Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

13

Click here to load reader

Transcript of Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

Page 1: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

Recuperar la costumbre de escribir bien

Periodismo es, ante todo, informar. Un título, unas simples líneas pueden servir para cumplir con este propósito, pero una información más profunda y compleja requiere de un texto más extenso.

Estudios sobre el comportamiento de los lectores indican que un alto porcentaje de ellos recorre el diario con su vista deteniéndose en los títulos y las bajadas, o copetes, sin meterse demasiado en el texto. En las revistas también ocurre algo similar, aunque en menor medida. Si la noticia o el tema lo atraen, repasará los subtítulos, frases destacadas, los recuadros y los epígrafes de las fotos, y solamente si la temática le resultó "seductora" y el diseño lo "invita" a interesarse y las fotografías muestran algo más que lo obvio, se "sumergirá" en el texto para leerlo. Así y todo, el lector "valiente" que se adentre en ese texto tendrá la posibilidad de abandonarlo antes de llegar al punto final.

El éxito de un artículo dependerá del mérito conjunto de las tres patas de la edición gráfica: redacción, fotografía y diseño. Un texto revelador, formidablemente escrito, pero mal "plantado" en una página se transformará en una nota fallida. Lo mismo si las fotografías que acompañan no están a la altura de lo que se narra. Y el periodista, limitado en sus responsabilidades, tiene que exigir que su texto se revista del marco apropiado. Un nota periodística no es una novela ni una página de la guía telefónica, donde la información vale sin importar el diseño. Pero sobre el periodista recae la responsabilidad no menor de escribir un texto atractivo, porque si falla su "pata" de nada servirá el mejor diseño ni las fotografías más reveladoras.

¿Qué tiene que hacer el periodista para no defraudar al lector? Simplemente escribir bien; esto es: utilizar un lenguaje claro, descargado de giros innecesarios, sin pretensiones literarias. Como veíamos la semana pasada, una buena historia se narra con rigor informativo, con el conocimiento profundo del tema a tratar. Las grandes historias se cuentan amalgamando la pasión y el análisis, renegando de la solemnidad y las frases hechas, utilizando apropiadamente los recursos del idioma castellano. Y no olvidemos que el diccionario de sinónimos es el mejor amigo del redactor. Quienes no tengan uno a mano y escriban en el Word (versión en español), pueden consultar sinónimos desplegando el menú "Herramientas" y eligiendo la opción "Idioma"; esta dará la posibilidad de consultar los sinónimos de una palabra previamente marcada. Otra forma de buscar sinónimos es señalar una palabra y presionar a la vez las teclas "F7" y "Mayúsculas".

En cuanto al plano léxico-semántico, el léxico que usemos debe ser claro, conciso y correcto. Lo mejor es el empleo de un nivel medio de lenguaje con adjetivos descriptivos y no valorativos y un léxico, en general, "objetivo". De todos modos, es común encontrar en las noticias un léxico valorativo y otros recursos selectivos de la información (entrecomillados, subrayados, etc...) que directamente van contra la objetividad.

Por ejemplo:Una gran manifestación. El grandioso acto fue considerado por Carlos Ortega, titular de la Central de Trabajadores Venezolanos, “la concentración popular de mayor volumen” celebrada nunca en Caracas. Los numerosos manifestantes...Desde el plano morfosintáctico:

- En los determinantes predomina el uso de demostrativos y posesivos.- El tiempo verbal más corriente es el pretérito perfecto simple del indicativo.- Abundan los predicados transitivos con muchas extensiones (circunstanciales de lugar, tiempo, modo, etc...).- Es frecuente el uso de la subordinación adjetiva.

Contenido de la Semana 3: Recuperar la costumbre de escribir bien • Los "malditos" gerundios • El

estilo de cada medio • Traducciones y castellanizaciones • Ejercicios • Inicio

Page 2: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

Los "malditos" gerundios

El adverbio modifica al verbo. Si escribimos: "Deportivamente, dice que le gusta el fútbol", estamos expresando que su forma de decir es "deportiva", que dice de manera deportiva. Y el temido gerundio también es un adverbio, por lo tanto, modifica al verbo principal y debe expresar simultaneidad o anterioridad, pero nunca posterioridad. Jamás debe emplearse modificando al sustantivo.

Hay una corriente periodística que sostiene que están "prohibidos". Y aunque su abuso no es bueno, son parte de la lengua castellana y por lo tanto, lícitos. El tema es usarlos correctamente.

El gerundio, forma verbal no personal, simple o compuesta (marcando, habiendo marcado), no resulta fácil de utilizar. Si es simple equivale a un adverbio, complemento circunstancial de un verbo al cual complementa, o bien puede funcionar como un verbo pleno. En el primer caso su función adverbial es comprobable en ejemplos como "Se marchó silbando", donde el gerundio silbando es semejante al adverbio "alegremente". En el segundo caso, es decir, como verbo, puede constituir oraciones independientes mediante perífrasis con la ayuda de verbos auxiliares: "Está nevando", "Siempre anda metiéndose en líos", etc.

Pero hay que tener cuidado cuando un gerundio complementa a un sustantivo o pronombre porque puede prestarse a equívoco. Así, por ejemplo, si digo: "He visto a tu hermano entrenando", ¿quién estaba entrenando? ¿yo o tu hermano?

También es incorrecto usar el gerundio con valor de adverbio, calificando o determinando a un sustantivo. "Encontré una caja conteniendo viejas camisetas", "Volcó un cajón transportando explosivos", "Tiene un perro siendo cojo", son expresiones que deben sustituirse respectivamente por "que contenía", "que transportaba" y "que es".

Además, el gerundio expresa una acción -es forma verbal- y esta acción tiene que ser simultánea o anterior a otra principal. Por ejemplo, "Te cansarás subiendo las escaleras" (simultánea); "Dando un agudo grito, se quedó luego paralizado" (anterior). Si la acción del gerundio es posterior, conviene evitar este uso. Frases como "Se cayó del árbol rompiéndose una pierna" o "Tomamos el tren dirigiéndonos a Sevilla" se consideran muy poco elegantes en la lengua española.

En cuanto al gerundio compuesto debemos señalar que nunca forma oraciones independientes y, como cláusulas subordinadas que son, adquieren distintos valores (temporales, condicionales, concesivos, causales, etc.), a la vez que expresan acciones perfectivas o terminadas: "Habiendo estudiado un poco más, habrías aprobado el examen" (Si hubieras estudiado, valor condicional), "Habiendo dado las doce, se fueron a la cama" (después de dar las doce, valor temporal).

Tres trucos para evitar el mal uso del gerundioEl gerundio es una forma verbal impersonal que expresa simultaneidad de la acción con el tiempo en que se habla. Existen tres reglas básicas que evitan su mal uso gramatical.

Primero, debemos asegurarnos que el sujeto del gerundio coincide con el sujeto de la oración principal.Normalmente, todo verbo tiene un sujeto que es quien realiza la acción. Los verbos escribo, escribes, escribe, escribimos, etc. tienen en los pronombres yo, tú, él, nosotros... sus sujetos gramaticales. En cambio, el gerundio al ser impersonal puede tener cualquier sujeto.

"Cortázar escribe improvisando como un músico de jazz".En esta frase se interpreta que Cortázar escribe y, además, improvisa. Para ambos verbos, el sujeto es el autor de "Rayuela". Un uso incorrecto sería: "Nos encontramos con los escritores emborrachándose".En este caso nosotros nos encontramos con los estancieros, pero nosotros no estábamos

Page 3: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

emborrachándonos, sino ellos. Lo correcto sería decir: "Nos encontramos con los estancieros que se estaban emborrachando".

Un segundo truco. La acción del gerundio debe realizarse al mismo tiempo (o antes) que la acción del verbo principal. De esta forma, hay que evitar el tan nombrado gerundio de posterioridad. La acción del gerundio debe ser anterior o simultánea a la del verbo principal. Así, es incorrecto decir:"Escribieron la carta dejándola sobre la mesa".El hecho de dejarla sobre la mesa es una acción posterior, al contrario que en este caso: "Se contagiaron la gripe caminando bajo la lluvia sin paraguas".

Este uso sí es correcto porque ambas acciones se realizan al unísono. Como truco, si utilizamos el adverbio MIENTRAS... deducimos si los dos verbos se dan de forma simultánea:"Se contagiaron la gripe MIENTRAS caminaban bajo la lluvia". La frase cierra, por lo tanto el uso del gerundio es correcto.

Tercer truco, la acción que expresa el gerundio debe interpretarse como una circunstancia (tiempo, modo o condición) de la acción del verbo principal.La receta es sencilla. Si el gerundio expresa en qué momento, de qué modo, por qué motivo, o con qué condición se da la acción del verbo principal sí se puede utilizar esta forma verbal. Si no responde a ninguna de estas cuatro preguntas, no se debe utilizar."Me lo contó escribiendo".¿Cómo me lo contó? Pues escribiendo. El gerundio responde a la pregunta ¿cómo?

Contenido de la Semana 3: Recuperar la costumbre de escribir bien • Los "malditos" gerundios • El

estilo de cada medio • Traducciones y castellanizaciones • Ejercicios • Inicio

El estilo de cada medio

Comentábamos la semana pasada que cada periodista tiene o irá formando su propio personal, con sus características y señas propias. Nunca terminan de aprenderse nuevos recursos para describir mejor lo que se ve. Pero también cada medio impone su propio estilo, el que muchas veces choca con el del redactor.

Sin apartarse del uso del castellano, hay diarios y revistas que prefieren determinadas formas a otras. Algunos medios dejan sentadas estas preferencias en lo que llaman "Manual de estilo", un compendio de normas que el redactor deberá respetar para unificar criterios y delinear una determinada manera de escribir que identifique a la publicación.

En la quinta semana tendremos como ejemplo algunos postulados del Manual de Estilo del diario madrileño El País, uno de los periódicos mejor editados del mundo hispano.

Nombres rigurosos¿Cómo se llama una persona? ¿Cómo se pronuncia su apellido? Lo mejor para escribirlo correctamente es preguntárselo al protagonista mismo. ¿Es Daniel Passarella o Pasarela? ¿Helmut Schoen o Schön? ¿Bin Laden o Ben Laden? Ser riguroso con los nombres de los protagonistas nos dará mayor credibilidad como periodistas.

Lo mismo pasa con los nombres de los partidos políticos, los clubes o los grupos musicales. Confundir una letra puede hacer que hablemos de instituciones diferentes, como ocurre con los clubes alemanes Bayer (de Leverkusen) y Bayern (de Munich).

Apodos y adjetivosLa regla del uso de los apodos la impone cada medio. Pero es claro que más allá de la publicación para la que se escriba, el área deportiva es la que permite en mayor medida llamar a los

Page 4: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

protagonistas por los apodos. También puede darse una mayor libertad de redacción en las secciones de espectáculos. En las páginas de política difícilmente se hable del "Turco" Menem o del "Chino" Fujimori, pero las deportivas permiten mencionar al "Bati", al "Chapulín" Romario o a "Mano de Piedra" Durand. Lo mismo ocurre a la hora de buscar variantes para no repetir los adjetivos gentilicios (los que indican nacionalidad o lugar de nacimiento), y aunque está aceptado, no todos los mexicanos son "charros" ni "aztecas", ni todos los argentinos son "gauchos", ni todos los peruanos son "incas". Del mismo modo, para acotar el uso de imágenes remanidas, los brasileños no viven bailando samba ni todos los colombianos son parientes de Juan Valdés.

Con los adjetivos pasa lo mismo que con los apodos, su uso es más extendido y consentido en las secciones deportivas. Pero con uno por frase está bien, ya que se suele caer en la sobreadjetivación innecesaria, un vicio bastante amplio en la lengua castellana. No es raro leer oraciones de este tipo: "fue un gol fantástico, supremo, majestuoso". Algo similar suele cometerse con los verbos, que para resaltar una acción se suman uno detrás de otro, inútilmente: "Alianza se defiende, se protege, se cuida", o "Francia presiona, empuja, mete atrás al fondo italiano". Con un solo verbo alcanza.

El género deportivo y en menor medida también el de espectáculos, tienen sus particularidades y sus licencias dentro del periodismo. Hay un permiso mayor para el uso de metáforas, la incursión en diferentes campos semánticos, el empleo de apodos, etc. Pero esa libertad para "volar" con el idioma suele aterrizar en el "lugar común", la frase hecha.

Contenido de la Semana 3: Recuperar la costumbre de escribir bien • Los "malditos" gerundios • El

estilo de cada medio • Traducciones y castellanizaciones • Ejercicios • Inicio

Traducciones y castellanizaciones

Según la política de cada medio, o el estilo impuesto por el editor, tendremos que escribir volley o vóleibol, default o cesación de pagos, y también The Beatles o Los Beatles, São Paulo o San Pablo, Napoli o Nápoles. La regla general más apropiada es la que indica que los nombres propios no se traducen. Hay excepciones, claro; el problema aparece cuando se pasan por alto por ignorancia.

Los nombres de los países tienen todos un equivalente en castellano (aunque todavía hay que consultar el diccionario para escribir Kazajstán, Kazakhstan, Kazaquistán..., lo mismo que las otras repúblicas ex soviéticas). En lo posible, las ciudades deben mantenerse en su idioma original, salvo London (escribiremos "Londres") y las nórdicas como Stokholm (en español "Estocolmo") o Køvenhavn ("Copenhague"). Y debemos prestar especial atención a las ciudades chinas, coreanas y demás orientales, que por traducción fonética pueden tener más de una traducción escrita: pasó en notas de medios importantes que tomaron a Beijing y Pekín como dos ciudades diferentes, cuando son dos traducciones diferentes de la capital de China. Lo mismo pasa con la coreana Pusán o Busán o la india Kolkata o Calcuta, por ejemplo.

Es común, sobre todo en algunos medios españoles, que se traduzcan los nombres propios. Pero más allá de que nos permitamos llamar "Carlitos" a Charles Chaplin, debemos mantenerlos en su lengua de origen. ¿O alguien leyó alguna vez sobre Pablo McCartney y Juan Lennon? Obviamente no, como tampoco podemos hablar de Miguel Jordan, Adolfo Hitler, Alejandro Del Piero o Jorge Bush.Más allá de los nombres propios, el empleo de palabras extranjeras comunes en el lenguaje cotidiano, queda a criterio del editor general de cada medio. Algunas, porque aún no encuentran un equivalente en castellano, otras porque se incorporaron sin proponérselo en el léxico cotidiano. Por ejemplo: reality show, airbag, fair play, top model, scanner, etc...

En el caso de las siglas acrónimos, se debe emplear (si existe) la variante en castellano: OTAN y no NATO, ONU y no UN, Sida y no Aids.

Page 5: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

La invasión de palabras extranjeras hacen que los periodistas inventen verbos a partir de una raíz foránea: bacapear (del inglés back up), faxear (de fax), etc. Algunas palabras surgen por derivación: balseros, caceroleros, globalifóbicos, piqueteros, etc., y otras por composición, como videoconferencia o telebasura.

Malas palabras e insultosSegún el país se las llama "malas palabras", "palabrotas" o "garabatos". También depende del lugar en que se digan o escriban, están más o menos admitidas y pueden resultar más o menos ofensivas. Lo mejor es que el periodista no las use, pero sí las refleje tal cual cuando forman parte de una declaración encomillada y responden a una frase textual de un entrevistado. Es una pacatería pasada de moda escribir "hijo de p..." o "la c..... de su madre". Si se decide (o el medio permite) escribirlas, se debe hacer con todas las letras.

Figuras retóricasEn diferentes textos periodísticos podemos hallar diferentes figuras retóricas, que están admitidas siempre y cuando no abusemos de ellas. Las más usuales son las metáforas (La guerra de la interna peronista; la cumbre sobre el empleo, etc.), metonimias (California prohíbe fumar en los bares;), personificaciones (El buen comportamiento de los precios; el crecimiento de los votos, etc.) o hipérboles (Toda España se volcó con la Selección).

La alteración del mensajeLa información se puede alterar con mucha facilidad, simplemente "moviendo" algunas variables. Algunas responden a mecanismos extralingüísticos, como la simple selección de unos contenidos antes que otros o el lugar que el editor le asigna dentro del diario: tapa o interior, página de la izquierda o de la derecha, etc. También puede modificar el mensaje la extensión que se le asigne la noticia, el apoyo gráfico (fotos, dibujos, esquemas, infografías, etc.), el color y la tipografía, etc.

También hay maneras lingüísticas de variar un mensaje. Un ejemplo de cómo se entorpece la comprensión es el uso de mecanismos que le restan claridad al texto: construcciones léxicas innecesarias, barbarismos, eufemismos, cultismos o derivaciones personales. Lo mismo ocurre con todo aquello que resta objetividad: sustantivos y adjetivos de significado bélico, el uso de hipérboles o las frases que incitan a la acción.

Contenido de la Semana 3: Recuperar la costumbre de escribir bien • Los "malditos" gerundios • El

estilo de cada medio • Traducciones y castellanizaciones • Ejercicios • Inicio

Ejercicios

Por favor, tratemos de cumplir con las fechas

Para el viernes 28 de octubre:Para ir retomando contacto con el lenguaje, un ejercicio con pronombres. La consigna es cambiar el pronombre "que" y remplazarlo por los pronombres "donde" (o "adonde"), "cuando" o "como":1- No es por la fuerza que se prueban las razones2- Fue en Guayaquil que se reunieron los jefes militares3- Fue en 1984 que Maradona debutó en el Napoli4- Era en el campo de Cienfuegos que estaba la algodonera5- Fue de cabeza que cayó6- Es no sólo con talento sino practicando que se consiguen los premios7- Es en avión que van y vuelven

La precisión es indispensable para hacer periodismo. La vaguedad informativa le da la sensación al lector, oyente, etc., que esa información puede ser incorrecta, ya que es claramente incompleta. Oraciones como estas, aparecen muy a menudo en la prensa. ¿Por qué son incorrectas? ¿Cuál es

Page 6: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

el error en cada una de ellas y cuál sería la formulación más acertada?1 ...el remate de Luis Hernández pegó en el palo y salió desviado...2 ...un policía herido por un arma de grueso calibre...3 ...el gol que Marcelinho le marcó con la mano al Corinthians...4 ...murió el gobernador Balmaceda, tras una larga y penosa enfermedad...5 ...la grave lesión de rodilla lo marginará del teatro durante seis meses...

Para el lunes 31 de octubre:Siguiendo con el tema de la precisión, hay términos que son sinónimos, pero sin embargo, uno es más específico que el otro. No alteran el sentido de la frase, pero entre todos hay uno -o varios- que ilustrará mejor lo que se quiere decir. En las siguientes frases, remplazar las palabras "cosa", "algo", "decir", "hacer", "poner", "ver", "tener" -y sus derivados- por vocablos más precisos:1- Le pidieron que dijera las cosas como habían pasado2- El último libro tiene algo melancólico3- El lesionado tenía muchos dolores, según dijo4- Los obreros hacían una nueva baranda en la represa5- En esta frase no queda bien puesta la palabra "frase"6- Se jactaba de cosas increíbles7- En su cara había algo de ferocidad8- Hizo una fosa con sus propias manos9- El contacto entre los vecinos es una cosa necesaria10- El artista puede ver lo importante del paisaje11- La vigilancia en los estadios es algo indispensable12- Pusieron una cartel detrás de la curva13- La conspiración fue hecha por los sectores de derecha14- La torre de iluminación, desde ese día, tuvo una luz muy brillante15- Es el periodista que más premios tiene

Para el martes 1 de noviembre:Los sinónimosPara el periodista, tener a mano un diccionario de sinónimos es importantísimo. Es el salvavidas en los momentos en los que la memoria se niega a asistirnos. Si se usa un procesador de textos como el Word, tener habilitada la opción "sinónimos" dentro del menú es igualmente útil. Con frecuencia, en una nota, debemos hacer citas y se nos agotan los sinónimos del verbo "decir"; entonces, resulta muy útil recurrir al contexto para encontrar la palabra remplazante. Esta puede referirse al contenido del mensaje (si el que dijo, agregó detalles a lo expuesto, explicó, amplió, especificó, detalló, pormenorizó, etc.). También puede vincularse con la intención del que habla (si lo que quiere es obtener respuestas, pregunta, interroga, averigua, inquiere, etc.); o bien, pueden usarse vocablos que expliquen de qué manera emitió el mensaje (si, por ejemplo, lo hizo con un tono de voz muy alto, diremos que gritó, vociferó, etc.).Encontrar los verbos que sugieran la idea de decir, y que respondan a las siguientes 30 definiciones:1- En voz baja2- Para admitir un hecho3- Para contar algo que pasa o pasó4- Para llamar la atención sobre algo5- Al ser interrogado6- Para referirse a algo que ocurrirá7- Para dar a conocer8- Para manifestar desacuerdo9- Para obtener algo

Page 7: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

10- Entre dientes11- Con enojo12- Por segunda vez13- Una vez más14- En forma entrecortada, vacilante15- Después de una interrupción16- Para convencer17- Para referirse a cosas pasadas18- Para revelar secretos19- Restándole importancia a un hecho20- Para manifestar acuerdo21- Indicando la falsedad de algo expuesto22- Para agregar un detalle23- Para expresar algo pero sin decirlo24- Con aflicción25- Con seguridad26- Para defender una posición27- Ante un auditorio28- Llamando la atención sobre un hecho o detalle29- Para hacer cumplir sus deseos30- Para referirse a situaciones que explique lo antedicho

Reglas generales

1. Las palabras agudas (no monosílabas) se acentúan si terminan en vocal, ene o ese.dialogó, inglés, camión.

2. Las palabras graves o llanas se acentúan si no terminan en vocal, ene o ese.fácil, cárcel, lápiz, pero dialogo, ingles, anden.

3. Las palabras esdrújulas y sobresdrújulas se acentúan todas:diálogo, médico, cómetelo.

Notas Los monosílabos nunca se acentúan: fue, vio, dios. Notar la diferencia entre vio, que es monosílabo y rió, que es bisílabo agudo, luego lleva acento. Los adverbios acabados en "mente" se acentúan según las reglas anteriores aplicadas a la palabra que resulta de eliminar el sufijo:de fácil, fácilmente, de grave, gravemente. No se acentúan las primeras componentes de las palabras compuestas, salvo que vayan separadas por un guión:asimismo, físico-químico. Cuando a un verbo se le posponen pronombres se aplican las reglas generales al compuesto, pero si el verbo sin pronombres llevaba acento, éste se conserva aunque las reglas no lo requieran:de coge, cógelo, de sostén, sosténlo. Si una palabra acaba en dos consonantes se aplican las reglas generales a la palabra que resulta de eliminar la última. Así, es Sáez, pero Saenz. Si una sílaba ha de llevar acento y tiene dos vocales hay dos posibilidades: Si una de las vocales es a, e, o, ésta lleva el acento:estáis, Damián, óigame, dióselo. Si las vocales son ui, iu, se acentúa la segunda:cuídate, interviú.

Page 8: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

El caso que falta no puede darse: dos vocales contiguas, ninguna de las cuales sea una i o una u nunca forman parte de la misma sílaba. Así, núcleo es esdrújula y creó es aguda (no monosílaba).

Hiatos

Además de indicar la sílaba tónica, el acento gráfico informa de cuándo dos vocales contiguas (una de las cuales sea tónica) forman parte o no de la misma sílaba. Cuando es así se dice que forman un diptongo, en caso contrario forman un hiato.

Hay que advertir que la formación de diptongos depende mucho de la posición de la palabra en la frase. Por ejemplo, María tiene normalmente tres sílabas, pero en compuestos como María José se pronuncia normalmente bisílaba. Las reglas de acentuación no pretenden distinguir estas situaciones, sino tan sólo indicar una pronunciación posible que no resulte inaceptable al oído ni lleve a confundir unas palabras con otras. Por ello se escribe María José, aunque si quisiéramos ser fieles a la pronunciación deberíamos escribir Maria José

Las reglas a seguir son las siguientes:

1. Dos vocales fuertes contiguas (a, e, o) nunca forman diptongo. 2. Dos vocales débiles contiguas (i, u) siempre forman diptongo. 3. Una vocal fuerte y una débil (en cualquier orden) pueden formar o no diptongo. Cuando no

lo forman y la vocal débil es tónica, se le pone acento aunque esto contradiga las reglas generales.

En la práctica las tres reglas se resumen en la siguiente:

Para que una palabra lleve acento en contradicción con las reglas generales en necesario (y suficiente) que se cumplan las tres condiciones siguientes:

La vocal tónica sea una i o una u, Vaya precedida o seguida de una vocal fuerte (a, e, o) Ambas vocales pertenezcan a sílabas distintas.

Ejemplos: había, país, lío, sonreír, baúl, aíslo, actúa, judaísmo, pero hinduismo, ruin, etc.

Nota: Palabras como ahumado muestran que las haches no impiden la formación de diptongos, luego las haches no se tienen en cuenta al aplicar la regla anterior. Por consiguiente se acentúan ahí, vahído, ahínco, etc.

Acentos diacríticos

La última excepción a las reglas generales la constituye un grupo cerrado de palabras que llevan o no acento según su función gramatical. Notar que en todos los casos lleva acento la forma que con más frecuencia aparece en posición tónica. El Lleva acento cuando es pronombre personal y no lo lleva cuando es artículo. Él vino tarde (= llegó más tarde.)El vino tarde (= lo tomaremos tarde.) Tu Lleva acento cuando es pronombre personal y no lo lleva cuando es adjetivo posesivo. ¿Qué dices?, ¿tú hijo mío? (= ¿soy tu padre?)¿Qué dices?, ¿tu hijo mío? (= ¿soy el padre?)

Page 9: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

Mi Lleva acento cuando es pronombre personal y no lo lleva cuando es adjetivo posesivo (o nota musical). Es para mí, hijo.Es para mi hijo. Es un error muy extendido acentuar ti, lo cual es absurdo, porque no podemos decir ti hijo. Si Lleva acento cuando es pronombre reflexivo o adverbio afirmativo y no lo lleva cuando es conjunción condicional, conjunción completiva o nota musical. Si está enfermo, no lo dice y nadie lo nota. (Dudoso.)Sí está enfermo, no lo dice y nadie lo nota. (Está enfermo.)

Este, ese, aquel (con sus femeninos y plurales) Llevan acento cuando son pronombres y no lo llevan cuando son adjetivos. Tampoco se acentúa el punto cardinal este. Me gusta éste rojo (= este pantalón rojo.)Me gusta este rojo (= esta tonalidad de rojo.) Es incorrecto acentuar esto, eso, aquello, pues no podemos decir esto jersey.Aquel (con sus femeninos y plurales) no lleva acento cuando es indefinido: Aquel que quiera revisar el examen... (= cualquiera que...)Aquél que está junto a la ventana... (= aquél en concreto.)

De, se Llevan acento cuando son verbos (dar, ser, saber). Déme un vaso, sé bueno, no sé qué pasa. Te Lleva acento cuando es sustantivo (la infusión) y no lo lleva cuando es pronombre. Solo Lleva acento cuando equivale a solamente y no lo lleva cuando es el masculino de sola. Ladra sólo (= no muerde.)Ladra solo / sola (= perro/a tonto/a.) Obviamente, sola nunca lleva acento. Notar que un solo libro, aunque equivale en sentido a solamente un libro, es el masculino de una sola libreta, luego no lleva acento.

Aun Lleva acento cuando equivale a todavía y no lo lleva cuando equivale a incluso. Aún lloviendo, vino a verme. (= todavía llovía cuando vino.)Aun lloviendo, vino a verme. (= a pesar de que llovía, vino igual.) Mas Lleva acento cuando es adverbio de cantidad y no lo lleva cuando equivale a pero. Lo intento, más no puedo. (= no puedo hacer más.)Lo intento, mas no puedo. (= pero no puedo.)

O Lleva acento cuando está entre números para evitar que se confunda con un cero: 1 ó 2. De todos modos, en un buen texto de imprenta es prácticamente imposible confundir 1 o 2 con 102, por lo que no es necesario poner acento. Es incorrecto acentuar una o por énfasis: Elige: campo ó playa. (MAL)

que, cual, quien, como, donde, cuando, cuanto Llevan acento cuando son interrogativos o exclamativos y no lo llevan en cualquier otro caso. En otras palabras: sólo se acentúan cuando sustituyen o acompañan a una persona, cosa, cantidad, lugar, etc. desconocidos o que causan admiración. ¿Qué coche quieres? ¡Qué fácil! ¿Cuánto vale? ¡Cuánto dinero! ¿Para qué sirve? ¿Por qué bostezas? ¡Cómo quema!, ¿Quién lo dice? ¡Que venga a verme! ¿A que no me coges? ¡Dale que te pego! El último que es una conjunción copulativa, los dos anteriores son completivos. Atención a las interrogativas y exclamativas indirectas: Me admiro de cuanto sabe. (cuanto = la cantidad - conocida - de cosas que sabe.)Me admiro de cuánto sabe. (cuanto = la cantidad - sorprendente - de cosas que sabe.)Ignoro cuánto sabe. (cuanto = la cantidad - desconocida - de cosas que sabe.)Se escribe como se lee. Averigua cómo se lee. Es increíble cómo se lee.(La primera es relativa, la

Page 10: Recuperar La Costumbre de Escribir Bien

segunda interrogativa y la última exclamativa.Está donde lo dejé. Ya recuerdo dónde lo dejé. Más delicado es el caso de que: Se preocupa por que todo vaya bien. (que es conjunción, no sustituye a nada.)Se pregunta por qué todo va bien.} (qué sustituye a la causa - desconocida - de que todo vaya bien.)Se preocupa porque todo va mal. (éste no viene al caso, pero puede marear.)