El emprendimiento social es la fusión entre

una solución innovadora a un problema de

desarrollo socio-económico y una estrategia

sostenible con impacto medido.

Cada vez más, el negocio de las empresas pasa

por la creación de valor social junto con el

valor económico. El abordaje de problemas

sociales y la mayor comprensión del contexto

en el que operan las compañías se han

instalado en las estrategias básicas de las

empresas líderes.

En la realización de un emprendimiento

social, la empresa tiene la intención

explícita de generar mejoras sociales a

través de la movilización y asignación

inteligente de sus recursos. De hecho, las

mejoras sociales afectan el contexto

donde operan las compañías, que se

benefician directamente gracias a las

iniciativas sociales que ayudan a

desarrollar.

En tal sentido, lo importante no es si la

motivación de la compañía se basa en el

altruismo o en un interés utilitario; en la

realización de un emprendimiento social, la

empresa tiene la intención explícita de

generar mejoras sociales a través de la

movilización y asignación inteligente de sus

recursos. De hecho, las mejoras sociales

afectan el contexto donde operan las

compañías, que se benefician directamente

gracias a las iniciativas sociales que ayudan a

desarrollar.

Los emprendimientos sociales surgen como

iniciativa de uno a varios individuos.

El liderazgo en emprendimientos sociales se

entenderá como la capacidad para hacer

transformaciones y obtener resultados

sobresalientes.

Sin embargo, para que el emprendimiento

funcione de manera eficiente y eficaz, debe

convertirse en parte integral de la operación

de la organización, este proceso se le conoce

como institucionalización.

El liderazgo entonces suele enfocarse en el

desarrollo de mecanismos de coordinación que

permitan mantener el equilibrio entre las

actividades descentralizadas y la estrategia

común de la organización. A lo largo de la vida

de los emprendimientos sociales, es posible

reconocer los distintos roles que pueden

desempeñar los líderes para alcanzar buenos

resultados. Paralelamente, en cada momento

del emprendimiento social se pueden

identificar las habilidades deseables o

necesarias que permiten al líder ejercer esos

roles de manera efectiva.

Cada líder desarrolla su estilo para ejecutar

los roles correspondientes a las distintas

etapas; no hay “recetas”, sin embargo, en

cada etapa, un estilo particular de liderazgo

parece ser más efectivo que otros para

satisfacer las necesidades de gestión que

presenta la organización en ese momento. El

estilo de liderazgo más apropiado dependerá

entonces de los desafíos de la transformación

organización que se deba enfrentar.