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Sobrecualificación y transición al mercado laboral

Capítulo VII

Los jóvenes y el mercado de trabajo en la España urbana: resultados del Observatorio de Inserción Laboral 2005 CAPÍTULO VII. Sobrecualificación y transición al mercado laboral

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CAPÍTULO VII. Sobrecualificación y transición al mercado laboral

VII.1. Introducción

Recientemente se ha vuelto hablar del problema de la sobrecualificación de los jóvenes universitarios españoles30. La generación más cualificada de la historia educativa de España se encuentra con una situación compleja en el mercado de trabajo. En muchas ocasiones tienen que aceptar empleos por debajo de su nivel de cualificación. Si en el pasado se les conocía como los JASP (jóvenes aunque sobradamente preparados) en la actualidad parece imponerse el término “mileuristas” para referirse a jóvenes graduados universitarios, que pueden tener incluso un master o un doctorado, que hablan idiomas, pero que tienen un trabajo temporal por debajo de su cualificación en el que perciben un salario de aproximadamente 1.000 euros. La principal característica de los jóvenes “mileuristas” es que siempre han tenido un trabajo por debajo de su nivel de formación: psicólogos que trabajan de auxiliares administrativos, biólogos empleados como teleoperadores, arquitectos trabajando sin contrato, etc.

El último informe EURYDICE (2005) señala que solo un 50% de los jóvenes de edades entre 25 y 34 años tienen un trabajo en la categoría de “profesionales y managers”31. Algunos países tienen niveles de sobrecualificación particularmente importantes como es el caso español. Según la medida adoptada por el informe

30 La generación de los mil euros, El País 23-10-2005. 31 EURYDICE (2005), página 46.


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EURYDICE menos del 40% de los jóvenes universitarios españoles entre 25 y 34 años trabajan en puestos adecuados a su nivel de cualificación.

Esta situación genera un evidente desajuste entre las expectativas de los jóvenes, en general, y los universitarios, en particular, y la realidad. El sociólogo Gil Calvo describe ese desajuste de manera muy expresiva:

"Con estos jóvenes se crearon unas lógicas expectativas. La generación anterior, la mía y la de mis hermanos menores (yo nací en el 46), creció con las vacas gordas, pudo cumplir el sueño de matar al padre, esto es, de superarlo en todo: mejor casa que los padres, mejores trabajos... Pero para estos mileuristas, que han tenido, paradójicamente, mejores oportunidades en forma de estudio, el futuro no estaba donde debía de estar"

El objetivo de este capítulo es analizar el fenómeno de la sobrecualificación, o la posesión de un trabajo que requiere realizar unas tareas que están por debajo del nivel de formación. En este capítulo también se estudia el desajuste entre las expectativas de los jóvenes y las condiciones que encuentra en su puesto de trabajo. Los dos fenómenos están muy relacionados: normalmente los jóvenes que desarrollan trabajos no adecuados a su nivel educativo muestran también un elevado nivel de desajuste entre las compensaciones recibidas y las esperadas.

La medición empírica de la relación entre cualificación y puesto de trabajo es compleja. Además, existen muy pocas fuentes estadísticas que incluyan esta tipo de información. Por ejemplo, entre las encuestas oficiales españolas tan solo la Encuesta de Condiciones de Vida y Trabajo de 1985 y la Encuesta de Estructura, Conciencia y Biografía de Clase de 1991 contenía este tipo de información32. Por desgracia ni el Panel de Hogares Europeos (1996-2001) ni la nueva Encuesta de Condiciones de Vida de 2004, cuyos resultados se han dado a conocer durante diciembre de 2005, incluyeron preguntas sobre la relación entre nivel de formación y el puesto de trabajo. En la Encuesta de Condiciones de Vida de 2004 hay una pregunta que solicita describir con cierta exactitud el puesto de trabajo y que podría cruzarse con el nivel educativo de los encuestados a partir de un diccionario ocupacional. No obstante, esta explotación todavía no se ha realizado y no es claro que se llegue a realizar.

En este punto es preciso realizar una nota terminológica. Aunque parte de la literatura habla de sobre-educación en este capítulo no se utilizará este término. Nadie puede estar sobre-educado, por definición, pues la educación es siempre un factor positivo. Lo que podría suceder es que, para un determinado trabajo, un graduado universitario esté sobrecualificado. Esta situación no es necesariamente permanente (la

32 Para un análisis de los principales resultados de estas encuestas se puede consultar García-Montalvo et al. (2003).


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sobre-educación lo sería a no ser que se hicieran cursos de des-educación) y es contingente al tipo de trabajo que se desarrolla en un momento concreto.

La segunda sección de este capítulo analiza la información estadística disponible, en el caso español, respecto al fenómeno de la sobrecualificación. La sección se centra en los universitarios, que son el grupo formativo que generalmente sufren en mayor proporción el efecto de la sobrecualificación y del que se dispone de más información. Para el análisis de esa sección se utilizarán todas las fuentes disponibles al margen de la información del Observatorio de la Inserción Laboral de los Jóvenes. En la tercera sección se presenta un análisis del indicador de sobrecualificación subjetiva tomando como base las encuestas del Observatorio 2005. La cuarta sección analiza la sobrecualificación a partir de un indicador de desajuste objetivo basado en los datos del nuevo observatorio. La quinta sección incluye un estudio de la percepción de los jóvenes sobre la equidad entre compensaciones recibidas y esperadas. Por último, la sexta sección sintetiza las principales conclusiones del capítulo.

VII.2. Universitarios y sobrecualificación

En secciones anteriores hemos comprobado que la Encuesta de Población Activa proporciona bastante información sobre la situación laboral de los trabajadores españoles y, en particular, de los universitarios. Ésta es la fuente fundamental de información laboral en el estado español. La utilización de una metodología común con otras estadísticas de otros países (siguiendo los criterios ILO) simplifica la comparabilidad con otros países en las estadísticas laborales básicas. No obstante, como se trata de una encuesta a la población general y de foto fija (no tanto de procesos), su capacidad para ofrecer información sobre aspectos concretos del proceso de inserción laboral de los universitarios es limitada. En el capítulo anterior se comentaron las dificultades de la EPA para proporcionar información detallada sobre la flexibilidad laboral de los jóvenes. La EPA tampoco es adecuada para analizar la adecuación entre el puesto de trabajo y el nivel de formación de los jóvenes. Las ventajas de las encuestas especificas frente a la EPA aparecen, además, cuando se quiere analizar con detalle la situación laboral y la transición de la universidad al mercado de trabajo. En primer lugar las encuestas específicas permiten separar los jóvenes graduados por ramas de estudios (cosa que en el caso de la EPA no es posible por lo reducido del tamaño muestral de dichas celdas). Además las encuestas específicas están diseñadas de manera que se puedan conocer otros aspectos importantes que no aparecen en el cuestionario de la EPA.


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VII.2.1. Algunas consideraciones teóricas

El tema de la sobrecualificación ha sido tratado en abundancia por la literatura educativa desde los años setenta. Existen dos teorías fundamentales para explicar la relación entre educación y productividad. La teoría del capital humano señala que cuanto mayor es el nivel educativo de un trabajador mayor es su productividad y, consecuentemente, su salario. De esta forma cualquier aumento del nivel educativo se transformaría en un aumento de la productividad. Sin embargo un aumento de la oferta de los trabajadores más cualificados provocará una disminución de sus salarios relativos si las técnicas de producción son flexibles. Los trabajadores por su parte decidirán invertir en educación en función de sus expectativas de rentabilidad de dicha inversión. En el largo plazo las cualificaciones de los trabajadores se utilizarán plenamente aunque en el corto plazo se puede producir un desajuste temporal entre la oferta y la demanda de trabajadores muy cualificados.

La educación también puede ser utilizada con el objetivo de proporcionar una señal sobre la productividad del trabajador. Según esta teoría la educación por sí no aumenta la productividad. La educación se utiliza como una señal para distinguirse de otros trabajadores ante un empleador que no puede observar la productividad de los trabajadores directamente. De esta forma el empleador contratará primero a aquellos individuos que han conseguido mayores niveles educativos en la confianza de que su productividad y motivación serán mayores, dado que han sido capaces de superar los obstáculos que les separaban de la obtención del título. Según la versión más estricta de esta teoría la sobrecualificación sería un fenómeno permanente. Los individuos aumentarán su nivel educativo para mejorar su probabilidad de encontrar un empleo y los empleadores los contratarán con independencia de los requerimientos del puesto de trabajo. Una versión más débil de la teoría de la señalización, conectada con la teoría de los mercados internos, indicaría que la entrada de los titulados en el mercado de trabajo se produciría en puestos de bajo nivel pero que, con el paso del tiempo y el conocimiento directo de su productividad por parte del empresario, su puesto de trabajo se iría ajustando a su cualificación mediante promociones internas.

La medición empírica de la sobrecualificación es una tarea compleja. Existen básicamente dos formas de hacerlo: las llamadas medidas subjetivas y las objetivas.

a) Las medidas subjetivas están basadas en la propia percepción del encuestado sobre la adecuación entre su nivel de formación y las tareas que realiza en su puesto de trabajo.


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b) Las medidas objetivas tienen varias versiones. Una posibilidad consiste en analizar las tareas que realiza el trabajador en su puesto y, utilizando un diccionario ocupacional, determinar si son ajustadas o no a su nivel educativo. Otra forma de realizar una evaluación objetiva de la relación entre cualificación y requerimientos del puesto de trabajo consiste en calcular, para cada ocupación, cual es el nivel educativo medio de los trabajadores y considerar como sobrecualificados aquellos que significativamente por encima de la media. Esta es la propuesta contenida en Verdugo y Verdugo (1991) y en García-Montalvo (1995). Los datos comentados al comienzo de este capítulo, derivados del informe EURYDICE, utilizan otra aproximación a la medición objetiva. Se trata de comparar, para la clasificación de ocupaciones a un dígito, el nivel de formación del joven y el tipo de ocupación. El emparejamiento entre estas dos fuentes de información es problemático pues las ocupaciones están muy agregadas y la definición de “adecuación” es bastante subjetiva.

Las consecuencias de la sobrecualificación son múltiples. Desde el punto de vista de política educativa una situación permanente de sobrecualificación supone subsidiar, reduciendo el coste privado, una actividad que no proporciona a la sociedad el rendimiento esperado y que se convierte simplemente en un procedimiento caro de subvención de los procesos de selección de personal de las empresas. De esta forma una parte de los recursos destinados a la educación podrían dedicarse a actividades con mayor rentabilidad social.

Desde el punto de vista de los trabajadores la sobrecualificación genera una enorme insatisfacción laboral que puede tener efectos tanto sobre su comportamiento en el trabajo (absentismo, elevado “turnover”) como en su salud (menor autoestima, mala salud psicológica, problemas con las drogas, etc.). Esta situación derivaría en una menor productividad respecto a los trabajadores que tienen puestos de trabajo ajustados a sus cualificaciones, lo que supondría también un problema para las empresas33.

Existe más información sobre la relación entre el nivel de formación y los requerimientos del puesto de trabajo en el caso de los titulados universitarios que en el resto de niveles educativos. La información proviene de una serie de encuestas específicas realizadas en los últimos años. Las más importantes son las siguientes:

a) La encuesta europea CHEERS (Career After Higher Education).

33 Tsang y Levin (1985).


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En 1997 un consorcio formado por 9 universidades y 3 institutos de investigación europeos y una universidad japonesa obtuvo de la Unión Europea financiación en el programa TSER para un gran proyecto de investigación (Higher education and Graduate Employment in Europe). En el mismo se abordó la construcción de una metodología común para el análisis del proceso de inserción laboral de los universitarios en Europa. En la confección del instrumento participaron expertos en educación universitarias de muy diferentes ramas del conocimiento (sociología, psicología, economía, ciencias de la educación, etc.). El cuestionario cubría muchos aspectos, incluyendo preguntas sobre los estudios universitarios realizados, los métodos pedagógicos, el historial laboral, las competencias necesarias para desarrollar las labores del puesto de trabajo, la satisfacción laboral, la satisfacción con los estudios universitarios, etc. La población objeto de estudio fueron los universitarios que finalizaron sus estudios durante el curso 1994 y 1995. El trabajo de campo se desarrolló durante 1999. Como resultado se obtuvieron unas 40.000 encuestas de graduados de enseñanza superior de doce países (Alemania, Francia, Italia, España, Austria, Reino Unido, Noruega, Finlandia, Suecia, Países Bajos, República Checa y Japón). La muestra española que forma parte del proyecto europeo incluye 3.029 encuestas aunque, de hecho, la muestra final se pudo ampliar hasta las 7.257 encuestas a partir de acuerdo concretos con universidades y consejerías de educación.

b) La encuesta AQUCAT de los graduados catalanes.

La AQUCAT es una encuesta realizada por la Agencia de la Qualitat Universitaria de Cataluña en 2001, referida a los graduados universitarios que finalizaron sus estudios en el curso 1997/98 (con excepción de los titulados de medicina). El tamaño muestral es de 9.765. Tanto el instrumento como el método de muestreo (envío de cuestionarios por correo con recordatorio telefónico y posterior realización de encuestas telefónicas) son muy similares a los utilizados por el equipo del proyecto CHEERS en España. En enero de 2005 se puso en marcha la segunda edición de esta encuesta con una población de referencia de 23.000 graduados que finalizaron sus estudios en el curso 2000/01.

c) La encuesta ANECA2003-04.

García-Montalvo (2005) presenta los resultados del proyecto de la ANECA. Este trabajo contiene una panorámica de la situación laboral de los jóvenes universitarios a partir de la perspectiva de tres grupos de informantes privilegiados: los graduados, los estudiantes y los responsables de recursos humanos de las empresas. Para cada grupo se preparó un cuestionario específico. La orientación de los cuestionarios se estructuró en función de cada uno de estos ámbitos poblacionales. Los estudiantes son capaces de informar con bastante precisión sobre sus expectativas, los motivos que les impulsaron a


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Cuadro VII.1 Principales características de las encuestas específicas

CHEERS CHEERS (España) AQUCAT ANECA

Año de realización 1998/99 1998/99 2000/01 2003/04

Población de graduados del curso. 1994/95 1994/95 1997/98 2000/01

Tamaño muestral 39.235 7.257 9.765 7.286

Captación información Correo Correo y CATI

Correo y CATI Internet

Fuente: Elaboración propia a partir de la encuestas CHEERS, AQUCAT y ANECA.

comenzar sus estudios o los métodos pedagógicos utilizados en la universidad. Los titulados no tienen la misma capacidad de juzgar sobre cuales eran sus expectativas cuando eran estudiantes ni los motivos por los cuales cursaron sus estudios dado que sus primeros contactos con el mundo laboral pueden contaminar su respuesta en este tipo de preguntas retrospectivas. Sin embargo están mucho más capacitados que los estudiantes para apreciar la utilidad para su vida en general, y su empleo en particular, de los contenidos y habilidades adquiridas durante sus estudios universitarios. Finalmente los representantes de recursos humanos de las empresas están poco capacitados para informar sobre, por ejemplo, los métodos docentes en la universidad pero están muy capacitados para evaluar hasta que punto los conocimientos y habilidades de los titulados universitarios se ajustan a las necesidades de las empresas.

Aunque los cuestionarios son diferentes para cada grupo existe un cierto juego de reflejos en tres espejos. Muchas preguntas permiten contrastar las percepciones de unos colectivos con las de otros (tanto sobre el mundo laboral como sobre la propia universidad). Por ejemplo es interesante conocer si las expectativas de los estudiantes (en términos del trabajo que realizarán, el salario que cobrarán, etc.) se corresponden con la realidad de la empresa tal y como la reflejan los encargados de recursos humanos de las empresas.

La encuesta de los graduados universitarios fue realizada a las titulaciones de las universidades que solicitaron participar en la Evaluación Institucional de la ANECA (ninguna universidad catalana participó). La captación de información se produjo a través de un cuestionario en Internet que rellenaban los graduados a los que previamente se les había mandado una carta con la identificación y código de acceso a dicho cuestionario. El cuestionario se podía rellenar en varias sesiones pero una vez que se completaba el código de acceso del graduado quedaba sin efecto.

El cuadro VII.1 contiene un resumen de las principales características de las fuentes de datos específicas sobre la inserción laboral de los universitarios.


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A pesar de las similitudes en el cuestionario la comparación de los datos de estos estudios es compleja por varios motivos. En primer lugar aunque las preguntas son similares en ocasiones no son totalmente idénticas (especialmente en el caso del instrumento utilizado por la AQUCAT). En segundo lugar la diferencia de años entre la finalización de los estudios y la realización de la encuesta no es idéntica en todos los casos, lo que dificulta también las comparaciones. No obstante, el mayor problema para realizar la comparación es que la situación del mercado laboral que se encontraron los graduados al finalizar sus estudios es muy diferente. Los graduados de 1994 (encuesta CHEERS) se enfrentaron a un mercado laboral muy duro para los jóvenes, donde la tasa de desempleo juvenil estaba cerca del 50% y la de los universitarios estaba próxima al 35%. En esta situación los jóvenes graduados puede tomar decisiones muy diferentes (por ejemplo pasar a una situación de inactividad por desánimo o seguir estudiando) de las que tomarían en un mercado laboral como el del año 1998 o 2000 en los que las tasas de desempleo de los jóvenes se habían reducido sustancialmente. Por supuesto, la probabilidad de estar inicialmente desempleado también era superior en los graduados de 1994 que en los de finales de los 90. Además esta situación inicial normalmente se transmite a la historia laboral futura de los jóvenes, lo que complica mucho la interpretación de muchas de las comparaciones entre las encuestas específicas comentadas con anterioridad.

Desafortunadamente algunas de las interpretaciones comparativas en Rodríguez et al. (2003) no tienen en cuenta estas consideraciones sobre el impacto del ciclo económico en los resultados obtenidos por las encuestas sobre el proceso de inserción de los jóvenes universitarios.

VII.2.2. Una visión panorámica de la información disponible

En esta subsección se presenta un análisis comparativo de los resultados obtenidos de las fuentes estadísticas anteriormente mencionadas. El indicador de sobrecualificación incluido en la encuesta europea CHEERS es de tipo subjetivo. En particular la pregunta es formulada de la siguiente manera:

¿Cuál es el nivel de estudios más apropiado para el empleo que tienes en relación con el nivel en que te graduaste en el curso 1994-95?

Opciones.

a. Un nivel más elevado del que me gradué.

b. El mismo nivel


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c. Un nivel de estudios superiores inferior al que tengo (En este apartado se incluyen, por ejemplo, los titulados superiores que piensan que con un título universitario de grado medio sería suficiente para desarrollar las tareas de su puesto de trabajo).

d. No haría falta ningún tipo de estudios universitarios.

e. Otros.

El cuadro VII.2 recoge la contestación a la pregunta del cuestionario CHEERS sobre el nivel de estudios más adecuado para el puesto de trabajo que desem-peña el titulado universitario. En dicho cuadro se observa que el nivel de sobre-cualificación de los titulados españoles es muy superior al del resto de los países participantes en el estudio. En total un 29,2% de los titulados universitarios españoles considera que después de cuatro años de terminada su carrera todavía realiza un trabajo para el cual tiene un exceso de cualificación educativa. Quizás más alarmante es el hecho de que un 17,9% de los titulados encuestados señalen que para realizar su trabajo no necesitarían haber pasado por la universidad.

Desafortunadamente la formulación de la pregunta en la encuesta AQUCAT es muy diferente a la del cuestionario CHEERS. En particular, la pregunta sobre desajuste formativo básico del cuestionario AQUCAT tiene la siguiente forma:

1. ¿Su nivel de estudios era un requisito para acceder a su trabajo actual/último trabajo?

- Si, pedían la titulación específica.

- Si, pero solo exigían titulación universitaria

- No.

2. En caso que la respuesta sea “Si”, las funciones y tareas que realiza, cree que son las propias del nivel de formación exigido?

3. En caso que la respuesta sea “No”, cree que las funciones que realiza requieren una formación universitaria a pesar de no ser un requisito?

España Total

Un nivel superior al que tengo 14,8% 11,7%El mismo nivel 55,4% 65,9%Un nivel inferior de educación terciaria 11,3% 12,2%No necesitaría educación superior 17,9% 7,7%Otros 0,6% 2,3%Total 100,00% 100,00%

Fuente: Encuesta CHEERS y elaboración propia.

Cuadro VII.2 El nivel de sobrecualificación de los graduados españoles y europeos


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Rodríguez et al. (2003) clasifican las repuestas en cuatro niveles. El nivel adecuado es el de aquellos que responden SI a la pregunta 1 y 2. El nivel de inadecuación A, o subocupación, es aquel que presentan los que responden SI a la pregunta 1 y NO a la 2. El nivel de inadecuación B, o no reconocimiento, incluye a aquellos jóvenes que contestan NO a la pregunta 1 y SI a la 3. Finalmente, el nivel de inadecuación C, o sobreeducación, se corresponde con una respuesta negativa a la pregunta 1 y la 3. Nosotros vamos a incluir una categoría adicional que denominaremos sobrecualificados, y que incluye a aquellos en inadecuación C más los jóvenes universitarios contratados con la exigencia de un título universitario pero que están realizando tareas que no requieren el nivel de formación requerido. Seguramente en este grupo faltan algunos de los graduados a los que se exigió una titulación específica pero no realizan tareas propias de universitarios pero los datos no permiten distinguir esta categoría.

A pesar de las diferencias en la pregunta el cuadro VII.3 muestra muchas semejanzas con los resultados del cuadro VII.2 para los graduados universitarios españoles. La suma de la proporción de adecuados y de no reconocidos (pero realizando labores de universitario) alcanza el 70,47%, muy similar a la suma de la proporción de adecuadamente preparados más los que necesitaría mayor cualificación para desarrollar sus tareas (70,22%) (Esta categoría no se reconoce independientemente en el cuestionario AQUCAT). El porcentaje de los graduado universitarios españoles que responden que no necesitarían educación superior para desarrollar su trabajo (17,9%) se encuentra en medio de la proporción de los que Rodríguez et al. (2003) llaman sobreeducados (15,35%) y los que nosotros consideramos sobrecualificados (21,34%).

Obviamente la extensión de la sobrecualificación depende de la rama de estudio y del tiempo que el joven graduado lleva en el mercado laboral. Con respecto al primer punto es claro que dependiendo de la rama de estudios la probabilidad de que un graduado universitario esté sobrecualificado para su puesto de trabajo es muy diferente.

El cuadro VII.4 muestra, utilizando los datos de la encuesta CHEERS, una gran variabilidad en cuenta al nivel de sobrecualificación por ramas de estudio. Al lector acostumbrado a las ramas de estudio del Consejo de Universidades le parecerá rara la división de materias incluida en el cuadro VII.4. Sin embargo, ésta fue la división de

Porcentaje

Adecuado 63,44Subocupado 14,18No reconocido 7,03Sobre-educado 15,35Sobrecualificado 21,34

Fuente: Encuesta AQUCAT y elaboración propia

Cuadro VII.3 Sobrecualificación entre los graduados universitarios catalanes


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Cuadro VII.4 Sobrecualificación por ramas de estudios: Europa y Japón

Ciencias de la Educación Humanidades Ciencias

Sociales Derecho Ciencias Naturales Matemáticas Ingeniería Ciencias de la

SaludUn nivel superior al que tengo 10,85 10,98 9,97 12,55 15,45 13,84 9,64 19,22El mismo nivel 72,25 52,80 63,21 66,32 62,29 68,78 71,66 74,16Un nivel menor de educación terciaria (e. ciclo corto) 8,00 19,28 14,50 11,58 13,14 12,32 10,87 3,61

No necesitaría educación superior 6,61 13,72 9,70 6,55 7,03 3,72 6,25 1,58Otros 2,29 3,23 2,62 3,00 2,09 1,33 1,58 1,43Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00

Fuente: Encuesta CHEERS y elaboración propia.

consenso teniendo en cuenta todos los países y las disciplinas que participaron en el proyecto CHEERS.

Las disciplinas donde se concentra un mayor grado de sobrecualificación son las pertenecientes a la rama de humanidades, seguida por las ciencias sociales y las experimentales. El menor grado de sobrecualificación se produce en las ingenierías, las matemáticas y, especialmente, las ciencias de la salud.

El cuadro VII.5 presenta los resultados por ramas de estudios (clasificadas siguiendo el criterio del Consejo de Universidades) según la información disponible en la encuesta AQUCAT. Al igual que sucedía con los graduados universitarios europeos, los mayores niveles de sobrecualificación se concentran en los titulados de la rama de humanidades, seguidos por los graduados de ciencias sociales y de ciencias experimentales. El nivel de sobrecualificación de los graduados de humanidades es ciertamente alarmante. Según la medida de sobre-educación de Rodríguez et al. (2003) el nivel alcanzaría el 32,8% incluso tras tres años de haber finalizado los estudios. Según el indicador de sobrecualificación el porcentaje se elevaría al 40,8%. Los datos del cuadro VII.5 también muestran que el nivel de sobrecualificación más bajo se da entre los titulados de técnicas (9,3%) y ciencias de la salud (5,6%). Todos estos porcentajes son superiores a los que muestra la encuesta europea.

Cuadro VII.5 Sobrecualificación por ramas de estudios en Cataluña

Humanidades Experimentales Salud Sociales Técnicas

Adecuado 46,26 57,16 87,23 59,82 74,27Subocupado 13,42 22,33 7,18 14,75 13,30No reconocido 7,49 5,90 2,53 8,04 6,76Sobre-educado 32,84 14,61 3,06 17,39 5,67Sobrecualificado 40,87 25,98 5,59 23,67 9,37

Fuente: Encuesta AQUCAT y elaboración propia.

Un segundo elemento que también puede influir sobre el nivel de sobrecualificación es el número de empleos que ha tenido el titulado. El cuadro VII.6 muestra la evolución del nivel de sobrecualificación de los jóvenes graduados universitarios desde


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Cuadro VII.6 Evolución del grado de sobrecualificación e historial laboral

Human. Experim. C. Salud Sociales Técnicas

Anterior/simultáneoInfracualificado 6,27 4,29 9,36 3,24 5,64 8,92Adecuado 46,99 40,00 38,75 34,99 44,75 60,36Sobrecualificado 46,74 55,71 51,89 61,77 49,61 30,72Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00Primer empleoInfracualificado 4,86 3,21 5,18 7,67 3,33 7,72Adecuado 55,81 40,56 55,49 81,73 49,14 64,68Sobrecualificado 39,33 56,22 39,33 10,60 47,52 27,60Total 100,00 100,00 100,00 100,00 1000,00 100,00Último empleo/actualInfracualificado 4,39 4,39 5,09 6,77 3,19 5,75Adecuado 67,94 49,62 70,76 83,22 62,27 79,27Sobrecualificado 27,67 45,99 24,15 10,01 34,54 14,98Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00

Fuente: Encuesta ANECA y elaboración propia

Rama de estudioRequerimiento puesto Total

el empleo anterior (o simultáneo a la realización de sus estudios) hasta el último empleo pasando por el primer empleo después de finalizar los estudios. Esta información procede de la encuesta ANECA y no está disponible ni para la encuesta europea CHEERS ni para la encuesta de la AQUCAT.

Los datos del cuadro VII.6 muestran varios fenómenos muy interesantes. En primer lugar el nivel de sobrecualificación en el empleo anterior (o simultáneo) a los estudios es muy elevado, alcanzando el 46,7%. En este caso el nivel más alto de sobrecualificación se da entre los graduados de ciencias de la salud (61,7%) y humanidades (55,7%). En el primer empleo con posterioridad a finalizar los estudios la sobrecualificación ha descendido al 39,3% (el nivel de infracualificación también ha disminuido lógicamente). Pero mientras la sobrecualificación entre los graduados de ciencias de la salud ha caído al 10,6% el nivel entre los graduados de humanidades ha aumentado (56,2%). En el último trabajo la sobrecualificación general (27,6%) es todavía menor que en el primer empleo. No obstante, entre los graduados de humanidades todavía alcanza el 46% y en los graduados de ciencias sociales se sitúa en el 34,5%. El nivel de adecuación de los graduados de ciencias de la salud alcanza ya el 83,2% y los graduados de técnicas presentan la mayor caída en el nivel de sobrecualificación entre el primer y el último empleo.

¿Qué puede explicar esta evolución del nivel de sobrecualificación?

Una primera explicación es que los jóvenes universitarios empiecen teniendo trabajos poco adecuados pero que, por medio de ascensos y mejoras en el puesto de trabajo, el nivel de adecuación entre su formación y el puesto de trabajo mejore. Esta es la visión que se ha definido al comienzo de la sección como desajuste temporal. La segunda


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explicación es que los jóvenes graduados ajusten sus expectativas profesionales con el tiempo mientras que la obsolescencia deprecia sus conocimientos. De esta forma un joven universitario que considera que está sobrecualificado para el trabajo que desarrolla puede ser que tres años después, realizando el mismo trabajo, acabe pensando que está adecuadamente preparado. Esta visión más pesimista parece ser coherente con los datos disponibles (ver García-Montalvo, 2005) aunque será necesaria más investigación para poder separar entre estas dos hipótesis.

VII.3. El desajuste subjetivo

El cuestionario del Observatorio de Inserción Laboral de los Jóvenes permite calcular dos tipos de indicadores del ajuste entre nivel formativo y puesto de trabajo. En esta sección se presenta un análisis detallado del indicador subjetivo basado en la percepción del joven sobre el ajuste, o desajuste, entre su nivel de formación y las tareas que realiza en su trabajo.

VII.3.1. Un análisis preliminar del desajuste subjetivo

Existen multitud de factores que pueden explicar la razón por la que un joven está realizando un trabajo poco adecuado a su nivel de formación. En esta subsección se realiza una descripción bivariante del nivel de ajuste frente a las características demográficas del joven, su nivel de formación, su puesto de trabajo y la localización de su residencia (provincia y tamaño del municipio).

Inicialmente, el cuadro VII.7 contiene la evolución del indicador de desajuste subjetivo en las diferentes oleadas del Observatorio. La primera columna de cada año presenta el desajuste en el primer empleo de los jóvenes encuestados y la segunda el desajuste en el último empleo, que en el caso de algunos jóvenes podría ser el primero. La lenta progresión del nivel de sobrecualificación en el primer empleo entre 1996 y

Cuadro VII.7 Desajuste subjetivo: evolución temporal

Primero Último Primero Último Primero Último Primero Último

Razonablemente adecuado 62,40 65,90 63,20 68,90 61,80 69,30 56,20 63,80Por encima de mi cualificación 2,70 2,80 1,60 1,60 2,40 1,90 1,50 2,00Por debajo de mi cualificación 35,00 31,30 35,30 29,20 35,80 28,90 42,30 34,20Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00

Fuente: Elaboración propia

20051996 1999 2002


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2002 se ha transformado en un salto importante en 2005. Si en el Observatorio de 2002 la sobrecualificación en el primer empleo era del 35,8%, en el último Observatorio dicho nivel ha aumentado hasta el 42,3%. El gráfico VII.1 presenta de una manera visualmente más clara el empeoramiento en el nivel de ajuste formación-puesto de trabajo en el primer empleo.

1996 1999 2002 20050%

10%

20%

30%

40%

50%

60%

70%

Razonablemente adecuadoPor encima de mi cualificaciónPor debajo de mi cualificación

Gráfico VII.1 Evolución del desajuste subjetivo en el primer empleo. Todas las ediciones del Observatorio


Pueden haber varios factores que expliquen este sustancial incremento en dicha proporción. En primer lugar, si los jóvenes deciden, en mayor proporción que en el pasado, trabajar mientras están estudiando existe una probabilidad alta de que tengan que hacerlo en empleos que no son adecuados a su nivel de cualificación. Éste sería el caso predominante en los trabajos de verano de los universitarios. En segundo lugar, es posible que parte del incremento sea debido al continuo aumento del nivel de formación de los jóvenes y al estancamiento relativo de la cualificación necesaria para desarrollar los trabajos demandados.

El incremento de la sobrecualificación en el primer empleo también se observa en el último empleo. Entre 2002 y 2005 la sobrecualificación subjetiva en el último empleo ha crecido en 5,3 puntos porcentuales, después de mostrar una tendencia levemente decreciente desde 1996. Por tanto ambos indicadores coinciden en señalar un incremento del nivel de sobrecualificación de los jóvenes.


325

El cuadro VII.8 incluye un análisis del desajuste subjetivo respecto a diversas características demográficas. Los hombres muestran un nivel de sobrecualificación en el último empleo (32%) algo inferior a las mujeres (36%). Por grupos educativos el nivel más elevado lo muestra el conjunto de encuestados entre 20 y 24 años. Con posterioridad a esta edad el nivel de sobrecualificación disminuye. En el análisis multivariante de la siguiente sección se muestra que gran parte de este efecto es consecuencia del efecto de la experiencia laboral más que la edad.

Cuadro VII.8 Desajuste subjetivo y características demográficas. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005

Hombre Mujer Menor de 20 años

Entre 20 y 24 años

Entre 25 y 29 años

Más de 29 años

Nacidos en España Inmigrantes



Lugar de nacimientoGrupos de edadSexo

El cuadro VII.8 también muestra las diferencias en el nivel de desajuste entre cualificación y puesto entre jóvenes nacidos en España e inmigrantes. Los segundos presentan un nivel de sobrecualificación inferior y un nivel de ajuste adecuado superior a los nacidos en España.

El cuadro VII.9 presenta la relación entre el ajuste cualificación-puesto de trabajo y el nivel educativo de los jóvenes. Como era de esperar los jóvenes con estudios obligatorios son los que presentan un menor nivel de sobrecualificación. No obstante, y a diferencia de los resultados de previos Observatorios, los jóvenes universitarios presentan un nivel de sobrecualificación menor que los graduados de enseñanza secundaría no obligatoria34. Las últimas columnas del cuadro VII.9 presentan la relación entre desajuste y percepción del mercado laboral. Los jóvenes que consideran que el mercado laboral está mal son los que presentan un mayor nivel de sobrecualificación mientras sucede lo contrario en los jóvenes que creen que el mercado laboral está bien. La justificación de esta relación es doble: por una parte los jóvenes que han podido encontrar un trabajo adecuado a su cualificación considerarán que el mercado laboral está bien (o al menos a ellos les ha ido bien); una segunda interpretación, que reforzaría el efecto anterior, es la posibilidad de que la percepción positiva del mercado laboral por parte del joven le permita ser más exigente a la hora de aceptar un empleo y esperar a que le ofrezcan uno que sea apropiado a su nivel formativo.

34 El análisis multivariante de la próxima sección separa el efecto del nivel educativo, la edad y la experiencia laboral.


326

Estudios obligatorios

Estudios no obligatorios secundarios

Estudios superiores

El mercado de trabajo está mal

El mercado de trabajo no está ni bien ni mal

El mercado de trabajo está

bien

Razonablemente adecuado 76,67 55,06 61,28 58,97 63,52 70,02Por encima de mi cualificación 2,78 1,83 0,91 1,36 2,73 2,26Por debajo de mi cualificación 20,56 43,12 37,80 39,67 33,75 27,72Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Empleador público

Empleador privado Autónomo Contratado por

ETT Agricultura Industria y construcción

Comercio, restauración y

transportes

Finanzas, educación y

sanidadAd. Pública Otros

servicios

Razonablemente adecuado 71,29 61,37 70,73 23,08 66,67 71,35 54,88 73,97 56,67 61,61Por encima de mi cualificación 0,99 2,36 1,22 0,00 0,00 3,93 0,68 0,68 3,33 4,27Por debajo de mi cualificación 27,72 36,27 28,05 76,92 33,33 24,72 44,44 25,34 40,00 34,12Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Hasta 10 trabajadores

De 11 a 49 trabajadores

De 50 o más trabajadores Indefinido Temporal Sin contrato Funcionario Otros



Cuadro VII.9 Desajuste subjetivo, nivel de estudios y percepción del mercado laboral. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005

Nivel de educación Percepción del mercado laboral

Cuadro VII.10 Desajuste subjetivo y características del empleo I. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005

Tipo de empleador Sector de actividad

Cuadro VII.11 Desajuste subjetivo y características del empleo II. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005

Tamaño de la empresa Tipo de contrato


327

El cuadro VII.10 muestra la relación entre el ajuste formación-puesto y las características del empleo. En función del tipo de empleador es evidente que el mayor desajuste se produce entre los contratados por las Empresas de Trabajo Temporal. Entre este grupo el nivel de sobrecualificación alcanza el 76,9%. Los niveles más bajos de sobrecualificación se producen entre los trabajadores cuyo empleador es el sector público o ellos mismos (autónomos). Por sectores de actividad la sobrecualificación se concentra especialmente en el sector comercial (comercio propiamente dicho, restaurantes y hostelería en general, transportes y comunicaciones). El menor nivel se da en el sector industrial, financiero, educativo y sanitario.

El cuadro VII.11 continúa con la relación entre características del empleo y adecuación subjetiva. El tamaño de la empresa no parece que tenga un efecto determinante en el nivel de sobrecualificación, aunque las empresas pequeñas presentan un nivel algo inferior de sobrecualificación que las más grandes. En función de la relación laboral parece claro a partir del cuadro VII.11 que los trabajadores con contrato temporal, o sin contrato, son los que mayor proporción de sobrecualificación presentan (en torno al 40%). Los jóvenes que tienen un contrato indefinido presenta el mejor nivel de adecuación entre su formación y las tareas de su puesto de trabajo.

La comparación entre la Comunidad Valenciana y el conjunto de la España urbana (cuadro VII.12) muestra que los jóvenes del segundo grupo tienen un nivel de sobrecualificación (37,3%) algo superior a los jóvenes de la Comunidad Valenciana (32,2%).

Una posible explicación del elevado nivel de desajuste entre la formación de los jóvenes y las tareas de su puesto de trabajo es que la puerta entrada en una empresa sea una categoría baja, pero que la consolidación en el mismo suponga una mejora progresiva en la adecuación. El cuadro VII.13 muestra una historia más compleja. El nivel de ajuste mejora hasta el tercer empleo pero empeora en el cuarto. Este mismo efecto ya se observaba en Observatorios anteriores, aunque de manera menos extrema. De hecho, en el Observatorio 2002 se observaba estabilidad en el ajuste hasta el tercer

Comunidad Valenciana

España urbana

Razonablemente adecuado 65,50 61,70Por encima de mi cualificación 2,20 1,10Por debajo de mi cualificación 32,30 37,30Total 100,00 100,00


Cuadro VII.12 Desajuste subjetivo: Comunidad Valenciana frente a la España urbana. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


328

Primero Segundo Tercero Cuarto Actual

Razonablemente adecuado 56,20 57,00 64,50 56,70 63,80Por encima de mi cualificación 1,50 2,90 1,20 3,30 2,00Por debajo de mi cualificación 42,30 40,10 34,30 40,00 34,20Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.13 Desajuste subjetivo y número de empleo. Muestra target de inserción. 2005

empleo y, posteriormente, un empeoramiento. En el observatorio 2005 el nivel de sobrecualificación cae del 42,3% al 34,3% entre el primer y el tercer empleo para volver al 40% en el cuarto empleo. La razón de este efecto es la inestabilidad laboral de muchos de estos jóvenes: si después de los primeros contratos temporales no se produce la estabilización en la empresa es muy probable que los jóvenes tengan que cambiar a otra empresa y comenzar desde un nivel poco adecuado a su cualificación. Con todo, y al igual que sucedía en los anteriores observatorios, se observa una clara mejoría entre el primer empleo y el último empleo, aunque la explicación de este efecto no es simple. En principio, podrían darse dos efectos contrapuestos: los jóvenes podrían realmente estar mejorando el ajuste entre su formación y el puesto de trabajo por ir aumentando los requerimientos, y la categoría, de su puesto de trabajo. No obstante, podría suceder que, con el paso del tiempo y la depreciación de sus conocimientos, los jóvenes reduzcan sus expectativas y consideren que casi cualquier trabajo se ajusta adecuadamente a su formación.

VII.3.2. Un análisis multivariantes de la adecuación formación-puesto de trabajo

En la anterior subsección se ha presentado un recorrido, meramente descriptivo, por la relación entre la adecuación de la formación del joven a su puesto de trabajo y una serie de factores que pueden afectar dicha relación. En esta subsección se pretende dar un paso más y realizar un análisis multivariante de los determinantes de la sobrecualificación y la infracualificación. El modelo estadístico es un logit multinomial pues en este capítulo, a diferencia del capítulo anterior, existen tres categorías (sobrecualificado, infracualificado y adecuadamente ajustado al puesto) en lugar de dos. La primera parte de la subsección presenta una breve descripción del procedimiento de estimación35. La segunda parte presenta las estimaciones, realizadas por bloques de variables y la especificación completa. A diferencia del análisis del estudio sobre el

35 Sigue básicamente la descripción en el estudio del Observatorio de 2002 y se incluye para no forzar al lector a acudir al estudio anterior para interpretar los resultados de la estimación.


329

Observatorio 2002 no se ha podido incluir información de las oleadas anteriores por el bajo nivel de recuperados que se ha obtenido en 2005.

El modelo logit multinomial considera que la probabilidad de un determinado suceso, j, se puede escribir como una probabilidad logística. La estimación de este modelo proporciona la probabilidad de un individuo con características x de estar en el grupo j. La normalización habitual consiste en hacer igual a 0 los parámetros de la opción tomada de referencia, ß1=0, con lo que la probabilidad de Y=j pasa a ser definida como

exp '

exp '

ijk=3

ikk=1

( )xPr(Y = j)=1+ ( )x

β

β∑

La probabilidad de la opción que se toma de referencia, por tanto, adopta la forma

exp 'k=3

ikk=1

1Pr(Y = 1)=1+ ( )xβ∑

La mejor forma para interpretar el efecto de las variables explicativas sobre la probabilidad de los distintos estados consiste en obtener el efecto marginal de los regresores que se calcula diferenciando la expresión anterior

jj kkj k

P = -P Pxβ β

∂ ∑ ∂

Utilizando estas definiciones se puede calcular el logaritmo del ratio de probabilidad entre la opción j y la opción de referencia como

ln 'ijij

i0

p= x

pβ

Por las características comentadas anteriormente del modelo logit multinomial se obtiene que el ratio de probabilidades, Pj/Pk, es independiente de otras opciones. La función de verosimilitud se construye con ayuda de un indicador, Ii(j=1), que toma valor 1 cuando la elección del individuo i ha sido la alternativa j. Por tanto, la función objetivo tiene la forma

∑∑= =

==I

i

J

jii jYjIL

1 1)Pr(ln)(ln


330

La estimación del modelo logit multinomial se realiza maximizando la función de verosimilitud anterior utilizando cualquiera de los procedimientos de optimización no lineal disponibles. Normalmente se utiliza el procedimiento de Newton con excepción de situaciones en las que los datos no son suficientemente precisos.

En todas las estimaciones que aparecen a continuación se presentan cuatro paneles. El primero, panel A, contiene los contrastes de razón de verosimilitud entre el modelo completo y el modelo reducido. Se entiendo por modelo reducido aquel que se obtiene omitiendo un efecto del modelo final. La hipótesis nula es que todos los parámetros de ese efecto son 0.

El panel B presenta, en la segunda columna, los parámetros estimados para la categoría de infracualificados respecto a los adecuadamente preparados para el puesto de trabajo. La segunda columna contiene un test asintótico de Wald para la hipótesis nula de que dicho parámetro es 0. La tercera columna contiene el nivel de probabilidad asociado al estadístico de Wald. Finalmente la última columna presenta las probabilidades relativas a la categoría de referencia según la fórmula

exp( ' )ijij

i0

p= x

pβ

El panel C presenta los mismos resultados pero relativos a la sobrecualificación. Finalmente el panel D contiene una serie de indicadores de la bondad del ajuste del modelo así como el tamaño de la muestra en cada caso. En particular se presentan los contrates de significatividad conjunta del modelo basados en el valor de la función de verosimilitud (-2lnL) y en el test Chi-cuadrado de Pearson. Asimismo se incluye el Pseudo-R2 y el porcentaje de predicciones correctas utilizando los parámetros estimados del modelo.

Las variables explicativas se consideran agrupadas en varios bloques: factores demográficos y educativos, factores laborales, factores psico-sociales y determinantes geográficos. Las primeras estimaciones, realizadas por bloques de variables, son preliminares pues el modelo completo se presenta al final de la sección. En todos los casos se controla por el tamaño de la localidad de residencia del joven y su localización en la Comunidad Valenciana o en el resto de España (determinantes geográficos):

La estimación contiene una dicotómica para la Comunidad Valenciana. El tamaño muestral y el gran número de ciudades incluidas en el Observatorio 2005 no permite incluir una dicotómica para cada provincia.


331

Respecto al tamaño de municipio la categoría omitida son las localidades de menos de 50.000 habitantes. Los otros dos tamaños considerados son los municipios entre 50.000 y 500.000 habitantes y los de más de 500.000 habitantes.

En el primer bloque, los factores demográficos y educativos, se incluyen las siguientes variables:

Edad

Sexo. Dicotómica que toma valor 1 si es un varón

Domicilio paterno. Dicotómica que toma valor 1 si el joven viven en el domicilio paterno.

Inmigrante. Dicotómica que toma valor 1 si el joven no nació en España.

Educación. Se ha clasificado en tres niveles: educación obligatoria (categoría omitida), secundaria no obligatoria y universitaria.

Los resultados de la estimación con estos determinantes aparecen en el cuadro VII.14. El bloque A muestra que las variables significativas conjuntamente (para explicar la infracualificación y la sobrecualificación) son la edad, el sexo, vivir en casa de los padres, la enseñanza secundaria superior y la universitaria y residir en una ciudad de más de 500.000 habitantes. El panel B muestra los determinantes de la infracualificación (la categoría omitida en todas las estimaciones es el ajuste adecuado). La reducida muestra de los infracualificados hace complicado encontrar factores estadísticamente significativos. Solo el sexo y el tamaño de la localidad de residencia resultan relevantes estadísticamente. Los hombres tienen casi 5 veces más probabilidad que las mujeres de estar infracualificados frente a tener un nivel apropiado de formación. Por el contrario los jóvenes que viven en ciudades grandes (más de 500.000 habitantes) tienen una tercera parte de probabilidad de estar infracualificados que los jóvenes que viven en ciudades de menos de 50.000 habitantes.

Los factores explicativos de la sobrecualificación aparecen en el panel C. Los factores más importantes son el nivel educativo, el tamaño de la ciudad, la edad y residir en casa de los padres. Los jóvenes con educación por encima de la obligatoria tienen tres veces más probabilidad de estar sobrecualificados que los jóvenes que tienen hasta educación obligatoria. Vivir en casa de los padres multiplica por 1,55 la probabilidad de sobrecualificación respecto a estar viviendo en un domicilio propio. La edad reduce el nivel de sobrecualificación mientras que vivir en ciudades de más de 50.000 habitantes lo aumenta. La dicotómica de la Comunidad Valenciana no es significativa, lo que


332

Panel A: Contrastes de la razón de verosimilitud

-2 log verosimilitud del modelo reducido

Chi-cuadrado gl Sig.

Intersección 1238,26 5,05 2,00 0,08Edad 1239,64 6,43 2,00 0,04Varón 1251,22 18,01 2,00 0,00Vive en casa de los padres 1244,12 10,90 2,00 0,00Inmigrante 1235,08 1,87 2,00 0,39Educación secundaria superior 1296,60 63,39 2,00 0,00Educación universitaria 1262,70 29,49 2,00 0,00Ciudad entre 50.000 y 500.000 1237,54 4,33 2,00 0,11Ciudad de más de 500.000 1245,05 11,84 2,00 0,00Comunidad Valenciana 1233,85 0,63 2,00 0,73

Panel B: Estimación de los parámetros: Infracualificados

B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -2,17 1,53 0,22Edad -0,10 1,68 0,20 0,91Varón 1,61 12,03 0,00 4,99Vive en casa de los padres -0,52 1,13 0,29 0,60Inmigrante -1,03 0,95 0,33 0,36Educación secundaria superior 0,42 0,93 0,33 1,53Educación universitaria -0,09 0,02 0,90 0,91Ciudad entre 50.000 y 500.000 0,05 0,01 0,91 1,06Ciudad de más de 500.000 -1,06 2,58 0,11 0,35Comunidad Valenciana 0,33 0,46 0,50 1,39

Panel C: Estimación de los parámetros: Sobrecualificados

B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -0,99 3,92 0,05Edad -0,05 5,04 0,02 0,95Varón -0,14 1,61 0,21 0,87Vive en casa de los padres 0,44 9,03 0,00 1,56Inmigrante -0,18 0,72 0,40 0,83Educación secundaria superior 1,10 59,50 0,00 3,01Educación universitaria 1,03 28,58 0,00 2,81Ciudad entre 50.000 y 500.000 0,37 4,31 0,04 1,44Ciudad de más de 500.000 0,50 7,90 0,00 1,65Comunidad Valenciana 0,07 0,24 0,62 1,07

Panel D: Tamaño muestral y estadísticos de bondad del ajuste

N 1574

-2lnL 0,00Pearson Chi2 0,89Pseudo R2 (Cox y Snell) 0,08% de predicciones correctas 65,20%


Cuadro VII.14 Factores determinantes del desajuste entre cualificación y tareas del puesto de trabajo. Factores demográficos. Muestra target inserción. 2005


333

muestra que no existe diferencia en términos del ajuste formación-puesto entre los jóvenes de la Comunidad Valenciana y los del resto de España cuando se consideran factores demográficos y educativos. El panel D muestra que los factores demográficos son capaces de predecir correctamente el 65,2% de las observaciones, con un pseudo R2 de 0.08.

El cuadro VII.15 muestra la estimación del logit multinomial para el segundo bloque de variables, que incluye la experiencia laboral del joven y las características de la empresa y del contrato:

Años de experiencia laboral.

El tamaño de la empresa. En este caso se distinguen entre empresas medianas (de 11 a 50 empleados) y empresas grandes (más de 50 empleados). La categoría omitida son las pequeñas empresas (de 10 trabajadores o menos).

El tipo de relación laboral. Se distinguen cuatro categorías, que se han convertido en variables dicotómicas: contrato temporal, trabajo sin contrato e indefinido (que es la categoría de referencia).

El sector de actividad. Se incluyen cuatro sectores: industria, comercio (que incluye restauración, comercio y transporte), financiero-educativo-sanitario y administración pública. La categoría omitida es otros.

El panel A muestra que las variables conjuntamente significativas son la actividad en el sector comercial, educativo o sanitario, la posesión de un contrato laboral o el trabajo sin contrato y el tamaño del municipio. Los determinantes de la infracualificación aparecen en el panel B. Solamente dos de ellos son significativos estadísticamente. A mayor experiencia laboral mayor grado de infracualificación. Por otra parte, trabajar en el sector comercial reduce el nivel de infracualificación.

El panel C presenta los factores determinantes de la sobrecualificación basados en características laborales. Trabajar en el sector comercial, con contrato temporal o sin contrato y en ciudades de más de 50.000 habitantes aumenta la probabilidad de estar sobrecualificado. El efecto más importante está asociado al tipo de contrato: los jóvenes que trabajan sin contrato tienen 2,4 veces más probabilidad de estar sobrecualificados que los jóvenes que tienen un contrato indefinido. Un contrato temporal implica un nivel algo inferior de sobrecualificación pero también estadísticamente significativo.


334




Intersección 889,88 44,80 2,00 0,00Experiencia 850,22 5,14 2,00 0,08Industria y construcción 847,63 2,55 2,00 0,28Comercio 854,36 9,29 2,00 0,01Educación y sanidad 853,93 8,85 2,00 0,01Administración pública 847,12 2,04 2,00 0,36Empresas entre 11 y 49 empleados 845,89 0,81 2,00 0,67Empresas de 50 o más empleados 847,79 2,71 2,00 0,26Contrato temporal 867,11 22,03 2,00 0,00Sin contrato 857,53 12,45 2,00 0,00Ciudad entre 50.000 y 500.000 851,84 6,76 2,00 0,03Ciudad de más de 500.000 858,22 13,14 2,00 0,00Comunidad Valenciana 846,69 1,61 2,00 0,45


B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -3,26 12,99 0,00Experiencia 0,17 3,99 0,05 1,19Industria y construcción -0,11 0,04 0,85 0,89Comercio -1,37 3,85 0,05 0,25Educación y sanidad -1,45 1,78 0,18 0,23Administración pública 1,27 1,13 0,29 3,57Empresas entre 11 y 49 empleados 0,46 0,74 0,39 1,58Empresas de 50 o más empleados -1,45 1,62 0,20 0,24Contrato temporal -0,13 0,06 0,81 0,88Sin contrato -0,40 0,22 0,64 0,67Ciudad entre 50.000 y 500.000 0,01 0,00 0,98 1,01Ciudad de más de 500.000 -1,11 1,67 0,20 0,33Comunidad Valenciana 0,86 1,60 0,21 2,36


B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -1,79 33,24 0,00Experiencia -0,06 1,55 0,21 0,94Industria y construcción -0,39 2,52 0,11 0,67Comercio 0,38 3,98 0,05 1,46Educación y sanidad -0,70 6,78 0,01 0,50Administración pública 0,60 1,42 0,23 1,82Empresas entre 11 y 49 empleados 0,07 0,15 0,70 1,07Empresas de 50 o más empleados 0,11 0,33 0,56 1,12Contrato temporal 0,81 20,44 0,00 2,26Sin contrato 0,90 11,93 0,00 2,45Ciudad entre 50.000 y 500.000 0,63 6,61 0,01 1,89Ciudad de más de 500.000 0,77 10,01 0,00 2,16Comunidad Valenciana 0,05 0,09 0,77 1,05


N 895



Cuadro VII.15 Factores determinantes del desajuste entre cualificación y tareas del puesto de trabajo. Factores relacionados con el tipo de empleo y contrato. Muestra target inserción. 2005


335

El panel D muestra que los factores relacionados con el empleo y las características de la empresa tienen mayor capacidad explicativa conjunta que los factores demográficos. El pseudo R2 es 0.10 y el porcentaje de predicciones correctas alcanza el 65,3%.

El cuadro VII.15 contiene los resultados de la estimación de los factores determinantes del desajuste formación-puesto en base a condicionantes psico-sociales. Entre los mismos se consideran los siguientes:

La centralidad absoluta del trabajo. Esta variable representa la respuesta a la pregunta sobre la disponibilidad del joven a seguir trabajando si le correspondiera un premio importante de lotería. Cuanto mayor es el valor menor es la centralidad absoluta del trabajo.

La centralidad relativa del trabajo, la familia y la formación. Corresponden a la importancia que estas facetas tienen para el joven cuando debe distribuir 10 puntos entre las mismas.

La iniciativa personal y la pasividad en la planificación de la carrera profesional. Estas variables fueron definidas con anterioridad y su construcción se trata con más detalle en el capítulo VIII de este libro.

La percepción del mercado laboral. Un valor alto indica una percepción positiva del mercado laboral.

El cuadro VII.16 muestra los resultados de la estimación de la probabilidad de desajuste en función de los determinantes psico-sociales de los jóvenes. El panel A contiene los contrastes de verosimilitud para estas variables. La centralidad relativa del trabajo y de la familia, la iniciativa, la percepción del mercado laboral y el tamaño de la ciudad son los principales determinantes del desajuste formación-puesto. La infracualificación disminuye cuanto mayor es la centralidad relativa del trabajo sin que ninguna otra variable resulte estadísticamente significativa. La centralidad relativa del trabajo también es estadísticamente significativa en la probabilidad de sobrecualificación, disminuyendo su probabilidad. Por tanto, se puede señalar que cuanto mayor es la centralidad relativa del trabajo mejor es el ajuste entre puesto y formación del joven. Por su parte, cuanto mayor es la centralidad relativa de la formación mayor es la sobrecualificación. En principio los que valoran la formación como algo muy importante en su vida tienden a ocupar puestos de trabajo que están por debajo de su cualificación. La iniciativa también tiene un efecto positivo en la sobrecualificación. La percepción positiva del mercado laboral reduce la sobrecualificación, como ya se observaba en los análisis descriptivos de la subsección


336




Intersección 2123,48 11,59 2,00 0,00Centralidad absoluta del trabajo 2112,89 1,00 2,00 0,61Centralidad relativa de la familia 2124,96 13,07 2,00 0,00Centralidad relativa del trabajo 2128,50 16,61 2,00 0,00Centralidad relativa de la formación 2117,70 5,81 2,00 0,05Iniciativa 2127,50 15,61 2,00 0,00Pasividad 2113,02 1,13 2,00 0,57Percepción del mercado laboral 2123,61 11,72 2,00 0,00Ciudad entre 50.000 y 500.000 2119,47 7,58 2,00 0,02Ciudad de más de 500.000 2132,83 20,94 2,00 0,00Comunidad Valenciana 2114,63 2,74 2,00 0,25


B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -2,93 3,40 0,07Centralidad absoluta del trabajo -0,11 0,81 0,37 0,89Centralidad relativa de la familia -0,71 12,72 0,00 0,49Centralidad relativa del trabajo 0,13 0,58 0,45 1,14Centralidad relativa de la formación 0,02 0,01 0,92 1,02Iniciativa 0,05 0,04 0,84 1,05Pasividad 0,05 0,06 0,80 1,05Percepción del mercado laboral 0,22 1,65 0,20 1,25Ciudad entre 50.000 y 500.000 0,09 0,03 0,85 1,10Ciudad de más de 500.000 -0,99 2,29 0,13 0,37Comunidad Valenciana 0,83 2,89 0,09 2,29


B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -1,47 8,96 0,00Centralidad absoluta del trabajo 0,01 0,11 0,73 1,01Centralidad relativa de la familia -0,04 0,41 0,52 0,96Centralidad relativa del trabajo -0,23 14,85 0,00 0,80Centralidad relativa de la formación 0,15 5,75 0,02 1,16Iniciativa 0,32 15,11 0,00 1,38Pasividad -0,06 1,01 0,32 0,94Percepción del mercado laboral -0,15 9,12 0,00 0,86Ciudad entre 50.000 y 500.000 0,49 7,52 0,01 1,63Ciudad de más de 500.000 0,73 16,76 0,00 2,07Comunidad Valenciana 0,02 0,02 0,89 1,02


N 1511



Cuadro VII.16 Factores determinantes del desajuste entre cualificación y tareas del puesto de trabajo. Factores psico-sociales. Muestra target inserción. 2005


337

anterior, donde se presentaban diversas hipótesis que podían explicar este efecto. Finalmente, la residencia en ciudades más grandes aumenta la probabilidad de sobrecualificación. El panel D muestra que los factores psico-sociales tienen unos coeficientes de bondad del ajuste peores que los anteriores grupos de factores considerados en esta subsección.

Por último el cuadro VII.17 incluye todos los grupos de factores determinantes analizados con anterioridad en una misma especificación. El panel A muestra como la mayoría de las variables que resultaban estadísticamente significativas en cada bloque lo continúan siendo cuando se incluyen conjuntamente. Éste es el caso de ser hombre, vivir en casa de los padres, tener educación secundaria superior o universitaria, trabajar en el sector comercial, educativo o sanitario, tener un contrato temporal o trabajar sin contrato, tener una visión positiva del mercado laboral, residir en una ciudad de más de 500.000 habitantes, la centralidad relativa de la familia y el trabajo y la iniciativa.

Los resultados para infracualificación y sobrecualificación aparecen separadamente en los paneles B y C. El panel B indica que los hombres y los jóvenes con mayor experiencia tienen mayor probabilidad de estar infracualificados para su puesto de trabajo. Por el contrario, un elevado grado de centralidad relativa de la familia está asociado con un nivel de infracualificación menor.

La explicación de la sobrecualificación incluye muchos más factores. Entre los demográficos, el incremento de la probabilidad de sobrecualificación está relacionado con vivir en casa de los padres y tener educación secundaria superior o universitaria. En el apartado de características del empleo el trabajar en el sector comercial con trabajo temporal o sin contrato aumenta la probabilidad de sobrecualificación. El efecto más importante está asociado al tipo de contrato: tener un contrato temporal dobla la probabilidad de sobrecualificación respecto a contratos indefinidos. El incremento es superior al doble en el caso de trabajar sin contrato. De los factores psico-sociales la iniciativa incrementa la probabilidad de sobrecualificación mientras que la percepción positiva del mercado laboral la reduce. Finalmente, residir en una ciudad de más de 500.000 habitantes tiende a incrementar la probabilidad de sobrecualificación. La estimación de este modelo es bastante buena teniendo en cuenta que el pseudo R2 alcanza el 0.20 y el porcentaje de predicciones correctas se acerca mucho al 70%.


338




Intersección 1097,64 7,67 2,00 0,02Edad 1090,02 0,05 2,00 0,98Varón 1097,41 7,45 2,00 0,02Vive en casa de los padres 1096,40 6,43 2,00 0,04Inmigrante 1091,46 1,49 2,00 0,47Educación secundaria superior 1117,89 27,92 2,00 0,00Educación universitaria 1104,94 14,97 2,00 0,00Experiencia 1095,52 5,56 2,00 0,06Industria y construcción 1090,07 0,10 2,00 0,95Comercio 1097,88 7,91 2,00 0,02Educación y sanidad 1096,78 6,82 2,00 0,03Administración pública 1093,31 3,34 2,00 0,19Empresas entre 11 y 49 empleados 1090,59 0,62 2,00 0,73Empresas de 50 o más empleados 1091,23 1,27 2,00 0,53Contrato temporal 1103,67 13,70 2,00 0,00Sin contrato 1097,87 7,90 2,00 0,02Centralidad absoluta del trabajo 1094,32 4,35 2,00 0,11Centralidad relativa de la familia 1098,39 8,42 2,00 0,01Centralidad relativa del trabajo 1097,52 7,55 2,00 0,02Centralidad relativa de la formación 1090,10 0,13 2,00 0,94Iniciativa 1097,04 7,08 2,00 0,03Pasividad 1092,10 2,13 2,00 0,34Percepción del mercado laboral 1098,58 8,62 2,00 0,01Ciudad entre 50.000 y 500.000 1093,18 3,21 2,00 0,20Ciudad de más de 500.000 1098,59 8,62 2,00 0,01Comunidad Valenciana 1091,62 1,65 2,00 0,44


B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -3,34 0,81 0,37Edad -0,01 0,01 0,92 0,99Varón 1,77 5,26 0,02 5,89Vive en casa de los padres -0,46 0,49 0,48 0,63Inmigrante -0,70 0,31 0,58 0,49Educación secundaria superior 0,29 0,22 0,64 1,33Educación universitaria -1,49 1,24 0,27 0,23Experiencia 0,23 5,47 0,02 1,26Industria y construcción -0,09 0,02 0,89 0,91Comercio -1,10 2,01 0,16 0,33Educación y sanidad -0,64 0,26 0,61 0,53Administración pública 1,59 1,19 0,28 4,91Empresas entre 11 y 49 empleados 0,42 0,45 0,50 1,53Empresas de 50 o más empleados -1,21 0,99 0,32 0,30Contrato temporal 0,09 0,02 0,89 1,09Sin contrato 0,37 0,14 0,71 1,45Centralidad absoluta del trabajo -0,28 2,10 0,15 0,75Centralidad relativa de la familia -0,86 7,00 0,01 0,42Centralidad relativa del trabajo 0,44 3,23 0,07 1,55Centralidad relativa de la formación -0,10 0,12 0,73 0,90Iniciativa 0,26 0,34 0,56 1,30Pasividad 0,12 0,15 0,70 1,13Percepción del mercado laboral -0,06 0,06 0,80 0,94Ciudad entre 50.000 y 500.000 -0,24 0,10 0,75 0,79Ciudad de más de 500.000 -1,80 2,42 0,12 0,16Comunidad Valenciana 0,95 1,50 0,22 2,59


Cuadro VII.17 Factores determinantes del desajuste entre cualificación y tareas del puesto de trabajo. Todas las variables. Muestra target inserción. 2005


339


B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -2,71 7,08 0,01Edad 0,01 0,03 0,85 1,01Varón -0,13 0,55 0,46 0,88Vive en casa de los padres 0,47 5,56 0,02 1,60Inmigrante -0,32 1,19 0,27 0,72Educación secundaria superior 1,07 26,66 0,00 2,90Educación universitaria 0,99 12,64 0,00 2,68Experiencia -0,05 1,18 0,28 0,95Industria y construcción -0,08 0,09 0,76 0,92Comercio 0,46 5,07 0,02 1,58Educación y sanidad -0,73 6,48 0,01 0,48Administración pública 0,89 2,61 0,11 2,43Empresas entre 11 y 49 empleados -0,07 0,13 0,72 0,93Empresas de 50 o más empleados -0,07 0,10 0,75 0,94Contrato temporal 0,72 13,22 0,00 2,05Sin contrato 0,85 7,89 0,00 2,35Centralidad absoluta del trabajo 0,07 1,73 0,19 1,07Centralidad relativa de la familia -0,08 0,88 0,35 0,93Centralidad relativa del trabajo -0,16 3,41 0,06 0,86Centralidad relativa de la formación -0,01 0,01 0,91 0,99Iniciativa 0,31 6,77 0,01 1,37Pasividad -0,12 1,89 0,17 0,89Percepción del mercado laboral -0,22 8,52 0,00 0,81Ciudad entre 50.000 y 500.000 0,46 2,97 0,08 1,58Ciudad de más de 500.000 0,58 4,96 0,03 1,79Comunidad Valenciana 0,10 0,24 0,62 1,10


N 856



Cuadro VII.17. Factores determinantes del desajuste entre cualificación y tareas del puesto de trabajo. Todas las variables. Muestra target inserción. 2005 (cont.)


340

VII.4. El desajuste objetivo

En la introducción de este capítulo se describieron dos tipos de medidas empíricas del desajuste: el llamado desajuste subjetivo y el objetivo. La sección anterior analizó el desajuste subjetivo en todas sus vertientes. En este capítulo nos centraremos en el desajuste objetivo. Para elaborar este indicador se ha utilizado la pregunta B15 del cuestionario, que hace referencia al nivel educativo que el entrevistado considera que sería necesario para desarrollar las tareas asociadas a su puesto de trabajo. La formulación de la pregunta es la siguiente:

Si tuvieras que recomendar a una persona para ocupar tu puesto de trabajo, ¿qué estudios le aconsejarías realizar? Indícanos, además, que nivel tendrían esos estudios.

En la edición del estudio sobre el Observatorio 2002 (García-Montalvo et al. 2003) se construyó un indicador de desajuste objetivo basado en la diferencia entre el nivel de estudios que poseía el joven entrevistado y el nivel de estudios requerido para realizar las tareas asociadas a cada puesto de trabajo. Al utilizar directamente la diferencia entre los dos niveles (educación primaria, educación secundaria obligatoria ESO primero y segundo, etc.) se pierde algo de información pues no es lo mismo pasar de primero y segundo de ESO a tercero o cuarto que pasar de FP de grado superior a una diplomatura. En segundo lugar, el indicador basado en la diferencia de niveles no permite establecer una métrica los suficientemente detallada como para catalogar categorías con un gran nivel de desagregación. Finalmente, los resultados de la clasificación del desajuste objetivo basado en las diferencias de niveles mostraban evidentes diferencias con los obtenidos mediante la clasificación subjetiva del grado de desajuste. Aunque, obviamente, no es necesario que ambas clasificaciones coincidan totalmente, pues este es el motivo por el cual se usa el indicador objetivo como una alternativa, si que parece razonable pensar que las diferencias no puedan ser muy grandes.

En esta nueva edición del estudio sobre el Observatorio de la Inserción Laboral de los Jóvenes se utiliza un indicador diferente. En primer lugar se transforma en años de educación cada uno de los niveles formativos. En el caso de los jóvenes que hayan seguido estudios antes de la implantación de la LOGSE la correspondencia es la siguiente:

1. Sin estudios: 0 años

2. Primaria/certificado escolar: 6 años

3. Graduado escolar/EGB: 8 años


341

4. FP1: 10 años

5. FP2: 12 años

6. BUP: 11 años

7. COU: 12 años

8. Universitario medio: 15 años

9. Tres años de universidad: 15 años

10. Universitario superior: 17 años

11. Master: 18 años

12. Doctorado: 21 años

Para los jóvenes que han seguido los itinerarios educativos de la LOGSE la correspondencia entre la clasificación de niveles y los años de formación es la siguientes:

1. Sin estudios: 0 años

2. Educación primaria: 6 años

3. Educación secundaria obligatoria ESO (primero y segundo): 8 años

4. Educación secundaria obligatoria ESO (tercero y cuarto): 10 años

5. Bachillerato: 12 años

6. FP grado medio: 12 años

7. FP grado superior: 14 años

8. Universitario medio: 15 años

9. Tres años de universidad: 15 años

10. Universitario superior: 17 años

11. Master: 18 años

12. Doctorado: 21 años


342

A partir de estas correspondencias y de la contestación a la pregunta sobre el nivel de formación que sería recomendable para realizar las tareas del puesto de trabajo en cada empleo se ha calculado el indicador de desajuste objetivo como la diferencia entre los años de formación del joven y los años de formación que se considerarían adecuados para realizar el trabajo que desarrolla. Para evitar una excesiva fragmentación se ha clasificado el desajuste objetivo en cinco categorías. La categorización aparece a continuación:

a) Infracualificación fuerte. Es aquella que se produce en todos los empleos en los que los años de formación requeridos por el puesto de trabajo superan en más de cinco años los años de formación del joven. Por tanto el indicador de la diferencia toma valores inferiores a –5.

b) Infracualificación débil. El indicador de la diferencia toma valores entre –5 y –3.

c) Cualificación adecuada. Se consideran como tales los empleos en los que la diferencia entre los años de formación requeridos por el puesto y los años de formación del joven son menores que 3 en valor absoluto. Por tanto el indicador de diferencia toma valores entre –2 y 2.

d) Sobrecualificación débil. Se produce en los empleos en los que el indicador de diferencia (desajuste objetivo) se sitúa entre 3 y 5 años.

e) Sobrecualificación fuerte. Cuando el desajuste objetivo se sitúa entre 6 y 9 años de diferencia entre la formación poseída por el joven y la requerida por el puesto de trabajo.

f) Sobrecualificación muy fuerte. Se produce en los empleos donde el indicador de desajuste objetivo está entre 10 y 12 años.

g) Sobrecualificación extrema. Se produce cuando el nivel de sobrecualificación supera los 12 años de formación. Este sería el caso, por ejemplo, de un universitario que trabaja como camarero en un bar (suponiendo que dicho trabajo no requiera ningún nivel de formación).

Esta aproximación a la medición del desajuste objetivo es bastante diferente a la adoptada en el anterior estudio, basado en los datos del Observatorio de 2002, aunque tenga un cierto soporte en los mismos principios. La utilización de los años de formación como métrica permite conseguir un indicador más ajustado al concepto que se desea medir. Además el nuevo indicador permite considerar como adecuadamente ajustados a los jóvenes que presentan un nivel de formación 2 años superior, o inferior,


343

al número de años que teóricamente sería recomendable para realizar el trabajo. La utilización de intervalos en la diferencia de años permite ajustar mucho mejor las definiciones a las situaciones observadas en la relación entre la formación de los jóvenes y los requerimientos del puesto de trabajo.

Los siguientes ejemplos clarifican algo más la relación entre el indicador basado en la diferencia de niveles y el indicador basado en la diferencia de años de formación.

Ejemplo 1: Supongamos un joven que tiene estudios de EGB pero está realizando una trabajo para el cual se requerirían estudios de FP2. En este caso la diferencia de niveles era –2 mientras el indicador de diferencia de años sería –8 si el joven ha estudiado bajo la LOGSE.

Ejemplo 2: Supongamos un diplomado en ciencias empresariales que está realizando labores de administrativo. En este caso el indicador basado en la diferencia de niveles toma el valor de 4 mientras el basado en la diferencia de años de formación es 5 (suponiendo que para dicho puesto de administrativo sea necesario un título de formación profesional de grado medio) si el joven estudio bajo la LOGSE. Si el nivel educativo recomendado para la realización de las tareas del puesto fuera solo educación primaria, entonces la diferencia sería de 11 años.

El cuadro VII.18 muestra que los hombres tienen un nivel mayor de infracualificación que las mujeres y un nivel de sobrecualificación inferior. Este resultado ya se observaba en el análisis del indicador de desajuste subjetivo aunque los niveles son algo diferentes. En particular, el ajuste objetivo formación-puesto es menor en ambos casos (hombres y mujeres) que el mostrado por el indicador subjetivo mientras la sobrecualificación objetiva es inferior y la infracualificación objetiva es superior a la obtenida por el indicador subjetivo. Por grupos de edad, el ajuste adecuado es máximo entre los mayores de 29 años y mínimo en los jóvenes entre 20 y 24 años. El grado de sobrecualificación sigue el patrón opuesto. La sobrecualificación según el indicador objetivo alcanza el 37,4% en los jóvenes entre 20 y 24 años y desciende al 25,9% entre los mayores de 29 años. Finalmente, los inmigrantes muestran un nivel de sobrecualificación objetiva inferior al resto de los jóvenes y un nivel de cualificación adecuada superior.

El cuadro VII.19 muestra las diferencias en el indicador de sobrecualificación objetiva en función del nivel de formación. Los resultados en esta tabla muestran diferencias considerables con los obtenidos por el indicador de desajuste subjetivo. La sobrecualificación se concentra en los graduados de estudios superiores. Además, el


344


Entre 20 y 24 años

Entre 25 y 29 años

Más de 29 años

Infracualificación fuerte 1,67 0,82 2,60 0,27 1,54 1,16 1,48Infracualificación débil 7,76 3,76 5,20 6,40 3,69 7,41 5,46 5,93Cualificación adecuada 57,69 60,09 60,28 55,86 64,00 66,67 58,66 62,96Sobrecualificación débil 9,59 15,73 12,06 13,22 14,46 7,41 13,25 11,11Sobrecualificación fuerte 11,87 11,85 9,22 13,90 10,46 14,81 12,01 10,37Sobrecualificación muy fuerte 9,44 6,22 10,40 8,04 3,38 3,70 7,93 4,44Sobrecualificación extrema 1,98 1,53 0,24 2,32 2,46 1,53 3,70Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00




Estudios superiores



El mercado de trabajo está bien

Infracualificación fuerte 3,36 0,15 0,80 1,29 1,71Infracualificación débil 8,30 6,03 3,85 5,41 7,89Cualificación adecuada 63,04 59,41 52,01 52,72 61,34 64,39Sobrecualificación débil 11,26 7,79 26,93 16,51 9,28 11,73Sobrecualificación fuerte 6,52 15,74 12,07 15,06 12,63 7,46Sobrecualificación muy fuerte 7,51 10,29 2,17 8,97 9,02 4,90Sobrecualificación extrema 0,59 6,81 2,08 1,03 1,92Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.18 Desajuste objetivo y factores demográficos

Sexo Grupos de edadNacidos en

España Inmigrantes

Cuadro VII.19 Desajuste objetivo, nivel educativo y percepción del mercado laboral


nivel de sobrecualificación aumenta con el nivel de formación. Este resultado no se observaba en el indicador subjetivo, donde la mayor sobrecualificación se concentraba en los graduados de enseñanza secundaria superior. Otra diferencia importante se refiere al nivel de sobrecualificación. En el indicador subjetivo la sobrecualificación alcanzaba al 37,8% de los universitarios. En el indicador objetivo este porcentaje aumenta hasta el 48%. Asimismo, los universitarios concentran la práctica totalidad de la sobrecualificación extrema de los jóvenes de la muestra. La sobrecualificación objetiva de los jóvenes con estudios secundarios superiores alcanza al 34,4% mientras que la que se da entre los jóvenes con estudios hasta obligatorios presenta un porcentaje del 25,3%. Por tanto, parece que el indicador de desajuste objetivo presenta una relación más estrecha con el nivel de formación que el indicador de desajuste subjetivo. La relación entre el ajuste formación-puesto y la percepción del mercado laboral, por su parte, sigue la misma tendencia que la ya mostrada por el indicador subjetivo: cuanto mejor es la percepción del mercado laboral menor es la sobrecualificación. Nuevamente, la tendencia observada es clara y significativa como ya lo era en el caso del indicador subjetivo.

El cuadro VII.20 contiene la relación entre el indicador de ajuste objetivo y la formación, el puesto y las características del empleo. La sobrecualificación objetiva es máxima entre los contratados por ETT (38,4%) seguido por los empleados de empresas privadas (37,4%). El ranking de la sobrecualificación en función del empleador es muy parecido al observado en el indicador de desajuste subjetivo, aunque los niveles son


345

bastante diferentes. Por sectores la mayor sobrecualificación se observa entre los jóvenes que trabajan en la agricultura (57,2%), seguidos por los trabajadores en el comercio y la restauración (45,7%). Por el contrario, el menor nivel se encuentra en el sector financiero, educativo y sanitario (16%).

El cuadro VII.20 también muestra que las empresas entre 11 y 50 trabajadores tienen la mayor proporción de jóvenes sobrecualificados (40,2%), siendo el resto de la distribución muy similar en todos los tamaños de empresa. Finalmente, el cuadro VII.20 presenta otro resultado que coincide con el mostrado con anterioridad al referirnos al desajuste subjetivo: los jóvenes que trabajan sin contrato presentan el mayor nivel de sobrecualificación (48,8%). En el caso del indicador objetivo los contratados temporalmente tienen un nivel de sobrecualificación elevado (38,2%) pero claramente inferior a los que trabajan sin contrato.

¿Cómo evoluciona el indicador de desajuste objetivo entre formación y puesto con el número de empleos del joven? El cuadro VII.21 presenta esta información. En clara consonancia con los resultados del indicador subjetivo, el nivel de sobrecualificación se mantiene estable durante el primer y el segundo empleo (40,6%) para disminuir en el tercero al 38,3% y aumentar de nuevo en el cuarto empleo hasta el 42,6%. El cuadro VII.21 muestra también que el nivel de infracualificación aumenta a medida que aumentan el número de empleos (ver también gráfico VII.2). En el último empleo, el actual, el nivel de sobrecualificación agregado es del 34,2% en el indicador objetivo, coincidiendo con la proporción en el caso del desajuste subjetivo. La sobrecualificación extrema alcanza al 1,7% de los jóvenes, mientras que la sobrecualificación muy fuerte afecta al 7,6%. En su conjunto, la proporción de sobrecualificación objetiva de tipo fuerte, muy fuerte y extrema afecta al 21,2% de los jóvenes.

El cuadro VII.22 presenta los resultados de un logit multinomial para explicar el desajuste entre formación y tareas del puesto de trabajo. El panel A muestra que la mayoría de las variables que resultaban conjuntamente significativas en el caso del indicador de desajuste subjetivo también son significativas en la explicación del desajuste objetivo. Las variables coincidentes son vivir en casa de los padres, trabajar en el comercio o en el sector de educación o sanidad, tener un contrato temporal o no tener contrato y la percepción del mercado laboral. Las diferencias respecto al análisis del desajuste subjetivo aparecen respecto a la edad y a la dicotómica de Comunidad Valenciana, que resultan significativas conjuntamente en el análisis del indicador de desajuste objetivo. Es particularmente interesante que las variables psico-sociológicas no tengan ningún efecto sobre el indicador de desajuste objetivo cuando si tienen efecto sobre el desajuste subjetivo.


346

Infra-cualificación

fuerte


débil

Cualificación adecuada

Sobre-cualificación

débil


fuerte

Sobre-cualificación muy fuerte


extremaTotal

Empleador público 1,02 12,24 67,35 13,27 5,10 1,02 0,00 100,00Empleador privado 1,06 4,89 56,67 12,95 14,13 7,93 2,38 100,00Autónomo 2,47 13,58 59,26 9,88 9,88 4,94 0,00 100,00Contratado por ETT 0,00 7,69 53,85 0,00 15,38 15,38 7,69 100,00Agricultura 0,00 9,52 33,33 19,05 23,81 14,29 0,00 100,00Industria y construcción 2,37 10,06 63,31 7,69 8,28 7,10 1,18 100,00Comercio, restauración y transportes 0,48 3,37 50,36 15,42 16,87 11,08 2,41 100,00Finanzas, educación y sanidad 1,40 8,39 74,13 11,19 4,90 0,00 0,00 100,00Ad. Pública 0,00 10,71 60,71 14,29 14,29 0,00 0,00 100,00Otros servicios 1,52 7,61 58,88 11,68 12,18 4,57 3,55 100,00Hasta 10 trabajadores 1,43 6,34 57,46 13,70 12,88 6,34 1,84 100,00De 11 a 49 trabajadores 1,47 5,88 52,45 11,76 15,69 9,80 2,94 100,00De 50 o más trabajadores 1,13 6,78 57,63 11,30 11,86 9,60 1,69 100,00Indefinido 1,31 7,33 68,06 12,04 5,24 4,45 1,57 100,00Temporal 0,93 4,63 56,25 14,00 15,05 7,18 1,97 100,00Sin contrato 1,67 5,00 44,44 13,89 15,56 18,33 1,11 100,00Otros 0,00 0,00 87,50 0,00 0,00 6,25 6,25 100,00Actual 63,80 0,00 0,00 0,00 0,00 2,00 34,20 100,00



fuerte


débil

Cualificación adecuada


débil


fuerte

Sobre-cualificación muy fuerte


extremaTotal

Primero 0,98 4,38 54,06 14,79 13,48 9,62 2,68 100,00Segundo 0,52 3,87 54,90 14,95 15,46 8,76 1,55 100,00Tercero 0,65 6,49 54,55 14,94 14,29 5,19 3,90 100,00Cuarto 1,85 11,11 44,44 16,67 16,67 9,26 0,00 100,00Actual 1,19 5,50 59,05 13,06 11,86 7,62 1,72 100,00


Cuadro VII.21 Desajuste objetivo en función del número de empleos

Cuadro VII.20 Desajuste objetivo y características del empleo y el contrato


347


Efecto-2 log

verosimilitud del modelo reducido


Intersección 1312,46 9,53 2,00 0,01Edad 1311,74 8,81 2,00 0,01Varón 1307,77 4,84 2,00 0,09Vive en casa de los padres 1313,57 10,64 2,00 0,00Inmigrante 1303,32 0,38 2,00 0,83Educación secundaria superior 1304,33 1,40 2,00 0,50Experiencia 1304,76 1,82 2,00 0,40Industria y construcción 1305,97 3,03 2,00 0,22Comercio 1318,55 15,62 2,00 0,00Educación y sanidad 1315,42 12,49 2,00 0,00Administración pública 1303,77 0,84 2,00 0,66Empresas entre 11 y 49 empleados 1304,55 1,61 2,00 0,45Empresas de 50 o más empleados 1303,32 0,39 2,00 0,82Contrato temporal 1322,16 19,23 2,00 0,00Sin contrato 1323,00 20,07 2,00 0,00Centralidad absoluta del trabajo 1303,03 0,10 2,00 0,95Centralidad relativa de la familia 1306,42 3,49 2,00 0,17Centralidad relativa del trabajo 1307,93 5,00 2,00 0,08Centralidad relativa de la formación 1307,60 4,67 2,00 0,10Iniciativa 1305,31 2,37 2,00 0,31Pasividad 1307,72 4,79 2,00 0,09Percepción del mercado laboral 1310,43 7,50 2,00 0,02Ciudad entre 50.000 y 500.000 1305,01 2,08 2,00 0,35Ciudad de más de 500.000 1303,08 0,15 2,00 0,93Comunidad Valenciana 1310,83 7,90 2,00 0,02


B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -1,63 0,86 0,35Edad -0,06 1,53 0,22 0,94Varón 0,68 4,73 0,03 1,97Vive en casa de los padres -0,92 8,13 0,00 0,40Inmigrante -0,31 0,36 0,55 0,74Educación secundaria superior -0,06 0,04 0,84 0,94Experiencia 0,08 1,81 0,18 1,09Industria y construcción -0,26 0,43 0,51 0,77Comercio -0,80 4,01 0,05 0,45Educación y sanidad -0,12 0,08 0,78 0,89Administración pública -0,87 0,59 0,44 0,42Empresas entre 11 y 49 empleados 0,17 0,21 0,65 1,18Empresas de 50 o más empleados 0,23 0,35 0,55 1,26Contrato temporal -0,17 0,27 0,61 0,84Sin contrato 0,25 0,22 0,64 1,28Centralidad absoluta del trabajo 0,01 0,02 0,90 1,01Centralidad relativa de la familia 0,27 2,91 0,09 1,31Centralidad relativa del trabajo 0,20 1,73 0,19 1,22Centralidad relativa de la formación 0,31 3,54 0,06 1,37Iniciativa -0,24 1,16 0,28 0,79Pasividad 0,05 0,11 0,74 1,05Percepción del mercado laboral 0,23 2,89 0,09 1,26Ciudad entre 50.000 y 500.000 -0,13 0,08 0,77 0,87Ciudad de más de 500.000 -0,10 0,04 0,83 0,91Comunidad Valenciana 0,01 0,00 0,97 1,01


Cuadro VII.22. Factores determinantes del desajuste objetivo entre cualificación y tareas del puesto de trabajo. Todas las variables. Muestra target inserción. 2005


348


B Wald Sig. Exp(B)

Intersección -1,77 2,64 0,10Edad -0,04 1,46 0,23 0,96Varón 0,06 0,10 0,76 1,06Vive en casa de los padres 0,31 2,00 0,16 1,36Inmigrante -0,03 0,01 0,92 0,97Educación secundaria superior 0,74 11,00 0,00 2,09Educación universitaria 2,11 45,00 0,00 8,28Experiencia 0,01 0,05 0,82 1,01Industria y construcción -0,35 1,55 0,21 0,70Comercio 0,72 11,12 0,00 2,04Educación y sanidad -1,38 17,57 0,00 0,25Administración pública 0,02 0,00 0,97 1,03Empresas entre 11 y 49 empleados 0,19 0,84 0,36 1,21Empresas de 50 o más empleados 0,01 0,00 0,97 1,01Contrato temporal 0,77 13,48 0,00 2,16Sin contrato 1,44 19,87 0,00 4,22Centralidad absoluta del trabajo 0,06 1,08 0,30 1,06Centralidad relativa de la familia 0,13 2,09 0,15 1,14Centralidad relativa del trabajo -0,09 1,01 0,31 0,91Centralidad relativa de la formación 0,05 0,24 0,62 1,05Iniciativa -0,18 2,01 0,16 0,83Pasividad 0,26 8,50 0,00 1,30Percepción del mercado laboral -0,20 6,39 0,01 0,82Ciudad entre 50.000 y 500.000 0,22 0,64 0,42 1,24Ciudad de más de 500.000 -0,15 0,32 0,57 0,86Comunidad Valenciana 0,72 11,68 0,00 2,06


N 823



Cuadro VII.22 Factores determinantes del desajuste objetivo entre cualificación y tareas del puesto de trabajo. Todas las variables. Muestra target inserción. 2005 (cont.)


349

Gráfico VII.2 Evolución de la sobrecualificación objetiva en función del número de empleos


Primero

Segundo

Tercero

Cuarto

Actual

0% 20% 40% 60% 80% 100%

Infracualificación fuerteInfracualificación débilCualificación adecuadaSobrecualificación débil

Sobrecualificación fuerteSobrecualificación muy fuerteSobrecualificación extrema

El panel B muestra el resultado de la estimación para la infracualificación. Las únicas variables estadísticamente significativas son ser hombre y vivir en casa de los padres. Los hombres tienen el doble de probabilidad de estar infracualificados que las mujeres mientras que vivir en casa de los padres reduce la probabilidad de infracualificación por debajo del 50% de vivir en domicilio propio.

Los factores que afectan positivamente al nivel de sobrecualificación son la educación secundaria o superior, trabajar en el sector comercial, con contrato laboral o sin contrato, tener una actitud pasiva ante la planificación de la propia carrera y residir en la Comunidad Valenciana. Por el contrario, tienen un efecto negativo en la sobrecualificación el trabajar en el sector de educación y sanidad y tener una percepción positiva de la situación del mercado laboral (panel C). Con todo, aunque los resultados respecto a las variables que resultan significativas son similares a los obtenidos con el indicador subjetivo, el tamaño del efecto es algo diferente. Los jóvenes con educación universitaria tienen una probabilidad 8 veces mayor de estar sobrecualificados que los jóvenes con educación hasta obligatoria. En el análisis de la sobrecualificación subjetiva la probabilidad era 2,6 veces superior. También en el caso de no tener contrato la probabilidad de sobrecualificación es superior a la estimada en el caso del indicador


350

subjetivo: trabajar sin contrato supone una probabilidad más de 4 veces superior de sobrecualificación respecto a tener un contrato indefinido.

El ajuste del modelo es bastante bueno como muestra el panel D. El pseudo R2 alcanza 0.28 y el porcentaje de predicciones correctas es del 65,1%.

VII.5. Otros desajustes

La sensación de desajuste que los jóvenes pueden percibir en su puesto de trabajo tiene otras dimensiones además de la ya comentada de la relación entre el nivel de formación y los requerimientos del puesto de trabajo. El Observatorio analiza dos de dichas dimensiones: la percepción del ajuste entre las contribuciones y las compensaciones y entre las expectativas anteriores a comenzar el ejercicio del empleo y la realidad. La descripción de estas dos facetas son el objetivo de esta sección.

VII.51. El desajuste entre contribuciones monetarias y esfuerzo

La implicación del joven con el puesto de trabajo, e indirectamente su productividad, viene influida por varios factores importantes. Uno de ellos es la percepción del joven sobre la relación entre su esfuerzo y la contribución monetaria que recibe por realizarlo. El cuestionario recoge esta dimensión con la siguiente preguntas:

Señalar que frase describe mejor la situación en tu trabajo. A) Lo que me pagan (pagaban) es menos de lo que hago (hacía). B) Lo que me pagan (pagaban) es razonable para lo que hago (hacía). C) Lo que me pagan (pagaban) es más de lo que hago (hacía).

El cuadro VII.23 muestra que la mayoría de los jóvenes consideran que las compensaciones monetarias que reciben por su trabajo son razonables para lo que aportan. Con todo, una tercera parte de los encuestados consideran que les pagan poco respecto a su contribución a la empresa. Esta proporción es similar a la obtenida en el anterior Observatorio (2002) y se mantiene por encima de los dos primeros Observatorios. Las mujeres son las que tienen esta percepción en mayor proporción. Por grupos de edad se observa que a medida que aumenta la edad los jóvenes perciben un mayor desajuste entre su contribución y las compensaciones que perciben. Por último, el cuadro VII.23 señala que los inmigrantes sienten que les pagan menos de los que hacen en mayor proporción que los nacidos en España.


351

Cuadro VII.23 Ajuste contribución-retribución y características demográficas. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


Entre 20 y 24 años

Entre 25 y 29 años

Más de 29 años


Me pagan menos de lo que hago 33,21 36,34 29,11 36,80 34,82 37,89 34,61 37,13Me pagan razonablemente para lo que hago 62,20 60,57 65,61 59,27 61,56 61,23 61,61 58,96Me pagan más de lo que hago 4,59 3,09 5,27 3,93 3,62 0,88 3,78 3,91Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00



El cuadro VII.24 presenta la relación entre el ajuste contribución-retribución y el nivel de estudios así como la percepción del mercado laboral. El nivel de formación no establece diferencias importantes en la percepción del ajuste entre compensación y contribución. Los resultados son muy distintos en el caso de la percepción del mercado laboral. Los jóvenes que creen que el mercado laboral está mal tienen una sensación de gran desajuste entre lo que contribuyen y lo poco que reciben como compensación. A medida que mejora la percepción del mercado laboral el desajuste se reduce.

Los jóvenes contratados por una ETT son los que tienen una percepción más desajustada de la relación entre su contribución y la retribución (cuadro VII.25) que reciben de la empresa que los emplea. En particular, el 46,1% de los mismos creen que les pagan menos de lo que hacen. Los autónomos son los que presentan un mayor grado de ajuste, como era de esperar. Por sectores las diferencias son poco importantes.



Estudios superiores




bien

Me pagan menos de lo que hago 35,41 35,06 33,77 40,73 32,91 28,24Me pagan razonablemente para lo que hago 61,18 60,97 62,27 56,04 62,39 67,63Me pagan más de lo que hago 3,41 3,97 3,95 3,23 4,70 4,13Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Empleador público




transportes



servicios

Me pagan menos de lo que hago 34,00 35,55 29,27 46,15 25,00 30,11 38,04 32,41 40,00 34,47Me pagan razonablemente para lo que hago 63,00 60,43 68,29 53,85 70,00 67,05 57,63 65,52 56,67 61,65Me pagan más de lo que hago 3,00 4,02 2,44 5,00 2,84 4,33 2,07 3,33 3,88Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00





Me pagan menos de lo que hago 33,27 35,61 37,70 29,47 34,26 39,06 33,33 27,78Me pagan razonablemente para lo que hago 62,45 62,44 57,38 67,25 61,27 54,69 66,67 66,67Me pagan más de lo que hago 4,28 1,95 4,92 3,27 4,46 6,25 5,56Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.26 Ajuste contribución-retribución y características del empleo II. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


Cuadro VII.25 Ajuste contribución-retribución y características del empleo I. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


Cuadro VII.24 Ajuste contribución-retribución, nivel de estudios y percepción del mercado laboral. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005



352

El cuadro VII.26 muestra que la percepción de recibir una retribución por debajo de la contri-bución aumenta con el tamaño de la empresa. Por tipo de contrato la mayor proporción de jó-venes que piensa que les pagan menos que lo que trabajan se concentra en los sin contrato. El cuadro VII.27 señala que la percepción de recibir una compensación monetaria inferior a la contribución es mayor en la España urbana que en la Comunidad Valenciana.

Los cuadros VII.28 y VII.29 comparan el ajuste entre contribuciones y retribuciones y el desajuste de cualificación. Un 44% de los jóvenes que consideran que se les paga menos que su contribución creen que su nivel de formación es adecuado al puesto de trabajo mientras que un 54% entienden que está por debajo de su cualificación (cuadro VII.28). En el caso de los jóvenes que creen que les pagan los razonable para lo que trabajan la mayoría se concentra en una situación de ajuste adecuado entre la formación y la cualificación requerida para el empleo. El cuadro VII.29 muestra unos resultados similares basados en el indicador de desajuste objetivo. Solo hay una diferencia destacable. Los jóvenes que consideran que les pagan más que lo que contribuyen tienen un nivel de sobrecualificación subjetiva menor que los jóvenes que creen que les pagan menos. Esta relación se invierte cuando se trata del indicador objetivo: los sobrecualificados objetivamente representan una proporción mayor entre los que creen que les pagan más que los contribuyen que entre los que creen que les pagan menos.

Me pagan menos de lo que hago

Me pagan razonablemente para lo que hago

Me pagan más de lo que hago

Razonablemente adecuado 44,38 75,54 40,91Por encima de mi cualificación 1,16 1,85 9,09Por debajo de mi cualificación 54,46 22,61 50,00Total 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.28 Ajuste contribución-retribución y desajuste subjetivo

Ajuste contribuciones-retribuciones


España urbana

Me pagan menos de lo que hago 32,58 37,27Me pagan razonablemente para lo que hago 63,47 59,29Me pagan más de lo que hago 3,95 3,44Total 100,00 100,00


Cuadro VII.27 Ajuste contribución-retribución: Comunidad Valenciana frente a la España urbana. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


353

Me pagan menos de lo

que hago

Me pagan razonablemente para lo que hago

Me pagan más de lo que hago

Infracualificación fuerte 1,41 0,98 1,64Infracualificación débil 4,44 5,87 4,92Cualificación adecuada 55,15 61,63 52,46Sobrecualificación débil 14,55 12,28 13,11Sobrecualificación fuerte 13,33 10,76 18,03Sobrecualificación muy fuerte 8,89 7,07 8,20Sobrecualificación extrema 2,22 1,41 1,64Total 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.29 Ajuste contribución-retribución y desajuste objetivo

Ajuste contribuciones-retribuciones

VII.5.2. La equidad percibida entre compensaciones totales recibidas y esperadas

Otro factor importante que influye sobre la satisfacción laboral de los jóvenes es la percepción de equidad entre las compensaciones totales recibidas y las esperadas. Por tanto, el análisis de este tipo de percepción de equidad supera y matiza los resultados anteriores en dos aspectos:

Incluye todas la compensaciones y no solo las monetarias (salario).

Sondea la relación entre expectativas antes del empleo y la realidad del trabajo del joven. En el anterior apartado las compensaciones monetarias se comparaban con el esfuerzo actual del joven.

La pregunta concreta del cuestionario es la siguiente:

Considerando en su conjunto las compensaciones monetarias y no monetarias (como las oportunidades de aprender, el clima laboral, etc.) que recibo de mi trabajo son:

A) mejores de lo que yo esperaba al empezar a trabajar. B) parecidas a lo que yo esperaba al comenzar a trabajar.

C) peores de lo que yo esperaba al empezar a trabajar.


354

El cuadro VII.30 muestra que la mayoría de los jóvenes consideran que sus expectativas respecto a las compensaciones que recibirían por su trabajo son parecidas a lo que esperaban (64%). Al igual que en el Observatorio 2002 los hombres que consideran que el trabajo es mejor de lo que esperaban superan proporcionalmente a las mujeres, sucediendo lo contrario en el caso de pensar que las condiciones son peores de las esperadas. La edad no establece diferencias importantes respecto a este apartado. Por su parte los inmigrantes señalan en mayor proporción que se encuentran con un situación laboral peor que la esperada, mientras que en los nacidos en España la proporción de mejor y peor es similar.

Cuadro VII.30 Expectativas de compensación y características demográficas. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


Entre 20 y 24 años

Entre 25 y 29 años

Más de 29 años


Mejores de lo que esperaba 19,41 16,49 22,22 15,53 18,44 17,18 18,20 14,98Parecidas a los que esperaba 63,73 64,26 62,26 65,30 63,12 65,64 64,03 63,84Peores de lo que esperaba 16,85 19,25 15,51 19,18 18,44 17,18 17,77 21,17Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00



Por niveles de estudios (cuadro VII.31) los jóvenes con estudios hasta obligatorios son los que han visto decepcionadas sus expectativas en mayor proporción. Los jóvenes con estudios universitarios muestran una situación, respecto a sus expectativas, solo algo mejor que los jóvenes con enseñanza secundaria superior. Los jóvenes que reciben mejores compensaciones que las esperadas se concentran en el grupo de los que piensan que el mercado laboral está bien.



Estudios superiores




bien

Mejores de lo que esperaba 19,68 16,56 17,58 12,49 21,40 22,97Parecidas a los que esperaba 60,74 65,59 66,17 66,86 61,20 61,20Peores de lo que esperaba 19,58 17,85 16,25 20,65 17,40 15,83Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.31 Expectativas de compensación, nivel de estudios y percepción del mercado laboral. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


En el cuadro VII.32 aparece la percepción de equidad respecto a las expectativas de compensación en función del tipo de empleador. Resulta muy interesante comprobar como los jóvenes contratados por ETT se han encontrado, en menor proporción que el resto, unas compensaciones globales inferiores a las esperadas. Por tanto, aunque los jóvenes que trabajan para ETT piensan que están muy sobrecualificados y que cobran un salario bajo para su contribución a la empresa, las situación es similar a la que


355

esperaban. Por sectores la peor situación respecto a las expectativas se produce entre los que trabajan para la administración pública. La razón es que sus expectativas eran, seguramente, muy optimistas.

Empleador público




transportes



servicios

Mejores de lo que esperaba 15,15 17,08 18,52 23,81 18,18 14,58 19,59 16,67 16,02Parecidas a los que esperaba 71,72 64,96 69,14 92,31 66,67 64,20 66,51 70,27 56,67 66,99Peores de lo que esperaba 13,13 17,96 12,35 7,69 9,52 17,61 18,91 10,14 26,67 16,99Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.32 Expectativas de compensación y características del empleo I. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


El cuadro VII.33 muestra que existe poca relación entre el tamaño de la empresa y la percepción de equidad entre las expectativas de compensación y la realidad de la empresa. Por contratos, los funcionarios son los que han encontrado en mayor proporción peores condiciones que las esperadas.




Mejores de lo que esperaba 16,99 13,40 19,23 23,80 15,59 13,64 10,53Parecidas a los que esperaba 66,41 68,90 64,29 60,25 66,82 70,20 80,00 78,95Peores de lo que esperaba 16,60 17,70 16,48 15,95 17,59 16,16 20,00 10,53Total 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.33 Expectativas de compensación y características del empleo II. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


El cuadro VII.34 compara la situación de los jóvenes de la Comunidad Valenciana frente al conjunto de la España urbana. En ambos grupos la proporción de los que piensan que la situación es peor que la que esperaban es similar. Sin embargo, la proporción de los que creen que es parecida a la esperada es superior en la España urbana y, por tanto, la proporción de los que creen que es mejor es algo mayor en la Comunidad Valenciana.


España urbana

Mejores de lo que esperaba 18,54 14,45Parecidas a los que esperaba 64,30 67,82Peores de lo que esperaba 17,16 17,72Total 100,00 100,00


Cuadro VII.34 Expectativas de compensación: Comunidad Valenciana frente a la España urbana. Último empleo. Muestra target de inserción. 2005


356

El cuadro VII.35 presenta la relación entre el nivel de sobrecualificación subjetiva y la percepción de equidad entre expectativas y compensaciones. Los jóvenes sobrecualificados son los que representan la mayor proporción entre los que han encontrado peores condiciones laborales que las esperadas (61,5%). Por el contrario, los jóvenes con un nivel de formación adecuado a su puesto de trabajo son los dominan el grupo de los que han encontrado mejores condiciones que las esperadas (74,5%). En el cuadro VII.36 aparece la misma relación, pero utilizando el indicador objetivo. Los resultados son similares a los obtenidos en el caso del desajuste subjetivo de cualificaciones aunque los niveles son algo diferentes.

Mejores de lo que esperaba

Parecidas a los que

esperaba

Peores de lo que esperaba

Razonablemente adecuado 74,55 67,32 37,35Por encima de mi cualificación 4,73 1,47 1,17Por debajo de mi cualificación 20,73 31,21 61,48Total 100,00 100,00 100,00


Mejores de lo que esperaba

Parecidas a los que

esperaba

Peores de lo que esperaba

Infracualificación fuerte 1,20 1,13 1,19Infracualificación débil 12,80 4,11 3,57Cualificación adecuada 59,60 59,61 55,56Sobrecualificación débil 12,40 12,74 14,68Sobrecualificación fuerte 6,00 13,57 12,30Sobrecualificación muy fuerte 7,20 7,40 9,13Sobrecualificación extrema 0,80 1,44 3,57Total 100,00 100,00 100,00


Cuadro VII.36 Expectativas de compensación y desajuste objetivo

Expectativas de compensacion

Cuadro VII.35 Expectativas de compensación y desajuste subjetivo

Expectativas de compensacion


357

VII.6. Conclusiones

En este capítulo se analiza la adecuación entre la formación y los requerimientos del puesto de trabajo del joven. En la primera parte se presenta una síntesis de resultados conocidos respecto a la sobrecualificación de los graduados universitarios basados en encuestas diferentes a la del Observatorio. El resultado más interesante es la enorme diferencia en el grado de sobrecualificación en función de la rama de estudios. Es relevante señalar la elevada correlación entre el grado de sobreculificación y la solicitud de plazas universitarias. En el curso 2005-06 el 40% de las plazas disponibles para la rama de humanidades se quedó vacante, coincidiendo con el máximo nivel de sobrecualificación que sufren estos graduados. Por el contrario la demanda de ciencias de la salud triplica la oferta. Recordemos que los graduados de ciencias de la salud, y en particular los de las carreras de esta rama que mayor demanda tienen, son los que presentan un grado de sobrecualificación menor.

En la segunda parte del capítulo se construyen dos tipos de indicadores de desajuste: uno subjetivo y otro objetivo. El subjetivo se basa directamente en una pregunta del cuestionario que solicita información sobre la percepción del joven sobre la adecuación de su trabajo al nivel de formación adquirido. El indicador de desajuste objetivo es más complejo y se calcula a partir de la diferencia de años de formación entre los poseídos por el joven y los necesarios para realizar el trabajo. Esta diferencia se clasifica en siete categorías, desde infracualificación fuerte hasta sobrecualificación extrema. Esta aproximación al cálculo del desajuste objetivo es diferente a la presentada en los anteriores observatorios.

Los resultados más importantes respecto a los niveles agregados de desajuste son los siguientes:

1. El 34,2% de los jóvenes están sobrecualificados en su empleo actual según el indicador subjetivo. El nuevo indicador objetivo muestra un nivel idéntico de sobrecualificación: 34,2%. No obstante el indicador objetivo permite distinguir varios niveles de sobrecualificación: débil (13%), fuerte (11,8%), muy fuerte (7,6%) y extrema (1,7%).

2. Los datos del Observatorio 2005 muestran un claro aumento del nivel de sobrecualificación de los jóvenes, que en 2002 era del 28,9%.

3. El nivel de infracualificación subjetiva en el último empleo (2%) es inferior al obtenido según el indicador objetivo (6,7%).


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4. No se observa una reducción significativa de la sobrecualificación a medida que aumenta el número de empleos o la experiencia del joven.

Los factores que explican el desajuste, ya sea utilizando el indicador subjetivo o el objetivo, son los siguientes:

1. El nivel educativo. Ésta es la variable más importante en la explicación de la sobrecualificación. Los jóvenes con estudios de secundaria superior o universitarios tienen una probabilidad superior de estar sobrecualificados. En el caso del indicador subjetivo la probabilidad de los mismos es similar. En el caso del indicador objetivo los universitarios tienen cuatro veces más probabilidad de estar sobrecualificados. Además, los jóvenes universitarios concentran la práctica totalidad de la sobrecualificación extrema presente en la muestra.

2. Las características del empleo. En concreto el sector de actividad y el tipo de contrato: los jóvenes que trabajan en el comercio y la hostelería tienen a estar sobrecualificados en mayor proporción. Por el contrario los jóvenes que trabajan en el sector educativo o sanitario tienen un nivel de sobrecualificación inferior al resto. Finalmente, los jóvenes trabajando con contrato temporal o sin contrato tienen una probabilidad superior de estar sobrecualificados. Estos resultados coinciden con los obtenidos de los datos del Observatorio de 2002.

3. Tener una percepción positiva del mercado laboral reduce la sobrecualificación. La interpretación de este efecto es difícil pues existe un doble efecto. Por una parte los jóvenes que han podido encontrar un trabajo adecuado a su cualificación consideran que el mercado laboral está bien (o al menos a ellos les ha ido bien); una segunda interpretación, que reforzaría el efecto anterior, es la posibilidad de que la percepción positiva del mercado laboral por parte del joven le permita ser más exigente a la hora de aceptar un empleo y esperar a que le ofrezcan uno que sea apropiado a su nivel formativo.

4. Los hombres tienen mayor probabilidad de estar infracualificados que las mujeres.

No obstante, existen algunas diferencias en la explicación del desajuste según se utilice el indicador subjetivo o el objetivo.


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1. Las variables psico-sociales no resultan estadísticamente significativas en la explicación del desjuste según el indicador objetivo. Sin embargo, en el indicador subjetivo tanto la iniciativa como la centralidad relativa del trabajo y la familia resultan significativas.

2. La residencia en una localidad de más de 500.000 habitantes aumenta la probabilidad de sobrecualificación según el indicador sujetivo pero residir en la Comunidad Valenciana no tiene efecto. Por el contrario, el tamaño de la localidad de residencia del joven no tiene efecto sobre el desajuste objetivo mientras que residir en la Comunidad Valenciana multiplica por dos la probabilidad de sobrecualificación objetiva frente al resto de jóvenes.

3. Vivir en casa de los padres está asociado a un menor nivel de infracualificación objetiva. Este efecto no se observa en el indicador subjetivo.

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