“MI AULA UN ESPACIO DE RESPETO Y CONVIVENCIA” 2B

ANTECEDENTES DEL PROYECTO Este proyecto surge con la necesidad de provocar un cambio de

actitud en nuestra comunidad educativa a través de una invitación desde el aula (Segundo “B”), el trabajo en común y el compromiso social para comenzar a cambiar el entorno de intolerancia, falta de norma y disfrutar así de la vida por medio de convivencia pacífica.

Al mismo tiempo para integrar al grupo ya que fueron combinados para, tratar de mejorar la actitud de los estudiantes en las diferentes actividades realizadas en el aula ya que presentaban vínculos amistosos muy fuertes, lo que ocasionaba dispersión en los estudiantes. El trabajo colaborativo no es dinámico, pues prefieren trabajar de forma individual, sin dar a conocer sus opiniones al resto del grupo, les cuesta seguir instrucciones, pedir la palabra para dar sus aportes, esperar al docente dentro del aula de clase, utilizan un tono de voz muy fuerte, lo que genera malestar en el grupo, realizan conversaciones inoportunas con sus compañeros, interfiriendo en el buen desarrollo de las clases, incumplimiento con las tareas.

JUSTIFICACIÓN.

En toda sociedad y ambiente tiene que haber normas, aunque sean mínimas. La familia y la escuela son fundamentales para su aprendizaje. Las normas deben ser cumplidas por maestros y estudiantes a fin de facilitar el logro de los objetivos educativos. Sin ellas difícilmente se alcanzan. ¿Cómo se va a aprender en un lugar donde todos hablan, gritan o juegan?

OBJETIVOS

Implementar estrategias metodológicas que conduzcan a la sana convivencia en el aula, mediante el fortalecimiento de valores como: el respeto, el compañerismo, la tolerancia.

ESPECIFICO: Planear la dirección de grupo, como un espacio que facilite y dinamice la

promoción y convivencia en el aula. 

Propiciar encuentros en el aula para que las estudiantes compartan sus experiencias e identifiquen sus propias formas de acceder al conocimiento.

Implementar las normas básicas de convivencia sobre las que se va a hacer mayor incidencia en el aula.

Propiciar espacios de diálogo para conocer gustos y necesidades de nuestros compañeros.

Compartir ideas y materiales de trabajo con otros compañeros.

Aplicar técnicas de trabajo cooperativo en la ejecución de actividades.

METODOLOGÍA. Análisis de materiales de apoyo, en forma personal y grupal,

dinámicas de grupo, lluvia de ideas, discusión socializada y técnicas específicas de la educación en valores, como clarificación de valores, resolución de dilemas morales, diagnóstico de situaciones, comprensión crítica, ejercicios de autoanálisis, construcción conceptual, etc.

Además espacios de reflexión individual y colectiva sobre aspectos teóricos y prácticos de la realidad actual, lo que conduce a un compromiso mayor asumido con la sociedad y con el educando.

Se elegirá el estudiante que represente el grupo, este ejercicio se hará de manera democrática, luego de escuchar sus propuestas, aportes que pueden dar al grupo, teniendo en cuenta las disposiciones expuestas en el Manual de Convivencia

IMPACTO Se espera que con la ejecución de este proyecto los

estudiantes aprendan a compartir sus experiencias con los compañeros, a practicar normas de convivencia, cortesía y que sean conscientes de la necesidad de incorporar los valores al proceso formativo y al mismo tiempo a su vida familiar.

Ya que la interiorización de normas de convivencia y el refuerzo por parte de la escuela de los valores adquiridos en la familia es fundamental para generar un ambiente de sana convivencia tanto en el aula como en el colegio.

POBLACIÓN BENEFICIARIA

En este proyecto se beneficia toda la comunidad educativa, principalmente los 31 estudiantes del grado Segundo “B” cuyas edades oscilan entre los 6 y 8 años; distribuidas de la siguiente manera: 8 niños, 6 años

RECURSOS