ANÁLISIS DE LA GESTIÓN DE RESIDUOS DE...

ANÁLISIS DE LA GESTIÓN DE RESIDUOS DE CONSTRUCCIÓN Y DEMOLICIÓN EN LA COMUNIDAD AUTÓNOMA DE ANDALUCÍA

Trabajo Fin de Carrera. ETSI

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7. RESIDUOS PELIGROSOS

7.1. Definición y características

En difícil encontrarse una obra de construcción, reparación o demolición donde no se generen residuos peligrosos. La Ley 22/20111 define un residuo peligroso como “aquel que presenta una o varias de las características peligrosas enumeradas en el anexo III de la presente ley, y aquél que pueda aprobar el Gobierno de conformidad con lo establecido en la normativa europea o en los convenios internacionales de los que España sea parte, así también se consideran residuos peligrosos los recipientes y envases que los hayan contenido”.

Las características que permiten calificar a los residuos como peligrosos son:

H 1. Explosivo: Se aplica a las sustancias y los preparados que pueden explosionar bajo el efecto de la llama o que son más sensibles a los choques o las fricciones que el dinitrobenceno.

H 2. Oxidante: Se aplica a las sustancias y los preparados que presentan reacciones altamente exotérmicas al entrar en contacto con otras sustancias, en particular sustancias inflamables.

H 3-A. Fácilmente inflamable: Se aplica a:

o Las sustancias y los preparados líquidos que tienen un punto de inflamación inferior a 21 °C (incluidos los líquidos extremadamente inflamables).

o Las sustancias y los preparados que pueden calentarse y finalmente inflamarse en contacto con el aire a temperatura ambiente sin aporte de energía.

o Las sustancias y los preparados sólidos que pueden inflamarse fácilmente tras un breve contacto con una fuente de ignición y que continúan ardiendo o consumiéndose después del alejamiento de la fuente de ignición.

o Las sustancias y los preparados gaseosos que son inflamables en el aire a presión normal.

o Las sustancias y los preparados que, en contacto con el agua o el aire húmedo, desprenden gases fácilmente inflamables en cantidades peligrosas.

H 3-B. Inflamable: Se aplica a las sustancias y los preparados líquidos que tienen un punto de inflamación superior o igual a 21°C e inferior o igual a 55°C.

H 4. Irritante: Se aplica a las sustancias y los preparados no corrosivos que pueden causar una reacción inflamatoria por contacto inmediato, prolongado o repetido con la piel o las mucosas.

1 (Ley22/2011, Art.3)



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H 5. Nocivo: Se aplica a las sustancias y los preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden entrañar riesgos graves, agudos o crónicos e incluso la muerte.

H6. Tóxico: Se aplica a las sustancias y los preparados (incluidos las sustancias y los preparados muy tóxicos) que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden entrañar riesgos graves, agudos o crónicos e incluso la muerte.

H 7. Cancerígeno: Se aplica a las sustancias y los preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden producir cáncer o aumentar su frecuencia.

H 8. Corrosivo: Se aplica a las sustancias y los preparados que pueden destruir tejidos vivos al entrar en contacto con ellos.

H 9. Infeccioso: Se aplica a las sustancias y los preparados que contienen microorganismos viables, o sus toxinas, de los que se sabe o existen razones fundadas para creer que causan enfermedades en el ser humano o en otros organismos vivos.

H 10. Tóxico para la reproducción: Se aplica a las sustancias y los preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden producir malformaciones congénitas no hereditarias o aumentar su frecuencia.

H 11. Mutagénico: Se aplica a las sustancias y los preparados que por inhalación, ingestión o penetración cutánea pueden producir defectos genéticos hereditarios o aumentar su frecuencia.

H 12. Residuos que emiten gases tóxicos o muy tóxicos al entrar en contacto con el aire, con el agua o con un ácido.

H 13. Sensibilizante: Se aplica a las sustancias y los preparados que, por inhalación o penetración cutánea, pueden ocasionar una reacción de hipersensibilización, de forma que una exposición posterior a esa sustancia o preparado dé lugar a efectos nocivos característicos.

H 14. Ecotóxico: Se aplica a los residuos que presentan o pueden presentar riesgos inmediatos o diferidos para uno o más compartimentos del medio ambiente.

H 15. Residuos susceptibles, después de su eliminación, de dar lugar a otra sustancia por un medio cualquiera, por ejemplo, un lixiviado que posee alguna de las características antes enumeradas.

La consideración de un residuo con carácter peligroso y no peligroso, se hará de conformidad con la “Lista Europea de Residuos”, publicada en la Orden MAM/304/2002. Esta lista codifica de una forma sencilla los residuos que se producen en las distintas actividades generadoras de los mismos y permite diferenciar fácilmente cuando un residuo es peligroso, ya que la codificación de estos residuos va



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acompañado de un asterisco (*), al contrario del código de los residuos no peligrosos que no incluyen ningún asterisco.

7.2. Obligaciones del productor de residuos peligrosos

Las obligaciones generales a seguir en la manipulación y gestión de los residuos peligrosos por parte de los productores de residuos; quedan definidas en la Ley 7/20072, y son las siguientes:

Separar adecuadamente y no mezclar los residuos peligrosos.

Envasar y etiquetar los recipientes que contengan residuos peligrosos en la forma que reglamentariamente se determine.

Poner los residuos peligrosos generados a disposición de una empresa autorizada para la gestión de los mismos.

Llevar un registro de los residuos peligrosos producidos o importados y del destino de los mismos.

Suministrar a las empresas autorizadas para llevar a cabo la gestión de residuos la información necesaria para su adecuado tratamiento y eliminación.

Presentar un informe anual a la Consejería competente en materia de medio ambiente en el que deberá especificar, como mínimo, la cantidad de residuos peligrosos producidos o importados, la naturaleza de los mismos y su destino final.

Informar inmediatamente a la Consejería competente en materia de medio ambiente en caso de desaparición, pérdida o escape de residuos peligrosos.

Los productores de residuos de construcción y demolición deberán hacer frente a una serie de obligaciones específicas en cuanto al envasado, almacenado y etiquetado de dichos residuos, que quedan definidos en el Real Decreto 833/19883 y que a continuación se desglosan.

Obligaciones en el envasado de los residuos peligrosos: o Los envases y sus cierres estarán concebidos y realizados de forma que

se evite cualquier pérdida de contenido y construidos con materiales no susceptibles de ser atacados por el contenido ni de formar con este combinaciones peligrosas.

2 (Ley 7/2007, Art. 100)

3 (R.D. 833/1988, Arts. 13, 14 y 15)



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o Los envases y sus cierres serán sólidos y resistentes para responder con

seguridad a las manipulaciones necesarias y se mantendrán en buenas condiciones, sin defectos estructurales y sin fugas aparentes.

o Los recipientes destinados a envasar residuos tóxicos y peligrosos que se

encuentren en estado de gas comprimido, licuado o disuelto a presión, cumplirán la legislación vigente en la materia.

o El envasado y almacenamiento de los residuos tóxicos y peligrosos se

hará de forma que se evite generación de calor, explosiones, igniciones, formación de sustancias tóxicas o cualquier efecto que aumente su peligrosidad o dificulte su gestión.

Obligaciones respecto al etiquetado de los residuos peligrosos. o Los recipientes o envases que contengan residuos peligrosos deberán

estar etiquetados de forma clara, legible e indeleble, al menos en la lengua española oficial del estado.

o En la etiqueta deberá figurar:

- El código de identificación de los residuos que contiene, según el sistema de identificación que se describe en el anexo del Real Decreto del 833/1988.

- Nombre, dirección y teléfono del titular de los residuos.

- Fechas de envasado.

- La naturaleza de los riesgos que presentan los residuos. o Para indicar la naturaleza de los riesgos deberán usarse en los envases

los siguientes pictogramas, representados según el anexo II del Real Decreto 833/1988 y dibujados en negro sobre fondo amarillo o naranja:

- Explosivo: una bomba explosionando (E). - Comburente: una llama por encima de un circulo (O).

- Inflamable: una llama (F). - Fácilmente inflamable y extremadamente inflamable: una llama (F).

- Toxico: una calavera sobre tibias cruzadas (T). - Nocivo: una cruz de san Andrés (X N).

- Irritante: una cruz de San Andrés (Xi).

- Corrosivo: una representación de un ácido en acción (C).



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o Cuando se asigne a un residuo envasado más de un indicador de riesgo

se tendrán en cuenta los criterios siguientes:

- La obligación de poner el indicador de riesgo de residuo tóxico hace que sea facultativa la inclusión de los indicadores de riesgo de residuos nocivo y corrosivo.

- La obligación de poner el indicador de riesgo de residuo explosivo

hace que sea facultativa la inclusión del indicador de riesgo de residuo inflamable y comburente.

o La etiqueta debe ser firmemente fijada sobre el envase, debiendo ser

anuladas, si fuera necesario, indicaciones o etiquetas anteriores de forma que no induzcan a error o desconocimiento del origen y contenido del envase en ninguna operación posterior del residuo. El tamaño de la etiqueta debe tener como mínimo las dimensiones de 10×10 cm.

o No será necesaria una etiqueta cuando sobre el envase aparezcan

marcadas de forma clara las inscripciones a que hace referencia al etiquetado, siempre y cuando estén conformes con los requisitos exigidos en el presente artículo.

Pictogramas de residuos peligrosos [R.D. 833/1988]

Obligaciones en el almacenamiento de residuos peligrosos.



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o Los productores dispondrán de zonas de almacenamiento de los residuos peligrosos para su gestión posterior, bien en la propia instalación, siempre que esté debidamente autorizada, bien mediante su cesión a una entidad gestora de estos residuos.

o El almacenamiento de residuos y las instalaciones necesarias para el

mismo deberán cumplir con la legislación y normas técnicas que les sean de aplicación.

o El tiempo de almacenamiento de los residuos peligrosos por parte de los

productores no podrá exceder de seis meses, salvo autorización especial del órgano competente de la comunidad autónoma donde se lleve a cabo dicho almacenamiento.

7.3. Residuos peligrosos en las obras de construcción

En la siguiente tabla se muestran aquellos productos utilizados en la construcción, que poseen carácter peligroso; también se indican que componentes de dichos productos, poseen una de las características de peligrosidad anteriormente enumeradas.

Producto/material Componentes

potencialmente peligrosos Propiedades potencialmente

peligrosas

Aditivos para el hormigón Hidrocarburos disolventes Inflamables

Materiales a prueba de humedad

Disolventes, bitúmenes Inflamables, tóxicos

Adhesivos Disolventes, isoclanatos Inflamables, tóxicos, irritantes

Masillas/sellantes Disolventes, bitúmenes Inflamables, tóxicos

Acabado de carreteras Emulsiones de alquitrán Tóxicos

Amianto Fibras inhalable Tóxica, cancerígeno

Fibras minerales Fibras inhalable Irritantes de piel y garganta

Madera tratada Cobre, arsénico, alquitrán, pesticidas, fungicidas

Tóxico, ecotóxico, inflamable

Pinturas y recubrimientos Plomo, cromo, vanadio, disolventes

Tóxico, inflamable

Equipos de transformación PCBs Ecotóxico

Iluminación Sodio, mercurio, PCBs Ecotóxico

Sistemas de acondicionamiento de aire

CFC’s Disminución de la capa de ozono

Sistemas contra incendio CFC’s Disminución de la capa de



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ozono

Botella de gas Propano, butano, acetileno Inflamables

Resinas/rellenos, precursores

Isocianatos, anhídrido ftálico Tóxico, irritante

Aceites y fueles Hidrocarburos Ecotóxicos, inflamables

Productos con carácter peligroso [Monografía sobre RCD]

El “Plan de Prevención y Gestión de Residuos Peligrosos de Andalucía 2012-2020”4, muestra en una tabla la producción declarada de residuos peligrosos, expresados en toneladas, durante el año 2009. Los residuos peligrosos se clasifican por los grupos que define la “Lista Europea de Residuos”.

Capítulos Lista Europea de Residuos t. de Residuos

Peligrosos

01 Residuos de Prospección, extracción de minas y canteras… 14

02 Residuos de la agricultura, horticultura, acuicultura, silvicultura, caza y pesca…

29

03 Residuos de transformación de la madera… 1

04 Residuos de las industrias del cuero, de la piel y textil 4

05 Residuos del refino del petróleo… 7.401

06 Residuos de procesos químicos inorgánicos 21.908

07 Residuos de procesos químicos orgánicos 19.615

08 Residuos de la fabricación, formulación, distribución y utilización de revestimientos…

2.099

09 Residuos de la industria fotográfica 1.041

10 Residuos de procesos químicos 31.546

11 Residuos del tratamiento químico de superficie y del recubrimiento de metales

3.486

12 Residuos del modelado y del tratamiento físico y mecánico de superficie de metales y plásticos

4.338

13 Residuos de aceites y de combustibles líquidos 35.424

14 Residuos de disolventes, refrigerantes y propelentes orgánicos 1.863

4 (Decreto 7/2012, p.28)



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15 Residuos de envases, trapos de limpieza… 9.330

16 Residuos no especificados en otro capítulo de la lista 25.567

17 Residuos de la construcción y demolición 11.299

18 Residuos de servicios médicos o veterinarios o de investigación asociada…

3.522

19 Residuos de las instalaciones para el tratamiento de residuos de las plantas externas de tratamiento de aguas residuales

54.306

20 Residuos municipales 328

TOTAL 233.120

Producción declarada de residuos peligrosos en Andalucía [Decreto 7/2012]

Como se observa en la tabla las toneladas de residuos peligrosos que se declararon en 2009, provenientes de las obras de construcción y demolición fueron 11.299 t. Por lo tanto las obras de construcción y demolición ocupan la 7º posición de un total de 20 actividades, referido a cantidad de toneladas generadas de residuos peligrosos.

Las actividades que en 2009 generaron más residuos peligrosos que las obras de construcción y demolición son: el tratamiento de aguas residuales, los aceites y combustibles líquidos, los procesos químicos, los residuos no especificados, los procesos químicos inorgánicos y los procesos químicos orgánicos.

El “Plan de Prevención y Gestión de Residuos Peligrosos de Andalucía”5, también muestra un desglose de las 11.299 toneladas de residuos peligrosos, que se generaron en las obras de construcción y demolición en el año 2009 en Andalucía.

L.E.R. Descripción Toneladas

17 01 06 Mezclas de hormigón, ladrillos, tejas y materiales cerámicos 0,02

17 01 06 Mezclas de hormigón, ladrillos, tejas y materiales cerámicos que contienen sustancias peligrosas

1.455,29

17 03 01 Mezclas bituminosas que contienen alquitrán de hulla 0,12

17 04 09 Limaduras y virutas de metales férreos 0,51

17 04 09 Metales férreos 0,88

17 04 09 Residuos metálicos contaminados con sustancias peligrosas 244,11

5 5 (Decreto 7/2012, p.194)



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17 05 03 Tierra y piedras que contienen sustancias peligrosas 7.813,67

17 05 05 Lodos de drenaje que contienen sustancias peligrosas 1,97

17 06 01 Materiales de aislamiento que contienen amianto 227,81

17 06 03 Otros Materiales de aislamiento que contienen sustancias peligrosas

4,72

17 06 05 Materiales de construcción que contienen amianto 1.441,02

17 09 03 Otros residuos de construcción y demolición que contienen sustancias peligrosas

108,52

Producción residuos peligrosos declarada del capítulo LER 17 2009 [Decreto 7/2012]

Las mayores cantidades declaradas de residuos peligrosos, en las obras de construcción y demolición, se corresponden a las tierras y piedras contaminadas (7.813,67 toneladas). Lo que supone que en al año 2009, en torno al 70 % de los residuos peligrosos procedentes de las obras de construcción y demolición que se declararon, fueron tierras y piedras contaminadas.

7.3.1. Suelos Contaminados

Se entiende por suelo contaminado aquel cuyas características químicas han sido alteradas de forma negativa por la acción del hombre. Para que el suelo se considere contaminado debe presentar unas concentraciones de elementos químicos elevadas, que define el Real Decreto 9/2005. Siendo especialmente vigilados los suelos que contienen elementos que pueden ser perjudiciales tanto para la salud humana como para el medio ambiente.

Entre las actividades que pueden generar contaminación de suelos indudablemente se encuentran la construcción, ya que durante la fase de construcción el uso de maquinarias y de productos que originan residuos peligrosos o que generan o contienen metales pesados pueden dejar una huella en el suelo muy difícil de recuperar.

La recuperación de suelos contaminados es posible, tanto por medios físicos como químicos, pero se tratan de soluciones que se suelen dilatar bastante en el tiempo, además de ser muy costosas, tanto del punto de vista material como medioambiental.

7.4. Residuos de amianto y residuos de madera tratada

De todos los residuos potencialmente peligrosos que se generan en una obra, merecen especial atención los residuos con compuestos de amianto y las maderas tratadas. La primera porque exige una gestión especial y la segunda porque



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representando un recurso, bien como materia prima secundaria, o bien de carácter energético, constituye una corriente emergente de la que se tiene una mala información pero para la que se va perfilando un interés creciente por parte del mercado del reciclaje. A continuación se profundiza más en cada una de estos productos peligrosos.

7.4.1. Fracción de residuos con amianto

El asbesto, también llamado amianto, es un grupo de minerales metamórficos fibrosos, que presentan excelentes propiedades aislantes, mecánicas, químicas y de resistencia al calor. Todo estas propiedades, unido a su bajo coste justifican su uso en una gran variedad de productos manufacturados, principalmente materiales de construcción (tejas, baldosas, azulejos, productos de cemento), productos de fricción, materiales textiles, pinturas, envases, etc.

El principal problema del asbesto, se ocasiona cuando sus microscópicas fibras son inhaladas, pudiendo producir graves enfermedades como la asbestosis, mesotelioma o cáncer de pulmón.

En diciembre de 2001 España prohibía la comercialización y utilización del amianto blanco, sobretodo en la forma de fibrocemento y de uralita, ya que otras variedades como el amianto azul o el amianto marrón, fueron prohibidas en España en 1984 y 1993 respectivamente.

Según la “Lista Europea de Residuos” publicada por la Orden MAM/304/2002, los residuos que contienen fibras de amianto y que podemos generar en una demolición son:

17 06 01* Materiales de aislamiento que contienen amianto

17 06 05* Materiales de construcción que contiene amianto

El Real Decreto 396/2006, establece las disposiciones mínimas de seguridad y salud aplicables a los trabajos con riesgo de exposición al amianto, estableciendo las pautas a seguir en trabajos de demolición, desmantelamiento, mantenimiento o reparación de materiales que contienen fibras de amianto. Establece el límite de exposición, medidas de prevención, medidas organizativas, equipos de protección, formación e información a los trabajadores…

Antes del comienzo de cada trabajo con riesgo de exposición de amianto, el empresario deberá elaborar un plan de trabajo, que deberá especificar6:

Descripción del trabajo a realizar.

6 (Real Decreto 396/2006, Art. 11)



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Tipo de material a intervenir indicando si es friable o no friable; la forma de presentación del mismo en la obra, indicando las cantidades que se manipularán de amianto.

Ubicación del lugar en el que se habrán de efectuar los trabajos.

La fecha de inicio y la duración prevista.

Relación nominal de los trabajadores en contacto con el material, así como categorías profesionales, formación y experiencia de dichos trabajadores.

Procedimientos que se aplicarán.

Las medidas preventivas contempladas

Los equipos utilizados para la protección de los trabajadores.

Medidas adoptadas para evitar la exposición de otras personas que se encuentren en el lugar donde se efectúe el trabajo y en su proximidad.

Las medidas destinadas a informar a los trabajadores.

Las medidas de eliminación de los residuos de acuerdo con la legislación vigente indicando empresa gestora y vertedero.

Recursos preventivos de la empresa.

Procedimiento establecido para la evaluación y control del ambiente de trabajo.

El Real Decreto 396/2006, en su artículo 4, define el límite de exposición que un trabajador puede tener a fibras de amianto a 0,1 fibras/cm3, medidas como una media ponderada en el tiempo para un período de ocho horas.

Para conseguir que la exposición de los trabajadores a las fibras de amianto esté por debajo del límite anteriormente indicado, el Real Decreto 396/20067 expone una serie de posibles medidas a aplicar.

Los procedimientos de trabajo deberán concebirse de tal forma que no produzcan fibras de amianto o, si ello resultara imposible, que no haya dispersión de fibras de amianto en el aire.

Las fibras de amianto producidas se eliminarán, en las proximidades del foco emisor, preferentemente mediante su captación por sistemas de extracción, en condiciones que no supongan un riesgo para la salud pública y el medio ambiente.

Todos los locales y equipos utilizados deberán estar en condiciones de poderse limpiar y mantener eficazmente y con regularidad.

7 (Real Decreto 396/2006, Art. 7)



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El amianto o los materiales de los que se desprendan fibras de amianto o que contengan amianto deberán estar en condiciones de poderse limpiar y mantener eficazmente y con regularidad.

Los residuos, excepto en las actividades de minería que se regirán por lo dispuesto en su normativa específica, deberán agruparse y transportarse fuera del lugar de trabajo lo antes posible en embalajes cerrados apropiados y con etiquetas que indiquen que contienen amianto. Posteriormente, esos desechos deberán ser tratados con arreglo a la normativa aplicable sobre residuos peligrosos.

Cuando la aplicación de las medidas preventivas, indicadas anteriormente, resulte insuficiente para garantizar que no se sobrepase el valor límite establecido o cuando un trabajador lo estime oportuno, aun no sobrepasándose el valor límite; deberá utilizarse equipos de protección individual para la protección de las vías respiratorias, de conformidad con lo dispuesto en el Real Decreto 773/1997, “sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud relativas a la utilización por los trabajadores de equipos de protección individual”.

Hay que especificar que la normativa delimita que la utilización de estos equipos de protección de las vías respiratorias, no podrá excederse en cuatro horas diarias.

Trabajadores desmontando piezas de amianto [Fuente consultada en internet]

7.4.2. Fracción de residuos de madera tratada

El mayor problema que presenta una gestión optima de los residuos de madera, tendente a reciclar y obtener la mayor parte de la energía contenidas en la misma radica, en la presencia de productos químicos como consecuencia de los diversos tratamientos que ha sufrido una parte importante de la misma.

Según la Lista Europea publicada por la Orden MAM/304/2002, los residuos de maderas tratadas que se consideran peligrosos se codifican de la siguiente forma.



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17 02 04* Maderas que contienen sustancias peligrosas o están contaminadas por ellas

La gestión que actualmente se hace de los residuos de madera está caracterizada por una información insuficiente o falta total de información en relación con la calidad y cantidad de este residuo, la falta de sistemas de clasificación y un uso muy reducido de la madera que queda fuera de servicio, sin que se aproveche el material ni la energía que contienen

Existen tres posibles destinos de la madera usada una vez convertidos en residuos:

Depósito en vertedero, que representa no hacer uso del potencial económico que posee este material ya sea como materia prima o combustible con apreciable valor energético.

Recuperación energética, de aquellas maderas no tratadas.

Reutilización o reciclaje con la fabricación de tableros aglomerados.

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