de Rancho Grande para llegar a los diversos pisos del frigorífico y proveerlos de las bajas temperaturas requeridas para la refrigeración y congelación de la carne.

Se observará que el sistema de refrigeración y congelación utilizaba como gas refrigerante el Amoníaco; por ello debían ser plantas de altísimas prestaciones y potencia ya que dicha sustancia, a diferencia de los modernos gases de refrigeración, es de difícil manejo y de baja capacidad de refrigeración a lo que se suma su gran volatilidad.

Los desarrollos teóricos sobre la fabricación de hielo y la refrigeración fueron originados en Europa, particularmente en Escocia, Francia e Inglaterra. La historia de la fabricación del hielo por el hombre lo inició apenas en 1834 el norteamericano Perkins cuando patentó su “máquina de hacer hielo”. La máquina de absorción de Ferdinand Carré, que usaba una mezcla de agua y amoníaco, fue patentada en Francia en 1859 y en los Estados Unidos en 1860. De tales teorías e invenciones se nutrieron los norteamericanos y de allí en adelante, como suele ocurrir con muchas invenciones, el progreso de la refrigeración y congelación, así como su uso y aplicaciones industriales fueron crecientes, especialmente en los Estados Unidos. Alrededor de 1865 Daniel Livingston Holden instaló una máquina de Carré en San Antonio y realizó varias mejoras en ella. En 1867 ya tres compañías estaban fabricando el hielo artificial en San Antonio. En ese momento solo había otras cinco plantas de hielo en los Estados Unidos. Aproximadamente en 1866 o 1867 Holden adquirió la patente de compresión de Peter Henri Van der Weyde que utilizaba éter de petróleo y nafta como refrigerante y, en 1869, Holden obtuvo una patente con sus propios diseños. El sitio de nacimiento de la refrigeración industrial por condensación de amoníaco en los Estados Unidos fue la ciudad de Jefferson, Texas dónde David Boyle, en 1873, estableció su primera planta. Entre 1871 y 1881 se estableció y se operó con éxito en Fulton, Texas, el primer matadero mecánicamente refrigerado en los Estados Unidos planeado con el propósito de enfriar, curar y conservar la carne para embarque a Liverpool, Inglaterra, y otros destinos. En el año de 1900 había 766 plantas de hielo en los Estados Unidos y de ellas, 77 estaba en Texas; tenía más de cualquier otro estado. Las plantas de hielo todavía usaban el método de agua y amoníaco como sistema refrigerante. Vendrían luego innovaciones en este sistema, incluidos motores de gran velocidad, más eficaces para el manejo de los compresores de amoníaco y el paso siguiente a los motores eléctricos. Debido a que se trataba de una nueva tecnología en desarrollo, los sistemas de refrigeración y congelación eran altamente costosos; por ejemplo, en 1928 Charles A. Zilker, vendió su planta de hielo basada en el sistema de compresión de agua y amoníaco, a Samuel Insull de Chicago por un millón de dólares.

Todos estos aspectos mínimos sobre la historia de la refrigeración para destacar cómo las instalaciones del Packing House de la Colombia Products Co. disponían de la última y mejor tecnología al respecto. También para significar el alto costo que constituía la instalación de un sistema de tales características en nuestro medio o en cualquier otro sitio.

3.4.11 CONSTRUCCIÓN DE RANCHO GRANDE

Para la construcción de la inmensa edificación que albergaría el matadero, los sitios de procesamiento, embalaje y el frigorífico, se seleccionó un sitio no muy lejano a la playa, con fácil acceso al muelle, en terreno firme y plano.

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EL MATADERO (ABBATOIR)

La edificación del matadero o planta de proceso tendría cincuenta y ocho metros de lado Oeste por veinte metros de frente (Norte) para un total de 4.640 metros cuadrados de construcción en los cuatro pisos; estructura rectangular con paredes de ladrillo rojo y columnas de concreto de gran grosor ensanchadas en su parte superior hasta un metro, cuatro pisos de altura variable, mas alto el cuarto, casi equiparando su altura con el edificio contiguo de cinco pisos; el primer piso destinado a servir de oficinas y depósito de elementos; el cuarto piso, que se ve aparentemente inconcluso por su altura desmesurada, era el verdadero matadero (Abbatoir), donde se dispusieron las áreas y se instalaron las máquinas para el sacrificio de reses y para el procesamiento inicial de las carnes de los animales sacrificados.

Figura 101. Construcción de Rancho Grande, vista sur del matadero. Coveñas, 1921

Figura 102. Construcción de Rancho Grande costado Sur. Coveñas, 1921

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Figura 103. Construcción de Rancho Grande, vista oriental del frigorífico en progreso y armazón del

matadero al fondo. Estaba por concluir la construcción de la planta de energía (a la izquierda).

Coveñas, 1921

Figura 104. Construcción del piso superior del frigorífico de Rancho Grande, vista sur. Coveñas,

1921

Foto por cortesía de Muriel A. Keeler Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

Para fines de 1921 gran parte de la edificación se encontraba ya construida. El matadero, ligeramente visible a la izquierda en la fotografía anterior, ya tiene los ventanales y al frigorífico le están terminando el piso superior. La escasa altura del piso 4º del frigorífico, donde apenas cabe un hombre de pie, se debe a su destinación para la congelación de los productos.

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El edificio fue dotado con inmensos ventanales de vidrios verde claro de seguridad, con mallas de alambre entre sus dos placas; una rampa posterior al edificio, que se inicia en una pequeña colina a la altura del segundo piso y concluye en suave pendiente en el cuarto piso, era el sitio de acceso para el ganado a la zona de sacrificio y procesamiento de los animales.

Los ascensores de cuatro metros de lado, que funcionaban con vapor, hechos con vigas y estructura de acero y de pino rojo, y las misteriosas escaleras interiores en caracol con barandales de hierro, comunican los pisos entre sí para bajar los productos desde el cuarto piso hacia los niveles 3° y 2°, donde se encontraban los sitios de selección, corte, peso, procesamiento y empaque (enlatado) de los productos cárnicos.

Los pisos de cincuenta centímetros de espesor fueron embaldosados de verde; las pesadas puertas de pino fueron dotadas de gigantescas y fuertes manijas, bisagras correspondientes al peso de las puertas y aldabones eternos; un oscuro y frío sótano y un túnel entre las dos edificaciones concluía la planta de proceso o matadero.

Tal era el aspecto de la espectacular primera etapa de Rancho Grande.

Figura 105. Construcción de Rancho Grande. Vista sur. A la izquierda el matadero, a la derecha el frigorífico; al extremo derecho la planta de energía y la planta de calderas con

altas chimeneas entre las dos construcciones. Coveñas, 1923

Foto del archivo personal del autor

EL FRIGORÍFICO

Al lado oriental del matadero y construido simultáneamente con él, estaría el frigorífico, otra gran edificación separada de la primera solo virtualmente por un espacio de unos ocho metros, pero conectados por pasillos para el traslado de los productos entre el segundo, tercero y cuarto pisos, dejando en el primer piso un túnel de acceso norte sur, sombreado y fresco por donde la brisa de la tarde sopla fresca y ululante.

El frigorífico se inicia en la sección norte con un vestíbulo de 30 metros de frente por 13 m de profundidad y 3 m de altura, con amplias entradas de acceso por el Este y Oeste que, a modo de túnel a nivel del piso delimitaban un pasillo interior por donde pasaba la vía férrea para recibir, en los vagones y plataformas, los productos enfriados, congelados o enlatados de la planta. Inmediatamente detrás del vestíbulo

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está el verdadero y gran frigorífico de 45 x 30 metros de lado, con cinco pisos y un sótano. Así, el frigorífico propiamente dicho, cuya altura es de 18 metros, tiene un total de 6.750 metros cuadrados de área construida, de los cuales 4.050 metros cuadrados estaban destinados a los cuartos de enfriamiento, congelación y almacenamiento de los productos procesados. Ni el sótano (área de 1.350 m2), ni el vestíbulo (área de 390 m2), eran usados para enfriamiento o congelación. Los 1.350 metros cuadrados del quinto piso tampoco se utilizaban para refrigeración debido a la dificultad técnica de conservar temperaturas bajas por la existencia del techo, constituido por la azotea de concreto, que absorbía el calor solar de manera directa; eran utilizados para almacenamiento de latas, empaques y para la realización de parte de los procesos de los mismos. De hecho, este último piso del frigorífico era el único que tenía ventanas, mientras que el resto de la edificación era totalmente hermética.

Figura 106. Construcción de Rancho Grande. Vista del complejo desde las oficinas iniciales de la Colombia Products Company (Casas de madera). Se observan los restos del estanque pequeño (Service

Reservoir). Coveñas, 1923

Foto archivo personal del autor

La fotografía de la figura 106 es una vista sur tomada desde el antiguo hospital de la Colombia Products Co.. En ella se observan: el tanque de agua aun sin pintar, detrás y a la derecha de éste el complejo industrial; al extremo derecho y detrás de la palmera están los talleres, estructuras de construcción igual a la planta de energía. En primer plano la zona de agua entre arbustos corresponde al estanque pequeño (Service Reservoir) y esta es la única fotografía existente que muestra tal depósito de agua que, según se ve, al parecer estaba en vías de extinción en 1923.

Figura 107. RANCHO GRANDE. Construcción terminada. Coveñas, 1923

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Foto por cortesía de Muriel A. Keeler

La anterior es una fotografía única y espectacular porque muestra la mayor parte del esplendor de la planta del Packing House; de izquierda a derecha: la rampa sur de acceso de ganado, el matadero y el frigorífico, la casa de calderas y la planta de energía; los talleres de mecánica y carpintería semicubiertos por el frondoso árbol y, al extremo derecho, la parte posterior de la Bodega Nº 1. Obsérvese también el abigarrado plantío de cocoteros de la derecha, ahora inexistente.

En el estado original de la construcción, las paredes y los pisos de los niveles 1º, 2º, 3º y 4º, de 45 x 30 metros de lado y 3.0 metros de altura (excepto el 4º con aproximadamente 1.3 metros de altura), estaban totalmente enchapadas con baldosines esmaltados y estos a su vez estaban recubiertos por bloques de corcho de 30 centímetros de espesor, de los cuales se debieron importar un millón de pies cuadrados, todo lo cual proveían a la zona de un aislamiento de notable eficiencia para el almacenamiento en refrigeración o congelación de los productos en proceso y terminados. Situado sobre las superficies de corcho de las paredes y los techos, todo el complejo albergaba el sistema de tubería de refrigeración en serpentines de cincuenta kilómetros de extensión, cuyo refrigerante, conducido por las tuberías, era el amoníaco. El cuarto piso tiene una altura aproximada de un metro con treinta centímetros, por lo que es necesario transitar inclinado dentro de él, y estaba destinado a congelar los productos que requerían de una temperatura mas baja para su conservación y por ello, a situar en él las carnes enfriadas143 que, después de 30 a 45 días debían ser congeladas para no deteriorarse.

Para disfrutar de una maravillosa vista del Golfo de Morrosquillo y de las áreas circundantes a las instalaciones, tanto la planta de proceso llamada Matadero o Abbatoir, como el frigorífico ― siendo éste último mas fácilmente accesible ―

143 Carne enfriada: “Se conserva, por el enfriamiento, a una temperatura de 28 a 30° Fahrenheit - 0 a 4 °C bajo cero, temperatura que no alcanza a congelarla, pero que si la conserva por un período de 35 a 40 días; si pasa de tal período debe congelarse”. Nota de pie de página de MACHADO, Op. cit., p. 72

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poseen amplísimas azoteas en cuyas esquinas y parte central de los bordes se encuentran remates triangulares que los decoran y destacan con discreto encanto. Y, en la esquina noroeste de la azotea del frigorífico sobresale el cuarto para el pozo de uno de los grandes ascensores.

INSPECCIÓN E INFORME DETALLADO DEL FUNCIONAMIENTO

Cartagena, diciembre 1 de 1923.MINISTERIO DE AGRICULTURA - BOGOTÁ Me permito "Llevar a conocimiento de vuestra señoría y del excelentísimo señor Presidente de la República que hallase terminado definitivamente obra Packing House de Coveñas, dentro plazo ultima prorroga, que todavía no ha vencido, según contrato 20 de Abril del año pasado, aprobado Ley 24 de ese mismo año. Pongo dicha obra órdenes Gobierno, cuyos auspicios favorables han dado aliento empresa llevarla felizmente a cabo y ruego a vuestra señoría mediante las formalidades que quieren rodear su debida inspección, disponer la cancelación garantía que prestó compañía que represento, por medio contrato 20 de mayo reformatorio antes mencionado, para responder de la obligación de terminar dicha construcción antes de vencerse término estipulado. Servidor y amigo,COLOMBIA PRODUCTS COMPANY, Fernando Vélez D. Presidente.144

La comisión que, a nombre del gobierno recibiría las obras del Packing House de Coveñas presentó el 21 de enero de 1924 el siguiente informe:

“Recorridos debidamente cada uno de los compartimientos en los cuales están divididas dichas obras, y oídas las explicaciones técnicas al ingeniero consultor Mr. T. Howard Barnes Mem: Soc: C.E. y presenciado el funcionamiento se llegó al siguiente convencimiento:

a) Que el Packing se encuentro listo y en estado de funcionar.b) Que el Packing contiene todas las construcciones técnicas para beneficiar hasta 9.000 reses mensuales.c) Que contiene lo necesario para aprovechar los desperdicios de las reses.d) Que puede beneficiar diariamente hasta 500 animales de ganado lanar.e) Que el edificio de refrigeración es capaz de depositar 6.000 ó 30.000 animales de ganado lanar.f) Que todos los anteriores compartimientos están debidamente complementados por los siguientes departamentos:1. Salón de calderas y bombas2. Salón de compresores y dinamos (aire acondicionado)3. Taller de mecánica4. Edificio de condensación5. Planta de hielo6. Taller de carpintería7. Fabrica de ladrillos8. Tres bodegas de acero para depósitos9. Depósito para aceite

144 CARTA de Fernando Vélez en las Memorias del Ministro de Industrias presentadas al Congreso de 1924. p 23, citada por MACHADO, Op. cit., p. 50

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Que los anteriores departamentos están complementados a su vez por los siguientes servicios:

1. Servicio completo de agua distribuido por una tubería de planta, que contiene capacidad de 300.000.000 de galones. (sic)2. Un tanque elevado a 100 pies de altura y con una capacidad de 150.000 galones. Dicho tanque tiene como fin primordial dar a la corriente alta presión.3. Una instalación completa de aparatos para extinguir los incendios.4. Servicio completo de alcantarillado y cloacas, no solo para el uso directo de las obras del Packing House, sino también para el servicio de los barrios destinados a los empleados y a los obreros.5. Un muelle para el atraque y servicio de buques de alto bordo de 1900 pies de extensión, con doble línea férrea y servicio de acueducto.6. Un muelle pequeño para embarcaciones menores, con una línea férrea y servicio de agua.

Contiene además la obra del Packing los siguientes edificios de madera: para el comisariato, para el Resguardo Nacional, para la Policía y para la habitación y oficinas del Servicio de Correos y Telégrafos. También se encuentra un campamento de casas de madera para habitación de los empleados principales, todas debidamente dotadas de los servicios necesarios, así como su correspondiente hospital, hotel y club. Asimismo, un campamento de mampostería y madera para residencia de los obreros, construido dentro de las disposiciones sobre higiene.Por último se hace constar que todas las construcciones están de acuerdo con los sistemas más modernos, se han observado las leyes de Policía y se han respetado las leyes de Higiene”.145

Para proveer el frigorífico la compañía tenía en ceba permanente de 45.000 a 50.000 reses y una cría con 20.000 vacas y toros, con esta cantidad se podría mantener aprovisionado el establecimiento por algún tiempo, mientras la conciencia general de los ganaderos le permitía concentrar su interés en la industria del ganado mediante el mercado seguro y a buen precio en que debía constituirse la empresa del Packing.

A continuación se hará una descripción del funcionamiento de la planta Packing y de sus instalaciones tal como apareció publicada en la Revista de Industrias N° 1 de junio de 1924:

"La tercera parte del capital empleado en el Packing puede decirse que esta por dentro, mejor dicho, bajo tierra, en drenajes, desagües, grandes alcantarillas, tuberías, etc. El agua se trae desde 2 millas de distancia en tubos de 8 pulgadas de diámetro y se deposita en un tanque inmenso el cual está en una altura de 30 metros, con la capacidad de 300.000.000 146

de galones. (sic) El edificio está compuesto de cinco pisos con ventiladores, salones y departamentos. El primer salón tiene 80 pies de largo y esta destinado pera lavar las reses. Es curioso el juego de agua que forman las tuberías, presentando aspecto de miles de duchas que se cruzan

145 Memorias del Ministro de Industrias presentadas al Congreso de 1924. p 26, citada por MACHADO, Op. cit., p. 50-51146 El dato indicado es errado, la capacidad real del tanque elevado es de 150.000 galones, mientras que la capacidad de la Represa de Villeros si es de trecientos millones (300.000.000) de galones. N. del A.

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simétricamente. Después sigue el matadero, principiando por la sección en donde se quita el cuero de la res con cuchillos especiales. Este salón tiene 150 pies de largo por 66 de ancho y está dotado de plataformas llevadas por sobre rieles.

Figura 108. Planta de proceso o matadero del Packing House. Coveñas, 1923

Figura 109. Taller y carpintería del Packing House. Coveñas, 1923

Foto tomada de: Nolasco Donoso, Pedro. Álbum de Cartagena de Indias, 20 de enero de 1533 – 20 de enero de 1933. Paris : s.n.,

1933. p. 90

Foto tomada de: Nolasco Donoso, Pedro. Álbum de Cartagena de Indias, 20 de enero de 1533 – 20 de enero de 1933. Paris : s.n.,

1933. p. 90.

Luego se pasa la res a una gran mesa de recepción donde se corta en dos partes, dejando caer los intestinos. Estos y la sangre van por tubos que tienen distintas dimensiones y formas, de acuerdo con las vísceras. En el centro del salón hay una enorme sierra para quitar los cuernos y una cuchilla en forma de cruz para clasificarlos; allí mismo hay una centrífuga destinada a secar los paños que se emplean. Es de advertir que todo el transporte de las reses desde que salen del lavadero se hace por medio de grandes poleas y cadenas que juegan a uno y a otro lado del salón. En un extremo de este mismo salón hay un gran tanque de agua caliente en donde se depositan los cerdos, los que son recibidos por un engranaje de dientes afilados que pelan mecánicamente al animal.

Hay otra sección para limpiar los menudos, que tiene cuatro máquinas adaptadas para reses y una para cerdos; allí quedan enredados como en grandes carreteles los intestinos. Sigue una limpiadora cilíndrica para limpiar la grasa o manteca de los estómagos y otra para lo que se llama vulgarmente entresijos. Luego dos tanques para endurecer la manteca por medio del calor, que se llaman purificadores, y a los lados grandes pailas para seleccionarla. Se observa que en todos los salones hay una inmensa llave de agua. En otro hay una gran parrilla para secar los huesos, hecha con tubos de vapor. Después sigue una maquinita interesantísima, para preparar mantequilla artificial.

Por ultimo hay tres salones de 45 metros de largo por 30 de ancho cuyos pisos y paredes tienen una capa de corcho; todas las paredes son esmaltadas. El primero forma un juego interesantísimo que semeja cortinas de agua, cuyo curioso mecanismo, ajustado a los últimos progresos de la ciencia obedece a las leyes físicas aplicadas para toda refrigeración. Estos tres salones están a una temperatura de 0°; siguen otros tres más abajo de

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12° bajo cero. Para dar una idea aproximada de la magnitud de estos compartimientos refrigeradores, basta decir que los tubos empleados en ellos para la circulación del amoníaco tendrían, si se extendieran prolongadamente una longitud de 50 kilómetros.

Todos los pisos están comunicados por ascensores de vapor y de un sistema modernísimo.El edificio cuenta también con grandes talleres de mecánica y carpintería. La planta eléctrica tiene dos generadores de 125 KW cada uno y tres compresores de 120 ton/cada uno. La primera patente de esta máquina se sacó en 1911 y vino a Colombia en 1914; es muy moderna.Tiene también una gran fábrica de ladrillo donde se han elaborado 1.500.000, para la construcción de los edificios. La mencionada fabrica tiene una capacidad para cocer 220.000 ladrillos en cada hornada; ésta dura 10 días. El Packing House ocupa 2.600 hectáreas, hay un hospital muy bien montado, un restaurante y un club de sport y 10 casas magníficas para los oficiales de la empresa y 17 para los obreros, una casa para la Policía, 3 barracas para obreros solteros, con capacidad para 50 individuos cada una; una casa para telegrafía, otra para el Resguardo Nacional y otra para comisariato. Un buque de vapor de 100 ton y varios bongos y lanchas. También cuenta el Packing con una planta para empacar heno; empaca 400 bultos de 2 arrobas cada uno semanalmente. Por último, hay un gran tanque de inmersión para quitar las garrapatas por el procedimiento que llaman de Macdougald.147

3.4.12 FUNCIONAMIENTO DEL PACKING HOUSE

A partir de 1923 el Packing House de Coveñas inició su funcionamiento con el sacrificio de un bajísimo volumen de reses para la producción de carne que sería seleccionada, enfriada, congelada y enlatada. Producción que estaría esencial y únicamente destinada a servir de MUESTRA de los productos de carne de res para enviarlas a los países de Europa a fin de explorar la aceptación de la calidad de los mismos y a proponer los precios que, como hemos visto, ni lo uno ni lo otro fue aceptado. La calidad de los productos no era comparable con la de otros países y los precios ofrecidos no compensaban ni los costos de producción, por lo que no era rentable vender a esos países.

No existieron propuestas ni intenciones de enviar muestras a los Estados Unidos ya que, como se menciona en la tesis de Adalberto Machado, ese país, no solamente había puesto dificultades a la exportación de la maquinaria, equipos y capital requeridos sino que, pasada la Primera Guerra Mundial, había establecido restricciones a la “[...] importación de carnes congeladas como consecuencia de la invasión del mercado interno por parte de Canadá (Arancel Fordney-Mcumber, 1922), [factores que] hicieron que se descartara este país como posible mercado para los productos elaborados por el frigorífico de Coveñas”.148 Para la importación de productos cárnicos Estados Unidos estableció un arancel de un (1) centavo de dólar por libra de carne, lo cual hacía inaceptable a ese país como mercado potencial o real.

147 Informe de la comisión que a nombre del gobierno recibió las obras del Packing House de Coveñas y que presentó el 21 de enero de 1924, citado por MACHADO, Op. cit., p. 52-55148 MACHADO, Op. cit., p. 56

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En el ámbito empresarial y político del Departamento de Bolívar se decía o rumoraba que los Estados Unidos habían bloqueado la exportación de maquinaria, equipos y capital durante la Primera Guerra Mundial por la sospecha que empresas como la Colombia Products Co., con su Packing House pudieran vender productos alimenticios a Europa, particularmente a Alemania y sus amigos (Austria, Hungría). Sospechas relativamente bien fundadas debido a la germanofilia existente en el Departamento de Bolívar en la época y al hecho que Estados Unidos había establecido restricciones para la importación de ganado en pie y de carne en canal. De hecho y a pesar de haber pasado la guerra, entre los países a los cuales se enviaron las muestras de productos cárnicos, estuvo Alemania, pero también a Inglaterra e Italia (de los aliados). La posición de los Estados Unidos con respecto al Packing House de Coveñas, probablemente se explicaría por la coincidencia de varios aspectos, entre los cuales se encuentran, antes de la Primera Guerra, la destinación de gran parte de las industrias norteamericanas para la fabricación de armas, equipos y productos bélicos y la consiguiente limitación o restricción para la fabricación de otro tipo de maquinaria y, por consiguiente, la falta de equipos y capital; después de la guerra por la necesidad de recuperación de la economía interna y por el reabastecimiento de equipos bélicos; a todo ello se agregaría el celo por la eventual competencia que esta fábrica traería a un mercado donde los mismos estadounidenses tenían intereses ya establecidos.

3.4.13 EPÍLOGO DEL PACKING HOUSE

Para 1923 o 1924, ante las dificultades de conseguir mercado para los productos y la falta de actividad de la planta en el procesamiento de ganado vacuno, los ganaderos reiniciaron sus exportaciones de ganado en pie; mientras tanto, desde 1923 la maquinaria del Packing House fue utilizada para en el sacrificio de cerdos. Su carne se almacenó en el frigorífico, los jamones y tocino fueron curados para venderlos en el mercado local y nacional, mientras que la manteca extraída de estos animales fue empacada en latas de cinco galones y se guardaba en el comisariato, pero mas adelante hubo que regalarla; ante su poca rentabilidad y receptividad, esta actividad fue abandonada rápidamente y desde entonces el funcionamiento del complejo frigorífico quedó detenido.

Entre las causas que condujeron a que el Packing House de Coveñas no llegara a funcionar en su integridad como empresa procesadora de vacunos y exportadora de carne enfriada, refrigerada y congelada, podemos distinguir:

Falta de una acción oportuna en cuanto a la construcción y puesta en marcha de la planta. La ley la 56 se expidió en 1909 con el objeto de aprobar un contrato para la construcción de un Packing House en la costa atlántica colombiana, proyecto que no se llevó a cabo. Esa era probablemente la época mas propicia para la instalación de una planta de dichas características, habida cuenta de las crecientes necesidades de alimentos en el mundo en desarrollo y por la existencia de los vientos de la Primera Guerra que ya se avizoraban en el horizonte internacional desde 1890 con la llegada al poder de Guillermo II en Alemania. Fue, recién comenzado el siglo XX, el momento oportuno para obtener una posición en el mercado internacional de las carnes y desarrollarlo en el futuro próximo. Cuando finalmente se establecieron las leyes (1914 a 1917) y se decidió la construcción de la planta, ya prácticamente había concluido la Primera Guerra Mundial, y si bien se agudizaban las necesidades de alimentos en el mundo, por lo menos las de

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cárnicos estaban claramente resueltas y “facturadas” a las plantas de Argentina, Canadá, Australia, Uruguay y Nueva Zelanda, que dominaban el mercado mundial tanto por su calidad como por el posicionamiento que habían adquirido tras años de experiencia y negocios y donde, incidentalmente, las empresas norteamericanas también tenían intereses económicos.

Baja calidad de los productos cárnicos resultantes de las razas de ganado existentes en el país. No era posible establecer competencia alguna, en términos de calidad de las carnes, con los países que dominaban el mercado y que habían introducido en sus dehesas diversos cruces con los cuales obtuvieron el mejoramiento de sus razas y, además, habían aclimatado razas extranjeras de excelente carne para la producción en sus correspondientes packing houses.

Como resultante de la baja calidad de las carnes y de la inoportunidad de inicio de la planta, se señalará la inexistencia de un mercado real para el consumo de las carnes producidas por la Colombia Products Co. Como se observó, los países a los que se les enviaron las muestras tuvieron respuestas poco menos que discretas (cuando no negativas) hacia los productos. Sobre ellos, en el mejor de los casos, el de Italia, se ofreció comprar 500 toneladas mensuales pero no se hizo pedido alguno. Los precios ofrecidos por los eventuales compradores no llenaban las expectativas de los propietarios de la planta y no era posible que vendieran “a pérdida” sus productos.

El eventual, aunque remoto mercado de los Estados Unidos estaba prácticamente descartado por el establecimiento de las restricciones impuestas por ese país ante la invasión del mercado por parte de Canadá y la imposición de un arancel de un centavo de dólar por cada libra de carne introducida a Estados Unidos, con lo cual era imposible trabajar.

La inexistencia de un plan “B”, por ejemplo el procesamiento de carnes vacunas enfriadas y congeladas para el consumo nacional, asunto que hubiera requerido de modificaciones legislativas, probablemente nada difíciles si consideramos que los ojos de los presidentes y legisladores estaban puestos en el magno proyecto del Packing House. Tal Plan “B” fue esbozado en 1925, de todas maneras bastante tarde, cuando el senador J. A. Gómez Recuero, antiguo apoderado de la Colombia Products Co., presentó un proyecto de Ley para permitir la venta en el país de los productos de la planta, iniciativa que fue archivada y revivida mas tardíamente a los tres años cuando se aprobó la Ley 91 de 1928 que permitía la venta en el país de los productos porcinos, tímida e ineficaz solución para un asunto de la magnitud del Packing House, que refleja la falta de visión, la inacción y tardía respuesta de los legisladores de entonces, la misma que, entre discusiones bizantinas había retardado innecesariamente la expedición de las primeras leyes entre 1914 y 1917. Un plan de ese tipo, que considerara la venta de los productos vacunos, asociado con eventuales y no imposibles exportaciones a los países del caribe y Centroamérica, tal vez hubiera permitido el funcionamiento de la planta procesando un volumen razonable que le permitiera ir asegurando su posición en el mercado, dar réditos y planear, con mas tiempo pero con ingresos, las posibilidades de explorar otros mercados y la introducción de ganados de razas mejoradas o de mejores carnes para el sacrificio en el Packing House.

En resumen, en el estado de desarrollo de los procesos administrativos de las empresas de entonces, parece que poco o nada se hizo en cuanto a la ejecución de actividades tales como: un adecuado análisis de problemas potenciales y la

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consecuente toma de decisiones, análisis objetivo del mercado real con claro conocimiento de las potencialidades y riesgos de los productos procesados en la planta; planes oportunos y acciones muy fuertes de mercadeo previos y, en coincidencia con la planeación del proyecto y la construcción de la planta; análisis exhaustivo de la competencia claramente existente ya posicionada en el mercado internacional.

La falta de los que ahora aparecen como los mas elementales recursos administrativos para el desarrollo de empresas pudiera hacer pensar que esos empresarios, o desconocían tales principios, lo que no era lógico dada su experiencia en las múltiples lides empresariales que les había llevado a ser los pioneros de la industrialización de la costa atlántica colombiana, o que simplemente se confiaron ante un mercado que sospechaban ávido de alimentos y creciente en sus expectativas después de la guerra, presupuesto que, por supuesto, fue falso y fatalmente nocivo para el Packing House de Coveñas. La disolución de la Colombia Products Co. fue definida en noviembre de 1937, pero los bienes y las condiciones de disolución fueron puestos en manos del liquidador, don Miguel Navas. El proceso de liquidación continuó efectivamente durante 1938 y probablemente durante 1939. En mayo de 1938, a los 20 años de la licitación, como estaba previsto en la minuta, el gobierno, mediante la Resolución Ejecutiva N° 125 del 31 de mayo de 1938, procedió a realizar la liquidación del contrato firmado con las compañías unidas (la Ganadería Colombiana y The International Products Co.).

Excepto por la exigua cantidad de cerdos procesados desde 1923 para obtener sus productos con destino al mercado nacional, de los acontecimientos sucedidos en Coveñas en relación con la planta del Packing House entre 1925 y 1934, no existen muchos relatos o documentos que puedan dar información al respecto. Se sabe que, por lo menos hasta 1934, fecha del fallecimiento de Don Julián Patrón, este pudo continuar con sus negocios de exportación de ganado y la recolección y exportación de coco. Es evidente, eso si, que las instalaciones del Packing House no quedaron totalmente abandonadas en ese período antes de ser compradas por la Sagoc en 1938.

Alfredo Castang era un jamaiquino que llegó a Coveñas por la época de la Colombia Products Co., trabajó en esa empresa y luego en la Sagoc como jefe en la bodega de materiales hasta su jubilación. Con la Colombia Products Co.; él trabajó como jefe de las actividades de vigilancia de las instalaciones entre 1925 y 1938 y debía contar con empleados destinados específicamente a ello: “Alfredo Castang se quedó cuidando las instalaciones que eran todavía de la empresa Colombia Products Co., construidas en las 30 hectáreas de propiedad de la Colombia Products Co.”.149

Después de 1938 el señor Castang continuaría trabajado para la Sagoc, inicialmente al cuidado de las mismas instalaciones y después como jefe de bodegas. Cuando en 1939 el sitio fue ocupado por la legión de trabajadores que llegaron a acondicionar las instalaciones para la Sagoc, encontraron los múltiples enseres (maquinaria, escritorios, sillas, estantes, etc.), todo lo cual había sido razonablemente guardado y conservado. Las casas de habitación de madera y las de mampostería construidas en 1919, excepto por el natural deterioro del desuso, permanecían en buen estado y no habían sido objeto de vandalismo; algunas de ellas fueron habitadas por los mismos vigilantes y, al llegar la Sagoc encontró gallineros rústicos y pequeños corrales para cerdos en terrenos aledaños a las casas. Sobre la maquinaria empleada para los sacrificios del ganado vacuno y los cerdos, como he mencionado, Frank (Pacho)

149 ENTREVISTA con Carmen Sierra Patrón. Bogotá, enero de 2002.

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Arbouin, asegura que dicha maquinaria se encontraba aún en Rancho Grande y que: “La Sagoc retiró la maquinaria que había en Rancho Grande y se la llevaron como chatarra para los Estados Unidos”.150

Es claro que los vigilantes de las casas, talleres, plantas de energía, calderas y bodegas cumplieron fielmente su cometido. En esas instalaciones permanecieron incólumes los equipos y elementos originalmente instalados y luego recibidos por la Sagoc. Pero los vigilantes de las instalaciones de Rancho Grande no debieron ser muy acuciosos en su actividad, porque en esa edificación se vieron, durante muchos años, las huellas del vandalismo. Tal vez esta edificación, por su imponencia, por la magnificencia de su visión en una región donde no había otra construcción ni remotamente parecida producía una atracción mayor que las demás, a los ojos de los vándalos. Ante la imposibilidad de ingresar a los salones o compartimientos de la edificación por la existencia de grandes y pesadas puertas de grueso pino de extrema solidez y fortaleza, bloqueadas con cerraduras para trabajo pesado, cuyas llaves ya no existían o no estaban disponibles, los vándalos amigos de lo ajeno debieron proceder a romper las placas de los pisos superiores para ingresar a los salones de los pisos inferiores en busca de objetos, maquinarias o herramientas. Por ejemplo, el acceso al piso cuarto del matadero a través de la rampa sur, era expedito y no ofrecía ninguna dificultad dado que entre la rampa y el cuarto de procesamiento no existían puertas ni estructuras que impidieran el paso. Desde allí pudieron entrar a romper los pisos. Claro está que, con el espesor de los mismos (45 a 50 centímetros), hechos en concreto y reforzados con gruesas varillas, la labor de destrucción no solo debió acarrear grandes esfuerzos sino que solo logró que abrieran orificios de menos de un metro de diámetro y, probablemente la búsqueda de los tesoros presuntamente allí guardados debió ser infructuosa. Arrancaron muchas de las ventanas e incluso algunas paredes, especialmente de los niveles superiores y solo la gran solidez de la edificación impidió que la destrozaran. La totalidad de la tubería de refrigeración desapareció, y casi la totalidad del millón de pies cuadrados de corcho que se instaló en las paredes del frigorífico se esfumó, dejando, en la época de SAGOC solo algunas muestras de ellos.

Se recordará que, con ocasión de la constitución de la Colombia Products Co. se había adquirido el compromiso de realizar una venta gratuita de 30 hectáreas de terreno (donde se construyeron las instalaciones) y el compromiso de vender a la misma empresa, a precio de mercado, de 1.500 a 2.500 hectáreas adicionales aledañas a las instalaciones. Durante el recibo de las obras por parte del gobierno se indica que: “El Packing House ocupa 2.600 hectáreas [...]” que, para ser exactos, son 2.632 hectáreas y 13 centareas.

El plano de la Colombia Products Co., elaborado en enero 30 de 1924 y el de la Sagoc, del 11 de agosto de 1943, son prácticamente idénticos en cuanto a la extensión, demarcación y límites de las tierras incluidas; con la excepción que en el plano de la Sagoc ya se incluyen como parte de la adquisición los terrenos de Madre de Dios, que no estaban considerados en los haberes de la Colombia Products Co. La existencia de estos planos complementa la información obtenida de las escrituras de venta de dichos terrenos. Las 2.602 hectáreas (excluidas las 30 hectáreas cedidas gratuitamente) aledañas a las instalaciones del Packing House fueron vendidas por Don Julián Patrón a la Colombia Products Co. mediante la Escritura pública número 72 del 31 de Enero de 1921 de la Notaría Segunda de Cartagena151.

150 ENTREVISTA con Frank (Pacho) Arbouin, radiooperador jubilado de Sagoc. Bogotá, agosto de 2003.

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Toda esta tierra fue luego vendida por la Colombia Products Co. a la empresa Sagoc en 1938, momento en el cual la viuda de Don Julián, Mercedes Pisarro, seguramente también vendió a la misma empresa la parte de terreno en la cual se encontraba la Casa Grande de Madre de Dios, con lo cual se completaban las 2.632 hectáreas y 13 centáreas que adquirió la compañía petrolera para sus instalaciones y para la exportación de crudo por el puerto de Coveñas.

Cuadro 1. Distribución de los terrenos de la Colombia Products Company y la South American Gulf Oil Company *

Nombre del lote o potrero Área en HectáreasMadre de Dios 60,88Instalaciones de Rancho Grande y campamentos 30,00Huerta de Guayabal 38,36El Mango 18,30El 5 37,36La Calera 60,50El 4 59,40El 6 44,40Deleite 135,50Tapia 23,48Rincón Santo 43,19Bellavista 143,45El Porvenir 36,64Jobal 109,01Delicias, Bohío, Tigre, Bretaña 1.600,00Represa de Villeros y otros terrenos no especificados 191,53Total 2.632,00

* Fuente: Plano de los terrenos de la South American Gulf Oil Co. Coveñas, de 1943. Cortesía de Carmen Sierra Patrón. 2003.

Parecería ser este un triste y desafortunado epílogo para la que debió ser una gran empresa de aguerridos líderes y para el gran coloso de Rancho Grande. Pero la Historia ha sido generosa; el surgimiento de nuevos horizontes habría de llegar pronto.

Nuevos y mejores tiempos de riqueza y prosperidad, apoyados en el gran complejo industrial y en su insuperable infraestructura, surgieron de manera casi natural desde 1938 con la compra, por parte de la Sagoc, de todo lo existente en los terrenos de la antigua Colombia Products Co. Renacería Coveñas, nuevas legiones de trabajadores colombianos y extranjeros comenzarían a forjar, desde 1939, la nueva etapa de la historia protagonizada entonces por la empresa petrolera SOUTH AMERICAN GULF OIL COMPANY - SAGOC.

151 La Escritura número 72 del 31 de Enero de 1921 se encuentra en el Archivo Histórico de Cartagena, pero su estado de deterioro es tal que no es posible reconocer o descifrar fácilmente su contenido. N. del A.

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