a2 I EL COMERCIO viernes 5 de febrero del 2010

OYÓN. En las últimas 48 horas, Eugenio Marcos Núñez ha sobre-vivido a todo. Él fue el único que se salvó de morir la madrugada del miércoles en la mina Gazu-na (a media hora de Oyón, en la sierra de Lima), pero además ha debido soportar el necesario asedio de los funcionarios de varias entidades del Gobierno Regional y del Ministerio Públi-co, que requerían su testimonio para elaborar sus informes (y de la prensa, es cierto). Ayer, duran-te todo este ajetreo, Eugenio no podía entender por qué seguía sintiendo mareos y por qué, co-mo repetía constantemente, se sentía “pesado”.

Por momentos, su cuerpo no respondía porque había inhala-do gases cuyo nombre ni siquie-ra conocía y que habían causa-do la muerte de ocho paisanos y amigos suyos. Nacido en el dis-trito de Llata (provincia de Hua-malíes, en Huánuco), Eugenio es uno de los tantos mineros sin ninguna experiencia que vienen desde tierras huanuqueñas a in-ternarse en los socavones por la promesa de un sueldo mediana-mente decoroso.

EL CAOS RENTABLE Aquí, en Oyón, la historia tantas veces contada de las fiebres mi-neras que terminan degeneran-do en un problema estructural de tipo económico y social se repite. Existen en total 144 concesio-nes de minas de carbón en esta provincia, de las cuales 122 ya están tituladas y 22 están en trá-mite. De las 144, solo 16 operan actualmente y, de estas, siete lo hacen sin autorización para los trabajos de explotación.

Según explicó Élmer Ruiz, jefe de la Dirección Regional de Ener-gía y Minas del Gobierno Regio-nal de Lima Provincias, los repre-sentantes de la mina Gazuna tie-nen título de concesión minera, certificado de pequeños produc-tores mineros y un estudio am-biental preliminar. Sin embargo, no cuentan con estudios ambien-tales formales ni con permisos de explotación.

“Se elaborará un informe y se procederá a la clausura de la mi-na. Muchos inversionistas creen que con tener título de concesión ya es suficiente, pero se necesi-tan permisos concretos para ex-plotar”, explicó Ruiz, quien reali-zó ayer una inspección en la mina siniestrada.

El funcionario reconoció que no ha habido un trabajo de fisca-lización eficaz, debido a que, pe-se a que esta función fue derivada al Gobierno Regional, no se asig-nó el presupuesto necesario. Pa-ra fiscalizar una mina de carbón en Oyón se requiere al menos una

Temadeldía En febrero pasado murieron 3 minerosEn febrero del año pasado tres mineros murieron asfixiados por gases tóxicos en el socavón denominado Bocatoma Cautiva de una mina de la empresa Raura, en Oyón.

El socavón de la informalidad

TEXTO: RICARDO LEÓN FOTOS: SEBASTIÁN CASTAÑEDAEnviados especiales

PROPIETARIOS DIERON EN CONCESIÓN LAS MINAS PARA EVITAR CONTROL ESTATAL

Mina Gazuna no contaba con permisos formales de explotación

Autoridades del sector reconocen que no hubo labores de fiscalización

El datoAl cierre de esta edición, fami-liares de los mineros fallecidos denunciaron que los represen-tantes de la mina Gazuna que-rían darles una indemnización de apenas S/.1.000. Ellos se reunieron en la comisaría de Oyón, donde hicieron pública su protesta.

La minaUbicación

Entradaa la mina

25 metros

15 metros

30 metros

Zona de la explosiónAproximadamentea 150 metros dela salida

La entrada tiene1,5 metros de anchoaproximadamente

Probable razón por la cual el gas grisú se acumuló en la zona donde trabajaban los mineros.

Opera ilegalmente. Cuenta con 40 trabajadores asignados al cerro Gazuna que trabajan en dos turnos de 10 horas cada uno.

¿Qué extraen?

De esta mina extraen carbón bituminoso cuya característica principal es su altaconcentración de gases (25% más que el resto de productos similares). Es utilizado por las empresas que fabrican materiales para la construcción como combustible para poner en funcionamiento sus hornos.

¿Por qué explosionó?Según las investigaciones el gas estaba acumulado en el ambiente y no fue advertido por ser inodoro y por no contar con los detectores para ello. Una chispa debido al contacto de un pico con el mineral causó la explosión.

La galería está ubicada en el cerro Gazuna. La zona donde se ubica es conocida por dedicarse principalmente a la extracción de carbón y en menor medida a otros minerales metálicos.

Nombre: Carbón bituminosoProducción: 30 t diariasPrecio en Oyón: S/.80 por toneladaPrecio en Lima: US$80 por

tonelada

C E R R O G A Z U N A

3 mineros sededicaban apicar el cerro

Un trabajadorgeneró unachispa al picarel mineral

Algunos minerosmurieron asfixiadospor los gases.

Hora: 3:00 a.m. 8 personas trabajando en la galería

Recorrido en zigzag

1

32

#ío Chancay

Santa Cruz

Huari

Chancay

Cajatambo

Huaral Canta

#ío Chill

ón

Oyón

L I M A

RAÚL RODRÍGUEZ

La inexperiencia de los mineros (algunos de ellos ingresaron por primera vez a una mina) y la falta de dispositivos de seguridad dentro del socavón también contribuyeron a la tragedia. Ahora el Ministerio de Energía y Minas quiere fiscalizar.

Operación ilegal

Una clara señal de que los dueños de la mina de carbón Gazuna no cumplían una se-rie de compromisos es que solo han enviado a sus re-presentantes a Oyón para enfrentar el problema. Tras-cendió que Efraín Delgado, dueño de la empresa, estaría en Lima.

Quien sí estuvo en Oyón para realizar varias diligen-cias fue Raúl Tarazona, con-tratista que trajo a los mine-ros de Huánuco para trabajar en la zona. Él asegura que no sabía que la mina no conta-ba con permisos de explo-tación. Comentó que los tra-bajadores fallecidos tienen seguro de vida, aunque no supo decir a cuánto ascen-día este.

Funcionarios del Ministe-rio de Trabajo realizaron ayer una inspección en la mina donde se reportó la explota-ción diaria de los mineros.

En su informe final se de-tallará, entre otros aspectos, la pésima condición labo-ral de los mineros, quienes cubrían turnos de unas 10 horas todos los días. Solo se les asignaba un casco y botas de jebe para realizar las faenas, en un ambiente cerrado donde no se puede ni respirar.

Según fuentes del Minis-terio Público, los propietarios de la empresa minera Gazu-na podrían ser denunciados por homicidio doloso.

Malas condiciones laborales

TESTIMONIO

Eran más de las 12 de la no-che y estábamos en plena fae-na. Mis compañeros me pidie-ron que les trajera café y hojas de coca del campamento, y yo fui. Cuando estaba a unos 200 metros del socavón, escuché una explosión fuerte. Corrí y en-tré llamándolos, pero como no salían, me metí más y más. No sabía que ahí había gases tóxi-cos; por inexperiencia casi me muero. Entré y salí varias veces y no los veía. En una de esas, me desmayé. Unos pobladores me sacaron, pero si me quedaba

unos minutos más, no aguanta-ba. Ahora me duele la cabeza y el hombro; debo haberme gol-peado por entrar corriendo. Los que han muerto son mis paisa-nos, algunos son cuñados míos. Uno de ellos, Cayo Guillermo Lastra, era cantante. Él se pre-sentaba como Cayito del Perú y nos cantaba dentro del soca-vón, así pasábamos el rato. De-cía que iba a hacernos una can-ción sobre la vida en las minas. Vinimos de Huánuco el año pa-sado porque queríamos saber cómo era eso de la minería”.

“Por inexperiencia casi me muero”

EUGENIO MARCOS NÚÑEZ

MINERO

SEPA MÁS

Ayer se confirmó que uno de los mineros muertos, Zósimo Juan Verde Robles, era menor de edad. Iba a cumplir 18 años el 30 de marzo. Hace un año em-pezó a trabajar en la mina.

Al cierre de esta edición, los familiares de las víctimas espe-raban que llegara un camión que los lleve a Huánuco, donde se-rán enterrados los cuerpos.

Gladys Guevara, médica le-gista a cargo de las autopsias, explicó que los mineros falle-cieron a causa de los golpes su-fridos y por inhalar gases tras la explosión. Los cuerpos están parcialmente quemados.

En Oyón, además de las mi-nas de carbón (casi todas infor-males), existen grandes minas polimetálicas de empresas for-males.

Según la Dirección Regional de Energía y Minas, cada mina informal emplea a 20 trabajado-res. En la mina Gazuna, por ser una de las más grandes, trabaja-ban 40 personas.

Fuentes del Gobierno Re-gional de Lima Provincias in-formaron que en marzo llegará un grupo de fiscalizadores del sector Trabajo, el cual orientará parte de sus funciones a la si-tuación de la minería informal.

Uno de los mineros era menor de edad

15 soles diarios gana en pro-medio una persona que tra-baja en una mina informal en Oyón. No cuenta con seguro médico ni accesorios de se-guridad que eviten algún tipo de accidentes.

camioneta, pero no se tenía nin-guna hasta hace unas semanas. Para los mineros aquí no había ley. No la hay aún.

UNA PROLONGADA CRISIS La historia de este avance desor-denado de la minería informal en Oyón se remonta a la primera mitad de los años 90. Por aque-lla época, los dueños de grandes minas de carbón empezaron a otorgar pequeñas concesiones a sus antiguos trabajadores pa-ra evadir las inspecciones que amenazaban sus irregulares negocios. Toda la provincia, en-tonces, se llenó de pequeñas par-celas mineras mal explotadas.

Además, según indicó Ale-jandro Vizurraga, gobernador de Oyón, se tendría indicios de que en los últimos años algunas autoridades locales habrían reci-bido dinero para no entrometer-se en los asuntos de los explota-dores de carbón. Para no mirar, al fin y al cabo. Aunque por ahora las denuncias son solo eso, se sa-be que en diversas estancias vie-nen siendo investigadas.

Las consecuencias de una explosión son devastadoras: el socavón donde se reportó el siniestro es ahora un laberinto semidestruido, en cuya entra-da se sigue acumulando el ba-rro negro.

A unos kilómetros de la mina, en la ciudad de Oyón, los parien-tes de los fallecidos velaban ayer los cuerpos parcialmente carbo-nizados a la espera de recibir más ayuda de la empresa minera. π

EXPLOTACIÓN DIARIA. La mina de la empresa Gazuna, en Oyón, no contaba con sistemas de seguridad para evitar emergencias.

a10 I EL COMERCIO martes 9 de febrero del 2010

RegionesCONTÁCTENOS 3 editorregiones@comercio.com.pe

Mareaalta

Mareabaja

P A I T A C H I M B O T E C A L L A O M A T A R A N Ihora

8:06 a.m.8:58 p.m.

5276

8:28 a.m. 3610:10 p.m.

9:33 a.m.11:15 p.m.51

3045

2726

cm hora cm hora cm hora cm

2:49 p.m. 150 3:47 p.m. 124 4:45 p.m. 103 1041:45 a.m. 132 2:09 a.m. 86 3:07 a.m. 65 590:31 a.m.

11:32 p.m.

6:16 p.m.6:00 a.m.

Mar en condiciones normalesLa Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina prevé que mañana el mar tendrá condiciones normales para navegar y pescar.

A veces las noticias, aun las más alarmantes, no dicen nada. Du-rante el año pasado unos 2.600 trabajadores de las minas de carbón en China murieron por inhalar gases, por derrumbes o explosiones, según un diario de ese país. No por eso los mineros chinos dejan de meterse en los oscuros socavones, como si de eso no se tratara su vida.

A mucho menor escala, la se-mana pasada ocho mineros mu-rieron tras una explosión en la mina de carbón donde trabaja-ban, en Oyón, a cuatro horas de viaje desde Huacho. El sistema de trabajo de estos ocho traba-jadores era absolutamente in-formal, este accidente era ab-solutamente predecible, y las posibilidades de que esto sirva de lección son absolutamente mínimas.

UNIVERSO INFORMALNo se sabía mucho de Oyón des-de el 2008, cuando el alcalde Manuel Delgado fue retenido por una turba que lo acusaba de malos manejos. Hasta hace unos días nadie se acordaba de que es-ta provincia tiene entre sus activi-dades económicas principales la extracción informal de carbón.

Había quienes sí lo tenían en cuenta, pero que poco podían hacer al respecto. En Huacho, en una de las oficinas del Gobier-no Regional de Lima Provincias, el ingeniero Élmer Ruiz ha visto –absorto, impotente quizá– que durante años la Dirección Regio-nal de Energía y Minas, que él di-rige, no tenía una camioneta para ir a esas minas de carbón y pedir cuentas a sus dueños.

Después de la muerte de los mineros, todo se transformó en preguntas. Preguntas que ha-cían aquellos trabajadores que ingresaban a los socavones con un par de botas como todo equi-po de protección. Preguntas con respecto a si en Lima lo ocurrido había sido noticia.

Sí fue noticia, pero de esas que no dicen nada. Al día siguiente, cuando aún los cadáveres eran velados, centenares de mineros siguieron, como si nada hubiera ocurrido, esa rutina que empieza en un camión que los lleva a la mi-na y que termina en rostros enne-grecidos y una espantosa dificul-tad para respirar. π

La minería como muerte lenta

EN RIESGO. Existen 144 concesiones de minas de carbón en Oyón, pero apenas operan 16. De estas, siete lo hacen sin los permisos reglamentarios. La informalidad impera.

La extracción de carbón en Oyón es, además de informal, un riesgo constante

Investigan a los involucrados en la reciente muerte de ocho mineros

ESPECIAL. LA PELIGROSA RUTINA EN LAS MINAS DE CARBÓN

TRABAJO INSEGURO. Los mineros provienen, en su mayoría, de las alturas de Huánuco. RUTINA. Estos hombres respiran durante horas el ambiente contaminado de los socavones.

Los representantes de las em-presas Gazuna S.A. y Minera San Lorenzo S.A.C., involu-crados en la muerte de ocho trabajadores en una mina ubi-cada en Oyón, comparecerán hoy ante los funcionarios de la Zona de Trabajo de Huacho, entidad que investiga los he-chos reportados la semana pasada en dicha provincia ubi-cada en las alturas de Lima.

Según se informó, los re-presentantes de ambas com-pañías deberán acreditar que los mineros fallecidos conta-ban con las medidas de segu-ridad reglamentarias para el trabajo que realizaban, y que gozaban de un seguro de vida

Se investiga a los responsables

y otros beneficios estipulados por la ley.

Según las primeras investi-gaciones, los trabajadores –to-dos provenían de Huamalíes, en Huánuco– extraían carbón de los socavones sin las míni-mas medidas de seguridad.

Por otro lado, según ade-lantó hace unos días la Direc-ción Regional de Energía y Mi-nas, a pesar de tener vigente el título de concesión, los repre-sentantes de la mina no con-taban con los permisos de ex-plotación reglamentarios, por lo que se anunció su clausura definitiva. Esas ocho muertes no podían ni debían quedar im-punes.

LUTO. Ocho mineros murieron el miércoles en Oyón.

MENUDEO. El carbón también se vende a escala local. Su principal mercado es la ciudad de Lima.

EN MASA. Oyón congrega uno de los mercados laborales informales más grandes de la región.

TEXTO: RICARDO LEÓNFOTOS: SEBASTIÁN CASTAÑEDAEnviados especiales