Bosquejo sobre la vida de Jos (para jvenes)Dios con Jos (Gnesis 39:2, 21, 23)

Introduccin: Dios haba prometido a Abraham estar con l; lo mismo a Isaac y a Jacob. Y cada vez que ha dado alguna comisin difcil a un siervo suyo, le ha asegurado su compaa. As a Moiss, a Josu, a Pablo, a los apstoles. Debiramos darnos cuenta de nuestra necesidad de la compaa divina, y procurarla. Dios estuvo con Jos:I. En la hora de la afliccinDescrbase su afliccin al ser vendido por sus hermanos, y ms tarde al ser calumniado y puesto en la crcel. Pudo por algn tiempo creer que Dios lo abandonaba, pero fue con l en cada caso.1. Consolndolo.2. Sostenindolo.3. Manteniendo su esperanza.Dios est siempre cerca de los afligidos. Tiene para ellos palabras consoladoras y promesas que alientan. Algn da llegar en que necesitaremos su compaa por este concepto. La tendremos?II. En la hora del trabajo1. Jos fue bendecido en su trabajo (39:3). Lo mismo en la casa de Potifar que en la crcel (v. 22), y ms tarde cuando fue gobernador de Egipto.2. Fuerza, nimo, sabidura, buen xito son las bendiciones que asegura la presencia del Seor con nosotros. Si estamos haciendo la obra que Dios nos seala, contestar la oracin que est expresada en Sal. 90:17.III. En la hora de la tentacin1. La tentacin de Jos: una de las ms comunes en la juventud. Jos poda haber hallado disculpa, si hubiera cedido. Pero nunca dej de temer a Dios. Crea que tal pecado era no solo contra su pureza personal, sino una traicin a la confianza de su amo, y un pecado contra Dios.2. Acusado, no quiso defenderse. Dej el asunto en manos de Dios. Quien cultiva la compaa de Dios estar preparado para la hora de la tentacin.IV. En la hora de la exaltacinEs cuando muchos pierden la cabeza, llenndose de vanidad, ejerciendo venganzas, enriquecindose. Veamos lo que hizo Jos:1. Honr a Dios ante Faran.2. Us su poder para bien de toda la nacin.3. Reconoci y perdon a sus hermanos.4. Conserv hasta el fin de su vida su religin y la esperanza de su pueblo.Una vida con Dios:a) Es usada para la realizacin de los altos fines de la Providencia.b) Es una vida llena de satisfaccin.c) Es una vida victoriosa.d) Es una bendicin para los dems.

Conclusin: Dejemos, pues, que Dios nos acompae.