Ciencia, Conocimiento e Identidad Nacional

download Ciencia, Conocimiento e Identidad Nacional

of 6

description

iencia, Conocimiento e Identidad Nacional

Transcript of Ciencia, Conocimiento e Identidad Nacional

  • ReencuentroISSN: [email protected] Autnoma Metropolitana UnidadXochimilcoMxico

    Prez Tamayo, RuyCiencia, conocimiento e identidad nacional

    Reencuentro, nm. 56, diciembre, 2009, pp. 12-16Universidad Autnoma Metropolitana Unidad Xochimilco

    Distrito Federal, Mxico

    Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=34011860003

    Cmo citar el artculo

    Nmero completo

    Ms informacin del artculo

    Pgina de la revista en redalyc.org

    Sistema de Informacin CientficaRed de Revistas Cientficas de Amrica Latina, el Caribe, Espaa y Portugal

    Proyecto acadmico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

  • Me toca iniciar este foro debate sobre universidad y produccin de conocimientos. Revisando el temario que me envi el doctor Luis Bojalil junto con la honrosa invitacin que mucho le agradezco, me di cuenta que es tan general que potencialmente incluye absolutamente todo lo que se nos pudiera ocurrir al respecto. un poco alarmado, lo llam por telfono para pedirle alguna indicacin un poco ms concreta, pero su secretaria me inform que se haba ido al Brasil y regresara dos das antes de esta reunin. Por fortuna, la misma secretaria me seal que yo sera el primer participante, despus de las palabras introductorias del doctor Bojalil, y que tena 45 minu-tos para mi presentacin. Pens entonces que quiz lo mejor fuera exponer una especie de panorama muy general que incluyera definiciones de los principales trminos que se estarn manejando en estos dos das, as como algunas precisiones que pudieran ser tiles como puntos de partida de los debates. He dividido mi pltica en tres partes, que son la ciencia, el cono-cimiento cientfico y la contribucin de la ciencia a la identidad nacional.

    LA CIENCIA

    En otras ocasiones he propuesto la siguiente definicin de ciencia: actividad humana creativa cuyo objetivo es la comprensin de la naturaleza y cuyo producto es el conocimiento, obtenido promedio de un mtodo organizado en forma deductiva y que aspira a al-canzar el mayor consenso. Esta definicin consta de seis componentes principa les, que son los siguientes: a) actividad humana creativa, b) comprensin de la naturaleza, c) conocimiento, d) mtodo cientfico, e) deduccin, f) consenso generalizado.

    Comentar brevemente cada uno de ellos:

    a) Actividad humana creativa Este primer componente de la definicin de ciencia es sencillo de comentar, en vista de que no existen primates, ruiseores, hormigas, bacterias o flores cientficas. La ciencia es privativa de homo sapiens. Esto no es de extraar, porque la ciencia requiere capacidad de comunicacin interpersonal amplia y flexible, memoria individual y colectiva (lo que se conoce como historia) y mecanismos evolutivos epige-nticos, o sea culturales. El hombre comparte con todos los seres vivos la nutricin, la reproduccin y el metabolismo, pero en cambio la ciencia es espec-fica del ser humano. Tambin resulta fcil de demos-trar que la ciencia es creativa cuando se recuerda que su principal actividad es la invencin de modelos o hiptesis para explicar la realidad. Esto no excluyea la observacin y el registro ms riguroso de los hechos, como postularon los empiristas, sino que sim-plemente los coloca en el lugar que les corresponde, o sea como elementos de verificacin o refutacin de las hiptesis. Cuando se pregunta si el cientfico des-cubre o inventa el conocimiento se comete una injus-ticia con la ciencia, porque la manera de descubrir a la realidad es inventndola primero y verificndola despus.

    b) Comprensin de la naturaleza Segn el diccionario de la Real Academia compren-der significa: abrazar, ceir, rodear por todas partes una cosa... Contener, incluir en s alguna cosa... En-tender, alcanzar, penetrar. Este enunciado no me parece suficiente porque no incluye un elemento esencial: la explicacin. Cuando la ciencia declara que su objetivo es la comprensin de la naturaleza, lo que quiere decir es que su meta es la explicacin de la realidad, el sometimiento de todo lo que est ah afuera a la racionalidad humana. Por natura-leza se entiende todo aquello cuya existencia puede verificarse objetivamente, ya sea de manera directa o indirecta, lo que descarta lo sobrenatural, que siempre ha formado parte de las explicaciones que el

    Ciencia, conocimiento e identidad nacional* ruy prez tamayo**

    * Este artculo apareci en Reencuentro nm. 3: Universidad y produccin de conocimientos, septiembre, 1991, pp. 6-11.** Miembro de El Colegio Nacional.

  • Reen

    cuen

    tro:

    Que

    20

    aos

    no

    es n

    ada.

    .. / 5

    6 / D

    icie

    mbr

    e 20

    09

    1312

    hombre inventa para los fenmenos que no entiende. Existen muchos fenmenos que son reales sin ser materiales, como las sensaciones (visin, audicin, dolor, etc.) o las emociones (amor, vergenza, ira, etc.). Esto no agota la esfera subjetiva humana: todava quedan las ideas, esos productos que constituyen la quintaesencia del homo sapiens. En ellas debemos distinguir entre su mecanismo de generacin y su contenido: el examen riguroso del primero es parte de la ciencia (neurofisiologa y psicologa) mientras que el segundo tiene tres salidas posibles; si se trata de hiptesis sobre algn aspecto de la realidad per-tenecen a la ciencia, si se apartan de la naturaleza pero se mantienen dentro de la racionalidad corres-ponden a la filosofa, y si no estn conectadas ni con la realidad ni con la racionalidad pertenecen a otras esferas de la vivencia humana, como fantasa, reli-gin o locura.

    c) Conocimiento Voy a posponer mis comentarios sobre este compo-nente de la definicin de ciencia para la segunda parte de mi presentacin. Aqu slo voy a sealar que el conocimiento es el nico producto de la ciencia; no tiene ningn otro. Tambin voy a adelantar que el nico uso que hace la ciencia del co nocimiento que genera es para producir ms conocimiento.

    d) Mtodo cientfico Tengo en mi biblioteca casi dos doce nas de libros contemporneos dedica dos a la descripcin de algo que llaman El mtodo cientfico. Son muy tediosos de leer, a pesar de que se refieren a un fantasma. En efecto, El mtodo cientfico, concebido como una re-ceta fija que aplicada a cualquier problema garantiza su solucin, no existe y qu bueno, porque si existiera la ciencia no tendra chiste. Sin embargo, tampoco puede negarse que los investigadores trabajamos de acuerdo con ciertas reglas que a travs del tiempo y la experiencia han demostrado ser tiles. En mi opi-nin, estas reglas son las seis siguientes: 1) el objeto de la investigacin cientfica es real y preferiblemente ajeno al cientfico; 2) la realidad externa es regular,o sea que sigue el principio de la cau salidad dentro de una estructura rigu rosamente determinista, es decir que no hay excepciones a las reglas de la naturaleza, por lo tanto no existen los milagros; 3) sin embargo, la realidad slo puede transformarse en experiencias (y tal vez en conocimiento) cuando se percibe por medio de los sentidos del sujeto que la observa; 4) la percepcin de la realidad por el homo sapiens no se parece a la imagen de algo en un espejo, sino que slo se registra aquello que tiene sentido, que posee sig-nificado dentro de sus esquemas previos; 5) la incor-poracin de un hecho nuevo puede (o no) cambiar la estructura terica que lo explica, por lo que la ciencia crece gracias al asedio que la realidad mantiene en contra de las hiptesis clsicas que pretenden ex-plicarla; 6) no debe olvidarse que en el trabajo diario

    del investigador cientfico frecuentemente surgen observaciones inesperadas, resultados completamen-te sorpresivos (conocidos como Serendipia) que no slo refrescan sino que a veces cambian radicalmente el inters y el campo de estudio del cientfico.

    e) Deduccin La filosofa de la ciencia se inicia con Aristteles, quien propuso que la investigacin cientfica se realiza por medio de dos operaciones lgicas, la in-duccin y la deduccin. La primera de ellas consiste en alcanzar principios de aplicacin universal a partir de observaciones individuales, yendo de lo particular a lo general; en cambio, la segunda operacin lgica consiste en derivar instancias especficas partiendode leyes o proposiciones generales, yendo de lo ge-neral a lo particular. La induccin fue desprovista (parece que para siempre) de su carcter lgico por Hume, aunque los investigadores cientficos seguimos usndola en nuestro trabajo cotidiano, o sea que ha-cemos predicciones generales basados en grupos razonablemente homogneos de observaciones in-dividuales. En cambio, no hay ningn problema lgico con la deduccin. En ciencia, esto se traduce como predicciones de hechos especficos a partir de principios o leyes generales. Nadie cuestiona que la ciencia est construida y funciona de manera deduc-tiva, una vez que ha alcanzado las teoras generales que describen las relaciones que operan entre los distintos componentes de la naturaleza.

    f) Consenso generalizado En 1968 Ziman escribi: El objetivo de la ciencia no es solamente adquirir informacin o emitir conceptos no contradictorios; su meta es el consenso de la opi-nin racional en el campo ms amplio posible. Este punto de vista toma en cuenta el carcter eminente-mente social de la ciencia, la participacin de toda la comunidad cientfica relevante no slo en la genera-cin del conocimiento sino tambin en su aceptacin o rechazo. La ciencia es una empresa eminentemente social. Sus observaciones y teoras deben ser cono-cidas, discutidas y aceptadas o rechazadas por los colegas ms cercanos, despus por el sector intere-sado de la comunidad cientfica del pas, y finalmente por el mundo cientfico internacional. Mientras ms amplio sea el consenso alcanzado, mayor ser el im-pacto de su contribucin cientfica.

    Esto concluye la primera parte de mi presentacin.

    EL CONOCIMIENtO CIENtFICO

    Empiezo por reconocer, con toda humildad, que desde hace por lo menos 2 500 aos el hombre se ha enfrentado al problema del conocimiento, cientfi co o no, y todava no ha podido resolverlo. Sospecho que este no es momento de esperar grandes revela-ciones. Quiz sorprenda un poco que el producto de la ciencia se limite a algo tan difuso y poco concreto

  • Ruy

    Pre

    z Ta

    may

    o. C

    ienc

    ia, c

    onoc

    imie

    nto

    e id

    entid

    ad n

    acio

    nal,

    pp. 1

    2-16

    .

    como el conocimiento, cuando reconocemos que la ciencia ha sido la fuerza principalmente responsable de la transformacin del mundo medieval en moder-no. Asimismo, que desde hace tiempo vivimos ro-deados por multitud de artefactos que utilizamos casi a cada momento, como luz elctrica, reloj, telfono, radio, transporte automtico, lavadoras, licuadoras, hornos de microondas, libros, televisin, microcompu-tadoras y muchos ms, todos ellos derivados del co-nocimiento cientfico, as como que continuamente estamos siendo bombardeados por los medios de comunicacin masiva con nuevas conquistas de la ciencia convertidas en objetos de consumo. Sin em-bargo, un minuto de reflexin debera convencernos de que todos esos productos de la ciencia han sido posibles gracias a la comprensin racional de la na-turaleza, sin la cual no hubieran podido surgir. Con-viene, pues, distinguir entre el conocimiento mismo y sus aplicaciones prcticas, que es lo que se conoce como tecnologa Y que puede definirse como la acti-vidad humana transformadora cuyo objetivo es la utilizacin de la naturaleza y cuyos productos son bienes de consumo de servicio. En otras palabras, ciencia es lo que hay que hacer para saber, mientras que tecnologa es lo que hay que saber para hacer, de manera que sin ciencia no hay conocimiento y sin conocimiento no hay tecnologa.

    Esta relacin no siempre fue as, pues durante todos los siglos en que no hubo ciencia (recordemos que la ciencia como hoy la conocemos apenas sur-gi hace unos 300 aos) la tecnologa se desarroll empricamente. Tal avance fue muy lento y requiri de mucho esfuerzo, pues con frecuencia se entraba en callejones sin salida. Con la aparicin de la ciencia, la tecnologa empez a apartarse del empirismo y a basar sus trabajos en la informacin generada cien-tficamente, consiguiendo la aceleracin progresiva que no slo ha convertido los sueos de Leonardo da Vinci y de Julio Verne en realidad, sino que los ha dejado atrs.

    En qu consiste este conocimiento cientfico, tan polifactico y poderoso? A primera vista parecera que no puede hacerse mucho con l, pues se trata de una serie de proposiciones o leyes que pretenden describir la manera como est hecha y funciona la realidad, desde las que pretenden cubrir ciertos aspectos de todo el universo, como las leyes de Newton o la teora general de la relacin de Einstein, hasta las que se limitan a fenmenos muy especficos, como la forma-cin de las nubes o la visin de los colores. Adems,poseen tres caractersticas negativas comunes:a) ninguna es final y completa, sino que siempre pueden ser corregidas, aumentadas, disminuidas o hasta completamente cambiadas; b) ninguna preten-de ser la verdad sino slo la mejor aproximacin a ella que tenemos hasta el momento; c) ninguna se expresa en trminos absolutos sino siempre en len-guaje probabilstico. En otras palabras, se trata de proposiciones tentativas y aproximadas, aceptadas

    condicionalmente y sujetas continuamente a pruebas cuyos resultados deciden si se conservan o se mo-difican, y que adems no afirman nada categrico sino siempre como un nivel de probabilidades. Esta descripcin del conocimiento cientfico puede resultar con toda razn decepcionante para los no profesio-nales de la ciencia, pues parecera que el complejo andamiaje del mundo moderno est asentado en una estructura demasiado terica, endeble y tran-sitoria. Pero el conocimiento cientfico posee otras dos caractersticas que transforman su debilidad en fortaleza: i) se basa en la realidad, y ii) nos permite manejarla.

    La palabra conocimiento se usa de dos mane-ras distintas: 1) amplia, para referir todo aquello de lo que tenemos conciencia y que proviene de ideas personales, convicciones, sueos, imaginacin, fe, corazonadas, tradiciones, conversaciones, lecturas, noticieros, etctera; 2) restringida, para denominar exclusivamente a la informacin cuya veracidad ha sido puesta a prueba confrontndole con la realidad y ha mostrado reflejarla con una aproximacin sa-tisfactoria. Cuando se habla de conocimiento cient-fico se hace referencia a la acepcin restringida de la palabra, o sea que se excluyen todos los otros usos mencionados hace un momento. A pesar de que la participacin del conocimiento cientfico en la expe-riencia humana total es mnima, y de que se limita a proposiciones tentativas, transitorias y quiz equi-vocadas, su anclaje en la realidad le confiere la posi-bilidad de utilizarla. Y este es precisamente el secreto de la inmensa fuerza de la ciencia: que funciona, que trabaja, que nos permite hacer predicciones siste-mticas sobre la manera como se comportar x en las condiciones y para comprobar tales predicciones cada vez que se hace la prueba.

    Las otras formas de conocimiento tambin per-miten hacer predicciones que se cumplen, pero no de manera sistemtica sino totalmente al azar y con una frecuencia muy baja. Todos hemos tenido la ex-periencia de predecir, basado no en un conocimiento cientfico sino en nuestra imaginacin y en nuestra buena suerte, cuando salimos a cruzar la ciudad de Mxico o parte de ella para cumplir con una cita; las pocas veces que hemos logrado llegar a tiempo son una medida aproximada pero indicativa de la dife-rencia en la eficiencia predictiva de la imagina cin y la buena suerte comparadas con la del conocimiento cientfico.

    CIENCIA E IDENtIDAD NACIONAL

    Antes de entrar de lleno a comentar las relaciones entre la ciencia y la identidad nacional quisiera refe-rirme brevemente a la clasificacin de la ciencia en pura y aplicada, que usan principalmente funciona-rios pblicos, economistas, administradores y otros personajes ms que tienen que ver con los presu-puestos asignados a la actividad cientfica. A veces la

  • Reen

    cuen

    tro:

    Que

    20

    aos

    no

    es n

    ada.

    .. / 5

    6 / D

    icie

    mbr

    e 20

    09

    1514

    dicotoma se expresa en otros trminos, como ciencia pura y ciencia comprometida, o ciencia y tecnologa, o ciencia y desarrollo (este ltimo es la traduccin del trmino en ingls research and development). Esta clasificacin traduce una preocupacin genuina de los administradores de recursos para la ciencia, derivada de dos ideas diferentes: la nocin de prioridades y el concepto utilitarista de la ciencia. En Mxico, como en muchos otros pases del tercer Mundo, existen graves problemas econmicos que restringen estre-chamente los recursos accesibles a la ciencia, lo que impone la necesidad de establecer prioridades. De acuerdo con el concepto utilitarista de la ciencia, las prioridades corresponden a los aspectos aplicativosde lo que se conoce como los grandes problemas na-cionales de Mxico. Los economistas dicen que uno de ellos es la distribucin ms eficiente de los recursos, juzgada en trminos de costo-beneficio; en efecto, lo ms urgente es resolver esos grandes pro-blemas nacionales, por lo que los apoyos deben dar prioridad a los proyectos cientficos dirigidos a ge-nerar soluciones para ellos. La ciencia bsica es para los pases ricos, que se pueden dar el lujo de inver-tir en la generacin de conocimientos que no tienen aplicacin inmediata.

    A pesar de que el planteamiento anterior parece razonable, es totalmente falso porque parte de premi-sas equivocadas. La primera es que corresponde a los administradores establecer prioridades en los cam-pos en los que no poseen suficientes conocimientos tcnicos para hacer juicios acertados. La prueba es que la lista de los grandes problemas nacionales ha cambiado cada sexenio, que nunca ha sido cla-ramente definida y que muchos de ellos no tienen nada que ver con la ciencia, ni pura ni aplicada. Las prioridades se han decidido con criterios po-lticos, no cientficos, y por eso guardan tan escasa relacin con la realidad de nuestro pas. La segunda premisa equivocada es la que divide a la ciencia en pura y aplicada. Esta divisin supone, como acabo de mencionar, que los conocimientos generados por la ciencia pura no tienen aplicacin inmediata o predecible en alguna de las prioridades de la famosa lista. No s a quin se le ocurri dividir a la ciencia en pura y aplicada, pero seguramente que no fue a un cientfico, porque nosotros sabemos muy bien que toda la ciencia es aplicada. El conocimiento intil no existe, ya que el primero y ms importante uso del conocimiento es para generar ms conocimiento; la informacin no slo es el resultado del trabajo cien-tfico, sino tambin es un instrumento de trabajo y uno de los ms importantes. Es claro que este uso no est incluido entre las prioridades, porque en ellasno se ha considerado la generacin de nuevos cono-cimientos; si se considerara, automticamente la lla-mada ciencia bsica pasara a ser aplicada. Por lo tanto, la divisin de la ciencia en bsica y aplicada depende exclusivamente de que en las prioridades se excluye la generacin de nuevos conocimientos.

    La tercera premisa equivocada es que la ciencia se puede programar, es decir, que es posible encargar a uno o a un grupo de cientficos que se dediquen a resolver un problema cuya solucin realmente se desconoce. Cuando esta es la situacin, nadie sabe lo que va surgir del estudio, cul va a serla respuesta ni qu alcances pueda tener, tanto para el problema mismo como para otras muchas cosas, relacionadas o no. Lo que generalmente se llama ciencia aplicada es ms bien tecnologa o simple desarrollo tecnol-gico, ya que se trata de la adaptacin de ciertas tc-nicas ya co nocidas para resolver algn problema de servicios o de bienes materiales.

    Para qu sirve la ciencia? Hay varias respuestas diferentes a esta pregunta, segn el punto de vista y la experiencia de quienes contestan. Esto no debe ex-traar, porque lo mismo acontece con otras pregun-tas si milares, como para qu sirve el arte? o para qu sirve la poltica? A primera vista, parecera que la utilidad de la ciencia la conocieran mejor los cien-tficos, la del arte los artistas y la de la poltica los polticos. Pero como se trata de actividades huma nas cuyos resultados o consecuencias nos afectan hoy a todos los miembros de la sociedad, todos opinamossobre ellas. Esto era as en el pasado y hasta muy re-cientemente: durante muchos siglos la ciencia, el arte y la poltica pertenecieron a las clases privilegiadas, a los ricos y a los poderosos. Fue hasta el siglo xviii, con la Revolucin Industrial, que otros sectores cadavez ms numerosos de la sociedad empezaron a bene-ficiarse con los descubrimientos cientficos, a disfrutarlas manifestaciones artsticas y a participar en los movimientos polticos. De hecho, una de las caracte-rsticas del mundo contemporneo es el libre acceso y la participacin de las masas en lo que en otros tiempos estaba reservado a unos cuantos. Esto com-plica, al mismo tiempo que enriquece, la respuesta a nuestra pregunta inicial sobre los uso de la ciencia.Para ejemplificar el punto, dir que el cientfico probablemente hablar de la generacin de nuevos conocimientos, el artista quiz se refiera a fuentesdistintas de inspiracin, mientras que el poltico har un vibrante discurso sobre la generacin de tecno-loga y la solucin de los problemas nacionales. En cambio, el ciudadano mexicano ajeno a estas acti-vidades seguramente hablar en trminos elogiosos de la televisin, los aviones y las Computadoras, y con inquietud y condena de la bomba atmica, de la conta-minacin ambiental y del ecocidio.

    Fue en esos tiempos cuando la ciencia empez a desempear un papel cada vez ms importante en la determinacin del desarrollo de cada pas y del nivel de vida de sus ciudadanos. Las naciones del he-misferio norte le imbuyeron del espritu inquisitivo y la bsqueda de explicaciones objetivas a los fen-menos naturales, dejando de lado el dogma autori-tario y los argumentos trascendentales. Los hombres de esos pases empezaron a liberarle de sus cadenas medievales y a enfrentarse al mundo no como un valle

  • Ruy

    Pre

    z Ta

    may

    o. C

    ienc

    ia, c

    onoc

    imie

    nto

    e id

    entid

    ad n

    acio

    nal,

    pp. 1

    2-16

    .

    de lgrimas sino como un conjunto de fenmenos naturales, cuyo conocimiento les permite una mejor adaptacin a la realidad a laque pertenecen. Tambin aprendieron a vivir en la incertidumbre ante lo des-conocido, a decir no s en lugar de aceptar mitos y tradiciones antiguas como respuestas cuando la rea-lidad todava no se haba penetrado. Y tambin empe-zaron a conocerse mejor a s mismos, en vista de que se aceptaron como seres humanos y como parte de la naturaleza, en lugar de seguirse considerando como receptculos de un espritu inmarcesible y eterno.

    En otras palabras, los pases del hemisferio norte usaron la ciencia para transformarse de medievales en modernos, con lo que la mayor parte se constituy en naciones desarrolladas. En cambio, el hemisferiosur rechaz a la ciencia y se mantuvo firme en sus ideas trascendentales, retrasando as su moderniza-cin en contraste con el hemisferio norte, constitu-yendo lo que hoy se conoce como el tercer Mundo. La historia de los ltimos dos siglos nos ensea que la ven-taja obtenida en esas circunstancias por los pases del Primer Mundo fue aprovechada en gran parte para colonizar y explotar las naciones subdesarrolladas, siempre aliados con las fuerzas ms conservadoras y tradicionalistas, para garantizar que las sociedades sometidas preservaran su estructura medieval y su filosofa de esclavos y pecadores.

    En este siglo hemos visto la desaparicin de la mayor parte del colonialismo de tipo poltico, aunque todava quedan algunas colonias en el tercer Mundo; tambin hemos contemplado y seguimos constatando los esfuerzos heroicos de muchos pases en desa-rrollo por librarse del colonialismo econmico que los agobia; incluso existen tambin cada vez ms individuos tercermundistas que aspiran y luchan por desprenderse del colonialismo intelectual que repre-senta la forma de la dependencia ms profunda, ms esclavizante y ms destructiva de la identidad nacio-nal de un pas, porque no hay peor prdida que la de los valores autctonos, los aspectos de la cultu-ra que permiten distinguir la diferencia entre pue-blos, como el idioma, la cocina, la ropa, la msica y las tradiciones familiares. Cuando todo esto, que es lo que conforma la esencia de un grupo humano espec-fico, empieza a cambiarse por caractersticas perte-necientes a otro grupo distinto, tambin se inicia su desintegracin.

    La funcin ms importante de la ciencia es contri-buir a reforzar la identidad nacional de los pueblos que la cultivan. Mediante la ciencia se conocen mejor a s mismos y pueden enfrentarse con mayor eficiencia a sus propios problemas, en lugar de intentar com-batirlos con ideas e instrumentos importados, desa-rrollados en otros pases con otros propsitos. Pormedio de la ciencia es posible elevar la capacidad de comprensin de la naturaleza de todo el pas; con ciu-dadanos mejor educados se incrementa la concien-cia civil y se posibilita llevar a cabo programas ms

    efectivos para elevar la calidad de vida de todos. Laciencia combate el fatalismo y la aceptacin fcil de derrota; ensea que no hay tal destino ni maldi-cin inexorable, sino que el hombre es capaz de modelar su vida de acuerdo con sus aspiraciones e intereses. La ciencia produce conocimiento y ste libera al hombre del oscurantismo engendrado por la ignorancia.

    He insistido en que este comentario se refiere especialmente al Mxico de hoy, no slo porque es la realidad que todos estamos viviendo sino porque los parmetros que la caracterizan no van a cambiar en un futuro previsible. En otras palabras, nuestro pas es y seguir siendo por tiempo indefinido pobre, subdesarrollado y vecino de Estados unidos, el pas ms rico y desarrollado del planeta, con el que compartimos ms de 3,000 kilmetros de frontera; pero adems, el vecino del norte sigue imbuido en su destino manifiesto que ayer se caracteriz por la presencia de los marines en varias tierras latinoa-mericanas y el bloqueo contra Cuba; hoy se expresa como apoyo a Pinochet y a los contras, presin pol-tica a Panam y con asesores militares en Colombia y Bolivia, y maana quin sabe cmo y en contra de quin de nosotros. La ofensiva de Estados unidos encontra de Amrica Latina no es slo poltica, tambin ha sido y sigue siendo principalmente cultural. La idea matriz de esa nacin es que se cre gracias a la homo-genizacin de las distintas culturas de los inmigrantes que la formaron a lo largo de dos siglos: ingleses, ita-lianos, polacos, rusos, japoneses, hindes, mexicanos y muchos otros ms. Todos ellos terminaron por comer hamburguesas McDonalds, bendecir a la de-mocracia y aceptar el american way of lite.

    Aqu es donde la ciencia puede desempear su papel ms importante en el Mxico de hoy. Ante la inmensa y aparentemente insuperable ventaja que ya nos llevan los pases en materia cientfica, y que no slo amenaza con conquistar todos nuestros mercadossino con transformar nuestra cultura, incorporndola a su patrn homogenizado de pensamiento dirigido y de consumo obligado, los mexicanos podemos y debemos responder con la afirmacin de nuestra personalidad independiente. Tal postura slo puede cimentarse en la creatividad original, en la existenciade grupos significativos de cientficos que con el tra-bajo y la generacin de nuevos conocimientos en lasreas de mayor impacto internacional, afirmen y con-firmen nuestro derecho a existir como sociedad inde-pendiente. Debemos rechazar el que inventen ellos... de unamuno porque, entre otras cosas, traduce laaceptacin de la incapacidad y de la inmadurez, lo que a su vez estimula y hasta propicia las ideas proteccio-nistas de los que s inventan. una ciencia mexicana bien cimentada y en vigoroso crecimiento servirla para aumentar la seguridad y el orgullo de ser sbdito de este pas, lo que me parece la funcin ms impor-tante que puede desempear hoy la ciencia en Mxico.