Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

download Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

of 16

Transcript of Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    1/16

    1

    La motivacin de la condena y su revisin ampl ia como garantas delimputado (Puede el jui cio por jurados restr ingir las?)1

    Por Gustavo A. Herbel

    La revisin amplia de la condena penal representa una garantajerarquizada expresamente por el Derecho Internacional de los DerechosHumanos (arts. 8.2.h. CADH, 14.5 PIDCP y 2 Protocolo adicional N7,CEDH), no obstante lo cual su alcance an no ha sido cabalmenteesclarecido. El propsito del trabajo es esbozar, sucintamente, losfundamentos de tres afirmaciones que permiten ensayar una respuesta al

    interrogante sobre qu tipo de recurso exige nuestro debido proceso penal ala luz del bloque constitucionalfederal que incorpora a las dos primerasnormas (cf. art. 75.22 C.N.).

    Para delinear la extensin de la garanta se sostendr: a) Que elcontrol de legitimidadsobre los fundamentos de la condena, representa elmodelo recursivo que mejor responde al derecho del imputado; b) que el

    principio de inmediatez del juez con la pruebano impone lmite alguno ala revisin del fallo adverso al acusado; y c) que el veredicto deculpabil idad inmotivadoimplica un costo injustificado, en detrimento de

    sus garantas.El debate sobre estas tres aseveraciones permitir otorgar un

    contorno ms claro a los requerimientos que debe cumplir la impugnacinde la condena penal.

    I.- El recurso como control de legitimidad:

    En nuestra cultura jurdica existen numerosos sistemas recursivos;algunos habilitan la apelacin de los juicios desarrollados por jurados ante

    otros jurados que actan como segunda instancia, sin perjuicio de laexistencia de un tercer control ante Casacin (as, Alemania e Italia)2;otros, en cambio, deben satisfacer la garanta del imputado directamentecon el recurso de casacin (vgr. Espaa y Argentina). En el commonlaw, el veredicto tiene un control restringido, por entenderlo contrario a lasoberana del jurado popular.

    1 El presente trabajo comprende algunos temas desarrollados en la defensa de mi tesis doctoral sobre Elderecho del imputado a revisar su condena, dirigida por Enrique BACIGALUPO y Zulita FELLINI, enla Facultad de Derecho de la UBA.2

    Ver: AA.VV.; HENDLER, Edmundo (Director); Sistema Procesales Penales Comparados, Bs. As.,Ad-Hoc - 1999, pag.: 199; ROXIN, Claus; Claus; Derecho Procesal Penal, Bs. As., Ed.: Del Puerto,2000, pgs.: 459 y s.).

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    2/16

    2

    Explicar las particularidades de dichos sistemas, excede estapresentacin; sin embargo, definir algunos conceptos dogmticos, facilitaresclarecer hasta qu punto ellos son compatibles con el estndar degarantas en debate.

    La primera distincin conceptual relevante para ingresar al anlisispropuesto, se presenta entre el juicio de mrito (las valoraciones deljuez del debate), y el juicio de legitimidad (control de esas valoracionespor el tribunal del recurso).

    Se trata de dos tipos de juicios diferentes, con objetos de estudiodiversos. El de mrito es un juicio sobre la capacidad de la prueba parademostrar la hiptesis acusatoria; siendo la propia acusacin su objeto deanlisis; en cambio, el de legitimidad, no se vincula directamente con la

    prueba, sino que revisa los criterios de valoracin del juez del debate. Su

    objeto no es la acusacin, sino los motivos de la sentencia.El juicio de mrito es, sustancialmente, unjuicio sobre la prueba

    que traduce percepciones sensoriales en argumentos cuya plausividadlgica y jurdica legitiman la sentencia. Sus valoraciones, an siendo frutode la inmediacin, no pueden cimentarse en impresiones subjetivas; serequieren motivos cognoscibles para el imputado y objetivados para sueventual revisin.

    El juicio de legitimidad, es un juicio sobre el juicio; slo revisa

    los argumentos del juez de mrito, no (re) evala la prueba3

    .Es clara la relevancia de este anlisis. No hay deberni necesidad-

    de probar, ni en rigor de obtener dato alguno, si no existe la obligacin demotivar una relacin eficaz entre prueba y condena. Y slo es posibleexigir un cierto estndar probatorio, cuando se lo somete al control delegitimidad y a su eventual invalidacin por carecer de razones suficientes4.

    El recurso, en el contexto jurdico local, exige como garanta delimputado, una revisin integralde su condena

    La afirmacin no es arbitraria; nuestra CSJN, en el precedenteCasal5, elige tal sendero al sealar: debe interpretarse que los arts.8.2.h de la Convencin y 14.5 del Pacto exigen la revisinde todo aquelloque no est exclusivamente reservado a quienes hayan estado presentes

    como jueces en el juicio oral (consid. 24), aclarando que, respecto de la

    3 IACOVIELLO, M.; Ricorso per cassazione, publicado en Dizionario di Diritto Pubblico, VolumeV, Roma, Giuffr editore, 2006, 5277 y s.4 FERRAJOLI, Luigi; I valori del doppio grado e della nomofilachia, publicado en Revista Materialie atti, del Centro di Studio e iniziativa per la riforma dello stato, N20, 1992, bajo el ttulo, il giudizio dicassazione nel sistema delle impugnacin, AA.VV., ps. 35 y ss.5 CSJN, C.1757.XL., Casal, Matas Eugenio, del 20/10/2005.

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    3/16

    3

    impresin personal que los testigos pueden causar en el tribunal, hayobligacin de dar cuenta mediante criterios que casacin puede revisar(consid. 25).

    La Corte IDH, en Herrera Ulloa entendi que el recurso importa

    un examen comprensivo e integral de todas las cuestiones debatidas yanalizadas en el tribunal inferior6; estudio que, segn este organismo,tiene como objeto un fallo motivado.

    En su precedente Apitz fue ms all al prescribir que: laargumentacin de un fallodebe mostrar que han sido debidamente

    tomados en cuenta los alegatos de las partes y que el conjunto de laspruebas ha sido analizado; para finalizar diciendo que: el deber demotivacin es una de las debidas garantas incluidas en el artculo 8.1,

    para salvaguardar el debido proceso7.

    Al parecer, desde la perspectiva de la Corte Nacional y laInteramericana, el control de legitimidad de los motivos de la condenaresulta un modelo recursivo que se compadece con la garanta delimputado.

    El Common Law brinda formas de revisin ms restringidas. Lacuestin no resulta problemtica en aquel contexto jurdico. Gran Bretaa yGales no lidian con las -de por s- difusas reglas del art. 2 del protocoloadicional N 7 CEDH (doble instancia en materia penal)89. Tampoco el

    sistema norteamericano est obligado a una revisin integral de la condena,pues si bien rubric la CADH (06/01/77), al presente no lo ha ratificado ycomo consecuencia no le es aplicable10.

    Gran Bretaa y Estados Unidos, s ratificaron el PIDCP, pero esteltimo al suscribirlo declar expresamente que las clusulas 1 a 27 son

    programticas11; adems, ninguno de ellos est adherido al Protocolo

    6 Corte IDH, Herrera Ulloa c. Costa Rica, del 92/07/2004, prr. 1677 Corte IDH, Apitz v. Venezuela, del 05/08/2008, prr 78; este organismo se expide en sentido anlogo

    en Chaparro lvarez y Lapo Iiguez vs. Ecuador, del 21/11/2007, aunque aqu se refiere a una medidade coercin infundada.8 Su texto reza:Derecho a un doble grado de jurisdiccin en materia penal. 1. Toda persona declaradaculpable de una infraccin penal por un tribunal tiene derecho a que la declaracin de culpabilidad o lacondena sean examinadas por un tribunal superior. El ejercicio de este derecho, que incluye los motivos

    por los que puede ser ejercitado, sern regulados por la ley. 2. Este derecho puede estar sujeto a

    excepciones respecto de las infracciones de carcter menor definidas por la ley, as como en los casos en

    que el interesado haya sido juzgado en primera instancia por un tribunal superior o haya sido declarado

    culpable y condenado despus de un recurso contra su absolucin. Como se advierte, la norma por unlado, permite limitar legalmente los motivos de la revisin y por otro, excepta del recurso los supuestosdonde un tribunal, definido como superior, haya dictado sentencia; de tal modo es posible, tanto restringirla revisin como impedirla segn el tipo de agravio o el tribunal que la dicte, respectivamente.9 Al 11/08/2012 dichas naciones no lo suscribieron (http//conventions.coe.int/treaty/commun/)10 cf. www.oas.org/jurdico/, estas jurisdicciones no suscribieron dicho Protocolo.11 cf.www.treaties.un.org/pages.

    http://www.oas.org/jur%C3%ADdico/http://www.oas.org/jur%C3%ADdico/http://www.treaties.un.org/pageshttp://www.treaties.un.org/pageshttp://www.treaties.un.org/pageshttp://www.treaties.un.org/pageshttp://www.oas.org/jur%C3%ADdico/
  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    4/16

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    5/16

    5

    El doble juicio de mrito representa un esfuerzo institucional que noparece brindar mayores beneficios16: (a) no se revisa la decisin impugnadasino que se vuelve a decidir en base a un plenario distinto; (b) si el objetodel recurso no es la sentencia, el imputado no discute los motivos de su

    condena, sino que reitera o innova sus planteos en el segundo juicio; (c) siel acusado no puede discutir las razones del fallo, su legitimidad reside enel nmero de jurados que se pronuncian en un mismo sentido. En tal caso,sera ms eficiente que ese grupo mayor (sumatoria de los jurados de

    primero y segundo grado) resuelva en una sola oportunidad, legitimando lacondena en base a mayoras calificadas, como lo hace el sistema anglo-americano.

    El problema no se resuelve. La virtud del jurado clsico reside en sucapacidad de control horizontal (un nmero importante de ciudadanos debe

    acordar con la acusacin), pero es naturalmente refractario al controlvertical que nuestro sistema impone (revisin integral del fallo).

    Como primera conclusin, podemos afirmar que el control delegitimidad es el modelo recursivo ms compatible con nuestro debido

    proceso constitucional; al postular como objeto de anlisis, una motivacinexhaustiva de la condena, que puede ser conocida y criticada por el acusado

    Este dispositivo, adems, minimiza el campo de discrecionalidad deljuzgador; pues susfundamentos son el lmite de una decisin legtima.

    Pero para validar este axioma, es necesario desautorizar a lasimpresiones subjetivas, adquiridas porinmediacin, como base legitima deuna afirmacin judicial.

    II.- La inmediacin: un pseudo-lmite inoponible al imputado.

    Si desde la perspectiva del derecho al recurso conforme el alcanceaqu sostenido-, se afirma que el veredicto inmotivado del jurado popular,restringe la garanta, es claro que un tribunal tcnico no podra arrogarse lafacultad de adoptar decisiones incontrolables; por ejemplo, sustentadas en

    la inmediacin con la prueba.La potestad del jurado lego proveniente del principio de soberana

    popular, es incongruente con la legitimacin meramente legal del jueztcnico. El espacio de discrecionalidad permitido a los representantes del

    pueblo (jurado), es intransferible al magistrado profesional. Habilitar queestos formulen juicios subjetivos fundados en la inmediacin con la prueba,

    16

    Sobre este interesante debate, con nutrida informacin de mbito jurdico alemn, ver: BACIGALUPO,Enrique; Justicia Penal y Derechos Fundamentales, Madrid Barcelona, Ed.: Marcial Pons, 2002,pgs.: 215 y ss.

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    6/16

    6

    nos lleva a la peor de las situaciones: no contamos con legitimacinciudadana17, ni con la garanta de motivacin exigida a los jueces tcnicos.

    Es evidente que el juez del debate y el del recurso no estn de parconditio respecto de la prueba del caso; pero ello no interfiere con la

    garanta del imputado, en la medida que el recurso controla la motivacindel fallo (juicio de legitimidad), sin necesidad de (re)valorar prueba que no

    percibe (juicio de mrito).

    Para analizar el tema, es til diferenciar tres rdenes deconocimiento:

    1. La percepcin de informacin:Es decir, la adquisicin de datosporinmediacin con la prueba del debate, lo visto y odopor el tribunalde mrito. La percepcin sensorial de la prueba desarrollada en

    audiencia, permite seleccionar el material probatorio til para formular lacadena argumental que fija los hechos de la sentencia. Esta percepcin, enlo que importa, puede controlarse, mediante los registros flmicos, sonoroso taquigrficos de lo declarado.

    2. La impresin personal: Esta es la valoracin subjetiva del juezsobre la informacin recibida en audiencia (punto 1); momento psquicoimpenetrable para el tribunal revisor, donde los estereotipos personales seencuentran liberados de todo lmite. Tales (pre)juicios, no son del todocontrolables siquiera para el sujeto cognoscente, al estar vinculados a la

    propia conformacin de su estructura psquica y cultural18

    . Tomarconciencia de ellos permite dosificarlos, no anularlos.

    3. La motivacin de la valoracin: Ella se expresa mediante eldesarrollo racional de los criterios de decisin utilizados al ponderar la

    prueba y determinar los hechos. La exhaustividad de los motivos dependedel estndar requerido por el sistema jurdico: A mayor exigencia deargumentacin, menor ser el espacio de discrecionalidad dejado a laimpresin personal. E, inversamente, no obligar al juez a fundar sus

    17 El modelo de jurado ingls aporta como garanta su integracin numerosa, electa en forma aleatoria ysometida a una seleccin donde las partes pueden recusar con y sin motivo; adems deciden la condena

    por unanimidad o mayoras privilegiadas, a lo que se suman minuciosas reglas de exclusin probatoria(cf. FERRER BELTRN, Jordi; La valoracin racional de la prueba, Madrid/Barcelona/Bs. As.,Marcial Pons, 2007, p. 44, con cita a DAMASKA, M.).18 El mundo de vida de un sujeto expresa su socializacin, la introyeccin de valores referidos a lacultura, a la sociedad y hasta a la propia identidad; un esquema de percepcin determinado histrica ysociolgicamente. Representa el saber profundo del sujeto que erige su propia normalidad yexistencia socio-cultural, y reconoce la existencia de certezas de fondo, imposibles de tematizar, porconstituir el mismo instrumental de acceso al conocimiento; de all que su percepcin siempre queda

    ligada a las hiptesis vigentes respecto del objeto investigado (Vase al respecto HABERMAS, Jrgen;"La lgica de las ciencias sociales", Madrid - 1988, pgs.: 495 y ss.; "Teora de la accin comunicativa:complementos y estudios previos", Madrid - 1989, Tomo: II, pgs.: 568 y ss.).

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    7/16

    7

    criterios de valoracin probatoria, deja este mbito librado a su arbitrio, sopretexto de ser datos solo aprehensibles con la inmediatez.

    Segn el fallo Casal, que no se dirige slo a Casacin sinotambin y muy especialmente- a los tribunales de mrito, lo nico

    incontrolable es la impresin personalque los rganos de prueba generanen el juez del debate; pero al mismo tiempo seala que ella slopuedetomarse como elemento fundante vlido, si el tribunal dio cuentacircunstanciada de los criterios utilizados, y estos a su vez pueden serrevisadospor Casacin (cf. consid. 25).

    En otros trminos, la impresin personal en s, no puede postularsecomo fundamento; los magistrados estn compelidos a justificar la razn

    por la cual asignan verdad a ciertas declaraciones dentro del cuadroprobatorio del caso19.

    El derecho a confrontar con la prueba y a la defensa en juicio, sonilusorios, si el juez no explicita su valoracin probatoria20. Tal es la raznde que toda prueba deba ser motivada, explicitando, inclusive, el juicio decredibilidad sobre las declaraciones recibidas oralmente21.

    Nunca una garanta puede operar contra su titular. La inmediacinotorga al imputado la posibilidad de defenderse eficazmente frente a todo elcontexto probatorio aportado en debate ante quienes lo juzgan. Pero el juezno puede basar sus afirmaciones en impresiones subjetivas sobre la prueba,

    sino en datos objetivos provenientes de ella.No debe decidira travs de la inmediacin, sino fundado en los

    datos obtenidos con la inmediacin, a partir de un distanciamientocrtico de sensaciones inmediatas que son inciertas y peligrosas22.

    No es aceptable acudir a una supuesta evidencia subjetiva paraobtener saber. Todo conocimiento es a priori pblico, esta impregnadolingsticamente y es en principio criticable, es decir, puede y debe serexpuesto a crtica. Ms llanamente; generar conocimiento requiere deevidencia como criterio objetivo de verdad, no reducible al mero

    sentimiento de evidencia23.

    19 En este sentido, CAFFERATA NORES, Jos I. y HOLZWARTH, Adriana M.; La cuestin de lasinceridad intrnseca del testimonio (divina chispa del juez o status de la verdad`?) , publicadoen Eficacia del sistema penal y garantas constitucionales, Ed. Mediterrnea, 2002, p. 127 y ss.20 TARUFFO, Michele; Il diritto alla proba nel processo civile, publicado en Rivista di diritto

    processuale, 1984, nmero 4, p.106.21 GASCN ABELLN, Marina; Los hechos en el derecho Bases argumentales de la prueba,Madrid / Barcelona / Bs.As.; Macial Pons, 2010, p. 180 y ss.22 TARUFFO, M.; Algunos comentarios sobre la prueba, ob. cit., p 82.23 APEL, Karl-Otto; Teora de la verdad y tica del discurso , Barcelona, Paids, 1991, p. 112.

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    8/16

    8

    La inmediacin es una tcnica de formacin de la prueba y no unmtodo de convencimiento del juez24. El contradictorio oral y la inmediatezcon la prueba, representan garantas instrumentales para que las partes

    pedan colocar en dificultades al testigo con sus interrogatorios, y ahondar

    en esa direccin, estableciendo su veracidad. El juez, por el contrario, debeatenerse al contenido del discurso, evaluar su consistencia y la coherenciade la informacin, cruzndola con otras fuentes del cuadro probatorio, en

    busca de corroboracin externa25.

    En otras palabras, debemos pasar del anlisis del testigo (opininsubjetiva sobre su credibilidad) al estudio del testimonio (escrutar sucoherencia y confrontar su versin)26. El primero, nos remite a una suertede visin intuitiva de la calidad de las personas portadoras de verdad; elsegundo, nos permite ingresar a una perspectiva analtica del discurso del

    deponente.Tal concepcin se sintetiza en el principio que reza: aquello que el

    juez no motiva no genera consecuencias jurdicas vlidas o, desde otrongulo, la decisin judicial no puede trasvasar los lmites de sumotivacin27.

    En esta perspectiva: La inmediacin no supone lmite alguno paraotra garanta: el recurso.

    Sera contradictorio crear un instrumento de control (el recurso) que

    no permita ingresar al estudio de parte de su objeto (la determinacin de loshechos fijados en la condena), y postular que ello es derivacin de otragaranta (la inmediacin), bajo el fundamento de que su carencia impide altribunal revisor, el control de las percepciones del tribunal de juicio.

    En rigor, la garanta de la inmediacin es instrumental al ejercicio dela defensa (produccin de prueba en el marco del contradictorio frente al

    juez que decide28); nunca un obstculo para su titular.

    Si el juez slo puede decidir hasta el lmite de su motivacin y estaes objeto del recurso, nada queda por fuera de la revisin garantizada al

    imputado.

    24 IACOVIELLO, Francesco M.;La motivazione della sentenza penale, op. cit., p. 151.25 En tal sentido se expide ANDRS PERFECTO, quien, con claridad, indica que si debiera optarse entredos testimonios uno de cargo y otro de descargo, sin cuadro probatorio con el cual contrastar lasversiones, habra que aplicar el in dubio pro reo, pues de otro modo, la fijacin de los hechos de lasentencia, quedara sujeto a la empata del juez con alguno de los declarantes (aut. cit., La prueba,op. cit., 61 y ss.).26 NIEVA FENOLL, Jordi; La valoracin de la prueba, Madrid, Marcial Pons, 2010, p. 220.27 IACOVIELLO, F. M.; La motivazione, ob. cit., p. 8.;28 Definido por MAIER como principio de unidad entre debate y sentencia; en su obra Derecho

    Procesal Penal, ob. cit., tomo IFundamentos, p. 656 y s.

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    9/16

    9

    III.- Veredicto inmotivado, derecho a ser odo y recurso: garantas en

    tensin.

    Las reflexiones apuntadas conducen a pensar que el mejor modo de

    preservar el conjunto de garantas, es un proceso que exija fundamentosexplcitos para que el imputado conozca las razones de su condena (juiciode mrito) y pueda impugnarlas integralmente ante una instancia ulterior(juicio de legitimidad).

    Pero que un modelo procesal pueda ser recomendable desde el puntode vista de las garantas convencionales, no invalida la existencia desistemas jurdicos donde el jurado clsico encuentra fuerte consensociudadano.

    La cuestin que pretende someterse a debate es diversa; esto es, siresulta conveniente que un Estado comprometido internacionalmente abrindar al imputado los motivos de la condena y su revisin amplia, adopteacrticamente un instituto jurado popular- cuyo producto: veredictoinmotivado, difcilmente se concilia con la alcance local otorgado a dichasgarantas.

    La respuesta podramos ensayarla desde distintas perspectivas queaqu sern slo esbozadas.

    1) En elplano cognitivo es vlido el siguiente planteo: Si penar tiene

    como requisito la veracidad de la acusacin29, debe adaptarse el modelodotado de mayor poder explicativo y ms cantidad de controles a sersuperados, para tener por verificadas sus afirmaciones30.

    Es pacfico en el contexto acadmico que el juicio oral,contradictorio, continuo y pblico es el mejor instrumento de conocimientodel caso31. Pero lograr calidad de informacin, no evita la arbitrariedad de

    29 Cuando se habla de verdad de la acusacin, es claro que hacemos referencia a una verdad relativa,como son todas las verdades cientficas (solo las metafsicas y religiosas pueden ser absolutas), perosiempre en el marco de una verdad que se corresponda con el mundo exterior (en el caso, el hechohistrico objeto del proceso), y no una concepcin narrativista que toma a la prueba como herramienta de

    persuasin con funcin retrica, sino una verdad correspondencia en que la prueba opere comoinstrumento de conocimiento con finalidad epistemolgica (cf. TARUFFO, Michele; Consideraciones

    sobre prueba y motivacin, publicado en Consideraciones sobre la prueba, AA.VV., Madrid,Fundacin Coloquio Jurdico Europeo, 2010, p. 29 y ss.).30 FERRJOLI, Luigi; Derecho y razn. Teora del garantsmo penal , Madrid, Trotta, 9 ed., 2009, p.50.31 Que la oralidad es el canal comunicativo con mayor posibilidad de acercamiento a la verdad, es una

    adquisicin que no se reduce al mundo jurdico-penal, sino que tiene rango acadmico en las cienciassociales (cf. BERGER, Peter y LUCKMAN, Thomas; La construccin social de la realidad,Amorrortu editores, 1991, p. 48.

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    10/16

    10

    las decisiones; es intil obligar a quien juzga, a someterse a la ley, si eslibre de elegir los hechos sobre los cuales decide32.

    Nada importa si en su fuero ntimo, quien resuelve adquiereconviccin sobre el caso por medio de intuiciones, pre-juicios, hiptesis de

    trabajo o impresiones inmediatas. Nada de esto cuenta en la motivacin delfallo, donde deben prevalecer los argumentos racionales, las hiptesisconfirmadas y las valoraciones convalidadas culturalmente33.

    La propia lgica del jurado popular resiste la motivacin exhaustiva.En tal modelo no se verifica analticamente la prueba de cadacircunstancia del caso; por el contrario, se formulan narraciones queorganizan los elementos probatorios, ms por persuasin que por controlesepistmicos34.

    Desde este punto de vista, el veredicto inmotivado obstaculiza alimputado revisar una condena que se deja librada al debate interno ysecreto, de un jurado al que no se exigen razones, ni se impone controlexterno35.

    Si por hiptesis se afirmara que la mejor aproximacin a la verdad,se alcanza sumando la apreciacin subjetiva de un conjunto importante de

    personas, que ofrezcan diversas miradas sobre un mismo objeto36, como dehecho hace el modelo de jurado clsico; lo cierto es que, pese a sucalificado control horizontal (popular), el sistema no satisface nuestro

    debido proceso.El enjuiciamiento penal debe contar, no tanto con la posibilidad de

    una verdad objetiva, sino con una verdad controlable por elimputado. Ms all de las calidades cognitivas de cada sistema, loimportante para el acusado (sujeto central de las garantas convencionales yconstitucionales), es poder conocer las razones de su condena y someterlasa critica ante otra instancia.

    Entre garantas y verdad, el Estado de Derecho hace tiempo que optpor la primera. El sistema de exclusiones probatorias37 es ilustrativo; por la

    32 HASSEMER, Winfried; "Fundamentos del derecho procesal penal, Barcelona, Bosch, 1984, p. 142.33 TARUFFO, Michele; La motivazione della sentenza, Padova, 1970, p. 119.34 TARUFFO, Michele; Simplemente la verdad, PONS, Marcial, 2010, ps. 80 y ss.35Ibdem,p. 211.36 NIETZSCHE tiene dicho: Existe, nicamente, un ver con perspectiva, nicamente, un conocer con

    perspectiva; y cuanto mayor sea el nmero de afectos a los que permitamos decir su palabra sobre una

    cosa, cuanto mayor sea el nmero de ojos, de ojos distintos que sepamos emplear para ver una misma

    cosa, tanto mas completo ser nuestro concepto de ella, tanto ms completa ser nuestra objetividad(aut. cit.; La Genealoga de la Moral, Bs.As., Gradifco, 2007, p. 139)37 Para un anlisis del tema y sobre la comparacin entre los sistemas norteamericano y alemn, puedeverse: GUARIGLIA, Fabricio; Concepto, fin y alcance de las prohibiciones de valoracin probatoria en

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    11/16

    11

    misma razn que una verdad sustentada con prueba irregularmenteadquirida no es oponible al imputado (cuando tal saber fue adquirido fueradel debido proceso), la condena basada en afirmaciones incontrolables setorna ilegtima. Y es que para nuestro sistema, conocer sus razones y

    criticarlas ante un segundo tribunal, representan garantas constitucionales(arts. 8.1 y 8.2.h CADH, 14.1 y 14.5 PIDCP).

    2) En el plano institucional, una de las bases de la divisin depoderes, se asienta en el carcter exclusivamente legal de la legitimacinjurisdiccional; el juez opera como contrapeso respecto de los poderesdemocrticos de mayora, para proteger a los individuos de sus desbordesautoritarios38.

    La diferencia cualitativa de la democracia constitucional respectode la meramentepoltica39 reside, no en quin debe decidir: Siempre es lamayora, sino en qu no puede decidir ninguna mayora. Lo nodecidible es aquello que las garantas constitucionales sustraen a lavoluntad popular; sustancialmente la vida y la libertad personal, que no

    pueden sacrificarse meced a ningn consenso, ni inters general.

    De all la crtica que esta concepcin dirige al jurado clsico: Si lasmayoras pueden decidir sobre esos derechos fundamentales, la jurisdiccinno est en grado de oponer lmites a sus abusos40.

    El jurado popular nace del recelo con la autoridad y permite integraral pueblo -o partes representativas de ste- en la actividad jurisdiccional.

    el procedimiento penal. Una propuesta de fundamentacin, Bs.As., Del Puerto, 2005, Coleccin TesisDoctoral.38Alexander Hamilton, en los albores de la democracia norteamericana sostuvo, coincidentemente conesta posicin, que si los jueces pudieran ser nombrados por perodos a travs del Ejecutivo o delLegislativo habra peligro de una complacencia indebida con la rama duea del cargo; el riesgo no seradiferente si ambos poderes concurrieran en la designacin, ni tampoco si se reservase al pueblo o a

    personas elegidas por el con ese objetivo especial; siempre surgira una propensin exagerada a pensar en

    la popularidad de las decisiones, y sera imposible confiar en que no se tuvieran en cuenta otra cosa que laConstitucin y las leyes (cf. HAMILTON, A.; MADISON, J. y JAY, J.; El Federalista, Mxico, Fondode Cultura Econmico, 1994, vol. n 78).39 Este concepto alude a sistemas donde las decisiones mayoritarias no tienen lmites legales; situaciones

    presentes en regmenes totalitarios que, so pretexto de postular la voluntad mayoritaria, legitimaron elsometimientoy hasta exterminio- de minoras desfavorecidas por la opinin pblica o el poder poltico.Tambin podran incluirse los Estados dominados por movimientos de base religiosa, que manifiestanintolerancia con expresiones culturales diversas. Las democracias constitucionales son, en cambio,sistemas que han consolidado un orden jurdico superior a la coyuntural expresin de mayora, a fin de

    proteger a los individuos y sus formas de vida- del ataque de otras personas o de la comunidad engeneral.40 En esta mismo camino DWORKIN defiende una concepcin constitucional de la democracia, como

    sistema que procura respetar los derechos de las mayoras y de las minoras, sin perjuicio que los juecesdeban orientarse fundamentalmente en direccin a las ltimos (cf. aut. cit., Freedoms law, Cambridge,Harvard University Press, 1996).

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    12/16

    12

    Con ello resuelve la contradiccin: autoridad / ciudadana a favor de laltima.

    Sin embargo, este modelo forjado en la resistencia contra el poderestatal, soslaya otra dicotoma relevante; la confrontacin: voluntad

    mayoritaria / derecho individual. Que en oportunidades el jurado proteja alindividuo frente al exceso del Estado, no significa que en otras no puedaejercer una funcin inversa y legitime la represin de individuos o gruposvulnerables41.

    Aqu no se pretende afirmar que el jurado es irracional o que sudecisin carece de controles legales aplicados por la jurisdiccin. De hechola irracionalidad del jurado es una causal de revisin en el common law,y las reglas de exclusin probatoria, las instrucciones al jurado y el controldel proceso por el juez del debate, son formas de imponer la ley en el

    juicio.Lo sometido a crtica, es que la ausencia de motivacin explcita de

    la condena, deja un margen de discrecionalidad irreductible, cuando enrealidad, las razones que funda la aplicacin de pena debieran serconocidas y controladas, sin que el principio de soberana popular,represente un obstculo legtimamente oponible al imputado.

    3) Por ltimo, desde el ngulo de las garantas, cabe confrontar

    nuestro debido proceso constitucional, con el veredicto inmotivado.La Corte norteamericana predicaba que el veredicto de culpabilidad

    del jurado es irrevocable42, salvo demostrase la inexistencia de evidenciasobre la acusacin (cf. Thompson43).

    En el precedente Jakson, se avanz al formular la pregunta crtica,de cul era el estndar de probatorio requerido para sustentar una condenacriminal, y se respondi que no alcanza con determinar si el jurado fueadecuadamente instruido, sino que era preciso establecer si del registro de

    41 La derogacin del sistema inquisitivo de la Ordenanza francesa de 1670 y la adopcin del juradopopular ingls, por ley de la Asamblea constitucional (16-29/09/1791) en la Repblica jacobina (cf.MAIER, Julio B.J.; ob. ant. cit. t. I, ps. 342 y ss.), no pudo evitar que en el trmino de catorce meses seefectuaran en Francia 17.000 ejecuciones oficiales (GREER, D. The Incidence of the Terror, Harvard,1935; cf. HOBSBAWM, Eric; La era de la revolucin 1789 1848,Bs.As., Planeta, 2011, p. 69).42 En Kotteackos v. United States, 328 U.S. 750 (1946), se aclar que no es funcin del tribunal deapelacin determinar la culpa o inocencia del imputado, an cuando para verificar la relevancia que unerror en el proceso haya podido tener en el veredicto, sea necesario estudiar la totalidad de las evidencias

    presentadas. Tanto la jurisprudencia como la doctrina norteamericanas han advertido la dificultad depostular esta revisin del caso, sin afectar los criterios utilizados por el jurado en su decisin, pues en elloal jurado se lo interpreta soberano (WAYNE R. LA FAVEISRAEL, Jerold H.; Criminal Procedure,St. Paul, Minnesota / USA, West Publishing Co., 1985,p. 999 y ss, y sus citas).43 CS - USA, Thompson v. Louisville, 362 U.S. 199 (1960), 80, S.Ct. 624, 4 L.Ed2d 654.

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    13/16

    13

    pruebas, surge que razonablemente se pudo afirmar la culpabilidad, msall de toda duda razonable. Pero no segn el criterio del tribunal revisor,sino despus de ver la evidencia a la luz ms favorable a la fiscala 44. Elmodelo Ingles, por su parte, maneja cnones anlogos45.

    El carcter excepcional de la revisin del veredicto de culpabilidad,no se compadece con el alcance de la garanta del art. 8.2.h. CADH, queexige controlar la valoracin probatoria y la aplicacin del in dubio pro reo(cf. precedentes ya citados, CSJN y Corte IDH).

    El modelo clsico de jurado, adems, tiende limitar la garanta delimputado aser odo por un tribunal de justicia (arts. 6.1 CEDH, 8.1 CADHy 14.1 PIDCP), en la medida que los fundamentos del fallo son los que

    permiten saber si han sido atendidos los planteos del acusado.

    Al examinar la cuestin, la Audiencia Plenaria del TEDH (GrandChamber), en el precedente Taxquet, seal que la condena carente defundamentos no viola por si sola el derecho a un proceso equitativo;cuando sus motivos pueden resultar de la acusacin y del contenido de lascuestiones propuestas al jurado, si ellas contienen informacin suficiente,son precisas e individualizadas46.

    Como se indicara, la Corte IDH, en Apitz47, fue ms exigente;impuso que: la argumentacin de un fall o debe mostrar que han sidodebidamente tomados en cuenta los alegatos de las partes y que el

    conjunto de las pruebas ha sido anal izado, estableciendo que tal garantaes parte del debido proceso (surge del derecho a ser odo, art. 8.1 CADH),y proporciona la posibilidad de criticar la resolucin y lograr un nuevoexamen de la cuestin ante las instancias superiores (art. 8.2.h CADH).

    Este alcance de las garantas, otorga al imputado el derecho adefenderse dos veces; la primera, alegando contra la acusacin en el marcodel debate donde puede confrontar la prueba ante sus jueces naturales(juicio de mrito); la segunda, criticando los fundamentos de su condena enla instancia recursiva (juicio de legitimidad).

    Por el contrario, el pronunciamiento del jurado clsico deja alimputado sin posibilidad de verificar si sus alegatos contra la acusacinfueron atendidos, sustrayendo as, el conocimiento de parte esencial de lasrazones de su condena.

    44 CS - USA, Jackson v. Virginia, 444 U.S. 890 (1979), 100 S.Ct. 195.45 Cf. SPRACK, John; Criminal Procedure, New York, Oxford University Press, 2008, p. 481 y s.

    46 TEDH, Taxquet v. Blgica, GC, del 06/10/2010, (www.bailii.org/eu/cases/ECHR/2010/1806.html).47 Corte IDH, Apitz v. Venezuela, del 05/08/2008.

    http://www.bailii.org/eu/cases/ECHR/2010/1806.htmlhttp://www.bailii.org/eu/cases/ECHR/2010/1806.htmlhttp://www.bailii.org/eu/cases/ECHR/2010/1806.htmlhttp://www.bailii.org/eu/cases/ECHR/2010/1806.html
  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    14/16

    14

    La impugnacin del veredicto inmotivado obliga al recurrente arealizar hiptesis sobre los fundamentos de su condena y criticarlos,muchas veces reiterando planteos ensayados en el debate originario, quelgicamente- no fueron respondidos por el jurado.

    IV. Algunas conclusiones:

    Se pretende haber demostrado que el recurso, interpretado comojuicio de legitimidad, obliga a una motivacin exhaustiva, que facilita alimputado conocer las razones de la condena, verificar el tratamiento de sus

    planteos y, eventualmente, instar su revisin ante otra instancia.

    Segn este mtodo, la inmediacin del juez del debate con la prueba,no importa lmite alguno al tribunal del recurso. Si las afirmaciones fcticas

    no pueden sustentarse en impresiones personales, los motivosexplcitamente desarrollados configuran el lmite de la decisin, ms all delo cual, se torna ilegtima.

    Este tipo de recurso habilita un elevado estndar para las garantas enestudio (derecho a ser odo y a recurrir integralmente el fallo), perocolisiona con el jurado clsico, referente del constituyente originario.

    Hay un punto inconciliable; mientras el jurado decide por veredictoinmotivado, los motivos representan la mejor fuente de conocimiento de lasrazones de la condena y el propio objeto del control de legitimidad.

    Ahora bien; significa esto que nuestro sistema jurdico debaprescindir del jurado popular?

    La participacin ciudadana en la administracin de justicia, tieneimpacto positivo en varios niveles del sistema: (a) obliga a producir toda la

    prueba en debate oral: Slo as conoce el jurado; (d) los profesionales seocupan de traducir los datos generados por las fuentes probatorias, entrminos inteligibles para los ciudadanos; (c) ello beneficia la comprensindel imputado y facilita su defensa material; (e) el jurado, es garanta de

    independencia de cualquier poder (no tiene lazos econmicos ni moralescon ninguno) y de imparcialidad respecto del caso especfico (existenamplias causales de recusacin); (f) el debate obtiene profundidad en elanlisis de sus particularidades, por el compromiso de los jurados, paraquienes es el caso y no un caso ms, como resulta a los jueces

    profesionales; (g) por ltimo, este contexto redunda en mayor legitimacinde las decisiones judiciales: Ms transparencia del proceso, suconocimiento por parte de la ciudadana y compromiso de sta con ladecisin adoptada.

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    15/16

    15

    Pero el conjunto de beneficios predicables sobre la intervencin deljurado, no subsana el hecho de que, al no motivar su decisin, la torna engran medida inexpugnable para el condenado.

    Las soluciones disponibles en el derecho procesal comparado son

    variadas48, y tambin conocidas sus crticas49Pueden ensayarse nuevas alternativas; es posible que luego de la

    audiencia oral, los integrantes ciudadanos del jurado, sesionen sinintervencin de magistrados profesionales, para dictar un veredicto que, deser absolutorio, tendra carcter irreversible; y de implicar una declaracinde culpabilidad, abrira paso a que los jueces tcnicos asistentes al debate,se pronuncien mediante sentencia motivada (en hecho y derecho) quecondene o absuelva al imputado50.

    Son imaginables diversas articulaciones entre participacinciudadana, motivacin de la condena y derecho a su revisin integral.

    Pero lo aqu importante es que, para nuestro sistema jurdico,compatibilizar estas garantas, no es slo una posibilidad sino unaexigencia consti tucional.

    La CSJN insina este camino al decir: Posiblemente sea necesariaaqu s- una interpretacin progresivapara precisar el sentido actual dela meta propuesta por la Constitucin. Habra que determinar si eljuradoque ese texto coloca como meta es actualmente el mismo que tuvieron en

    miras los constituyentes, conforme los modelos de su poca, o si debe serredef ini do segn modelos actuales diferentes de participacin popular.(Cons. 15; las negritas no son del original)51.

    Sera una triste paradoja de nuestra historia institucional, que la muyesperada implementacin del juicio por jurados, termine criticada por su

    principal beneficiario, el acusado, por entender restringidas otras garantas:

    48 En Alemana e Italia, existen jurados escabinos, integrados por ciudadanos y jueces tcnicos, paradecidir causas penales. En nuestro pas, la provincia de Crdoba ha puesto en funcionamiento un juradoescabino compuesto por 8 jurados populares titulares, 4 suplentes y tres jueces tcnicos, con obligacin defundar la sentencia en hecho y derecho (Ley 9182; B.O.C., 09-11-2004).49 Las integraciones mixtas fueron acusadas de relegar a los legos, dejando la hegemona de la decisin alos jueces tcnicos; y, por otro lado, se ha entendido precaria la factura de los fallos fundados porciudadanos sin capacitacin jurdica.50 En realidad el modelo anglo-americano de enjuiciamiento opera parcialmente en un modo anlogo: elveredicto absolutorio es irrevocable y el condenatorio debe ser encuadrado jurdicamente por un jueztcnico que determina la calificacin legal y la pena; en la propuesta aqu esbozada, luego del

    pronunciamiento del jurado popular, el juez o tribunal profesional debe, adems, justificar jurdicamente(con argumentos racionales) la idoneidad de la prueba para sustentar la condena; requisito que habilita unrecurso amplio para el imputado.51 CSJN, C.1757.XL., Casal, Matas Eugenio, del 20/10/2005

  • 7/28/2019 Jurado Motivacion y Recurso 2013-1-0

    16/16

    16

    el derecho a conocer y hacer revisar integralmente, las razones de sucondena.