OPCION S 55 Octubre 2014

8
E n alianza entre organizaciones sociales his- tóricas, el FUT convocó a la gran marcha nacional del 17 de septiembre, donde con- currieron, masivamente, profesionales, estudian- tes, maestros, jubilados, ecologistas, feministas, indígenas, campesinos, amas de casa, etc., en con- tra de las políticas de derecha del actual gobierno. Quienes participamos en la movilización lo hi- cimos en contra de la pretendida aprobación de un nuevo Código Laboral que es totalmente regresivo en materia de derechos colectivos de los trabajdo- res y beneficia a los empleadores. También, mar- chamos por los pretendidos cambios constitucio- nales que atentan a los derechos fundamentales de todos los ecuatorianos. Asimismo, nos movili- zamos porque atacaron a las organizaciones socia- les (Decreto 016), a los fondos de cesantía, a los jubilados, a la educación superior incluyente, a la zona más biodiversa del planeta, al agua, a la tie- rra, a la vida. En este contexto, los estudiantes secundarios especialmente de los colegios MEJÍA Y MONTÚ- FAR, tomaron una relevancia acostumbrada en gobiernos anteriores. Será acaso porque su rebel- día es innata y valerosa. Ellos salieron a las calles de Quito desde la mañana del 17 y también el 18 de septiembre, en un acto de pundonor, en defensa de los derechos de las clases populares del país, levándose la peor parte en esta jornada llena de represión. La tarde del 17 de septiembre, mientras el Pre- sidente bailaba y cantaba en un “festival” de poca asistencia llevado a cabo, de manera irresponsa- ble, paralelamente, en la Plaza Grande, la policía dispersaba BRUTALMENTE la gran concentra- ción en San Francisco impidiendo que culminen las intervenciones de los dirigentes sociales, así como la lectura del Manifiesto del FUT; y en la noche y al día siguiente apresaba y reprimía a los estudiantes atrincherados en los colegios Mejía, Montúfar y otros, dejando un saldo de casi 300 es- tudiantes detenidos en dos días de protesta, supe- rando, como lo señaló Elsie Monge, inclusive a las dictaduras militares que hubo en el país. A los estudiantes del Colegio Mejía, los apresa- ron dentro del colegio, con la avenencia del rector, así lo denunciaban los padres de familia, el 19 de septiembre en la Unidad de Flagrancia; así como acusaban a la policía de maltratos y hasta tortura. En días posteriores, en las respectivas audiencias, los jueces negaron todos los recursos posibles para liberar a los estudiantes, pues, al parecer, la or- den era declarar culpables a los acusados, no de dañar el “bien público”, sino por haber osado salir a las calles pese a las advertencias del Ministro de Educación y del Presidente. Finalmente, con- siguieron su objetivo, 39 estudiantes salieron en libertad declarados “cómplices” del delito; 5, para salvar las apariencias, fueron declarados inocen- tes; y 15 fueron conminados a declararse culpables para aminorar la pena que podía extenderse hasta 3 años. Así, 11 estudiantes fueron sentenciados a 2 meses de prisión por daños a bienes ajenos; de- mostrándose, una vez más, que de lo único que le sirve al gobierno el haber “metido las manos” en la Justicia es para amedrentar y perseguir a quienes se movilizan en busca de un verdadero socialismo. Publicación mensual • Octubre 2014 Número 55 En páginas interiores: El gatopardismo económico en tiempos de revolución ciudadana Nuevo sistema penitenciario del Ecuador “El martirio no rehabilita” Ley de Tierras Rurales y Productivas: Más agro negocio, menos Soberanía Alimentaria Preparar la huelga nacional Nerviosito… El proceso electoral del Brasil en la actual coyuntura latinoamericana “La Muerte de Jaime Roldós”: convergencia entre cine y periodismo Conflicto de poderes entre el Gobierno y los Municipios ANTE LA ORGANIZACIÓN DEL PUEBLO, BRUTAL REPRESIÓN Y CRIMINALIZACIÓN POR PARTE DEL GOBIERNO

Transcript of OPCION S 55 Octubre 2014

En alianza entre organizaciones sociales his-tóricas, el FUT convocó a la gran marcha nacional del 17 de septiembre, donde con-

currieron, masivamente, profesionales, estudian-tes, maestros, jubilados, ecologistas, feministas, indígenas, campesinos, amas de casa, etc., en con-tra de las políticas de derecha del actual gobierno.

Quienes participamos en la movilización lo hi-cimos en contra de la pretendida aprobación de un nuevo Código Laboral que es totalmente regresivo en materia de derechos colectivos de los trabajdo-res y beneficia a los empleadores. También, mar-chamos por los pretendidos cambios constitucio-nales que atentan a los derechos fundamentales de todos los ecuatorianos. Asimismo, nos movili-zamos porque atacaron a las organizaciones socia-les (Decreto 016), a los fondos de cesantía, a los jubilados, a la educación superior incluyente, a la zona más biodiversa del planeta, al agua, a la tie-rra, a la vida.

En este contexto, los estudiantes secundarios especialmente de los colegios MEJÍA Y MONTÚ-FAR, tomaron una relevancia acostumbrada en gobiernos anteriores. Será acaso porque su rebel-día es innata y valerosa. Ellos salieron a las calles de Quito desde la mañana del 17 y también el 18 de septiembre, en un acto de pundonor, en defensa de los derechos de las clases populares del país, levándose la peor parte en esta jornada llena de represión.

La tarde del 17 de septiembre, mientras el Pre-sidente bailaba y cantaba en un “festival” de poca asistencia llevado a cabo, de manera irresponsa-ble, paralelamente, en la Plaza Grande, la policía dispersaba BRUTALMENTE la gran concentra-ción en San Francisco impidiendo que culminen las intervenciones de los dirigentes sociales, así como la lectura del Manifiesto del FUT; y en la noche y al día siguiente apresaba y reprimía a los estudiantes atrincherados en los colegios Mejía,

Montúfar y otros, dejando un saldo de casi 300 es-tudiantes detenidos en dos días de protesta, supe-rando, como lo señaló Elsie Monge, inclusive a las dictaduras militares que hubo en el país.

A los estudiantes del Colegio Mejía, los apresa-ron dentro del colegio, con la avenencia del rector, así lo denunciaban los padres de familia, el 19 de septiembre en la Unidad de Flagrancia; así como acusaban a la policía de maltratos y hasta tortura. En días posteriores, en las respectivas audiencias, los jueces negaron todos los recursos posibles para liberar a los estudiantes, pues, al parecer, la or-den era declarar culpables a los acusados, no de dañar el “bien público”, sino por haber osado salir a las calles pese a las advertencias del Ministro de Educación y del Presidente. Finalmente, con-siguieron su objetivo, 39 estudiantes salieron en libertad declarados “cómplices” del delito; 5, para salvar las apariencias, fueron declarados inocen-tes; y 15 fueron conminados a declararse culpables para aminorar la pena que podía extenderse hasta 3 años. Así, 11 estudiantes fueron sentenciados a 2 meses de prisión por daños a bienes ajenos; de-mostrándose, una vez más, que de lo único que le sirve al gobierno el haber “metido las manos” en la Justicia es para amedrentar y perseguir a quienes se movilizan en busca de un verdadero socialismo.

Publicación mensual • Octubre 2014Número 55

En páginas interiores:

• El gatopardismo económico en tiempos de revolución ciudadana• Nuevo sistema penitenciario del Ecuador “El martirio no rehabilita” • Ley de Tierras Rurales y Productivas: Más agro negocio, menos Soberanía Alimentaria• Preparar la huelga nacional• Nerviosito… • El proceso electoral del Brasil en la actual coyuntura latinoamericana• “La Muerte de Jaime Roldós”: convergencia entre cine y periodismo• Conflicto de poderes entre el Gobierno y los Municipios

AntE lA orgAnizAción dEl puEblo,brutAl rEprEsión y criminAlizAciónpor pArtE dEl gobiErno

El gAtopArdismo Económico En tiEmpos dE rEvolución ciudAdAnA

2 opción sm

irA

dA

s

En los últimos meses, la política econó-mica y financiera del gobierno de la re-volución ciudadana ha enviado señales

confusas en cuanto a su orientación técnica e ideológica; vale la pena recordar la propuesta de mensualización obligatoria de los décimos para el sector público y optativa para el sec-tor privado, propuesta que se puede entender como un intento por aumentar el dinamismo de la economía nacional median-te el componente gasto. Esto enmarcado en una política de restricción y sustitución de im-portaciones, mientras que, por otro lado, se negociaba y se daba por sentada la adhesión del Ecuador a un TLC con la Unión Europea, muy similar al firma-do por Colombia y Perú, el cual garantiza un extremo aperturis-mo comercial. Después, en una jugada poco debatida y explica-da, el gobierno nacional acudía a las instituciones financieras internacionales para entregar el oro físico de la reserva nacio-nal a cambio de $500 millones (1,5% del presupuesto 2014) bajo la figura de colateral; a esta maniobra hay que sumarle la emisión de bonos por un valor de $2.000 millones (5,8% del presupuesto 2014) con un rendimiento de casi el 8%, mientras que paí-ses como Perú o Colombia lo hacen a tasas no superiores al 4%.

A continuación, el país era testigo de cómo, en contra de un dictamen constitucional, el presidente Correa afirmaba que el espectro radioeléctrico es un recurso natural no reno-vable y que las utilidades de los trabajadores de las telefónicas privadas debían en su ma-yor parte ser captadas por las arcas del Esta-do, yéndose así en contra de los derechos con-seguidos por los trabajadores y, una vez más, sin afectar un solo centavo de las ganancias del gran capital trasnacional, garantizando mediante esta declaración, para nada revolu-cionaria, por lo menos $100 millones anuales

Francisco Yépez Cadena

para el Estado (0,3% del presupuesto 2014). A intenciones como esta, en los últimos días, se han sumado ideas como el impuesto a la plusvalía que pretende gravar las ganancias de los especuladores de tierras, a pesar de que en el artículo 556 del COOTAD ya existe una figura para este tipo de casos, y nuevamente sin cuestionar el monopolio de la propiedad de la tierra en el Ecuador.

La última propuesta tribu-taria del Presidente consiste en aplicar un impuesto a la comida chatarra, sin tener definido téc-nicamente el concepto de este tipo de alimentos; basado en un discurso sobre precautelar la sa-lud y la atención médica futura de los consumidores, Correa pre-fiere ignorar que la aplicación de este tipo de impuestos, en pri-mer lugar, promueve la creación de negocios clandestinos que no reúnen las condiciones físicas ni sanitarias ideales y, en segun-do lugar, que si bien en el corto plazo el consumidor restringe su

gasto en los productos gravados, en el media-no y largo plazo regresará a sus viejas tenden-cias de consumo a pesar de los altos tributos.

Es importante entender que estas acciones económicas y financieras se desarrollan den-tro de un marco deficitario de la economía na-cional, en el que la reducción, tanto de la de-manda como de los flujos crediticios chinos, el estancamiento y progresivo retroceso del pre-cio del petróleo, junto a la desaceleración de la economía de la región, están pasando factura al Ecuador aunque las autoridades se nieguen a aceptarlo. Esta condición puede explicar la conjunción entre el aumento de la presión fiscal, la toma de decisiones impopulares, la emisión de un nuevo código monetario, la en-trada en circulación de un dólar electrónico, ambiguamente respaldado, y la creación de una Junta de Regulación Monetaria y Finan-ciera sin responsabilidad penal.

opción s 3

nuevo sistema penitenciario del Ecuador“El martirio no rehabilita”

En

tr

Ev

ist

A

¿desde cuando trabajan en la problemática penitenciaria del país?

El Colectivo Feminista Mujeres de Frente, se organizó en el 2004 ante las protestas penitencia-rias, por los problemas, principalmente, de haci-namiento en las cárceles. Hubo varias manifes-taciones, entre ellas las de la cárcel de mujeres del Inca. A partir de esta, nos encontramos varias mujeres, en ese entonces estudiantes, y nos jun-tamos con mujeres que estaban en prisión. Desde ese entonces, nos involucramos con esta proble-mática, y ahora con los nuevos centros regionales y los traslados masivos se activó el comité.

¿En qué se diferencia el sistema anterior con el actual?

En el sistema anterior, es verdad, existía ha-cinamiento, sin embargo una de las bondades de este sistema es que era un régimen bastante abierto; el horario de visistas era de 9 a 5 de la tarde; ¿los familiares eran revisados? ¡Por supues-to! pero podían llevar alimentos, medicinas, pelí-culas, etc. En ese caso, podemos decir que era un sistema que permitía la cercanía de los afectos.

Ahora, primero, los traslados fueron realizados sin ninguna evaluación socioeconómica ni psico-social. Incluso cuando se trasladan reses, de un lugar a otro, se necesita un certificado de salud, no se diga cuando se traslada una población en-tera. Cambiaron toda la jurisdicción de los juicios en teoría de Quito a Latacunga, pero exste una confusión en ese aspecto. La cárcel no está termi-nada, hasta ahora no tienen agua bebible, las co-nexiones de luz son intermitentes… al principio no tenían ni un patio para salir, pasaban ence-rrados 20 horas al día. Las condiciones han ido mejorando mínimamente; sin embargo, no existen todavía los talleres de trabajo ni de recreación que existían antes, entre otras cosas… pero lo peor de este nuevo sistema es el régimen de visitas.

En la actualidad, la cárcel queda demasiado lejos. La mayoría de la gente es pobre; tiene que viajar largas distancias para visitar a sus familia-res por solo hora y media; son horarios asignados arbitrariamente en internet sin importar el traba-jo, las complicaciones de los familiares. Asimismo, violándose derechos humanos, se han asignado

tiempos de visita de acuerdo a las penas que cum-plen los internos (mínima seguridad: 1 vez por se-mana; media: 2 veces al mes; máxima: 1 vez al mes). Además, los presos deben señalar quienes los van a visitar, impidiendo así el acceso a la so-ciedad civil. En este sentido, este nuevo sistema representa una ruptura total con el afuera social. Creemos que no puede haber rehabilitación o rein-serción social si aislas completamente a la gente del mundo. La gente de ahí va a salir loca… el alejamiento significa encalustramiento y eso pro-mueve más violencia y que no se haga conocida. Eso nos preocupa.

¿Qué tipo de Estado se está consolidando con este sistema penitenciario?

Lo que se consolida es un modelo de Estado disciplinario… Tienes ahora unas celdas flaman-tes, pero donde empiezan a hipernormarte y lo importante no son los derechos humanos sino la seguridad… Un gobierno, que se dice de izquierda promociona una política completamente de dere-cha, expresada en todas estas políticas de toleran-cia cero, que se convirtieron desde los años 80 en seguridad ciudadana.

Seguimos pensando, si miramos el COIP, que la justicia es cárcel, castigo; lo cual es terrible…cuando hablamos de justicia castigadora, discipli-naria, estamos hablando de una justicia patriarcal que te alecciona a través de la violencia y eso es lo que no queremos. Se supone que estamos en la era del buen vivir y todo lo demás, pero el buen vivir no lo generas a través del castigo… no lo generas a través del disciplinamiento, sino a través de un mejoramiento de las condiciones de vida, en tratar de pensar una justicia que vaya más allá, en pen-sar qué es lo justo para una mujer o un hombre que nació en condiciones desiguales… el martirio no rehabilita, porque el martirio crea rencor.

Entrevista a Lisseth Coba, parte del

Colectivo Feminista Mujeres de Frente y del

Comité de familiares, amigas y amigos de la

gente Presa

4 opción s

Históricamente, ha existido una presión comercial sobre los recursos naturales; uno de esos es la tierra. El agronegocio de

los alimentos, la forestación para la producción de madera, celulosa y derivados que apuntalan la industria del papel, la inversión dirigida a la extracción de minerales e hidrocarburos y, el ne-gocio de los agrocombustibles (Coalition, 2011) son presentados como avances de progreso o el milagro “rentista” ecuatoriano.

El conflicto por la tierra ha enfrentado a secto-res campesinos, frente a los propietarios de heren-cia colonial y republicana que concentran grandes extensiones de suelo productivo. Las disputas cen-trales por el régimen de propiedad y las formas de uso del suelo desarrollan puntos conflictivos sobre los mecanismos de acceso a la tierra, el latifundio y el minifundio, la función social y ambiental de la tierra, el papel del Estado, el carácter del campesino en torno al mercado, entre otras.

Creemos que las dinámicas históricas de la re-lación capital, tierra y trabajo en el campo han en-contrado, en el régimen actual, un gobierno que co-difica las prácticas de acumulación del capital en el Estado, cuyas expresiones concretas las vemos en la reforma institucional y legal del Estado, las estra-tegias nacionales de erradicación de la pobreza, el cambio de matriz productiva y energética, el buen vivir rural, que, entre otros, conforman un disposi-tivo de control sobre los recursos naturales (la tie-rra) y formas de poder como el disciplinamiento, el control y, gobierno de las poblaciones en el campo. Así lo expresaría el “nuevo” proyecto de “Ley orgáni-ca de tierras rurales productivas” preparado por la Comisión de Soberanía Alimentaria de la Asamblea Nacional.

AnÁlisis dEl proyEcto dE “lEy orgÁnicA dE tiErrAs rurAlEs productivAs”

CONTEXTO Con la aprobación de la Constitución en

2008 y la Ley de Soberanía Alimentaria 2009, las organizaciones indígenas y campesinas avizoraron un marco jurídico a favor de un proceso de redistribución y acceso a la tierra. Se presentaron 8 proyectos de Ley de Tierras y Territorios y un mandato comunitario que se disputaban el sentido de la ley. Hay que

destacar el proyecto presentado por la Red Agraria (FENOCIN, CNC ELOY ALFARO y CORMOLIT), que fue acompañado por una amplia movilización social y 46.860 firmas de respaldo.

A partir del año 2013, se posesionan los discur-sos de la productividad y la lucha contra la pobre-za, como premisas que instalan un nuevo escenario para la discusión normativa en materia agropecua-ria, pues estos emprenden otra agenda para las po-líticas públicas, definiciones de “nuevos” problemas, y la construcción de un sujeto campesino con carac-terísticas ciudadanas. En este periodo, que conti-núa en la actualidad, el único proyecto que se deba-te es el de la Asamblea Nacional, denominado “Ley Orgánica de Tierras Rurales Productivas”. Así, nos encontramos en un contexto en que la productivi-dad, la lucha contra la pobreza, la judicialización de la protesta social, entre otros, se condensan en la planificación nacional. La propuesta de ahorro por sustitución de importaciones (MAGAP 2013), el Acuerdo Comercial con la Unión Europea, el Código Integral Penal componen el proyecto de Ley de Tie-rras propuesta del Estado.

puntos conFlictivos

El nombre de la ley o su nominación.- En primer lugar, el cambio de nombre a ley

Orgánica de Tierras Rurales Productivas elimina de su ámbito de aplicación todo lo que corresponde a los territorios, pretendiendo así se-parar de la discusión de la ley el tema de la con-sulta pre-legislativa.

En segundo lugar, la Comisión ha definido uni-lateralmente los significados e importancia de la tierra. Desplaza la importancia cultural de la tie-rra para los pueblos, el debate sobre sus múltiples funciones en la construcción de la economía y, tal como lo hace la economía neoliberal, restringe su comprensión a un problema de eficiencia y produc-tividad en función del mercado.

De acuerdo con lo anterior, creemos que la incor-poración del concepto de territorios en el debate de la ley permite cumplir con las disposiciones consti-tucionales de implementar un régimen de Sobera-nía Alimentaria, en el cual se especifiquen los pa-rámetros para definir el latifundio, la función social y ambiental, además de generar mecanismos claros para la expropiación y adjudicación de tierras.

Esteban DazaLuis Andrango

lEy dE tiErrAs rurAlEs y productivAs:mÁs Agro nEgocio,mEnos sobErAníA AlimEntAriAr

Ep

or

tA

JE

opción s 5

Fines y principios La transformación de la estructura agra-

ria estará entendida como incremento de la pro-ductividad, generación de empleo y democratiza-ción del ingreso, y no como redistribución de la tie-rra. El principio de sustentabilidad, por su lado, es comprendido como el aprovechamiento eficien-te del suelo y no como relación armónica entre el hombre y la naturaleza. En el artículo 5, sobre los fines, la propuesta menciona que el Estado tiene como fin garantizar la propiedad privada so-bre la tierra, lo que permitiría cerrar el círculo de alcanzar la productividad en el campo. Final-mente, el artículo 6, sobre los lineamientos de la política agraria, promueve al Estado como el actor estratégico para brindar apoyo al de-sarrollo del sector agropecuario y garantizar el cumplimiento de la función social y ambiental.

Función social y ambiental de la TierraOtro de los elementos a considerar es que la es-

trategia de cambio de la matriz productiva sirve de marco referencial para definir la función social y ambiental de la tierra. Con la misma lógica de la definición de la ley, sus fines y principios, la función social se cumple cuando se explote efi-cientemente la tierra, cuando tenga niveles acep-tables de productividad, cuando se respeten los derechos laborales y, cuando no exceda la tenen-cia de los límites permitidos (Art 8.).

Por lo tanto, la función social recae en dos ele-mentos, primero, el de política social entendido a partir de la redistribución del ingreso y segundo, como política de fomento productivo. Es así que esta nueva ley se articula perfectamente a la propuesta de Sustitución Selectiva de Importaciones del Mi-nisterio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (MAGAP) de agosto de 2013, que establece como estrategia grandes extensiones de tierra para cultivos no tradicionales y agrocombustibles.

Para cumplir la función ambiental se debe cui-dar de la biodiversidad, los ecosistemas y el patri-monio genético cuando se exploten los suelos, pero deja en la ambigüedad el ingreso de semillas trans-génicas, pues este elemento en la propuesta se en-cuentra en paréntesis. En este sentido, la función ambiental descansa sobre la explotación eficiente del recurso tierra como discurso de sustentabilidad, y además se articula a la función social de la tierra como el discurso de la productividad responsable en el campo.

El Latifundio, expropiación, adjudicación, y sujeto agrario en la LeyOtro de los puntos que impulsan la concentra-

ción de la tierra como modelo de desarrollo, ex-

presado en la propuesta de ley, es el latifundio, pues este no estará definido por el acaparamiento de la tierra –únicamente– sino estará determi-nado por la productividad. Es así que se entiende que latifundio son los terrenos en manos de una sola persona que supere los límites permitidos por la ley pero siempre y cuando sean improductivos. La expropiación aparece como una opción con-templativa ante el acaparamiento de la tierra en pocas manos ya que si no se cumple con los nive-les de productividad necesarios, la sanciones son de carácter correctivo, pues el propietario tendrá opción para poner a producir su tierra durante tres años, luego de la notificación,a y pagar mul-tas de hasta el 20% del avalúo comercial.

En este panorama favorable para el acapara-miento, es factible el establecimiento de un Régi-men de Agricultura Bajo Contrato (Título III de LOTRP), el cual aparece como la opción más conve-niente para la especulación del precio de la tierra, evita la figura del latifundio y atenta contra la au-tonomía de los sectores campesinos al perder el uso de sus predios.

La adjudicación se presenta como el régimen de distribución democrático de la tierra por parte del Estado; esta es una distribución vía mercado, pues los beneficiarios de los programas de entrega de tierras deberán cancelar un valor económico fi-jado por la Autoridad Agraria. Esto se contrapone claramente al punto nueve del Mandato Comuni-tario para una Ley de Tierras, que exige el acceso gratuito a la tierra.

Para finalizar, nos interrogamos acerca del suje-to agrario que necesita este proyecto de ley para la modernización del campo en el Ecuador y nos encon-tramos que se proponen dos características. Prime-ro, la Asociatividad productiva: los productores deben estar asociados y organizados en función de la productividad de las parcelas agrarias. Estos pro-ductores asociados estarán apoyados por el Estado en el marco de los derechos, serán el “nuevo ciuda-dano rural” con capacidades para competir en me-jores condiciones en el mercado. La segunda carac-terística es que se constituyan también como orga-nizaciones representativas establecidas dentro del ordenamiento jurídico. Es decir, la ley reconoce solo a organizaciones de derecho; desconoce la repre-sentación política histórica del movimiento social y campesino que lucha por la tierra.

conclusiónLo que se puede deducir, de todo lo antes bre-

vemente expuesto, es que no hay una política es-tatal para impulsar la redistribución de la tierra, tampoco existe una reforma agraria y peor una revolución agraria; lo que vemos es una consagra-ción de los viejos intereses capitalistas en el cam-po y un virar las espaldas a la causa profunda que explica la pobreza rural y urbano marginal.

rE

po

rt

AJE

op

inio

nE

s Director: Víctor Granda AguilarEdificio Korea Park, oficina 5-6Corea E2-17 e Iñaquito • 593 2 320 3675 [email protected] opcion socialista / @opcionsecuador Quito Ecuador

La masiva movilización del pasado 17 de Septiem-bre sorprendió a los medios de comunicación del país, que no destacaron la amplia y voluntaria

convocatoria, atemorizados por la enorme campaña publicitaria de desprestigio que realizó el gobierno an-tes, durante y después de aquella.

El régimen, siguiendo el estilo inaugurado por Lucio Gutiérrez, convocó antidemocráticamente a una concentración paralela en apoyo al Presidente, quien aseguró que agruparía diez veces más de los manifes-tantes convocados por el FUT y, frente al éxito e im-pacto de la movilización social, optó por distorsionar su importancia y convertir a los enfrentamientos vio-lentos de la fuerza pública con los manifestantes en la principal noticia de la jornada.

El régimen asegura que los trabajadores se movi-lizaron contra un proyecto de Código Laboral que no existe y contra un aumento de pasajes que no es de su competencia, sino de los gobiernos locales. De manera cínica, asevera que su iniciativa de un nuevo Código del Trabajo, que lesiona derechos conquistados por los trabajadores, ha sido radicalmente modificada, sin pre-cisar los supuestos cambios, desconociendo que desde hace cuatro años, sus ministros de trabajo, en conve-niencia con los empresarios, han elaborado, hasta el 1 de Mayo pasado, la 5ta.2B versión de su autodenomi-nado “proyecto revolucionario”, lo que de por sí consti-tuye un categórico desmentido a su afirmación de que no tienen una propuesta definida. A ello se suma la amenaza del Ministro del Trabajo de que dicho proyec-to regresivo, con algunas modificaciones desconocidas, será calificado de “urgencia económica” por el Presi-dente para que se imponga en el corto plazo.

Frente a esta actitud de confrontación y represión y de la consabida manipulación de las “consultas legisla-tivas”, los trabajadores han anunciado nuevas movili-zaciones pra caminar a una HUELGA NACIONAL. En realidad no queda otro camino para el FUT y las orga-nizaciones sociales, pero esa decisión de lucha debe ser preparada eficientemente, concentrando las luchas y las reivindicaciones sociales traicionadas por el gobier-no, sin permitir su manipulación y utilización de los sectores políticos de derecha que no están interesadas en desmontar el actual modelo autoritario y de recorte de los derechos sociales, sino únicamente de asegurar un efímero proceso de sucesión presidencial.

Enrique Ayala Mora

cAminAr HAciAlA HuElgA nAcionAl

La agresión verbal, el insulto, la provocación, han sido la respuesta a las discrepancias o las críticas al Gobierno. Una avalancha de mensajes en las ca-

denas difundidas en los medios, las redes sociales, hasta en las paredes, agrede en vez de debatir. Así lo hace, a la cabeza de sus colaboradores, el Presidente de la República para imponer lo que llama “revolución”.

Nunca contestaré provocaciones ni insultos en el mis-mo tono, pero sí voy a aclarar las afirmaciones del Presi-dente en su última sabatina, sobre mi artículo de EL CO-MERCIO del viernes pasado, que decía que, contra la opi-nión de muchos, en la marcha del 17: “Los convocados por el FUT y las demás organizaciones sociales fueron muchos más que los que el gobierno concentró en la Plaza Grande sin intentar siquiera hacer una manifestación”.

Allí no hablé ni de veinte, ni de treinta y cinco mil per-sonas, como Correa afirmó. No mencioné cifras. El dijo una falsedad para tratar de ocultar, cada vez más nervio-so, lo que fue absolutamente claro: salieron muchos más a protestar que a respaldarlo.

No es Correa, que nunca ha sido socialista, quien pue-de calificar nuestra militancia en el socialismo de más de cuarenta años. Por eso se debe rectificar su afirmación de que la mayoría de los socialistas del país le respalda. En realidad, solo una minúscula cúpula correísta que asaltó la dirección del Partido Socialista respaldada por decisiones ilegales del Consejo Electoral, actúa como cola del gobier-nismo y hasta pide la reelección presidencial indefinida.

La inmensa mayoría de los socialistas estamos donde debemos estar: manteniendo la línea revolucionaria, res-paldando a las organizaciones sociales, a los trabajadores, indígenas, estudiantes, profesionales, empleados, que exigen al Gobierno democracia y el cumplimiento de sus ofertas, frente al hecho cada vez más evidente de que en vez del “socialismo del siglo XXI”, se está imponiendo en el país el “capitalismo del siglo XXI”.

El correísmo es el retorno al pasado caudillista. Por eso luchamos contra la persecución de la organización social, para vencer el autoritarismo, la negación de la democra-cia, la impunidad de la corrupción, el ataque contra la organización popular, que tienen base constitucional. Me ratifico en la necesidad de la realización de una consulta popular para la convocatoria a una Asamblea Constitu-yente que, respetando todos los derechos y garantías, rea-lice una radical reforma de la parte orgánica, que impuso un solo poder incensurable y arbitrario.

Correa seguirá agrediendo a quienes no somos sus incondicionales. Continuará diciéndonos “pobrecitos” o “rectorcitos”, a los que discrepamos. Eso parece inevita-ble. Pero está claro que se pone “nerviosito” cuando las organizaciones populares se movilizan para demandar un verdadero socialismo.

nerviosito…

Artículo publicado el 3 de octubre en Diario El Comercio <http://www.elco-mercio.com/opinion/enriqueayala-nerviosito-opinion.html>

opción s 7

Víctor Rivadeneira Cabezas

Santiago Cahuasquí Cevallos

rEsultAdos ElEctorAlEs En brAsil

“la muerte de Jaime roldós”:convergencia entre cine y periodismo

El documental “La muerte de Jaime Rol-dós”, de Manolo Sarmiento y Lisandra Rivera, fue declarado ganador en la cate-

goría de Imagen en los premios “Gabriel García Márquez” de la Fundación para el Nuevo Perio-dismo Iberoamericano (FNPI).

La catalogación de los jueces sobre la produc-ción ecuatoriana como un “objeto periodístico fuera de lo común”, confirma que su atributo di-vulgativo no es solo su trabajo de investigación, sino también su rico contenido enunciativo como ensayo cinematográfico.

En la obra, los argumentos propios del periodis-mo como la contrastación, la verificación y la inda-gación, se condensan con una incisiva narración iconográfica que invita a la reconceptualización de imágenes preexistentes (reabrir la memoria).

Esta tensión creativa entre el rigor de los da-tos y la búsqueda de nuevas facetas del lenguaje fílmico plantea nuevas entradas y bifurcaciones que son relativamente inaugurales para el cine ecuatoriano. La exploración nacional debe conti-nuar rebatiendo la linealidad que el documental clásico dio al testimonio, para evitar la censura de los núcleos de sentido y ampliar así las inmen-sas posibilidades cromáticas que tiene nuestra historia.

Siguiendo la línea de reflexión de Gabriel García Márquez sobre periodismo y literatura, diremos que en el caso de “La muerte de Jaime Roldós”, es la obra creativa la que da valor cine-matográfico al trabajo documental.

y varios escándalos de corrupción que le ha costa-do una reducción considerable en las intenciones de voto.

Con el paso del PSDB a la segunda vuelta, el electorado brasileño tiene un claro panorama po-lítico, pues, éste representa a la derecha brasile-ña, específicamente, a la burguesía financiera por sus planteamientos de conceder “independencia” al Banco Central, otorgar mayor “libertad” al ca-pital especulativo mundial, privatizar medios de producción estratégicos como PETROBRAS, en-tre otros; y, representa a los grandes medios de comunicación. En política exterior, pretende for-talecer las relaciones comerciales con la Alianza del Pacifico y, asimismo, con Estados Unidos; lo cual generaría un declive en las relaciones con UNASUR y los BRICS.

Es indudable que esta coyuntura en el país más grande e influyente de sur América ofrezca perspectivas o de continuidad de políticas favora-bles al bienestar o de un retroceso con posturas neoliberales.

En Brasil se cumplirá la segunda vuelta electoral, el 26 de octubre próximo, con los dos candidatos más votados en la prime-

ra vuelta, donde participó más del 80% del elec-torado. Por un lado, la actual Presidenta Dilma Rousseff del Partido de los Trabajadores (PT) y, por otro, sorpresivamente con 7 puntos de dife-rencia, Aécio Neves del Partido Social Demócrata de Brasil (PSDB).

El PT, en el gobierno durante 12 años, ha po-sesionado a Brasil como la séptima economía del mundo. Forma parte de los países emergentes (BRICS), incorporándose a un panorama mun-dial que apunta a ser multipolar, contrario al unipolar en el ámbito económico planteado por Washington; también consolidó el bloque sud-americano UNASUR, creando condiciones favo-rables para la integración regional. Casa aden-tro, con políticas sociales, el gobierno redujo la pobreza y aumentó el número de familias en la clase media. Sin embargo, hay graves críticas por el excesivo gasto público en el mundial de fútbol

int

Er

nA

cio

nA

l

8 opción s

La pugna de poderes que pretende eva-dir responsabilidades y acumular po-testades entre el gobierno central y los

gobiernos autónomos descentralizados, abre un menú de conflictos jurídicos en cuanto a la interpretación que, a la conveniencia de una y otra parte, provoca una cortina engañosa que oculta la verdadera intención de los ac-tores de este show presentado a la población.

La Constitución de Montecristi, en su pri-mer artículo, proclama que el país se gobierna de manera descentralizada, lo que consagró una serie de facultades que propiciaban una real autonomía para los GADs, sin embargo, el gobierno central, fortalecido de poderes, invade la actividad exclusiva de algunos ni-veles de gobierno y en otros casos evade sus propias responsabilidades.

Un primer episodio, que todavía se man-tiene en cuanto al conflicto de competencias, es el referente a la regulación del uso y la ocupación del suelo urbano, que constitucio-nalmente le corresponde a los GADs munici-pales, de acuerdo al artículo 246 numeral 1 de la Carta Magna, y que el Ejecutivo preten-de usurpar, con el propósito de incrementar su poderío a través de la Ley Orgánica de Or-denamiento Territorial y Gestión del Suelo.

La segunda escena, más reciente, es la re-lacionada con el alza de pasajes, que por ya once años permanecen congelados en una ta-rifa que el gremio de transportistas considera injusta y que, desde diciembre de 2011, son compensados por el gobierno con la entrega de un subsidio a cada unidad para evitar el incremento de los 0,25 centavos de dólar, que actualmente se pagan, por los 0,42 que pro-ponen.

El subsidio en mención fue entregado solo hasta mayo del presente año; cuando el go-bierno dejó de pagarlo, el gremio de transpor-tistas del país empezó a presionar por una revisión de tarifas de buses y taxis. En este contexto, se dio un almuerzo en Carondelet, el pasado primero de septiembre, con el Pre-sidente de la República, en el que no se abrie-ron espacios de diálogo sino que solo se con-cluyó, astutamente, en que las regulaciones

de tarifas ahora le corresponden a los muni-cipios, trastocando la esencia del artículo 394 de la Constitución de la República.

La polémica también la avivan ciertos municipios, como el de Guayaquil, que igno-ra la Resolución 006 del 26 de abril de 2012 del Consejo Nacional de Competencias, en el que se transfiere la planificación, regulación y control del tránsito a favor de los gobiernos autónomos descentralizados, tal como lo ma-nifiesta el numeral 7 del artículo 17 del Regla-mento, en cuanto a la responsabilidad de fijar las tarifas en apego a la potestad del gobierno central contenida en el numeral 7 del artículo 11 del mismo cuerpo, que obliga al gobierno central a regular a nivel nacional las tarifas terrestres, esto de acuerdo a una categoriza-ción de gobiernos municipales, en donde las principales ciudades como Quito, Guayaquil y Cuenca se encuentran en la A, otros diez en la B, y más de doscientos en la C.

La Resolución 100 de la Agencia Nacional de Tránsito establece la metodología para la fijación de tarifas de transporte urbano o intercantonal, que estará a cargo de los GADs que hayan asumido dichas competencias y de la Agencia Nacional de Tránsito en los casos que así no ocurra, limitando el 13 % como margen de utilidad suficiente para los trans-portistas, que se quejan de insuficiente en re-lación al pésimo servicio del que todos pade-cemos, mientras líderes del gobierno central y de los GADs continúan un choque de fuer-zas donde el pueblo se asfixia en medio de sus decisiones.

conFlicto dE podErEsEntrE El gobiErno y los municipios

Pablo Herrera Naranjo